Franklin. Historia de un billete, un film que no da respiro y que nos sumerge en un espiral de violencia, traiciones y deseos de fugarse hacia un futuro mejor.
El Sistema Keops es un homenaje al cine negro pasado por el tamiz de la contracultura pop, con un humor que apuesta por el absurdo de lo cotidiano llevado a un extremo, mezcla de comedia y thriller de pseudo misterio con buen ojo para las costumbres sociales, las figuras retóricas modernas y las teorías conspiranoicas actuales.
Con una tierna y bienintencionada mirada de cada uno de los personajes, Mika lorgra que Un Amor Cerca del Paraiso sea una película luminosa y pintoresca
La manera en la que The Medium mezcla la cultura de chamanes tailandeses es muy interesante, diferente al cine de terror convencional, con momentos realmente terroríficos, donde los efectos de las posesiones le dan un toque de realismo, es un film intenso que, a pesar de ser extenso y no ser tan novedoso, funciona también como drama de cariz antropológico en torno a servidumbres familiares e imposturas religiosas.
En general, Llamas de Venganza no es una mala película, pero no tiene un sello distintivo que la haga sobresalir sobre las demás películas mencionadas(incluso Brightburn, con sus falencias, se destacaba por algunas escenas brutales y por la tensión constante que generaba el temor de despertar a la bestia interior del niño).
En su ópera prima como director, Nicolás Di Cocco recoge y le da vida a personajes que habitan en su mente para amenizar la estadía de Ricardo Darring en su pueblo, logrando un entrañable relato sobre el difícil proceso de reinventarse y no quedarse anclado en la fugacidad de un exitoso pasado.
Dr Strange y el multiverso de la locura es un paso adelante (y distinto) de la franquicia. Esta vez no solo se destaca por la dinámica narrativa y la acción, sino por la incorporación de un sostenido suspenso, con algunas escenas que juegan al borde en cuanto al nivel de violencia a los que nos tiene acostumbrados.
En Matar a la bestia no estamos ante una película de horror convencional, ya que el factor miedo no se mide en la sangre derramada, ni en zombies o monstruos espeluznantes; el horror está construido en el fuera de campo, pero principalmente surge de un lugar espiritual y simbólico.
En I Nostri Giorni no hay un hilo argumental, los protagonistas es la clase obrera (lavoratore en italiano) en su día a día. En la lucha por defender la vida de las personas por sobre el interés de unos pocos empresarios, que solo se preocupan porque los balances económicos cierren sin importar el capital humano que está detrás de cada trabajo.
El Buen Patrón también se destaca por su dinamismo natural a la hora de presentar las diferentes subtramas que el protagonista deberá atender para poder encausar la empresa ante la llegada de un momento crucial y muchas situaciones divertidas, sobre todo lo relacionado a la tragicómica historia del despedido en huelga de hambre que lo espera en la entrada a la fábrica. Así, dentro de un frenético raid de prácticamente una semana se darán diferentes problemáticas como abuso de poder, infidelidades, relaciones extra-matrimoniales, despidos, reclamos salariales, discriminación y muchas cuestiones de la vida cotidiana que hacen del film una muestra realista de los entornos laborales actuales