Pasaron casi 40 años desde el estreno de “Star Wars”, aquella película de George Lucas que creó un mundo hermoso que algunos creen que no debía haber continuado, porque iba a significar que alguien pudiese destruir eso tan especial que se había hecho. Lawrence Kasdan se hizo cargo de escribir las dos películas que cerrarían con la trilogía y lo había hecho de gran manera. Pero pasaron los años y Lucas decidió revivir todo, ésta vez sólo hizo una precuela, en el que conoceríamos el pasado de Anakin Skywalker. Muchos pueden decir que esta trilogía no era necesaria, que arruinó Star Wars y un montón de cosas más, pero ya no importa, porque pasaron diez años del estreno de “La Venganza de los Sith” y se podría decir que los nuevos fans que llegarán luego del “Despertar de la Fuerza”, no necesitan saber quién era Anakin, así que nos podemos olvidar de él y Padme girando en el pasto durante veinte minutos.
Para ponernos un poco en contexto Davis Guggenheim, director de “La Verdad Incómoda” o “Esperando a Superman”, nos muestra una animación que cuenta un momento determinado en la historia de Pakistán en la que una niña convence a todo el pueblo a luchar en la guerra, pero ella es asesinada en combate. Esa chica se llamaba Malala y se transformó en un símbolo de lucha para el pueblo Pakistaní. Pero no vamos a ver un documental sobre esa niña, esta es la historia de Malala Yousafzai, una niña que decidió hacerle honor a su nombre, que luchó y sigue luchando por los derechos de las mujeres, más que nada a la educación. Para eso, con sólo 15 años tuvo el coraje de pararse frente a una cámara y enfrentar a los talibanes. Eso casi le cuesta su vida y tuvo que irse a Inglaterra para poder vivir. En este documental vemos cómo ella se transformó en lo que es, cómo su familia la acompañó y le enseñó a ser cómo es. Nos ayuda a entender los problemas que hay con lo talibanes y nos muestra la vida de ella ahora.
En época navideñas todos esperamos la felicidad de la reunión familiar, los regalos y todo el folklore que implican estas fiestas. Pero hay algo de lo que no se habla y que seguramente no muchos conozcan. Hay una leyenda que cuenta que existe criatura llamada “Krampus”, esta bestia con cuernos, se encarga de castigar a los niños que se portaron mal durante el año y se los lleva con él. En el film de Michael Dougherty, readaptan este mito y lo vemos como el malvado “San Nicolás” con sus cuernos y todo. Tratando de castigar a una familia porque el pequeño Max (Emjay Anthony) siente que el espíritu de la Navidad se perdió y con él su alegría. Así que Krampus viene a castigarlos haciendo que el pobre niño se arrepienta de lo que deseó.
La evolución de la animación nunca va a parar de sorprendernos, en 1929 Disney presentó “The Skeleton Dance” con música de fondo, en blanco y negro, con una animación súper básica que consistía en dibujar, proyectar y dar sensación de movimiento. Hoy, unos 86 años después, sale una película animada con una calidad de imagen extremadamente realista. En la que el agua parece agua y la textura de todo lo que se ve es impresionante. “Un Gran Dinosaurio” se venía planeando hace años pero luego de que Bob Peterson, guionista y co-director de “Up”, se baja del proyecto en 2013, alguien debía hacerse cargo. Entonces, Peter Sohn, que sólo había dirigido un corto en 2009 y además estaba en “Disney” ya que hizo las voces de muchos de su personajes en los últimos años, se puso la película al hombro y la sacó adelante.
Luego de cuatro películas llega a su fin la saga que a todos los que pudimos leer los libros nos hizo llorar y aunque hoy toca hablar de una película, hay que remarcar los fiel que es a la historia que creó Suzanne Collins y que luego de cuatro años se termina. “Sinsajo: Parte 2” empieza en donde terminó la primera parte: A Peeta (Josh Hutcherson) le lavaron el cerebro, entonces cree que Katniss es un “muto” y por eso la quiere matar. La mejor manera de arreglarlo es mandarlo a él junto con “El Sinsajo” y su habitual grupo de trabajo al campo de batalla. Mientras tratan de llegar al Presidente Snow deben hacer que Peeta vuelva a ser el que era antes. Cuando tomaron la decisión de separar el último libro en dos muchos nos preguntamos por qué hacían eso, ya que en la primer parte de “Sinsajo” no pasa nada y en cambio la segunda mitad era muy intensa. Esto se ve reflejado en las películas y en esta entrega cuando arrancan no paran. Como dije al principio, la película de Francis Lawrence respeta mucho el libro y se aprovecha de esto porque hace que las escenas de suspenso duren más de lo debido y como sabés lo que va a pasar dan ganas de gritar. Si no los leíste no importa porque la sensación la sentís igual. Hay que estar muy atento a todo lo que se hace, se dice y no se dice en esta entrega más que en ninguna otra, porque todo lo que pasa va a tener importancia en el futuro de Panem . Las actuaciones de todos siguen estando al nivel que se requiere, desde Elden Henson (Pollux) hasta Julianne Moore dándole vida a la Presidenta Alma Coin. Lo de Josh Hutcherson es muy destacable y aunque muchos seguramente estén cansados de escuchar a Jennifer Lawrence gritar y llorar, no hay manera que nos imaginemos a otra chica poniéndose en la piel de una jóven que sin querer se transformó en la cara de la revolución y que fue usada por los medios para generar amor, esperanza y odio en una sociedad que necesita a alguien a quién seguir. “Sinsajo: Parte 2” es un gran final para una gran saga, que tuvo algunos momento malos (la parte 1) y que a pesar de ser una historia “teen”, llena de amor y esperanza en un mundo completamente destruído. Habla del rol de los medios a favor o en contra del cambio y tiene personajes femeninos que toman decisiones fuertes. El film no decepciona, sean amante de los libros o amante de lo que se ve en la pantalla grande vas a disfrutar de una película que no es la mejor de la saga pero pelea mano a mano con el resto.
Cuando escribí la review de “Wayward Pines” aproveché para destruir a M. Night Shyamalan, director de “Sexto Sentido” entre otras cosas, pero seguramente hayan visto más de una película de él. En esta oportunidad vuelve al terror, pero no es el típico terror al que estamos acostumbrados, con sustos de la nada como si fuese una “Casa de Halloween” en la que sólo quieren hacerte gritar. En este film se trabaja mucho con el suspenso, con el fuera de campo y también con un terror que suele estar presente en la pantalla, que gracias a situaciones que están al límite de lo bizarro, situaciones que duran los minutos exáctos hace que te sientas incómodo con lo que estás viendo.
Ya vimos en distintas series y en algunas películas el uso de los drones para pelear batallas sin necesidad de poner en riesgo tu vida y sin darle la posibilidad de sobrevivir al que este donde el drone vaya a caer. En “Máxima Precisión” vemos a un ex piloto que al volver de la guerra le dieron un asentamiento a él y a su familia en “Las Vegas” y su trabajo consiste en vestirse como piloto para ir a sentarse al cubículo que le corresponde a su tripulación para vigilar y terminar con futuras amenazas en el Medio Oriente. Acostumbrados al ritmo de las películas de guerra más físicas, se siente lo mismo que Thomas Egan, que la rutina aburre, que necesita más riesgos y que no puede seguir viviendo esta farsa. Igual ojo, es lo que quiere la película, que sientas el mismo agotamiento que él siente, que te indignes y que quieras hacer lo que el personaje de Ethan Hawke quiere
Seguramente muchos se sientan confundidos a la hora de ver a Vin Diesel afuera de un auto pero se ve que quiere cambiar un poquito de aire y se pone a cazar brujas. Nuestro querido “Toretto” le da vida a Kaulder, un cazador de brujas que cientos de años atrás, formaba parte de una organización que tenía como meta destruir a la “Bruja Reina” y así poder evitar el fin del mundo. En este enfrentamiento, muchos de sus amigos mueren pero Kaulder logra matar la Bruja y ella antes de transformarse en cenizas los maldice con la vida, algo que nuestro protagonista odiaba porque el pasado lo persigue.
Vuelve Steven Spielberg a la pantalla grande luego de tres años, junto con un gran guión los hermanos Coen y con Tom Hanks como protagonista. Nada podía salir mal. Para hablar de esta película debemos pararnos en todos los puntos que se puedan, guión, dirección, montaje, actuaciones, uso de determinados lentes, etc. Hicieron todo tan bien desde el vamos, que se podría hacer una review que sólo diga “Tenés que ir a verla”. En plena guerra fría, un espía ruso es atrapado en suelo americano y el gobierno decide ponerle un buen abogado para que parezca que lo trataron como a cualquier persona. Desde la CIA le hacen ir a negociar con Rusia en Alemania por el intercambio de un soldado americano por el soldado ruso. Además, se mezclan los intereses de la URSS y de una Alemania dividida por el muro. Tom Hanks le da vida a James Donovan, el responsable legal del agente ruso, un hombre de familia, que a diferencia del resto, pone primero a su honor y su amor por el trabajo que a los intereses del país. Un país que le recuerda todos los días lo que está haciendo. La gente lo mira y lo trata como si fuese un traidor, su familia también sufre el precio de lo bien que James Donovan hace su trabajo. Es increíble como desde el guión se trabaja sobre lo que se dice, lo que no se dice y lo que en realidad se está diciendo. Durante toda la película vemos un tire y afloje entre los distintos países. Son muy entretenidos los diálogos porque el soldado americano se apellida “Powers” y cuando hablan de él se escucha “¿Quién tiene poder? Nosotros queremos poder” y cosas por ese estilo que se aprovechan a la perfección. También se puede notar el uso del objetivo gran angular, que Spielberg lo usa en momentos determinados para agigantar (en mi opinión) todo lo que hace referencia a la justicia. Cuando vemos los juicios, el uso de ese tipo de objetivo hace que las columnas sean gigantes y da la sensación de “la justicia está en un nivel superior al nuestro”. El trabajo que se hace desde el montaje es genial, se pueden ver algunas técnicas de montajes paralelos, de esas que te enseñan cuando estudias cine pero hay que saber usarlas y sin duda saben cómo hacerlos. La película dura casi dos horas y media y no aburre en ningún momento, no se hace larga y siempre te mantiene tenso. No hay dudas que Tom Hanks es un gran actor, lo vimos a hacer muchos personajes, desde joven demuestra su talento y los años sólo hacen que se acerque más y más a la perfección. A él se le suman un grupo de actores que aunque no tengan un cuarto del tiempo que él tiene en pantalla, cuando aparecen lo hacen de la mejor manera posible. Faltan algunos meses para saber quiénes formarán parte de las nominaciones en los Oscars pero desde todos los aspectos hay alguien que podría ganar un premio.
Todo el mundo decía que Johnny Depp con esta película iba a sumarse a la pelea por el Oscar en 2016 y eso hace que el hype con el que uno va ver “Pacto Criminal” no le haga para nada bien al film de Scott Cooper. Si bien Johnny Depp haciendo de un mafioso frío y sin respeto por la vida es de lo mejor de la película, junto a la gran performance de Joel Edgerton y un cast lleno grandes nombres, no hacen que “Pacto criminal” llegue al nivel que creo que todos esperábamos. Para los que no saben mucho del film, Johnny Depp le da vida a uno de gangsters más buscados en Estados Unidos, un hombre que controlaba todos los ambientes ilegales del Sur de Boston, que podía hacer desaparecer a cualquier persona que quisiese y gracias al trato que tenía con el FBI no lo podían tocar. Él de a poco fue creciendo a cambio de información que le podía ser útil a los federales para atrapar a mafia con la que competía por el territorio.