Es una alocada comedia de acción, con un elenco de estrellas encabezado por Brad Pitt que brinda entretenimiento de acción frenética y banal con humor sangriento. La historia basada en la novela de Kotaro Isaka que hizo el guión con Zak Olkewicz transcurre a bordo del tren bala que va de Tokio a Kioto. Si bien en el enunciado se trata de una historia familiar, de destino y de buena o mala suerte, esos elementos con personajes que tocan una sola cuerda, solo sirven de soporte para los enredos constantes y la coreografía precisa de la acción, con efectos especiales que se salen de toda lógica sin molestar. Básicamente son asesinos a sueldo que coinciden en ese viaje, una banda que lidera Pitt para su lucimiento, no en vano el director es David Leitch (Deadpool 2) que solía ser el doble de riesgo del actor. Aquí con inspiración evidente en directores como Tarantino y Ritchie, se juntan dos hermanos temibles, una princesa con aspecto de colegiala, una experta en venenos, un temible exterminador mexicano, y la mafia china a pleno comandada por “la muerte Blanca”. Brad Pitt dirigido por su jefa combate su mala suerte y las enseñanzas new age que poco tienen que ver con su profesión, esta apodado como “Lady Bug”, para nosotros una vaquita de San Antonio. Un hombre que quiere sembrar la paz y riega todo con golpes, cadáveres y amenazas. Con muy buena factura técnica, famosos haciendo cameos, el elenco brilla con Joe King, Aaron Taylor Johnson, Michael Shannon, Hiroyuki Sanada y Sandra Bullock. Cine pochoclero para pasar un buen rato.