Solo la sombra del director que alguna vez fue
Tim Burton volvía al cine luego de esa derrapada importante llamada Alicia en el País de las Maravillas para adaptar la serie Dark Shadows de Dan Curtis que se emitió por Tv desde mediados de los '60 hasta comienzos de los años '70.
Sombras Tenebrosas comenzará con contarnos los prósperos orígenes de la familia Collins al llegar a los Estados Unidos y su posterior exterminio a cargo de la malvada Angelique Bouchard, donde su hijo Barnabas es sepultado y convertido en un vampiro. Dos siglos más tarde Barnabas es liberado e intentará devolver a su familia la gloria y las riquezas que alguna vez tuvieron y además vengarse de la bruja que lo maldijo.
Lamentablemente Tim Burton perdió la brújula. Vendría a ser como aquella canción que entonaba aquel anciano en calzones de Los Simpsons que decía: "Mi vieja mula ya no es lo que era, ya no es lo que era". Hoy es la sombra de ese realizador interesante que supo brindar en el pasado grandes películas como lo son El Joven Manos de Tijeras, Beetlejuice, Ed Wood o las dos Batman.
Este nuevo largometraje de Burton representa una nueva decepción. A pesar de no esperar demasiado de este film y tampoco de no pertenecer a ese selecto grupo de amantes de este director, en mi más profundo ser deseaba encontrarme nuevamente con ese cine interesantemente tenebroso de seres oscuros que buscan su lugar en la sociedad y lamentablemente me encontré con una película fría, artificial, light y cursi. Solo los chistes alrededor de la inserción de un personaje en un mundo que le es ajeno son lo único que Sombras Tenebrosas logra hacer valer, pero solo al comienzo, ya que con el pasar de los minutos la repetición de los diálogos sobre ese argumento quedan totalmente agotados.
Por otra parte también hay fallas en el desarrollo de tramas y personajes en Sombras Tenebrosas, algo que resulta inadmisible para un realizador de la experiencia de Burton. La historia se encuentra carente de cohesión y fluidez, quedando como resultado un film lleno de escenas sueltas donde todo parece estar mal pegado. El romance entre Johnny Deep y Bella Heathcote no funciona en absoluto debido a que el personaje de Josette no es desarrollado adecuadamente (solo se hace en escasos minutos por medio de dos flashbacks) para generar una mediana empatía por la relación. Por otra parte tenemos a una Chloe Moretz (que en la cinta y en la vida real posee solamente 15 años) con una llamativa impronta sensual (y también sexual, de hecho en un diálogo se da por sentado que se masturba a los gritos) que resulta cuanto menos desubicada y por momentos hasta obsena. Incluso las participaciones de Jackie Earle Haley, Jonny Lee Miller, Gulliver McGrath y Helena Bonham Carter son usadas solamente a favor de un guión que los invocará con poca fortuna en algún momento del film para intentar introducir algo que realce este aburrimiento. Quizás solamente Deep y la hermosa y sensual Eva Green son los únicos personajes que quedan medianamente bien parados (actoral y narrativamente hablando) al finalizar su visionado.
Para colmo sobre el final asistiremos a un desesperado intento de salvataje que incluirá hombres lobos, poderosos espectros, itacas y hachas que deja bien en claro que el rumbo de la cinta estaba totalmente perdido y que encima ese brusco volantazo empeoró por mucho el impacto.
Sombras Tenebrosas demuestra nuevamente que Tim Burton se encuentra perdido y que hoy lamentablemente solo es la sombra de aquel director que alguna vez fue.