En busca de su dueño “Mis Huellas a Casa” (A Dog’s Way Home, 2019) es una película familiar de aventuras dirigida por Charles Martin Smith y co-escrita por Cathryn Michon y W. Bruce Cameron. Está basada en el libro homónimo de este último, el cual fue publicado en mayo de 2017. El reparto incluye a Jonah Hauer-King, Alexandra Shipp (Yo Soy Simón), Ashley Judd (Divergente), Edward James Olmos, Chris Bauer, Wes Studi, Brian Markinson, entre otros. La voz del animal principal es puesta por Bryce Dallas Howard (Eclipse, Historias Cruzadas). La historia se centra en Bella, una cachorra que es rescatada por Lucas (Jonah Hauer-King) de debajo de una casa destartalada donde convivía con gatos. Con su mascota ya crecida, Lucas y su madre Terri (Ashley Judd) tendrán que lidiar con un vecino malhumorado que exige que la perra sea capturada por considerarla pitbull (en la zona donde viven esa raza está prohibida). Para protegerla, Lucas le pide ayuda a Olivia (Alexandra Shipp), su amiga del trabajo que llega a la conclusión de que la única manera de que el animal esté a salvo es que pase un tiempo con sus parientes, los cuales viven en Farmington, Nuevo México. Aunque allí Bella tiene una vida tranquila, el echar tanto de menos a su verdadera familia la impulsa a escaparse y encontrar el camino a casa, un recorrido que será demasiado cansador como extenso. Difícil es que las historias que cuentan con animales reales como personajes no nos gusten ni lleguen al corazón. “Fluke” (1995), “Marley y Yo” (Marley & Me, 2008) y “Siempre a tu Lado” (Hachi: A Dog’s Tale, 2009) son solo algunos ejemplos de filmes que hicieron sacar más de una lágrima a los amantes de los perros. Incluso la más reciente “La Razón De Estar Contigo” (A Dog’s Purpose, 2017), también basada en un libro de Bruce Cameron, a pesar del boicot que tuvo por un video filtrado de maltrato animal en el set, logró salir airosa al brindar una trama tan simpática como tierna. Entonces, ¿hay alguna cinta con animales que pueda salir mal? “Mis Huellas a Casa” llega a la cartelera para demostrarlo. La película es el claro patrón de que no basta con tener a una perra preciosa como protagonista para lograr un buen producto cinematográfico. Con un guión flojo lleno de situaciones inverosímiles y la peor decisión al elegir a Bryce Dallas Howard como la indicada para plasmar en pantalla los pensamientos de Bella, el lindo comienzo del film pronto se diluye en un viaje aburrido y poco interesante para el espectador. Teniendo en cuenta que la mayoría de los demás animales están hechos por computadora, tanto su diseño como los efectos de crecimiento dejan mucho que desear. Esto genera que las escenas que Bella comparte con otras criaturas de cuatro patas, en especial con un puma llamado “Gatito Grande”, se sientan demasiado falsas como para lograr algún tipo de emoción. Por otro lado, la cinta es muy previsible y el paso del tiempo no está bien representado (nunca nos llegamos a creer que en el transcurso de la trama pasaron más de dos años). “Mis Huellas a Casa” ni siquiera cuenta con un desenlace conmovedor que nos haga pensar que la sosa vuelta al hogar valió la pena. Sin embargo, si lo único que buscan con este film es ver a un can en pantalla, la cinta les puede resultar pasable.
Todas lo adoran “El Príncipe Encantador” (Charming, 2018) es una película animada musical dirigida y escrita por Ross Venokur. Coproducida entre Canadá y Estados Unidos, las voces originales fueron puestas por Demi Lovato, Wilmer Valderrama, Avril Lavigne, Ashley Tisdale, G.E.M., Nia Vardalos, Sia, Tara Strong, Jim Cummings, entre otros. Además, Lovato se encargó de la producción ejecutiva de la banda de sonido y Sia escribió dos canciones para el filme. La historia se centra en el príncipe Felipe (Wilmer Valderrama), un joven veinteañero que, debido a un hechizo que recibió siendo un bebé por la malvada Amargura (Nia Vardalos), no puede evitar que todas las mujeres se enamoren y caigan rendidas a sus pies. La única manera de romper el encantamiento consiste en que Felipe encuentre a su verdadero amor, tarea difícil para un hombre que está comprometido con Cenicienta (Ashley Tisdale), Aurora (G.E.M.) y Blancanieves (Avril Lavigne) a la vez (sin que ellas sepan que su príncipe es la misma persona). Sin saber qué hacer, Felipe se embarcará en una aventura hacia la montaña con el guía Lenny (Demi Lovato). Incontables son las malas decisiones que se tomaron para armar esta película. Primero y principal, la animación deja mucho que desear ya que todo luce demasiado falso y grotesco. El diseño de los personajes no es atractivo por lo que es imposible que la empatía florezca a medida que avanza la historia. Con el agregado de un guión que hace quedar a las princesas como tres tontas y al príncipe como un idiota en potencia, ni siquiera los más chicos se divertirán en la sala. Por otro lado, la música de la película está puesta porque sí, logrando que la fluidez brille por su ausencia y estas secuencias se sientan encajadas a la fuerza. Teniendo en cuenta que las canciones son ultra olvidables, lo que provoca aún más el desinterés es que ni siquiera contamos con subtítulos para entender la letra (en nuestro país el filme solo se proyecta en castellano). Así es como de la nada los personajes pasan a cantar en su idioma original, dando como resultado un producto completamente fallido. La idea de que el príncipe encuentre a su verdadero amor en una joven ladrona enérgica y decidida no estaba mal, sin embargo la superficial forma con la que se moldeó a cada personaje sumado a las insoportables voces en español hacen que la película no logre su cometido. Un grupo de indígenas que parecen de madera junto a un monstruo de piedra solo acrecientan las ganas de que llegue el desenlace por más que la duración sea corta. “El Príncipe Encantador” se hará insufrible para los más adultos y también para los chicos. A la hora de ir al cine, mejor llevarlos a ver otras películas animadas tales como “La Gran Aventura Lego 2” o “Cómo Entrenar a tu Dragón 3”.
Amigos opuestos “Green Book: Una Amistad Sin Fronteras” (Green Book, 2018) es una comedia dramática dirigida y co-escrita por Peter Farrelly. Brian Hayes Currie y Nick Vallelonga (hijo mayor de Tony Lip, protagonista de la historia) también se encargaron del guión. Basada en hechos reales, la cinta cuenta con un reparto compuesto por Viggo Mortensen (The Road, Capitán Fantástico), Mahershala Ali (Los Juegos del Hambre: Sinsajo, Luz de Luna), Linda Cardellini, Sebastian Maniscalco, Mike Hatton, Dimiter D. Marinov, entre otros. El filme se alzó como ganador de tres Globos de Oro (Mejor Película Comedia o Musical, Mejor Guión Original y Mejor Actor de Reparto) y está nominado a cinco premios de la Academia. Nueva York, 1962. Frank Anthony Vallelonga (Viggo Mortensen), más conocido como Tony Lip, es despedido de su trabajo en el club nocturno Copacabana. Para mantener a su esposa Dolores (Linda Cardellini) y a sus pequeños hijos, Tony se da cuenta que no podrá valerse de apuestas por mucho tiempo más así que decide tener una entrevista laboral con el Dr. Don Shirley. Para su sorpresa, éste último resulta ser un talentoso pianista de color que vive arriba del Carnegie Hall. Shirley tiene programado una serie de conciertos por ocho semanas en distintas ciudades del sur de Estados Unidos, siendo la presentación final muy cerca de Nochebuena. Tony no solo deberá ser su chofer, sino que también tendrá que protegerlo de cualquier inconveniente que se presente por la discriminación de esa época hacia las personas de color. Sin estar muy convencido del empleo, y con un previo rechazo hacia la gente negra, Lip se embarcará en el viaje. Con el paso de los días, estas dos personas se volverán amigos. Las películas que tratan sobre el racismo abundan en el país del norte y es muy fácil ya sentirse cansado de que siempre la temática sea la misma. No obstante, el filme de Peter Farrelly logra salir adelante debido a que, por más de que veremos lo que ya conocemos (no dejan entrar a la persona de color a un restaurante ni permiten que use el mismo baño de los blancos o que se aloje en el mismo hotel), las personalidades tan opuestas de los protagonistas son las que nos llevan a sumergirnos de lleno en esta historia verídica. Sin Viggo Mortensen y Mahershala Ali esta cinta no sería lo mismo. Los dos actores brindan muy buenas interpretaciones que en ningún momento pierden naturalidad. La impulsividad, violencia y mala educación de Tony Lip contrastan de muy buena manera con lo reservado y respetuoso que es Shirley, un hombre solitario que no tiene un grupo al que pertenecer. Aunque nos queden ganas de conocer más sobre la vida de Don, los momentos que comparte con Vallelonga tanto dentro como fuera del automóvil logran sacarnos más de una carcajada, en especial las escenas que tienen que ver con la redacción de cartas y el cómo comer el pollo frito. Sin ser arriesgada, “Green Book” (nombre que se le dio debido a la guía de viajes para afroamericanos creada por Víctor Hugo Green) consigue un buen balance entre las risas y el drama. Además, su cálido desenlace deja una sonrisa genuina en el espectador al salir de la sala de cine.
En busca de sus amigos “La Gran Aventura Lego 2” (The Lego Movie 2: The Second Part) es una película animada de acción y comedia que constituye la secuela de “La Gran Aventura Lego” (The Lego Movie, 2014). Con un guión que continúa estando a cargo de Phil Lord y Christopher Miller, la dirección esta vez quedó en manos de Mike Mitchell. Siendo el cuarto filme dentro de la franquicia ya que hay dos spin-offs (The Lego Batman Movie y The Lego Ninjago Movie), las voces originales vuelven a ser puestas por Chris Pratt, Elizabeth Banks, Alison Brie, Will Arnett, Charlie Day, Jonah Hill, Cobie Smulders, entre otros. En el reparto actoral se agregan las actrices Maya Rudolph y Brooklynn Prince (The Florida Project), aparte de que Tiffany Haddish aporta su voz a un nuevo personaje. Cinco años después de los eventos ocurridos en el primer filme, la ciudad de Bricksburg ha sido destruida por unos invasores rosados de extrañas formas. Todos los habitantes Lego se sienten tristes y abatidos excepto Emmet (Chris Pratt), el extra positivo Maestro Constructor que sueña con armar un bello hogar para convivir con su novia Lucy (Elizabeth Banks). Con la llegada del astronauta Mayhem (Stephanie Beatriz), éste anuncia que una Reina de otra galaxia quiere casarse con Batman (Will Arnett), por lo que su equipo secuestra al murciélago y demás amigos de Emmet. El feliz lego emprenderá un viaje para salvar a sus compañeros de un rápido lavado de cerebro. El recorrido no lo hará solo, ya que Rex, un joven decidido y entusiasta, lo salvará del choque con un asteroide y le hará reflexionar sobre en quién debe transformarse para ser un héroe. En 2014 “La Gran Aventura Lego” resultó una grata sorpresa gracias a la construcción de un mundo innovador y colorido con un protagonista lleno de carisma. A su vez, los chistes funcionaron a la perfección y la canción “¡Todo Es Increíble!” (Everything is Awesome) quedó pegada en la cabeza de más de uno. Con esta secuela la diversión sigue estando presente aunque no se llegue a superar a la primera entrega. Esto se debe primordialmente a que la historia puede tornarse un poco rebuscada para los más pequeños, que no llegarán a comprender al 100% lo que están viendo en pantalla y más bien quedarán relegados a reírse de los chistes más inocentes como los de una banana resbaladiza. Por otra parte, los más grandes disfrutarán de las referencias a la Liga de la Justicia, El Mago de Oz, Volver al Futuro y la graciosa presencia del Lego de Bruce Willis. Lo maravilloso de “La Gran Aventura Lego 2”, aparte de sus fenomenales letras de canciones, radica en las moralejas que quieren transmitir al espectador. Al ya saber que todo lo que sucede en el mundo animado está conectado con el mundo humano, la película se enfoca en la relación entre hermanos, el trabajo en equipo y el adaptarse y respetar los gustos del otro. Además, el filme busca dejar claro que no hay que cambiar la personalidad de uno para complacer al prójimo y se vuelve más realista en cuanto a que a veces no todo siempre es increíble. Con buenas dosis de acción y risas, la nueva aventura de Emmet es imperdible para los que nos encariñamos con este personaje tan leal, ingenuo, positivo y de buen corazón. P.D.: Ni se les ocurra levantarse de la butaca una vez terminada la película ya que la canción y diseño de los créditos es espectacular y los hará sonreír a más no poder.
La supervivencia del más apto “Escape Room: Sin Salida” (Escape Room, 2019) es un thriller de aventuras dirigido por Adam Robitel (La Noche Del Demonio: La Última Llave) y escrito por Bragi F. Schut y Maria Melnik. El reparto incluye a Taylor Russell, Logan Miller (Si No Despierto, Yo Soy Simón), Deborah Ann Woll, Tyler Labine, Jay Ellis, Yorick van Wageningen, Nick Dodani, entre otros. La historia se centra en seis personas a las que les llega una misteriosa invitación para la Sala de Escape Minos, ubicada en un edificio con muchísimos pisos. El que sea tan ingenioso como para descubrir la manera de salir de ese lugar obtendrá como recompensa diez mil dólares. La gran suma de dinero constituye el principal incentivo para la estudiante de física Zoey (Taylor Russell), el empresario Jason (Jay Ellis), el minero Mike (Tyler Labine), la veterana de guerra Amanda (Deborah Ann Woll), el repositor de supermercado Ben (Logan Miller) y el apasionado gamer Danny (Nik Dodani). Así es como estos seis desconocidos deberán rebuscárselas para escapar; no obstante a medida que pasa el tiempo lo que creían que era un juego inofensivo se irá transformando en un acertijo donde el peligro es completamente real. Calificada en el género de horror psicológico erróneamente, la cinta contaba con buenas ideas para otorgar un producto cinematográfico decente. Y aunque en cierta parte lo consigue gracias a los diversos escenarios (una habitación que pasa a ser un horno, una sala de billar al revés, un espacio a temperatura bajo cero, etc.), los giros de guión resultan tan cliché que inevitablemente hacen que la cinta pierda su atractivo. Como nunca se profundiza en cada personaje (solo sabemos de qué trabajan y algún que otro aspecto de su personalidad), resulta imposible establecer una conexión que nos haga preocuparnos por sus vidas. El hecho de que al pasar los nuevos desafíos siempre alguno quede atrás ya se ha visto en otros filmes, además de que no ayuda en nada que la primera escena muestre a uno de los participantes en una situación límite: de esta manera ya sabemos desde los primeros minutos quién es el que superará todas las pruebas. Con unas notorias ganas por parte de los guionistas para que Escape Room se transforme en una saga, la última media hora abunda de elementos cada vez más patéticos e inverosímiles. No obstante, si estás buscando una opción entretenida (hasta cierto punto) que no requiera usar el cerebro (los personajes no hacen partícipe al espectador de la resolución de los acertijos), ésta película puede llegar a funcionar.
Una feroz rivalidad “La Favorita” (The Favourite, 2018) es un drama cómico de época dirigido por Yorgos Lanthimos (The Lobster, El Sacrificio del Ciervo Sagrado) y co-escrito por Deborah Davis y Tony McNamara. Coproducida entre Reino Unido, Estados Unidos e Irlanda, el reparto se compone por Olivia Colman, Emma Stone, Rachel Weisz, Nicholas Hoult (Mi Novio Es Un Zombie, Jack El Cazagigantes), Joe Alwyn, James Smith y Mark Gatiss. Tuvo su premiere mundial en el Festival Internacional de Cine de Venecia, donde obtuvo el Gran Premio del Jurado y la Copa Volpi a la mejor actriz (Colman). Además, la cinta lidera las nominaciones de los Critics’ Choice Awards y cuenta con cinco nominaciones a los Globos de Oro incluyendo Mejor Actriz de Reparto (por Weisz y Stone) y Mejor Película – Comedia o Musical. A principios del siglo XVIII, Inglaterra se encuentra en guerra con Francia. La reina Anne (Olivia Colman), dolorida por la enfermedad de la gota, confía en su gran amiga Lady Sarah (Rachel Weisz) para que se ocupe de los asuntos del Estado. Las dos mantienen una relación secreta que excede el ámbito laboral y de amistad. Con la repentina llegada de Abigail Hill (Emma Stone), prima de Sarah que se presenta en el palacio en busca de empleo, la dinámica entre Anne y su confidente irá cambiando. A partir de que Abigail ingresa en el cuarto de la reina para aliviar su dolor con una pasta de hierbas, la lucha de las primas por tener la atención completa de Anne alcanzará niveles impensados. Provocadora, intensa y llena de locura, la nueva cinta del director griego es una muestra desenfrenada de lo que un humano es capaz de hacer con tal de ascender en el poder. Lanthimos tiene la capacidad de comenzar el relato en el medio de la acción, sin que el espectador entienda en un principio qué está pasando; en vez de que esto juegue en contra, sucede todo lo contrario: queremos saber más y más sobre la vida dentro de las paredes del castillo por lo que desde los primeros minutos resulta imposible no sumergirse de lleno en la trama. Si van con expectativas de encontrarse con un drama histórico serio que se atiene a los hechos verídicos, esta no es una película recomendable. Aquí pasamos al plano de la sátira, la cual está conformada por grandes cantidades de ácido humor negro y varios momentos bizarros construidos de forma excelente. Nada funcionaría si no fuera por las tremendas actuaciones que brindan Colman, Weisz y Stone. La primera hace un enorme trabajo al encarnar a una reina inestable, histérica y bipolar, sobrepasada de tragedias. Rachel Weisz como Sarah ejerce un control excepcional por sobre Anne y Emma Stone da una interpretación nunca antes vista en su carrera. Lo más atractivo del film está en el desarrollo de sus personajes, en especial en el de Abigail, que pasa de trabajar en la servidumbre a ser la mano derecha de la reina, usurpando el lugar de su prima. Gracias a un guión ágil y filoso, que no tiene reservas en ningún aspecto, la astucia de esta mujer que asciende a la nobleza se vuelve una experiencia imperdible. Con una puesta en escena formidable, donde se utilizan rápidos movimientos de cámara hacia la derecha y un lente de ojo de pez que produce una vista panorámica excepcional, la película transmite con eficacia la sensación de agobio dentro del palacio. El vestuario y la imponente música son la frutilla del postre para crear una atmósfera en donde hasta lo inimaginable puede llevarse a cabo. “La Favorita” se alza como uno de los mejores filmes de Lanthimos hasta la fecha por su forma tan original de representar los celos, el amor, la ambición, la manipulación y la desgracia. Dividida en capítulos con títulos irreverentes, las tres mujeres brillan en cada una de sus escenas.
Libertad, amor y liderazgo Cómo entrenar a tu dragón 3 (How to Train Your Dragon: The Hidden World, 2019) es una película animada de aventuras que constituye la tercera y última entrega de la saga Cómo entrenar a tu dragón, la cual tuvo su comienzo en 2010. Basada en una serie de libros infantiles escritos por la inglesa Cressida Cowell, la dirección, guion y producción ejecutiva vuelven a estar a cargo de Dean DeBlois (Lilo & Stitch). Para las voces originales regresan Jay Baruchel, Cate Blanchett, America Ferrera, Gerard Butler, Jonah Hill, Craig Ferguson, Kristen Wiig, Kit Harington, entre otros. Un año después de los eventos ocurridos en la segunda parte, Hipo (Baruchel) y su gran compañero Chimuelo continúan rescatando dragones y llevándolos a la isla de Berk, donde los vikingos ya aprendieron a convivir tranquilamente con estos animales. Dándose cuenta que la isla está sufriendo de superpoblación, Hipo recuerda las historias que le contó de pequeño su padre Estoico sobre el Mundo Oculto, un hábitat tranquilo y seguro para los dragones. Con la amenaza latente de Grimmel (F. Murray Abraham), un cazador experto de Furias Nocturnas, Hipo y sus amigos emprenderán viaje en busca del Mundo Oculto. A su vez, Chimuelo se enamorará por primera vez de la delicada Furia Luminosa. La saga fue una grata sorpresa allá por el 2010, convirtiéndose en una de las mejores producciones de DreamWorks debido tanto al cuidado diseño de los seres mitológicos como al foco que tenía la historia: la relación entre un dragón y un chico plasmada de la manera más empática posible. La segunda entrega, estrenada cuatro años después, supo mantener la esencia de su predecesora con un gran agregado de acción al tener que luchar contra un gigante y malvado dragón Alfa que lograba que los animales no actúen como ellos mismos. El acierto de estos filmes se basó en que, por más de que estuvieran dedicados a un público infantil, los directores y guionistas no dudaron en tocar temáticas universales como la amistad, el luchar por lo que uno cree, lo que conlleva crecer, el no encajar en una comunidad, la pérdida y el sobreponerse a los obstáculos de la vida. Con la llegada del fin, nuestro protagonista deberá darse cuenta que su heroísmo, valentía y fortaleza no se deben a que tiene a Chimuelo a su lado: el coraje está instalado en su interior. Por otro lado, Hipo aprenderá que el dejar ir no tiene por qué ser un aspecto negativo, más bien se trata de un acto de amor por el bienestar del otro. La película tiene escenas de acción realmente épicas y dignas de un cierre de trilogía; sin embargo, lo que más se destaca es el aspecto visual. Aunque las dos cintas anteriores ya eran imponentes en este apartado, aquí se consigue llegar a otro nivel. Los colores y las luces brillan en todo su esplendor, aparte de que la cantidad de dragones pareciera ser inagotable. El diseño de la isla de Berk y el Mundo Oculto son solo algunos de los escenarios más espectaculares que están construidos con especial atención al detalle. Aunque la trama que se da alrededor del cazador de Furias Nocturnas no posea nada innovador y el villano no tenga motivos sólidos para argumentar su accionar, el tiempo que se le dedica a desarrollar la relación de Chimuelo y Furia Luminosa es un deleite para los más fanáticos de la criatura sin dientes. Resulta imposible no sonreír con cada movimiento del dragón oscuro, a la vez que la hembra posee una belleza etérea inigualable. Cómo entrenar a tu dragón 3 se alza como un digno cierre de una trilogía que supo llegar al corazón del espectador. Franca, concisa y real, las últimas escenas son tan perfectas que harán lagrimear a más de uno.
La magia está en el aire “El Regreso de Mary Poppins” (Mary Poppins Returns, 2018) es una película musical que funciona como secuela de la “Mary Poppins” de Julie Andrews, la cual se estrenó en 1964. Dirigida y producida por Rob Marshall (En El Bosque), el guión estuvo a cargo de David Magee, basándose en la serie de libros escritos por P. L. Travers. Protagonizada por Emily Blunt, el reparto está compuesto por Lin-Manuel Miranda (Hamilton), Ben Whishaw (The Lobster, Suffragette), Emily Mortimer (La Librería), Julie Walters, Joel Dawson, Pixie Davies, Nathanael Saleh, Colin Firth, Meryl Streep, entre otros. La cinta recibió nueve nominaciones en los Critics’ Choice Awards y cuatro en los Globos de Oro, incluyendo las categorías de Mejor Actriz – Comedia o Musical y Mejor Película. En la época de la Gran Depresión londinense, el ya adulto Michael Banks (Ben Whishaw) continúa viviendo en la calle 17 de Cherry Tree Lane, casa que le perteneció a su padre y donde pasó toda su infancia. Ahora los niños del hogar son John (Nathanael Saleh), Annabel (Pixie Davies) y el pequeño Georgie (Joel Dawson). Aunque los chicos tienen una estrecha relación con su tía Jane (Emily Mortimer) y la pasan bien con Ellen (Julie Walters), su ama de llaves, desde la muerte de su madre Kate ya nada es igual. Cuando dos abogados llegan allí para avisarle a Michael que perderá la casa si no paga las respectivas deudas, Mary Poppins (Emily Blunt) volverá a bajar del cielo para recordarles a los Banks qué es lo que verdaderamente importa. “Mary Poppins” (1964) se convirtió en la película favorita de muchos por su bellísima historia, sus geniales interpretaciones y una música que hasta el día de hoy resulta inolvidable. Que 54 años después una secuela del clásico llegue a los cines podía no ser del todo bueno por el miedo a que la nueva producción no esté a la altura. No obstante, las dudas se desvanecen ni bien empieza el filme ya que éste no intenta competir contra el original, más bien le brinda un enorme respeto y logra que la esencia esté intacta. Ponerse en los zapatos de Julie Andrews no era tarea sencilla para nadie; sin embargo, al ver a Emily Blunt en la piel de la niñera más especial y particular nos genera mucha emoción ya que la actriz es perfecta para el rol. Su carisma, energía, manera de moverse y modo elocuente de expresarse indiscutiblemente recuerda a Andrews pero a la vez Blunt consigue darle su toque propio, uno que la hace tan querible como su antecesora. Aparte de ser una secuela, la película constituye un reboot para las nuevas generaciones. Esto se puede notar en casi todas las escenas ya sea porque ahora Jane es sindicalista, Michael trabaja en el Banco Fiduciario o, en especial, porque cada secuencia musical homenajea a las respectivas canciones de 1964. Como era de esperarse, la imaginación juega un gran papel en la trama, lo que resulta precioso cuando llega la hora de bañarse o cuando Mary, Jack (el nuevo deshollinador al que le da vida Lin-Manuel Miranda) y los chicos ingresan a un mundo de porcelana que combina humanos con figuras animadas. Excelente tanto desde lo visual como desde las coreografías y el diseño de vestuario, las canciones tampoco decepcionan. Mientras que la diversión se hace presente en “The Royal Doulton Music Hall”, “A Cover Is Not The Book” y “Turning Turtle”, la emotividad está a flor de piel en “The Place Where Lost Things Go” y “A Conversation”. Además, “Trip a Little Light Fantastic”, número musical de los deshollinadores, tiene un despliegue técnico tan asombroso como extraordinario. En conclusión, “El Regreso de Mary Poppins” dejará encantados a los que ya eran fanáticos de la primera así como servirá para que muchos conozcan por qué la película original es un clásico indiscutible. Con mensajes importantísimos sobre la pérdida, la unión familiar, el amor, ver las cosas desde un punto de vista diferente y el no perder el espíritu que se tuvo en la niñez, el musical de Rob Marshall merece ser visto una y otra vez en la pantalla grande.
Explorando el ciberespacio “Wifi Ralph” (Ralph Breaks The Internet, 2018) es una película animada de Disney que constituye la secuela de “Ralph El Demoledor” (Wreck-It Ralph, 2012). Rich Moore vuelve a estar a cargo de la dirección, esta vez junto a Phil Johnston. Este último co- escribió el guión junto a Pamela Ribon. Producida por John Lasseter y Jennifer Lee (Frozen), las voces originales de los personajes que ya conocemos vuelven a estar puestas por John C. Reilly, Sarah Silverman, Jack McBrayer, Jane Lynch y Ed O’Neill. A la vez se agregan caras nuevas con las voces de Gal Gadot, Taraji P. Henson, Alfred Molina, Alan Tudyk, Sean Giambrone y Bill Hader. Seis años después de los eventos ocurridos en la primera entrega, Ralph (John C. Reilly) y la corredora Vanellope (Sarah Silverman) continúan siendo grandes amigos que se juntan diariamente a tomar algo luego de la jornada de trabajo en el Arcade. No obstante, Vanellope no está del todo satisfecha: al ya conocer de memoria las carreras y obstáculos que presenta su juego Sugar Rush, el cansancio de la rutina se hace presente a cada momento. Notando esta situación, Ralph decide construir una nueva pista en la tierra de los dulces para alegrar a la niña. Mientras el juego está en funcionamiento, Vanellope se emociona al descubrir lo que hizo su amigo y toma ese camino, lo que produce que el videojuego falle y el volante se rompa. Con la preocupación latente de que Litwak (Ed O’Neill), dueño del negocio, desconecte Sugar Rush para siempre, Ralph y Vanellope se embarcarán en una súper aventura a través del Internet con el objetivo de adquirir un nuevo volante por eBay. Luego de ver los tráilers, “Wifi Ralph” se convirtió en una de las secuelas más esperadas y el resultado no decepciona. La cinta expande el universo de su antecesora a gran escala ya que nos sumerge en el mundo cibernético, lo que hace que las referencias abunden por doquier. Snapchat, Youtube, Amazon, IMDB, Twitter, Instagram, entre otros, conforman un espacio tan alucinante como atractivo visualmente. No solo eso, sino que también Disney aprovechó la oportunidad de mostrar todas las compañías que tiene en su poderío, tales como Marvel, Star Wars y The Muppets, por lo que será muy entretenido ver a personajes ya reconocidos de otros filmes (Groot, Bay Max, Iron Man, el burro Igor, los Stormtroopers, etc.) en esta película. Al haber tantos guiños a otras producciones y páginas web, el conflicto principal en cierto punto inevitablemente flaquea. Sin embargo, el filme tiene una atención al detalle magnífica que nos cautiva todo el tiempo por la enorme creatividad que hubo en el proyecto. Así es como veremos qué pasa desde adentro de la red, donde el buscador de Google actúa con una rapidez absoluta, las publicidades pop-up son tan insistentes como fastidiosas y los virus pueden destruir más de lo que se piensa. Sorprendentemente, la película no cuenta con un villano marcado. Esto no le juega en contra ya que no lo necesita para dejar moralejas tan necesarias como importantes para la actualidad, las cuales tienen que ver con el odio que existe en la red a través de los comentarios y cómo en una amistad saludable hay que siempre tener en cuenta que la otra persona no nos pertenece. Párrafo aparte para el momento en el que Vanellope se encuentra con las princesas de Disney, brindándonos un crossover hilarante gracias a un guión estructurado a la perfección. Ariel, Rapunzel, Cenicienta, Blancanieves, Elsa, Anna, Mulán, Pocahontas, Tiana, Bella, Aurora, Moana, Jasmine y Mérida indudablemente son de lo mejor de la película e incluso las frases de sus respectivas remeras combinan con sus personalidades. “Wifi Ralph” logra ser más que una digna secuela que encantará tanto a chicos como a grandes. Épica, entretenida e innovadora, el encanto de la primera se intensifica, además de que aquí se corrobora que Disney continúa siendo el mejor estudio en cuanto al tratamiento y transmisión de sus mensajes.
Un inesperado empleo “La Mula” (The Mule, 2018) es una película dramática dirigida, producida y protagonizada por Clint Eastwood. Inspirada en el artículo de The New York Times “The Sinaloa Cartel’s 90-Year Old Drug Mule”, escrito por Sam Dolnick, el guión estuvo a cargo de Nick Schenk. Completan el reparto Bradley Cooper, Michael Peña, Andy García, Dianne Wiest (La Extraña Vida de Timothy Green), Taissa Farmiga (The Bling Ring, La Monja), Alison Eastwood (hija de Clint), Laurence Fishburne, Noel Gugliemi y Eugene Cordero. En el 2017, el negocio del horticultor Earl Stone (Clint Eastwood) llega a su fin debido a los avances del Internet en cuanto a las compras online. Sin tener adonde ir, el ex veterano de guerra decide presentarse en la celebración de compromiso de su nieta Ginny (Taissa Farmiga). Como era de esperarse, no es bien recibido ni por su ex esposa Mary (Dianne Wiest) ni por su hija Iris (Alison Eastwood), ya que los últimos años el anciano nunca estuvo presente en el ámbito familiar. Antes de que Earl se suba de nuevo a su camioneta, un invitado de la fiesta se le acerca y, al notar todas las etiquetas que tiene pegadas en su vehículo sobre la cantidad de lugares que visitó, le propone un trabajo como transportista. Sin nada que perder, Stone se presenta en la dirección que le dejó ese hombre. Desde ese momento, y sin darse cuenta de lo que está llevando en un principio, el “Tata” será el encargado de realizar variadas entregas de cocaína a un cartel mexicano. Clint Eastwood vuelve a ponerse delante de las cámaras después de “Curvas de la Vida” (Trouble with the Curve, 2012), esta vez con un proyecto basado en la historia real de Leonard Sharp, hombre que según las autoridades de Detroit protagonizó una de las mayores operaciones de tráfico de drogas en Estados Unidos. Con ganancias de un millón de dólares al año, la vida de Sharp a sus 80 años resultaba más que interesante para ser llevada a la pantalla grande. Con un guión eficaz que contiene varios comentarios graciosos e irónicos sobre la tecnología y la diferenciación entre los yankees negros y blancos, la película busca dejar en claro lo mal que está priorizar el trabajo por sobre la familia. Con respecto a esto, a medida que avanza el relato se puede notar el click que hace el protagonista ya que el anciano reflexiona y cambia de parecer sobre sus acciones en un momento cúlmine. Por otro lado seremos testigos de la labor del nuevo agente de la DEA Colin Bates (Bradley Cooper) que, gracias a la información brindada por uno que opera dentro del cartel de Sinaloa, buscará dar con Earl y acabar de una vez por todas con la ilegalidad. No obstante la película llega a sentirse un poco larga al no tener tanto contenido por mostrar. Esto hace que las diversas entregas de cocaína se vuelvan más de lo mismo sin aportar nada diferente aparte del atractivo de que Earl hacía sus propias paradas y recorridos. A pesar de contener escenas completamente innecesarias entre el protagonista y un par de mujeres, “La Mula” es un film correcto gracias al desempeño de Eastwood. Aunque no esté entre sus mejores producciones, Clint logra que nos sea fácil empatizar con el “Tata” de Illinois.