Cuando descubrí que estaban haciendo esta película y estaba basada en un libro, corrí a comprarlo. Tres noches después, lo terminé con una sonrisa terrible. Hacía mucho que un libro no me hacia reír tanto, si es cierto, no leí el libro equivocado. Un libro muy dinámico con mucha ciencia en todo momento, algunos inclusive muy pesados. Pero lo que me cautivó más fue el personaje de Mark Watney, que en la película es interpretado por Matt Damon, extremadamente carismático y de un humor excelente. Afortunadamente la película hace valer lo que hizo el libro, y el guión adaptado de Drew Goddard es excelente. Obviamente cortó varias partes del libro y tal vez el humor no estaba tan presente, pero la esencia del personaje principal y el positivismo en la ciencia están todos en la película. La historia cuenta como la tripulación de Ares III, después de una fuerte tempestad tiene que abandonar la misión, y en el medio de la salida ocurre un accidente,y el astronauta Mark Watney es dado por muerto. Descubrimos que Watney no está muerto y tiene que vivir solo, con suministros para 30 dias, pero la próxima misión a Marte llegará recién en 4 años. La historia básicamente nos muestra lo que Watney tiene que hacer para sobrevivir e intentar comunicarse con la Nasa para que sepan que está vivo, y usar toda sus capacidades en ciencia para llegar al objetivo. En una mezcla de Náufrago con Apollo 13, con una visión extremadamente positiva de como es usada la ciencia, nos muestra y explica cada paso y desafíos que Mark tiene por delante, usando el carisma y el ingenio para superar los desafíos. Las explicaciones son orgánicas y en ningún momento trata al público de burro, explicando todo, pero de forma directa. Matt Damon lleva el papel muy bien, con su carisma habitual, en un papel que podría ser cansador para el público ya que aparece solo gran parte de la película, pero al contrario cuando salimos de Marte, contamos los minutos para volver a Watney y compartir su humor contagioso y perseverancia en sobrevivir. El resto del elenco, que es impresionante, está muy bien, cada uno en su papeles, algunos mas chicos que otros, pero cada uno dando su contribución. Con nombres como Jessica Chastain, Chiwetel Ejiofor, Jeff Daniels, Eddy Ko, Michael Peña, Kate Mara, Aksel Hennie, Sean Bean, Donald Glover, Kristen Wiig, Sebastian Stan, Mackenzie Davis, realmente es un elenco soñado. Dirigido por Ridley Scott de forma impecable, mostrando un lado menos sombrío de lo que acostumbra en sus películas, pero con su capacidad para fascinar en planos abiertos y mostrarnos lo claustrofóbico de las tomas internas .Nos muestra Marte en todo su esplendor y peligro, con un 3D excelente, que realza la grandiosidad de lo que seria estar en Marte y lo inhóspito que es. Un excelente sorpresa, después de una semana en la que descubrimos que hay agua en Marte(coincidencia? mmm sospechoso). Y después de algunos blockbuster deprimentes en el comienzo del año, empieza la última etapa del ciclo con el pie derecho y ojalá que sigamos así hasta el final.
Me acuerdo que cuando Discovery, History y National Geographic se dedicaban a mostrar documentales, vi varios sobre el Everest, y siempre me pareció impactante tanto el deslumbre por llegar al punto más alto de mundo, como el impacto visual de las imágenes del propio Everest. Pero si hay algo que esta película consigue realmente sorprender es dar la sensación de la grandiosidad y peligro de la montaña, con imágenes deslumbrantes en 3D muy buenos, realmente merece ese formato y una sala de cine lo más grande posible. A pesar de no estar acreditado como fuente, la película utiliza mucho del libro Mal de Altura de Jon Krakauer (interpretado en la película por Michael Kelly), que retrata con detalles lo vivido en los acontecimientos de 1996, concentrado en los esfuerzos de los veteranos Rob Hall(Jason Clarke) y Scott Fischer(Jake Gyllenhaal), en llevar de forma comercial a alpinistas menos experimentados a la cumbre de la montaña más alta del mundo. Creo que muestra bien como algo que hasta antes de los años 90 era solo para alpinistas profesionales, se transforma en un asunto de negocios. Se ven como los grupos compiten entre ellos por espacio y por llevar sus clientes a la cima. Sin caer en el cliché de poner algún villano como parte de los acontecimientos que llevan a la tragedia, siendo un punto positivo. Por otro lado, retrata bien la camaradería de los veteranos de Hall y Fischer cuando viendo las dificultades que tienen, se ayudan mutuamente, mostrando una dinámica que trabaja entre la provocación, amistad y respeto. Volviendo a la parte técnica, es un trabajo primoroso, un excelente trabajo de fotografía y efectos especiales que consiguen retratar de forma grandiosa el Everest, sin que en ningún momento se note que fue echo con computación gráfica, set o donde fuere filmado en la locación. El 3D como ya comenté, mostrando una profundidad sin par para las imágenes hermosas que son mostradas. Infelizmente no solo de parte técnica es hecha una gran película, la última parte pierde mucho ritmo comparado a la primera hora donde se siente muy bien la tensión y como es sufrida la preparción para subir a la montaña. Siendo la parte final prácticamente solo de diálogos, a pesar de emotivos, la sensación me dejó fue como que faltó un brillo, siendo en momentos yo diría hasta aburrida. Pero en general como comenté, termina siendo buena por mostrar la fascinación que el Everest ejerce sobre el ser humano y también lo implacable que puede ser con nosotros.
Como no leí los libros no voy a poder decir como es la película como adaptación, pero me llevé sentimientos desencontrados con esta. La primera parte de Maze Runner tenía algo de interesante por la simpleza y como era un película limitada de presupuesto para los niveles de Hollywood era más inventiva a la hora de sacarle el jugo a las escenas de acción. Esta va por otro camino, nos lleva fuera de laberinto, nos muestra toda una tierra post apocalíptica y termina cayendo en las clásicas escenas del género. Sin más para que quien no leyó los libros la crítica puede contener algunos SPOILERS. La película empieza exactamente donde termina la última, donde Thomas (Dylan O´Brien) junto a Teresa (Kaya Scodelario) y el resto de grupo que escapó del laberinto, se van a una instalación militar donde teóricamente están a salvo. Pero acá empiezan los problemas que siguen por toda la película y que más me molestaron, tal vez los libros tengan el suspenso que faltó en la película, porque a partir de acá todo, a mi manera de ver, es muy predecible, la instalación que es la salvación y de entrada sabes que tiene problemas, un sorteo que todos festejan pero sabemos que algo va mal, en el mundo afuera los cranks(nada más que los viejos zombis) que aparecen de la nada por que alguien apriete un botón, que cualquiera sabe que no se debe apretar, termina dejando una película que tenía sus méritos por lo visual y ritmo, en una como mínimo mediana. La misma teórica traición en el tercer acto, es mostrada en tu cara desde el momento en que salen de la instalación, y muestran tantas veces lo que iría pasar que lo único que queda de suspenso es saber en qué parte la van usar. Por el director Wes Ball, la dirección de efectos especiales, la parte visual esta muy bien lograda, con un 3D que a pesar de no ser nada novedoso esta bien implementado. La escenas de acción no están mal, pero sigue la misma fórmula de correr, descansar, correr, descansar de la anterior. Exagerado en algunos puntos teóricamente dramáticos donde no se lo siente. Por ser una película del medio de la trilogía, no tiene un final 100% definido lo que termina generando el problema de 99% de las trilogías, quedamos en un final sin nada, ahora a esperar la tercera que está programada para 2017.
En pleno 2015 no se porque todavía me sorprendo en ver como Hollywood no aprende de sus errores, viendo este nuevo Hitman me pongo a pensar como alguien debe haber presentado este proyecto al estudio, “esta será una película de acción sin precedentes, pero no se preocupen porque nadie va notar nada porque será todo muy rápido, los efectos no serán caros porque total lo que importa es una buena explosión al estilo Michael Bay y con mucho slow motion, y el guion olvídate metemos 300 cosas sin ningún nexo que nadie va entender total lo que importa es el espectáculo.” Bueno mirando la última de Hitman creo que la idea fue maso o menos esa. Lo que más molesta es que el personaje del título que esta basado en un game que es probablemente uno de los más fáciles de ser llevado al cine , el Agente 47 en si es un Jason Bourne turbinado con un poco más de espectacularidad, mismo así después de la primera película en 2007 con Timothy Oliphant y ahora con Rupert Friend encarnando el agente, terminan cometiendo siempre los mismos errores. Además infelizmente el director debutante Aleksander Bach no ayuda mucho, su dirección usa todo los clichés de la última década en cuestión de escenas de acción con el diferencial de todavía ser muy mal aplicadas. Bueno sobre el guion creo que mi introducción deja bastante claro el nivel. Lastima porque tiene muy buen elenco, además de Rupert estan Zachary Quinto, Ciarán Hinds , Thomas Kretschmann, que me hace pensar también si leen los guiones antes de entrar en estas películas.
Al comienzo de la película sentí un poco la "vibe" del 007 de Roger Moore, Henry Cavill me transmitió esa idea de espía pomposo que hace todo calculado a su tiempo pero siempre manteniendo el estilo y buen humor, bueno infelizmente fue solo ese comienzo. Basada en una serie de los años 60 con el mismo nombre, Agente de C.I.P.O.L (The man from U.N.C.L.E), siendo una precuela y de presentación, sigue la idea del conflicto de la guerra fría, no trayendo la historia para los días de hoy, acá me pareció un acierto ya que está muy bien retratado la época, trayendo ese glamour del pasado, y evitando toda la parafernalia tecnológica de las películas de espías del presente donde casi todas terminan pasando por hackear algún sistema. Presentando a Napoleón Solo (Henry Cavill) agente de la CIA y su contraparte de la KGB Illya Kuryakin (Armie Hammer), vemos acá la clásica representación del americano con todo glamour y el soviético como apenas un tipo rústico de fuerza bruta. Entre los dos está la alemana Gaby Teller (Alicia Vikander) que es el gatillo de toda la acción de la película. El trío me pareció muy forzado como queriendo tirarnos en la cara que es todo accidentado, aún los momentos teóricamente de humor no son orgánicos y se notan una cantidad inmensa de clichés que no ayuda mucho. Los villanos siendo talvez el mayor cliché de la película, sin un motivo concreto plausible, crean un arma nuclear porque pueden y pretenden usar contra el mundo porque también pueden, no se siente ninguna motivación, están para juntar el equipo nada mas. Guy Ritchie también no ayuda mucho a la película con su dirección, con una acción toda entrecortada y muy rápida, casi siempre haciendo que se pierda el ritmo del espectador, usando su característica división de cuadros para mostrar escenas paralelas en exceso y medio como para decir que están ahí, como si quisiera poner su firma, pero infelizmente no acrecienta en nada, sólo para acelerar algunas escenas. Lamentablemente el tiempo de Snatch: cerdo y diamantes ya pasó. A pesar de tener sus momentos de diversión principalmente en la primera parte, se pierde mucho en la segunda y con la parte final muy poco inspirada termina siendo apenas una película de acción y comedia que no suma en nada a un mundo de Hollywood tan poco inspirado de hoy.
Los 4 fantásticos, unas de las mayores incógnitas del año, llegó y una de las primeras cosas que voy a contar es que es mejor que los otras dos anteriores... realmente no quiere decir mucho, las otras eran como mínimo y estando de muy buen humor sufribles. En esta nueva tentativa llevada por FOX tenemos lo que se podría decir dos películas. Una que es lo que Josh Trank (Director) prometió en inumerables entrevistas, no una película de súper héroes, una película de ciencia ficción con toques de terror a lo David Cronenberg (muy poco pero está ahí). La segunda partes es la que me parece tiene la mano del estudio de por medio, una película que quiere ser de súper héroes toda desconectada con escenas de acción flojas, efectos especiales malos y apurados. La película que para los padrones de hoy es corta, tiene una hora y cuarenta minutos, pasa la mayor parte (una hora y veinte calculo), con la parte de origen, mostrando como surgió la amistad de Reed Richards (Miles Teller) y Ben Grimm (Jamie Bell), como es la relación Susan y Johnny Storm (Kate Mara y Michael B. Jordan ) con su padre, y como se crea la máquina de salto de dimensiones paralelas con la ayuda de Victor Von Doom (Toby Kebbell). Hasta ahí todo bien, la película se muestra en un tono de ciencia ficción con un toque de suspenso, hasta que llegan los poderes y se nota un poco la idea de ficción para el lado del terror. Particularmente pienso que está bien como se muestra la relación de los poderes con cada uno, principalmente con Reed que lleva todo el peso de la culpa de haber llevado a su mejor amigo a una situación que tiene consecuencias graves e irremediables para él. Pero cuando te estás acostumbrando con la idea de que los cuatros fantásticos van a mostrarse y a trabajar en conjunto, surge el villano transformado Dr. Doom. Ahí si que se viene todo abajo, en una caracterización que ya no sé cómo puedo calificar además de horrible, caricaturizado al máximo sin ninguna motivación a menos que sea destruir todo. En ese momento, los últimos 30 o 20 minutos, la película se transforma totalmente, cambiando el tono de ciencia ficción para una de súper héroes que te hace acordar a la versión anterior de los 4 fantásticos. El clímax final con la lucha de los 4 con Dr. Doom es totalmente apresurada, sin inspiración, monótona, triste. Por eso creo que tiene cara de que el estudio metió la mano e intentó cambiar el resultado final, pero como en 99,99% de las veces que eso ocurre termina mal, en este caso no podría ser distinto. Es una lástima constatar que con un director prometedor y un elenco tan bueno, terminemos con una película mediocre y que va a ser olvidada apenas salgas del cine.
Al ver a Tom Cruise a los 53 años agarrado a la puerta de una avión (si es el no es doble) te hace tener fe de nuevo en el cine de acción. Después de muchos sucesos de taquilla que usan efectos exagerados e imposibles para la acción, acá estamos delante de una película un poco a la vieja escuela con acción mas práctica y directa. Sí, obvio que hay cosas “imposibles”, pero se nota mucho la acción bien dirigida y sin tanto “exageración” y hasta ridículas como por ejemplo se usan en la últimas películas de la saga Rápido y Furioso donde prácticamente los protagonistas son Avengers sin uniforme. Acá tenemos de nuevo a Ethan Hunt usando todo los medios posibles y generalmente fuera de los protocolos del gobierno para finalizar las misiones imposibles, lo que termina en que la CIA con su director interpretado por Alec Baldwin use todo su esfuerzo para finalizar la Fuerza Mision Imposible (si FMI), dejando a Ethan solo para ir atrás del El Sindicato una organización independiente con objetivos más que oscuros y con toda la fuerza y destreza de la FMI, inclusive llamada en la película en cierta parte una anti-FMI. En el equipo tenemos los mismos de la película anterior, Brandt (Jeremy Renner), Benji (Simon Pegg) y Luther (Ving Rhames), con la introducción del personaje ambiguo de Ilsa Faust (Rebecca Ferguson) y como villano tenemos a Lane intepretado por Sean Harris prácticamente irreconocible por el maquillaje. Renner y Rhames no comprometen y están bien en sus papeles que a pesar de ser menores tienen su importancia. Simon Pegg está muy bien y se nota que cada vez esta mas confortable, siendo obviamente usado como un cierto alivio cómico que de por si está excelente, muy orgánico y sin parecer forzado. A Rebecca Ferguson que es la contraparte femenina de Ethan en ningún momento se la usa como la dama en peligro y en cuestión de acción individual está en el mismo nivel. El villano me gustó, Sean Harris usa voz baja, siempre pausada y calculista, es un villano sin acción pero que tira todas las cuerdas de la trama. Tom Cruise volviendo a un excelente nivel tanto de actuación como de carisma. Ya hable un poco de la acción arriba, pero realmente todas las escenas te dejan sin aliento, prendiéndote en la silla, y lo que me gustó más que todas, es que no tiene un final predecible, sí, obvio que a los protagonistas no les va pasar nada, pero en todo momento queda la duda de cómo va terminar. Creo que por ahora junto con Mad Max tiene las mejores escenas de año. Aconsejo a todos a verla en el mejor cine posible, es una película que merece pantalla y sonido a la perfección, y a pesar de que tal vez la parte final decaiga un poco es muy recomendable en todo sentido.
Cuando salieron las primeras noticias del Hombre Hormiga, gran parte de lo que vendría quedó como una incógnita y también como la esperanza de algo distinto que, en principio, sería escrito y dirigido por Edgard Wright. Creo que el mayor “problema” de las películas de Marvel es su uniformidad, en general son todas iguales, tienen básicamente el mismo plot, visualmente no difieren en casi nada una de otra, y para mi ya empieza a cansar. Y a pesar del enorme suceso de los Guardianes de las Galaxias, desde mi punto de vista es una película floja con un humor muy forzado. En mi imaginación pensé que con Edgard Wright estaríamos empezando a ir para otra dirección, pero mis alegrías no duraron mucho, ya que en mayo de 2014, a poco de empezar las filmaciones, Edgard dejó la dirección de la película. La básica disculpa es la “diferencias” creativas, más se dice que lo que hizo que Edgard saliera fue que Marvel quería que la película tuviera innumerables relaciones con su universo y Wright quería una película más cerrada en si misma. Después de lo ocurrido asumió la dirección Peyton Reed, director mediano de comedias más medianas, como por ejemplo ¡Sí, señor! protagonizadas por Jim Carrey. El Hombre Hormiga, a pesar de ser un personaje importante de la mitología Marvel, nunca fue del gran escalón. Sí fue uno de los fundadores de los Avengers, pero nunca consiguió mantenerse en la cima. Por esa misma razón creo que Marvel tardo tanto en sacar su película, probablemente la apuesta más arriesgada hasta el momento. La película en si sigue la básica trama de origen, que se parece mucho a la primera del Hombre de Hierro. Pero acá creo que el guión de Edgard Wright aparece y se notan las diferencias, es una película muy bien cerrada, con un humor más orgánico y legitimo, no tan forzado como el que se nota en Guardianes de las Galaxias. Se ve en toda la película su toque, salvo en las claras apariciones y menciones al universo Marvel. Las escenas de cuando se encoje están muy bien logradas, incluso recuerdan a la época de “Querida encogí a los niños”. Paul Rudd muestra su carisma como actor y comediante, que convence como Scott Lang. Michael Douglas muestra un Hank Pym amargado por el pasado, pero con un toque de la personalidad de Pym del comic. Y del lado del villano, me parece que Corey Stoll no convence, siendo muy caricaturizado, y también mostrando ya lo flojo que se están quedando los villanos de Marvel, con motivaciones como mínimo predecibles y sin lógica. El Hombre Hormiga termina siendo un buen divertimento y un pequeño toque de creatividad en un universo Marvel que empieza a sentir el peso de tantas películas iguales.
Cuando empezaron a surgir noticias de este proyecto y que Arnold estaría dentro, realmente me dio esperanzas, después de películas como mínimo flojas (Terminator 3: Rise of the Machine y Terminator 4: Salvations The Future Begins), creí que con la mano de Arnold y las lecciones aprendidas en las dos últimas entraríamos en una nueva trilogía con el pie derecho, lo que infelizmente no es el caso. Con la idea de ser un reboot y continuación al estilo de la nueva franquicia de Star Trek, la película empieza con hechos que nunca vimos en las otras. Cómo la resistencia consigue ganar a Skynet con ayuda de John Connor (Jason Clarke), que por lo que le pasó en la infancia (Terminator 1, 2 y 3) tiene conocimientos casi mesiánicos de lo que sucederá. En esta primera parte vemos a Connor con la ayuda de Kyle Reese (Jai Courtney), tomar de asalto una base especial de la Skynet, donde se encuentra la máquina del tiempo, donde se ve al T-800 siendo enviado al pasado con la misión de matar a Sara Connor (Emilia Clarke), siguiendo los acontecimientos de la primera película de 84 y bueno, obviamente, Reese se ofrece para enfrentalo y hacer el viaje en el tiempo, pero en el último instante pasa algo inesperado y cuando llega a 1984 descubre que Sara ya no es la mujer frágil que le contaba Connor, pero que es una guerrera entrenada por un exterminador que ella lo llama “papi”. Hasta acá todo bien, realmente la primera parte y principalmente cuando vez al T-800 llegando, con muy buenos efectos sobre el Arnold digital joven, la historia funciona. Toda la reconstrucción de las escenas del Terminator original es extraordinaria y te llevan a la nostalgia de cuando lo viste por primera vez. Después de acá lamentablemente todo se va para abajo, una cantidad de reviradas vueltas al pedo, para peor la mayoría de ellas entregada en los trailers. Schwarzenegger dijo en varias entrevistas que había más cosas importantes que no fueron mostradas, pero salvo un pequeño detalle al final, que claramente fue introducido para seguir haciendo más películas, todo el resto fue tirado en nuestras caras por el estudio, con eso le saca todo lo bueno del comienzo. Además los nuevos actores no convencen, por ejemplo, vos te imaginas una Sara Connor que fue creado por un Terminator de los 7 años de edad para que sea un soldado, lo primero que me vino a la mente fue Linda Hamilton en Terminator 2, y lo que vez en la pantalla es casi una adolescente irritante, que en ningún momento te transmite la fuerza y la determinación de Linda Hamilton. Jay Courtney no hace más que un personaje genérico. J.K. Simmons que ni el tiene idea de lo que esta haciendo ahí, totalmente desperdiciado. Jason Clarke en un papel, yo diría hasta injusto, por la manera en que el estudio trató el marketing de la película. Lo único que lo salva es cuando Alnord aparece en escena, realmente el carisma que tiene en pantalla es lo único que motiva a verla. Escenas de acción flojas, diría que en ese sentido el peor de toda la franquicia, mostrando un T-800 obsoleto salvando a Sara Connor de un enemigo tras otro, termina siendo un rejunte de homenajes a las primeras películas, que tira abajo nuestra esperanza de una nueva trilogía.