Paul Thomas Anderson es uno de los mejores directores de cine que nos dieron los '90. Su sensibilidad detrás de las cámaras nos regaló grandes películas como Boogie Nights (1997) o Magnolia (1999). Es por este motivo, que cada estreno con su nombre impreso genera grandes expectativas.
Vicio Propio (Inherent Vice) es un viaje sensorial por la California de 1970. La acción acontece en la localidad ficticia de Gordita Beach, en donde el detective hippie y fumanchero Larry "Doc" Sportello (Joaquin Phoenix) recibe la visita de Shasta Fay Hepworth (Katherine Waterston), una ex novia que le pide ayuda para encontrar a su actual pareja, un millonario de la zona que está desaparecido.
Sin soltar el faso, "Doc" decide ayudarla y emprende una búsqueda que no le interesa a nadie, ni a Anderson, ya que desde ese preciso momento parece abandonar el relato lineal, y la película comienza a convertirse en una serie de escenas aparentemente inconexas en donde irán apareciendo decenas de personajes que llevarán a nuestro protagonista de aquí para allá. Cada avance en la investigación lo llevará a nuevas preguntas y a desenroscar nuevos casos en los que el investigador se verá inmiscuido.
Recordemos que Vicio Propio es la primera adaptación al cine de una novela de Thomas Pynchon, escritor reconocido por la complejidad al pedo impresa en sus obras. Digamos que la trama central es completamente sosa, por lo que el autor se vale de otros elementos para enriquecerla.
Volviendo a la película, algunas personas pueden decir que el guión es un poco flojo, que no lleva a ningún lado, que los personajes secundarios son excusas para meter algún que otro chiste. Y la verdad es que no estarían muy errados. Lo que esas personas tienen que entender, es que a la hora de adaptar esta novela, la motivación real de Anderson fue describir todas las sensaciones de una época en la historia norteamericana que, lentamente, iba dejando de existir.
La ambientación, la música y el tratamiento de la imagen te llevan de excursión a esos años '70, que marcan de alguna manera, la muerte del Flower Power. El hippismo salió mal y eso se nota en toda la película. Joaquin Phoenix transmite una sensación de nostalgia ante los tiempos que corren. Este sentimiento se ve aumentado cuando contraponemos su papel con el de Josh Brolin (MIB III, Old Boy), quien interpreta al detective "Bigfoot" Bjornsen, que no pierde oportunidad de levantar y samarrear a la primera persona que vea con el pelo por debajo de los hombros.
Mientras la película avanza, "Doc" se ve inmerso en muchas situaciones que poco tienen que ver con la premisa inicial de la película. Es acá donde brillan los personajes secundarios, representados por un verdadero dream team hollywoodense. Entre estos podemos nombrar a Owen Wilson (Zoolander, Midnight in Paris), quien representa a un ex saxofonista heroinómano, presuntamente muerto que es captado por los servicios secretos, o a Benicio del Toro (Snatch, The Usual Suspects), que interpreta al abogado de "Doc" y cuyos intereses se acercan más a tirar frases con groove que proteger a su cliente. Un papel imperdible, y poco aprovechado, es el del actor Martin Short (Mars Attacks!, Frankenweenie), que representa a un odontólogo completamente cocainómano con la líbido por el cielo. Otra actriz que deja su huella es la blonda Reese Witherspoon (Wild, Legally Blonde), cuya química con Phoenix ya pudimos disfrutar en la genial Walk The Line (2005).
El mayor hallazgo de Anderson fue darse cuenta que la película pasa por ahí. Las interacciones entre estos actores marcan los puntos más altos de esta obra, generando todo tipo de situaciones ridículas e hilarantes. Esta es, probablemente, la película con mayores dosis de humor del director.
Mi impresión final es que Vicio Propio va a ser una película que va a dividir a su audiencia. El film dura casi dos horas y media, y a primera vista, no parece tener muy claro a dónde quiere ir. Pero si uno se anima a ir un poco más allá de lo evidente (como Leon-O), va a ser recompensado con un viaje bien volado a los últimos esbozos de la era del "paz y amor".
VEREDICTO: 7.5 - Could you be looovveed...
Paul Thomas Anderson vuelve a las andadas con una película densa y difícil de digerir. Si te animás, te sugiero que te prendas uno y acompañes al carismático "Doc" Sportello en esta aventura por las calles de Gordita Beach. Yo me sumo.