El generoso trailer de anticipo de Tren bala/Bullet train, “la nueva película de Brad Pitt”, ya dejaba claras las referencias al cine de Guy Ritchie. En especial a Snatch: cerdos y diamantes, que también contó con la presencia del actor.
Acá hay un grupo de matones, de asesinos a sueldo, a bordo de un tren que va de Tokio y Kioto, y que para un minuto en cada estación. Entre ellos, sus balas, sus maletines llenos de dinero y sus misiones cruzadas, está Catarina (Pitt, en modo full comediante).
En esta imagen proporcionada por Sony Pictures, Brad Pitt, izquierda, y Aaron Taylor-Johnson, en una escena de “Tren bala". (Foto: Scott Garfield/Sony Pictures via AP)
En esta imagen proporcionada por Sony Pictures, Brad Pitt, izquierda, y Aaron Taylor-Johnson, en una escena de “Tren bala". (Foto: Scott Garfield/Sony Pictures via AP)
La apuesta, del director David Leitch (Deadpool 2), basada en un libro del japonés Kotaro Isaka, presenta un ritmo frenético que no ahorra efectos ni violencia: edita montañas de trompadas, patadas y demás alegrías como si se escapara el tiempo. Pero a pesar de una búsqueda tarantineana, en diálogos y situaciones que bordean el absurdo, la sumatoria de esas situaciones, en una duración exagerada, termina por agotar. Frente a esa acumulación, queda la gracia de Pitt como salvación, en una película que se autopercibe más divertida de lo que termina siendo.