Una verdadera fiesta. Brad Pitt se sube a este vehículo a toda velocidad luciéndose como el guía de una adrenalínica propuesta en la que se revisitan clásicos del género influenciados por la cultura de lo efímero. Con escenas de alto impacto visual, música y muchos, muchos, fuegos artificiales, Pitt vuelve a demostrar su capacidad y carisma para llevar a buen puerto esta divertida propuesta.