Casa Coraggio de Baltazar Tokman se muestra como un documental adentrándose en la vida de la familia Coraggio, dueños y señores de una cochería fúnebre en la localidad de Los Toldos. Su director registra la paz que se encuentra en una familia de pueblo cuyo negocio es simple: la muerte. El film sigue la vida de Sofía Urosevich y su viaje hacia a Toldos, La Plata, su pueblo natal. Entre la calidez pueblerina y las diferentes historias de familia, Tokman transfiere al espectador para que sea parte del film y no solamente un observador. Para ser un documental, Casa Coraggio plasma diferentes situaciones, las cuales hacen dudar si lo que estamos presenciando es ficción o realidad. La naturalidad básica de las cosas llama la atención. Cabe destacar que el realizador motiva al público con imágenes extremadamente bellas que necesariamente no utilizan diálogo alguno, para registrar eficiencia cinematográfica; es más, los mejores momentos de esta película se dan sin palabras, sólo con el registro de acciones acompañado de una banda sonora o simplemente el ruido del viento. Casa Coraggio se imprime con eficiencia en los ojos de los espectadores por su espontaneidad. En esta cinta no sólo conocemos al clan Coraggio, sino también a empleados de la funeraria, clientes, etc… Ellos comparten momentos de vida, costumbres y sentimientos; todos los participantes brindan un cierto interés en la sala por la vida en Los Toldos. Por ejemplo, una simpática conversación de Sofía con su abuela puede resultar sumamente atractiva gracias al cariño real que se da en pantalla entre familiares. La introducción de numerosos personajes presenta algo negativo: la cantidad puede apabullar al público, y tras ese carisma local, también hay personalidades altaneras e innecesarias -la madre de Sofía resulta tóxica para el film- que no suman absolutamente nada y generan malestar con presencias vacías y sin objetivo alguno. Inclusión por inclusión… no funciona y sin dudas la frase “pueblo chico, infierno grande”, resuena en una que otra oportunidad. Casa Coraggio es un viaje de ida en el cual no vemos resoluciones o cierres de historia, simplemente es una presentación de un estilo de vida y sus integrantes. Entre la vida y la muerte, el film documenta un negocio de forma correcta sin demasiados lujos de detalle.
Con una nueva encarnación y tras ser reclutado en el Universo Cinematográfico de Marvel la nueva aventura de Spider-Man es un film extremadamente divertido, con una historia simple pero efectiva y una sensación de objetivo logrado a la hora de definir a su personaje principal, Spider-Man Homecoming (nombre en inglés) es el claro ejemplo de "la tercera es la vencida". El director John Watts, encargado de la película Cop Cap - joyita protagonizada por Kevin Bacon - logra introducir al público en un ambiente pactado sin necesidad de volver al clásico "mataron al tío Ben!" de Peter Parker. Watts y guionistas recurren a una introducción poco ortodoxa de spidey, ubicando la mirada en desarrollar una historia sobre héroe en pleno ascenso con hambre de gloria. El origen archirecontra quemado del “trepa muros” queda como un simple chisme del pasado. Como si fuera un homenaje hacia John Hughes, la cinta juega continuamente sobre el conflicto de crecer y asumir responsabilidades. No tenemos a un Peter Parker en crisis post traumática por causa de la muerte, sino a un Parker ambicioso por el éxito y marcado por la promesa de su aliado en armas, Tony Stark (Robert Downey Jr.) de ser futuro miembro de los vengadores. Gracias a esa promesa, Parker/Spidey va - como si fuera una autoescuela de superhéroes - aumentando el factor de riesgo de sus acciones hasta que inevitablemente su camino da con Adrian Toomes/Vulture (Michael Keaton), un traficante de armas. Es interesante el caso del personaje de Keaton, el UCM (Universo Cinematográfico de Marvel) se caracteriza por ofrecernos villanos interesantes que terminan siendo una simple débil presencia, pero en Homecoming el personaje de Keaton cambia todo lo que se vio anteriormente; Adrián Toomes es un personaje rico argumentalmente con un motivo realista el cual hace que los espectadores se sientan identificados con él. El objetivo final del villano no es global - generalmente por culpa de esto las cintas de Marvel se sienten predecibles - sino local y justamente al ser así, la amenaza representada se vuelve más real y efectiva. Vulture es el mejor villano que el UCM nos ofreció hasta el momento. Spider-man: Homecoming es un film que resulta accesible para todas las edades, los más grandes van a poder disfrutar de ver a uno de los héroes de su infancia plasmado en pantalla de manera diferente y al mismo tiempo familiar, y los más chicos van a poder conocer a un joven héroe de ficción que resulta simpático desde el primer minuto de metraje. Para los más fanáticos y familiarizados con la obra original en páginas: si superan algunas libertades étnicas y de origen narrativo, la película es entretenimiento en su estado mayor, de principio a fin.
It comes at night (título en inglés) se presenta como un proyecto que agrega de nuevo la ya aburrida palabra Apocalipsis a la larga lista de film sobre este tema, pero créanme, los primeros minutos de película nos sitúan ante algo diferente. El film de Trey Edward Shults tiene un escaso alcance de costo en producción, sin embargo entre las actuaciones que ofrece y una dirección que merece sacarse el sombrero y aplauso It Comes at Night, es uno de los aciertos cinematográficos del año. La trama es bastante simple: un misterioso virus amenaza con barrer toda vida en la Tierra. Las miradas se centran en la vida de una familia recluida en una casa tratando de vivir con lo que posiblemente sea el final de sus días. Todo esto resulta conocido pero el film está realizado de una forma sumamente especial que no necesita una cantidad desorbitante de sangre, lo groso, lo interesante de It comes at Night, se da a nivel técnico. El manejo de cámara que da a pie al suspenso es excelente. Shultz instiga a que el público imagine horrores desconocidos tras la seguridad del ojo de la cámara. La incertidumbre que sienten los personajes a los hechos que los rodean, se adivinan en el aire gracias a una combinación de paneos que revelan solamente lo necesario; lo que no se ve, es lo que realmente llama la atención en el film. Un consejo: hay que olvidarse del terror porque en este film el suspenso es rey. El trabajo actoral es otra de las fuerzas que posee It Comes at Night, solamente 10 personas tienen presencia en esos 91 minutos de film con Joel Edgerton (Warrior, Black Mass) encabezando la línea de ataque, pero el film no necesita más. Tenemos personajes que brindan intriga en toda la duración del metraje. Acciones predecibles y momentos tontos que generan bronca en el público no van a faltar, no obstante todo esto se da con un grado de actuación asombroso que hace que, decisiones idiotas pasen desapercibidas. Dato a destacar: es increíble el nivel actoral que ofrece Joel Edgerton cuando su única compañía son lágrimas y una botella de whisky. It comes at night es una pequeña pero muy efectiva propuesta en la línea de películas apocalípticas; tal vez no tenga una gran producción, pero todo elemento que ofrece en pantalla ya sea actoral como técnico está hecho de una manera sólida que engancha y genera un positivo conflicto en el espectador. De suspenso al por mayor.
Don't Knock Twice (nombre en inglés) es una película que reúne componentes de otros films de terror. La película trata de sorprender al público con situaciones carentes de interés y presentando personajes absolutamente dispensables. El director del proyecto Caradog W. James, los guionistas Mark Huckerby y Nick Ostler recurren a escenas de terror básicas, predecibles y aburridas. Para dar un ejemplo de esto nos encontramos con la clásica “abducción” en plena video llamada de Skype que demuestra el "gran poder" del villano, pero ese poder más el ambiente y hasta las palabras empleadas por los protagonistas es algo que ya se vio en tres mil películas anteriormente como en Unfriended, Paranormal activity y sus secuelas (por dar ejemplos). W. James y sus guionistas reciclan momentos durante toda la película suponiendo que el espectador es estúpido y no se va a dar cuenta del desastre que está presenciando. ¿Se acuerdan de la típica escena de la comida que se transforma en algo asqueroso para darle al protagonista un motivo para no dormir ese dia? Bueno, también tenemos esa gastada situación en Don't Knock Twice. Katee Sackhoff y Lucy Boynton (madre e hija en la ficción) intentan mantener el ritmo de la película ofreciendo actuaciones que son desafortunadas - culpa del guión de Huckerby y Osler - básicas y desinteresadas. En el caso de Sackhoff la situación de "buena o mala actuación" es un tiro a ciegas, hay veces que Katee se mantiene en línea con el nivel de la película como por ejemplo en The Haunting in Connecticut 2: Ghosts of Georgia (un bodrio entretenido) pero en ciertas ocasiones ella hace brillar la pantalla/tv con su presencia, dos gratos ejemplares son Nip/Tuck y Battlestar Galactica. Katee Sackhoff es una actriz pura y exclusivamente del género acción o ciencia ficción y no es para nada placentero verla desperdiciar su descomunal presencia haciendo de una madre afligida- no se lo puede creer ni ella-. Puede ser que el departamento de arte y la banda sonora a cargo de James Edward Barker y Steve Moore ayuden en ciertos momentos pero a no engañarse, Don't Knock Twice es un film estándar y obsoleto que no sorprende, no se arriesga a innovar y no logra mantener al público interesado en esos cortos 93 minutos. Sin dudas es un film para olvidar.
ese a un desafortunado guión, entre olas y arena, un nuevo equipo de rescatistas se apoderan de las playas con humor y buena química. Lejos de la esencia de la serie de "Hoff" y Pamela Anderson, elBaywatch '17 divierte, aunque con un gran costo. Protagonizada por Dwayne "The Rock" Johnson, Zac Efron y Alexandra Daddario la película sorprende por la excelente química en pantalla de este nuevo equipo. El film se ilumina en las escenas compartidas por Johnson y Efron: estas ofrecen -en situaciones obvias- una buena dosis de humor absurdo, además evidencia buena camaradería entre actores. El carisma de Johnson reina en cada escena. La sorpresa de la película es la presencia de la hermosa Kelly Rohrbach, que opaca - y de gran manera - a "ojitos" Daddario. Baywatch puede cumplir con gran facilidad con algunos chascarrillos, pero si hablamos en términos de "adaptación" deja mucho que desear. La serie ícono de los 90's -tesoro nacional de esa época- resultaba ideal ya que tenía el espíritu, ambiente y si..., los bikinis que marcaban tendencia en esos años. La nave noventera comandada por Pamela Anderson, Traci Bingham y Yasmine Bleeth exclamaba sensualidad a lo largo y ancho de esos 60 minutos de duración por capítulo - actuaciones de un lado, por supuesto - Baywatch era eso, lo sexy se veía pero no explícitamente. Pamela Anderson podía correr por la playa, bajar escaleras, vigilar en su puesto de guardavidas o simplemente hacer absolutamente nada y en todo esto, lo sexy estaba ahí. En esta adaptación las bromas explicitas se utilizan como conductor para demostrar sensualidad y gracias a un penoso guión de la autoría de Damián Shannon y Mark Swift, lo sexy está hecho para la mentalidad "Millenial" y simplemente no funciona. La serie no invocaba palabras, lo mostraba sin peros y excitaba sin decir absolutamente nada. Todos pueden recordar el ruido de la batería y el pianito de la canción intro de la serie, pero en esta nueva versión tenemos melodías actuales que por alguna razón consiguen elevar positivamente el ritmo de la película. De todas formas la cancioncita de Jimi Jamison está y viene con cameo incluido. Estamos ante una película que nunca pidió ser una obra maestra y sí, lo tenemos que sufrir en pantalla, por ejemplo: el uso de exteriores en gran parte es la fiel y confiable pantalla verde, los efectos especiales son de un grado bajísimo (en una escena tenemos al Mitch de Johnson salteando obstáculos de fuego inexistentes), y para finalizar la película entera se siente como si fuera Baywatch: Hawaiian Wedding vol.2, una producción terrible que no tiene salvación ni con los chistes de series/bandas teen que Johnson hace uso cada 5 minutos de la película. Baywatch '17 sirve como referencias en las pobres adaptaciones de Tv a la pantalla grande, de milagro gracias a la buena química del elenco y un humor crudo la película se puede disfrutar para reírse un rato de la pavada. Ofrece lo que promete, risas fáciles, mínima historia entretenida, un villano que funciona y el gran clásico de baywatch: bikinis.
"Bienvenido a un nuevo mundo de Dioses y Monstruos", esta es la carta de presentación que Dr. Jeckyll (Russell Crowe) le ofrece a Nick Morton (Tom Cruise) en The Mummy (La Momia), la primera película de la nueva línea Dark Universe (monstruos clásicos revitalizados) de Universal. Alex Kurtzman -Transformers, Cowboys & Aliens- nos presenta una película que revitaliza el deseo de presenciar a los monstruos clásicos de una forma precisa sin vueltas de rosca y dándole un enfoque que sin dudas, es controversial. Desde los tiempos de Boris Carloff hasta Arnold Vosloo invocando tormentas de arena contra Brendan Fraser, la momia es un personaje místico que representa una amenaza absoluta hacia toda alma que se cruza con su maldición. Hay que destacar el trabajo realizado de Tom Cruise. Absolutamente profesional y entregado en cada proyecto que realiza, el actor de 54 años -increíble pero cierto - se siente erróneamente casteado en su papel, el staff de casting podría haber elegido cualquier otro actor, 20 años más joven que podría haber cumplido sin dificultad alguna el rol de Cruise... PERO, y sin dudas es un gran pero, si el film tiene alguna chance de generar éxito el gran responsable de ese objetivo es, sin dudas: Tom "mi nombre es éxito" Cruise. Las cosas podrían haber resultado muchísimo mejor con el uso de otro guión que refleje más tragedia, horror y perdición. Una película que con ser vista una vez, es suficiente. En esta nueva etapa de resurgimiento del horror nos encontramos con una momia sexy que recurre al método de ex-novia psicótica para atraer al personaje de Tom Cruise hacia un destino que al fin del trayecto, no está nada mal. Esto no es culpa de la hermosa Sofia Boutella, que con sus dotes de danza mezclado con actuación manifesta una momia correcta para lo que la película quiere presentar. Ahora bien, esta nueva momia resulta demasiado sexy y cuando esos 107 minutos terminan uno se va a preguntar, ¿Por qué Tom Cruise se resistió tanto a esto?. Sacrificando el horror por la acción, el inicio del Dark Universe de Universal vuelca atención absoluta en las escenas con contenido desenfrenado. Un accidente de avión, persecuciones en coche y a pie, escape de monstruos bajo el agua son un par de ejemplos que el nuevo vehículo de Tom Cruise ofrece al público; Todo esto, toda escena de acción descontrolada e implacable que se ve en el film resulta adecuada por el simple hecho que el proyecto ofrece lo que promete: pochoclear y despejarse la cabeza, clásico en las películas de Cruise. Con un guión flojo por donde se lo mire, cuesta tomarse la película como una “revolución” nueva del horror. La acción es buena pero en este caso el sentido de misterio por descubrir la tragedia se suplanta por un espacio de superficialidad absoluta. Estamos viendo acción, estamos viendo pequeñas dosis de horror pero todo esto se siente vacío y sin impacto, tenemos un ligero guiño a American Werewolf in London pero no logra alcanzar el mínimo pico de genialidad que las escenas homenajeadas del film de Landis transmitían; ni la gran presencia de Crowe como un nexo a futuros proyectos ayuda a rescatar de la ineficiencia del film para lograr un futuro "gran" interés en otro proyecto de este "mundo de Dioses y monstruos".
Grata sorpresa nos entrega Patty Jenkins con el film de una de las heroínas más icónicas de la historia del comic, tv y de ahora en más, del cine. Wonder Woman es una película que ubica al nuevo universo cinematográfico de DC nuevamente en el mapa Gal Gadot (franquicia Fast & Furious, triple 9) nos viene deslumbrando con su belleza y curriculum desde hace algunos años - además de modelo tiene 2 años de servicio en la fuerza de defensa Israelí - , pero en lo actoral es (o mejor era) sólo una cara bonita. Pero su destino comienza a cambiar a partir de Batman vs Superman: El Origen de la Justicia (2016). Gal en Batman vs. Superman se llevó todas las miradas- pese a que la película cosechó sólo mediocres opiniones- y despejó toda duda sobre su integridad como actriz para con el rol de Mujer Maravilla; simplemente la rompió, Un año más tarde llega el spin off de Diana y totalmente comandada por ella. El resultado: un nuevo comienzo para La liga de la Justicia. Como presentación a la vida de "Diana Prince" la película nos sitúa en Themysciram hogar de las amazonas. Themysciram es un paraíso aislado del mundo gracias a una magia mitológica. Durante todo el tiempo en que la película explica los orígenes de la vida y mitología de Wonder Woman, el film logra incluir una empatía hacia los personajes secundarios; La reina Hipólita (Connie Nielsen), su hermana Antíope (Robin Wright), encargada del entrenamiento secreto de su hija Diana, influyen al futuro del comportamiento heroico e inquebrantable de Diana. En los primeros minutos vemos una Diana inexperta con hambre de gloria y triunfo que va más allá de la costumbres de su pueblo. A medida que pasan los años, Diana se olvida de sus años de aprendiz y pasa a convertirse en una verdadera arma de destrucción masiva. A pesar de todo esto "su destino" es desconocido. Esa paz y tranquilidad de este mundo de guerreras se ve comprometido gracias a la llegada de un extraño llamado Steve Trevor (Chris Pine) un espía norteamericano. El personaje de Pine pone un punto de quiebre a las ideas y valores de Diana: gracias al accidentado encuentro con Steve, Diana por fin sale de su burbuja y desde ese momento tenemos a una Mujer Maravilla desencadenada. Wonder Woman es un lujo fotográfico gracias el trabajo de Matthew Jensen (Game of Thrones, Chronicle). Jensen muestra los horrores de la guerra de paraísos desolados y en contraparte, un edén repleto de vida en ese paraíso llamado Themysciram. La fotografía es clave en este proyecto ya que el peso de eventos históricos pasados son una parte fundamental de la historia de la Mujer Maravilla. En cuanto al guión, Wonder Woman ofrece personajes principales y secundarios que interesan, no sólo por simpatía sino por el motivo de la fuerza que los mueve hacia sus decisiones. Allan Heinberg (Grey's Anatomy, The O.C.) da un buen ejemplo con la presentación y el desarrollo de la historia pero a la hora de cerrar el círculo del film deja que el cliché se adueñe de la situación final. Los 25 últimos minutos se sienten débiles y sucios, la sensación de lo "ya visto" se adivina en ese último tramo del film y ese villano (Ares para ser preciso) que actúa como el tiburón de Jaws a lo largo y alto del film, termina siendo una mera copia de lo frecuente. El film es muy bueno pero al cumplir sus objetivos se adentra hacia el terreno de lo fácil con su final "a la carta". Pero todo esto, más allá del gran elenco y trabajo del equipo técnico, es pura y exclusivamente el show de Gal. Gadot en piel de Mujer Maravilla es un ejemplo perfecto de excelente selección de casting. Lynda Carter en su momento fue (aún retirada del rol) Wonder Woman, pero en lo que va del tiempo, en "nuestros" tiempos Gadot se encargó de callar a mucha gente - me incluyo - e hizo ese rol absolutamente suyo, Gadot es sin duda nuestra Wonder Woman. No estamos hablando de una próxima Kathryn Bigelow, pero el trabajo de Patty Jenkins en este proyecto da nuevos aires y genera una nueva potencia en trabajo de dirección femenina. En su Bio Jenkins posee Monster, ese glorioso film protagonizado por Charlize Theron el cual le valió un Oscar por mejor actriz pero gracias a Wonder Woman puede sumar sin lugar a duda un sólido y poderoso film, que engancha a la audiencia y consigue esperanzas en lugares que, tras el fracaso no había. Wonder Woman es un éxito y merece serlo.
Jack Sparrow (Johnny Depp), Henry "el hijo de Will" Turner (Brenton Thwaites ) y una astrónoma (Kaya Scodelario) cuyo nombre se pierde por el manejo confuso de su personaje, forman una alianza para apoderarse del "Tridente de Poseidón": liberar de la maldición del Holandés Errante a Will Turner y derrotar al temible Capitán Salazar (Javier Bardem). Si hablamos de regresos triunfales Piratas del Caribe: La venganza de Salazar resulta un retorno "de serie". La saga de aventuras de piratas vuelve en forma de sketchs con una mínima historia y personajes opacados por una mera rutina simpática. Con un opening a gran escala, la película logra introducir al espectador en un espectáculo frenético ya característico de la saga. Utilizando el escenario de un plan de robo que no sale como se esperaba, el film recuerda por un corto tiempo la gloria que trasmitía la maldición del Perla Negra y el cofre de la muerte con las acciones torpes "ala Buster Keaton" de Jack Sparrow. El mítico pirata está de regreso 14 años desde el estreno del primer film; Ahora bien, el Jack Sparrow que conocíamos antes no es el de ahora... este Jack Sparrow se convirtió en una parodia de sí mismo: toda acción realizada por el pirata se muestra ya vista y hay que decirlo, aburrida al mejor estilo "I'm too old for this shit"- invocando un poco a Roger Murtagh de Lethal Weapon -, si fuera ése el único problema de esta película La Venganza de Salazar sería un film muy bueno con un protagonista caído por el tiempo. Geoffrey Rush, Javier Bardem, Kevin McNally, Stephen Graham y David Wenham hacen lo que pueden con sus roles "de relleno" y digo de relleno ya que absolutamente todos ellos quedan opacados por la presencia de Depp. Jeff Nathanson - guionista del film - se dedica a brindarle culto total al personaje principal y deja a la deriva al resto del reparto - y tenemos personajes muy interesantes en el film -. Bardem y Rush se comportan como campeones con el material brindado - que es poco y decepcionante- pero el caso de Wenham, para decir esto de una manera corta y simple, es simplemente triste. Un plus positivo de todo esto: el cameo de Paul McCartney que si bien es innecesario, da un aire fresco en el momento justo. La venganza de Salazar al igual que las entregas anteriores recurre a una cantidad considerable de efectos especiales. Efectos de CGI y prácticos van y vienen en pantalla, ya visitamos esqueletos y moluscos mutantes, ahora es el turno de los fantasmas. Estos villanos de turno resultan pobres e insuficientes a la hora de ser convincentes. Bardem brinda intensidad en su rol como Salazar es sanguinario y extremo, pero su esfuerzo resulta en vano y la presencia amenazante que se veía en los avances (en especial en la presentación de personaje) se pierde sobre los primeros minutos del film. Esta saga falla continuamente por la insistencia de recrear el mismo último acto en diferentes circunstancias y ahora sólo no resulta novedoso Jack Sparrow, sino también sus villanos. Si hablamos de la experiencia 3d la película deja mucho que desear. Algo clásico con el 3d es la sensación de ceguera en escenas nocturnas por la opacidad de los lentes, y en La venganza de Salazar el caso se repite; La frustración de tratar de divisar lo que está pasando en varias escenas claves del film degrada cada vez más la experiencia total del film a medida que los minutos van pasando, y sin duda estamos ante un producto que es necesario disfrutarlo en el clásico 2d. Piratas del Caribe: La venganza de Salazar ofrece muchas resoluciones y un par de momentos que dan en el blanco (ver a Sparrow interactuando con su viejo amigo el mono o resolviendo una cierta situación con una guillotina son un par de ejemplos), pero también nos ofrece frustraciones con sus villanos, su duración y lo monótono que se siente el film en general. La venganza de Salazar es una película para tener en plan B sobre los otros films en cartelera.
“Cuando haces las cosas bien, te va bien”… Este es el lema de Jordan Peele (MADtv, Key and Peele, Keanu) y esta es la idea que lleva a todo sus proyectos. Peele, comediante de pies a cabeza, nos trae un film que se aleja de sus comedias simpáticas y pasatistas, esta vez el director se centra en los conflictos raciales de una manera sutil y novedosa, sin perder su sentido del humor. Get Out! (nombre en inglés) es una de las sorpresas del año. Con un argumento simple, la película cuenta la historia de Chris (Daniel Kaluuya), un joven afroamericano y su visita a la familia caucásica – y misteriosa - de su novia Rose (Allison Williams). Desde el comienzo el guión escrito por Peele tiene una fuerte carga sobre las diferencias culturales ya que vemos a un Chris inseguro por la decisión de Rose de no avisar previamente a sus padres el color de piel de su nuevo novio. Además todo cuestionamiento que Chris hace a su novia cae en respuestas como “mi padre es fanático de Obama". Cuando por fin la reunión se lleva a cabo, Chris está convencido de que los padres de la joven (Chaterine Keener y un irreconocible Bradley Whitford) son “buena gente”, hasta ahí todo bien, pero el extraño comportamiento de la sirvienta y el jardinero de la familia (ambos afroamericanos) empieza a ganar peso sumado al uso de la palabra hipnosis. Hay que aclarar que Get Out! no es una película de terror, la fantasía de monstruos “Lovercraftianos” o de clase “Cronenbergs” no se va a divisar en ninguna parte del film, la película recae en la manipulación de la psiquis, el racismo y sobre todo en la incertidumbre de un ambiente sospechoso y desconocido. Para ser una película de suspenso, los elementos utilizados para sorprender al público están aprovechados al máximo y el uso de sangre se usa en los momentos justos y necesarios, nada más y nada menos. El film de Peele va en línea con The Skeleton Key del año 2005. Una cosa que hay que destacar de Get Out! es su humor. El encargado absoluto es el actor LilRel Howery el cual interpreta a Rod, el mejor amigo de Chris; Cada vez que Rod entra en pantalla la película se convierte en un estallo de risas por la manera en que hace sus descargos sobre la vida, su trabajo y su extraña obsesión con relacionar absolutamente todo con “esclavos sexuales”. Rod es el “comic relief” del film pero también es la voz de la razón, en un sentido bizarro obvio; LilRel Howery se roba la película y más de uno va a querer tener un amigo como Rob. La ambientación es un gran protagonista en esta película, el juego de “misterio en casa de campo” está presente en todo momento y se solidifica al incluir en escenas claves a los vecinos de la familia de Rose; encuentros cada vez más extraños con personas cada vez más excéntricas advierten que en definitiva las cosas no están bien. Las dudas sobre de que va el film posiblemente caigan rápido, puede que lo predecible gane presencia rápidamente, pero aun así el entretenimiento está garantizado. Cada tanto aparece un proyecto misterioso con poca campaña de marketing y con un enfoque simple pero sorprendente. Con un aire indie Get Out! logra destacarse como un gran película con un mensaje contundente. Una de las sorpresas del año y absolutamente recomendada.
Guardianes de la Galaxia vol. 2 es el lado B de Guardianes de la Galaxia (2014) si estuviéramos hablando de un vinilo. La película del año 2014 nos presentaba a individuos multiculturales que tratan de funcionar pese a orígenes extremadamente disfuncionales, en esta segunda parte el centro de atención es la expansión de la relación de este equipo intergaláctico. James Gunn vuelve como director y nuevamente cumple su objetivo incluyendo ambiente retro que va a agradar a todo tipo de público. Las bromas van y vienen, la mayoría de justo en el blanco pero otras veces se sienten repetitivas al llegar al punto de fatiga. Dave Bautista en este segundo volumen ubica de nuevo a su personaje Drax en lo más alto de la película, Vin Diesel muestra a Groot en los momentos exactos – quédense tranquilos que la película no es “Baby Groot y los guardianes de la galaxia - y Rocket (Bradley Cooper) vocifera ironía, encanto y peligro a la perfección. El resto del cast funciona correctamente y – a excepción del personaje de Teaserface – logran ayudar a mover la trama. Para el público más grande la adición de Kurt Russell como Ego y Silvestre Stallone (en un rol que no termina de cerrar) consigue poner esa frutilla faltante del postre. Utilizando un gran soundtrack (desde ELO hasta David Hasselhoff) la película no pierde ritmo en ningún momento; Tenemos a un Groot que baila aprovechando el caos explosivo para presentar los créditos iniciales y también tenemos una especie de compilado de baile momentáneo de todo el cast; Todas estas cosas aunque suenen como un “Otra rutina de baile innecesaria” están puestas con extremo cuidado y sirven para dar un toque extra de simpatía sin llegar a lo absurdo. Si bien no estamos ante las melodías monumentales que encontramos en vol.1, sin duda la lista de canciones cumple su objetivo. En Guardianes de la Galaxia vol. 2 tenemos de todo. Las referencias en relación al MCU (Marvel Cinematic Universe) son muchas e introducen al espectador a un mundo de sorpresas con cada minuto que pasa. Sinceramente, uno no sabe con qué cara famosa, homenaje o situación bizarra se va a encontrar cuando ve este tipo de películas – y eso es parte del encanto de MCU – y ayuda bastante tener a un tipo como James Gunn en la silla de dirección , no sólo introduce nuevamente a sus amigos de confianza (Gregg Henry y Michael Rooker) sino que se encarga de llenar la pantalla de pequeñas y grandes sorpresas para el público cinéfilo (un claro ejemplo: ver a Tommy Flanagan en este universo marvel cinematográfico). En una época en que la palabra “familia” está teniendo una sobreexposición importante hasta llegar al hartazgo – te estoy mirando Rápido y furioso – Guardianes de la galaxia vol. 2 despeja toda molestia al resolver de manera sólida y sin vueltas este temita, no vamos a necesitar 5 películas más para concluir de dónde viene el origen de Peter Quill, y se agradece, ya que podemos enfocarnos en futuras películas sin que este tema vuelva como un fantasma irritante a sacarnos la atención. James Gunn tomó nota de lo que no hay que hacer para aburrir al público con sub tramas ya vistas y enterradas. Es Guardianes de la Galaxia vol.2 mejor que su antecesora? No, pero logra la misma línea de entretenimiento y aumenta aún más el panorama galáctico que desde el año 2014 seduce en los cines al público. Gran secuela que deja la promesa de grandes aventuras por delante.