Un año después del casamiento de Ted con Tamy-Lyn (Jessica Barth) la pareja empieza a desplomarse y deciden adoptar un bebe porque creen que de esa manera van a dejar de pelear y van a concentrarse en amar a su hijo. La pareja quiere adoptar un bebe pero el gobierno les niega la oportunidad de ser padres ya que no consideran a Ted una persona, sino que es un objeto y entonces no tiene ningún derecho. A partir de la noticia, la vida de él se empieza a caer a pedazos, lo echan del trabajo, le dan de baja las tarjetas de créditos y le anulan el casamiento. En ese momento John y Ted deciden hacerles un juicio al gobierno para que el oso de peluche sea considerado persona y pueda volver a su vida normal. Para poder ganar el juicio necesitan a un abogado y la única posibilidad que tienen es Samantha (Amanda Seyfried), una abogada recién recibida que lo haría todo por la experiencia. En la primer película John era el personaje que tenía que crecer, en esta oportunidad tiene un viaje completamente diferente que lo deja ser a él el “bardo” de la película y lo pone a Ted frente a un objetivo que lo tiene que hacer crecer. Seth MacFarlane es el director y guionista de la película. El guión no es muy bueno, tiene muchas pequeñas historias, que generan minutos de pantalla y situaciones, que aunque sean graciosas podrían no estar. Por un lado tenemos el camino al juicio, por el otro tenemos el luto de John (Mark Wahlberg) que se separó de Lori (Mila Kunis-Ted/2012) y tiene que volver a enamorarse. Pero también hay una tercera historia que tiene que ver Donny, el hombre que se quiere robar a Ted en la primer entrega, que vuelve para tener lo que tanto quiere. El creador de “Padre de Familia” hace una historia que tranquilamente podría ser un capítulo de la serie, porque toma los temas que se tocan en la misma, con un humor extremo, sin miedo a ofender y trata de mostrar detrás de todos los chistes y las risas temas que están en la conversación constante de las personas. La película tiene muchos errores en la estructura del guión, pero eso no hace que no se disfrute, ya que los chistes van de menor a mayor, las actuaciones ayudan, las situaciones absurdas, bizarras y divertidas hacen que la película no decepcione.
Basada en la novela “La humillación”, de Philip Roth, la nueva película del director Barry Levinson (Rain Man, Buenos días) habla sobre la decadencia, soledad, ego y locura de un famoso actor de teatro y con alguna películas en su haber, que al llegar a los 67 años pierde la capacidad de recordar sus guiones y decide aislarse por un tiempo. Al Pacino (Simon Axler) le da vida a este hombre. Un hombre cansado, que luego de probar de todo para poder recuperarse, pastillas, psiquiatras y hasta el suicidio pareció una buena opción, conoce a la joven confundida sexualmente (Greta Gerwig), que de chica tuvo fantasías con él y ahora las puede cumplir.
Tres años luego del estreno de “Notas Perfectas” (Pitch Perfect) llega a los cines la secuela escrita otra vez por Kay Cannon, pero esta vez dirigida por Elizabeth Banks (Sí la actriz) y protagonizada otra vez por la gran mayoría de las “Bellas” originales. En una película sobre competencias, lo único que se puede hacer en una segunda parte es subir el nivel de la misma. Como pasaba con “Glee” a medida que iban pasando los años las dificultades no podían ser las mismas, así que hay que subir la apuesta. ¿Cuál es la mayor competencia? Un campeonato mundial. Las Bellas ganaron por tres años consecutivos los torneos nacionales y son las encargadas de representar a Estados Unidos en el mundial, para eso deberán vencer a “Das Sound Machine” un grupo de Alemanes que se destacan por ser alemanes, son robots que cantan y bailan. Indestructibles. Ellas en cambio no están pasando un gran momento, ya que es su último año de Universidad y Beca (Anna Kendrick) ya está pensando en su futuro.
Estando más cerca del 2016 que del 2014, se puede decir que el género “terror” fue el más golpeado este año, ya que viene intentando e intentando sacar algo interesante y cae constantemente en cliché del mismo. En esta nueva oportunidad decide volver a los exorcismos. Pero no se deje engañar por el título, la película transcurre Estados Unidos, ya que la gente del Vaticano se hace cargo del caso en el último acto, para realizar el exorcismo. Según un pequeño teaser que se ve al principio del film, el Diablo o demonio, siempre tiene planes para vos, cuando nacés ya estás destinado a ser o no ser objeto de su gran plan.
La CIA toma control de un FMI completamente disuelto, ya que los métodos de nuestro equipo de protagonistas no es el correcto. William Brandt (Jeremy Renner) se une a la CIA, Benji Dunn (Simon Pegg) termina sentado en un escritorio haciendo trabajos de oficina, Luther Stickell (Ving Rhames) renuncia y Ethan Hunt (Tom Cruise) escapa. Mientras es perseguido por agencia de inteligencia americana debe tratar de detener al “Sindicato”.
“Vacaciones” es la continuación de una serie de películas sobre las vacaciones de la familia Griswold, que en su primer film recorren todo el país en auto para poder llegar al parque de diversiones “Walley World” y hacen lo que sea para llegar a su destino En esta entrega el que debe llevar a su familia a el mismo parque de diversiones es Rusty Griswold, aquel hijo de Clark Griswold (Chevy Chase), que quiere lo mismo que su padre, unir a su familia.
Brenner, Cooper, Ludlow y Eddie son cuatro niños que en los 80’ pasaban su tiempo libre jugando en los fichines, horas y horas jugando hacían que algunos de ellos sean realmente buenos en lo que hacían. Estos niños crecieron, algunos habían cumplido sus sueños, otros sólo habían crecido. La nueva película de Chris Columbus (Director de las dos primeras de Harry Potter) empieza mostrándonos a esos niños con sueños, sus habilidades en el mundo virtual y luego nos lleva al presente, un presente en el alguno triunfó y otro no.
El director y guionista canadiense Maxime Giroux elige contar una historia de amor de manera muy bella e interesante. La historia protagonizada por dos personas totalmente diferente que se sienten encerrados en su vida y que en la primera posibilidad de salir de su mundo tan cuadrado caen en la tentación y la curiosidad del “¿Cómo será hacer otra cosa?”. La bellísima Hadas Yadon le da vida a una mujer judía ortodoxa (Meira) que está casada con Shulem (Luze Twesky) y tienen una bebe. Por otro lado vemos a Félix (Martin Dubreuil) un hombre de unos cuarenta años que le escapó al peso de la religión por el lado de su familia y luego de la muerte de su padre vuelve a verlo.
Con “Ant-Man” Marvel da como finalizada la segunda fase de su gran proyecto y lo hace de la mejor manera posible. La película dirigida por Peyton Reed, un director al cual le pudimos observar la mano en algunas series como por ejemplo New Girl o en el cine con “Yes Man” ya mostraba para que lado querían ir con el tono de la película, más humor, menos drama. Coescrita por Edgar Wright, Joe Cornish, Adam McKay y hasta Paul Rudd, entre otros, que le dejan un guión a Peyton Reed que le queda como anillo al dedo. No importa que Marvel, de por sí, trate de tomarse las cosas un poco más a la ligera que su competencia, esta película lleva todo casi al límite de lo absurdo, pero usa todo lo que su simple premisa le presenta como una dificultad y lo usa para divertirte constantemente. ¿Qué se puede hacer de un superhéroe que se hace chiquito y puede hablar con las hormigas? En realidad no mucho, suena como si Marvel quisiese más plata y dice “Hagamos una película sobre Ant-Man, total los fans ven todo”. Pero ahí es cuando se ve la gran mano de los guionistas, del director y de todo el elenco. Que hace de la nada, mucho. Durante casi dos horas de película la misma no para un segundo, pero cuando digo no para un segundo no me refiero a piña constante, me refiero al tono cómico que funciona como eje del film y hace que no decepcione. Sin dudas elegir a Paul Rudd para darle vida a Scott Lang, un hombre que sale de prisión y que tiene los conceptos de delincuencia bastante “confundidos”, que quiere ser un héroe para su hija y que ahora tiene la oportunidad fue la mejor decisión que pudieron haber tomado, ya que con su carisma y su aire de galán despreocupado encaja perfectamente en el traje de este nuevo héroe. Ant-Man-1 Scott Lang tiene un grupo de ladrones amigos liderados por un Michael Peña, aprovechadísimo desde el lado del guión y la dirección que hace que todas su participaciones sean divertidas. Por el lado más serio de la película aparecen el Dr. Hank Pym (Michael Douglas), la muy linda Evangeline Lilly, dándole vida a Hope, su hija, y el malo de la película Darren Cross (Corey Stoll), ex discípulo de Pym que quiere copiar su trabajo y crear su propio “Ant-Man”. Todas las actuaciones son correctas, algunos están más aprovechados que otros, pero no hay nadie que quede debiendo. En toda la película hay muchas referencias al universo cinematográfico de Marvel, S.H.I.E.L.D, Hydra, Los Vengadores y muchos problemas del pasado. ¡Bienvenido Ant-Man!
Si hay algo que aprendimos a lo largo de los años es que cuando queremos ver una gran comedia hay que buscarla en España. Siempre el argentino tiende a reírse de los españoles y el estereotipo que tenemos presente es el de bruto y divertido, pero no hay nada más divertido que un español que puede reírse de sí mismo y puede hacer una comedia romántica muy de género que divierte constantemente.