Tommaso es un médico cardiólogo de gran renombre entre sus colegas, casado, padre de dos hijos, un hombre grande, de ideas y creencias fijas. Pero si hay algo en lo que Tommaso no cree es en Dios, en el “amigo imaginario de arriba” –como él mismo lo llama–. La vida de este respetable medico cambiará radicalmente cuando Andrea, su hijo mayor, le confiese su vocación: quiere ordenarse como sacerdote. M’hijo el dotor Si Dios Quiere es una comedia con tintes dramáticos, pero comedia por sobre todas las cosas, donde se nota al cien por ciento su estirpe italiana. Y el hecho de que la película proceda del país con forma de bota no es un mero dato al azar: la fotografía hace un uso precioso de las locaciones, convirtiendo a los suburbios, calles, paisajes rurales, y grandes edificios en protagonistas de la historia. Quien se encarga de ponerse la cinta al hombro y sacarla adelante es Marco Giallini (El Amigo de la Familia) quien interpreta al genial Tommaso, el respetable cardiólogo que tiene poco tacto para con sus empleados y no tiene problemas en decir las cosas sin filtro. Todo el elenco secundario acompaña de gran forma a Giallini, pero destaca sobre sus pares, la bella Laura Morante (La Habitación del Hijo) quien se mete en la piel de Carla, la esposa de Tommaso la cual siente que su vida no tiene sentido. A pesar de su corta duración (unos escasos 87 minutos), uno de los pilares de Si Dios Quiere es su ritmo vertiginoso, el cual compensa esos instantes en los que la trama cae en el dramatismo, y se percibe esa falta de comicidad de la cual peca por momentos la cinta, haciendo que, aunque al espectador no se le salgan los globos oculares de sus órbitas de la risa, el relato dinámico de la historia hace que uno se entretenga. La banda sonora, compuesta íntegramente por guitarras estridentes al más puro estilo rock and roll, y el montaje de la cinta que evoca a los videoclips de la vieja época, son un buen toque que le dio el director Edoardo Maria Falcone, siendo ésta cinta su opera prima. Los más puritas dirán que la cinta falla como comedia –lo cual es cierto–, y las escenas dramáticas no terminan de encajar bien. Todo esto, sumado al final abierto que tiene la historia, termina dejando un sabor de boca bastante extraño. Seguramente le hubiese sentado mejor una historia inclinada más por la comedia y haciendo énfasis en los momentos absurdos –los cuales son los mejores de la cinta–, brindando esas escenas tan propias de la comedia italiana. Conclusión Si Dios Quiere no es una propuesta que pasará a la historia, y falla como comedia al no ser tan graciosa como debiese. Lo cual no quita que brinde momentos hilarantes, y que los 87 minutos del metraje se pasen rápido. El punto fuerte es su ritmo presuroso, las buenas actuaciones y los hermosos paisajes de Italia. Recomendable para ver en casa, pasar un buen rato y a otra cosa mariposa.
Jack y su mamá llevan una vida cuasi normal. Desayunan juntos, ven la televisión, juegan, leen historias, festejan los cumpleaños. El principal problema yace en el hecho de que su casa es una pequeña habitación de 3×3 mts, donde se desarrolla toda su existencia como madre e hijo. Todo cambiará drásticamente cuando Ma decida poner fin a su vida de claustro, ideando junto a su hijo de cinco años un plan que podría sacarlos de esa habitación y llevarlos hacia lo desconocido. El extraño mundo de Jack Hay veces en las que es difícil escribir acerca de ciertas producciones de pobre calidad, debido a que faltan palabras para analizar películas que apenas si merecen ser visionadas. Todo lo contrario ocurre con La Habitación, donde la difícil misión se encuentra en no deshacerse en halagos y elogios hacia la cinta. La Habitación está basada en la novela homónima de Emma Donoghue publicada en 2010, quien además es la encargada de adaptar la novela a la pantalla grande. A pesar de que es común leer que la novela en la que se basa esta película está inspirada en hechos reales, la autora ha aseverado reiteradas veces que su historia no está basada en ningún caso de la vida real. Aunque es de público conocimiento –inclusive en nuestro país– los reiterados casos de secuestros como el que se retrata en la historia que aquí nos concierne. La Habitación está filmada con tal precisión, que las casi dos horas que dura su metraje no se sienten en absoluto. La brillantez de esta cinta yace en su simple pero bien contada historia y en las impactantes actuaciones de sus protagonistas. Lenny Abrahamson dirige este drama que nos retrata de forma intimista y desde la perspectiva de Jack su día a día en la habitación en la que él, junto a su mama, viven sus días, donde la puerta de entrada está al lado de la cocina, al costado de esta yace el baño, contiguo al baño se encuentra la cama y el armario, y de vuelta a la puerta de entrada. Así es el mundo de Jack. Los protagonistas absolutos en esta cinta son Jacob Tremblay quien se mete en la piel del pequeño Jack y resulta toda una revelación interpretando a ese pequeño Tarzán, mientras que Brie Larson es quien deja el alma en la interpretación de una madre que intenta darlo todo para que su hijo tengo una existencia lo más normal posible en ese pequeño recinto. Es cierto, que a la cinta le sobran unos cuantos minutos de ciertos momentos superfluos, pero no deja de ser un resultado redondo y satisfactorio gracias a un gran pulso narrativo y a un guión perfecto. Por lo tanto, no sorprende el hecho de que La Habitación haya recibido nominaciones de la Academia tanto como mejor película, mejor director, mejor actriz por Brie Larson y mejor guión adaptado. Les aconsejamos evitar mirar los distintos tráilers que fueron lanzados, ya que arruinan una historia que merece ser disfrutada desde cero. Conclusión La Habitación es un retrato intimista de una madre y un hijo, que a pesar de lo difícil de su situación, es la madre quien pone todo el amor para llevar adelante sus vidas. Brie Larson ofrece una soberbia interpretación, mientras que el pequeño Jacob Tremblay nos regala matices típicos de un nene de cinco años que llegan directo al corazón. Una película que sacude el alma contándonos una historia sobre el amor. Absolutamente recomendable.
A principios del siglo XIX, cuando no existía la electricidad y todavía no se sabía del petróleo, la historia de la humanidad se iluminaba con aceite de ballena. Calles, casas, ciudades enteras podían ver en la oscuridad gracias al aceite del mamífero más grande de la tierra. En el Corazón del Mar nos sube a bordo del barco ballenero Essex, y lo que empezó como un viaje en busca del preciado aceite, terminará convirtiéndose en un desastre producto de la codicia. Sálvese quien pueda poster en el corazon del marUna vez más, el prolífico director Ron Howard (Rush, Apollo 13) nos trae una nueva cinta basada en hechos reales. Esta vez, el cineasta de cabellera colorada nos contará el naufragio del Essex acaecido en 1820 por nada más y nada menos que un cachalote de tamaño descomunal, y que parecía tomarse venganza contra el Essex y su tripulación por todos los cetáceos muertos en pos del mercado del aceite de ballena. Mientras los hombres del Essex naufragaban por el desierto de agua del océano Pacifico, debieron cometer actos espantosos para sobrevivir. En el Corazón del Mar es una cinta con el clásico sello de Howard, y si bien ya la fórmula es archiconocida, aun así funciona de maravilla. La historia comienza con un Thomas Nickerson ya bastante entrado en años (interpretado por Brendan Gleeson), quien tendrá una reunión con Herman Melville (interpretado por Ben Whishaw). De ese encuentro entre el escritor y el marinero nacerá la novela Moby-Dick. Melville decidió usar solamente la primera parte de la historia, hasta el hundimiento del Essex, y es aquí donde En el Corazón del Mar aprovecha para contarnos la historia completa. El hecho de que la cinta está narrada en retrospectiva es un aliciente, puesto que los saltos temporales no son bruscos, sino que cada vez que el narrador interrumpe la historia para agregar algo, es ahí donde se produce la elipsis temporal. Si bien la cinta tiene momentos en donde el ritmo cae y se vuelvo un poco tediosa, todo se olvida en los momentos en los que aquel cachalote albino hace sus apariciones esporádicas. Los efectos especiales están a la altura de la historia junto con una hermosa fotografía, y a pesar de que Moby no sea la protagonista, su presencia marca la película y obviamente con cada aparición que hace, el aire se tensa. Todo el reparto de la cinta cumple a la perfección, destacándose Chris Hemsworth por sobre el resto, ya que aparte de ser el protagonista, se despega del rol de Thor al que tanto se lo asocia, ya que, a pesar de que su interpretación sigue esa línea de pibe rudo, al verlo en pantalla no pensamos que estamos viendo al dios asgardiano. El resto del elenco acompaña muy bien tanto Gleeson como Holland y Cillian Murphy. Conclusión En el Corazón del Mar es una historia de amistad, codicia y supervivencia, con el aliciente de contar con aquel cachalote albino que tantas pesadillas causó. Una epopeya que nos hundirá hacia lo profundo del océano y nos traerá de regreso no sin antes enseñarnos quien es el que reina en el mar. La cinta nos brinda actuaciones impecables, una fotografía hermosa que realza la belleza del mar y una trama cargada de dramatismo y aventura. La cinta nos permite cerrar el 2015 de una gran forma y si bien no será la película del año ni mucho menos, el film cumple con creces. Recomendada para todos y todas.
Ras y Calvin son dos jóvenes colombianos amantes de graffitear paredes en los barrios de Cali, donde ellos residen. Calvin es un estudiante universitario de bellas artes, mientras que Ras se vuelve un bala perdida luego de que su patrón lo eche del trabajo por robar pintura. Pero a ambos los une el amor por el arte y una gran amistad. Y será ese lazo que comparten lo que los lleve a vagar por la ciudad como dos hongos perdidos. Píntame, le dije yo al pintor Con unos créditos de apertura al más puro estilo psicodélico, combinando una música símil rock tribal y esa sensación que nos brindaba el ya extinto 35mm, Los Hongos nos abre las puertas de lo que a priori parece ser una cinta al estilo buddy movie con el aliciente del arte callejero. Pero lamentablemente esta coproducción entre Colombia y Argentina deja un sabor de boca tan terriblemente malo que es imposible encontrarle alguna virtud. Empezando por los protagonistas y sus actuaciones poco creíbles, las líneas de dialogo prácticamente leídas, y unos personajes más chatos que posavasos. Ni hablar de la nula trama o del pobre guion. La cinta dura 1 hora y 43 minutos, y en todo ese tiempo no hay historia. Es como si la película fuera una serie de escenas concatenadas y eso es todo. Y por eso no deja de sorprender los laureles que recibió la película durante su paseo por los distintos festivales de cine, y más aún sorprende el hecho de que fue seleccionada por Colombia para competir en los Oscar de la temporada pasada en la categoría de Mejor Película de Habla No Inglesa. La cinta además de ser totalmente soporífera en su extremadamente larga duración, no tiene rumbo fijo ni dirección, y pierde el norte pasada la media hora. Como si el director no se hubiese decidido entre hacer una especie de falso documental, un drama o una buddy movie, y como resultado termina concibiendo este hibrido con tantos baches en su metraje que hace imposible su visionado. La falta de pulso narrativo del director colombiano Oscar Ruiz Navia (El Vuelco del Cangrejo, 2010) no hace más que entorpecer –aún más– el ritmo de la cinta. Quizás uno de los elementos que vale la pena rescatar de esta producción es su música, y algún que otro plano de los muchachos pintando un gran mural en un puente de Colombia. El resto es totalmente descartable y no vale la pena ni mencionarlo. Ni siquiera el pésimo y espantoso final, aunque pensándolo bien, el desenlace va acorde a lo que fue la cinta: un total oprobio hacia el espectador. Conclusión Sin historia, sin trama, sin hilo narrativo, absolutamente tediosa y aburrida, Los Hongos es una película sin pies ni cabeza en la que no vale la pena gastar tiempo en verla, ni mucho menos dinero. Con tantos buenos proyectos argentinos, sorprende que el INCAA haya financiado esta cinta que no destaca en nada, salvo por su música. Absolutamente no recomendable, en serio.
Vergüenza y Respeto es un documental que retrata a los Campos, una familia bonaerense de linaje gitano. La cinta nos retratará desde un punto de vista observacional el día a día de una familia que trata de mantener sus costumbres y creencias viviendo entre medio de los payos. Gitana robaste mi alma Vergüenza y Respeto es de esos proyectos en los cuales el director instala una cámara y filma los sucesos que acaecen uno tras otro, en este caso a familia Campos, desde un punto de vista totalmente íntimo, buscando esa sensación de ubicuidad para no perder detalle alguno. El documental comienza con una publicidad totalmente invasiva, de mal gusto y calidad (el cual vuelve a repetirse sobrevolando el final de la cinta) para luego dar paso a una filmación casera donde unos jóvenes se comprometen en matrimonio, obviamente, según sus creencias y tradiciones gitanas. Mientras la cinta se desarrolla y va avanzando, lo mismo hará la pareja de comprometidos: veremos su casamiento, el anuncio de su hija, y el nacimiento de su primogénita. Por momentos es imposible seguir los diálogos de las conversaciones, debido principalmente a la forma de hablar de los protagonistas, ese acento español argentinizado obliga al espectador a afinar el oído más de la cuenta. Todo esto se acentúa aún más debido a que algunos diálogos se sienten totalmente antinaturales, ya que la presencia de la cámara incomoda a los protagonistas y eso se siente. El título del documental hace referencia hacia el orgullo de ser un gitano de vergüenza y respeto, sobre todo hacia la mujer. Los gitanos son de una estirpe puramente matriarcal. En este caso, la familia Campos pertenecen a la tribu de los Caló, y si bien se comprende que busquen mantener vivas sus sempiternas tradiciones, las mismas son bastantes llamativas. Solamente por enumerar algunas: las hijas deben mantenerse vírgenes hasta el matrimonio, no pueden ir solas a ningún lado, ni salir a bailar, no tienen amigas, no pueden ni siquiera terminar la escuela, y así un largo etcétera. En contrapunto está el varón gitano quien puede salir a boliches, embriagarse, ir a todas las fiestas familiares, verse con mujeres y cientos de prerrogativas más con las que las mujeres no cuentan. Mantener a las mujeres “aisladas”, castas y puras en el seno familiar es lo que ellos llaman honrar a la familia. La música del documental está compuesta únicamente de los cantos flamencos que entonan la familia, y la misma acompaña de forma perfecta, un gran acierto por parte del director. Lo mismo ocurre con el narrador, es uno de los propios protagonistas quien está a cargo de contar y explicar en qué consisten sus ancestrales tradiciones. Conclusión Vergüenza y Respeto muestra con total intimidad el día a día de una familia gitana. La idea está bien planteada, se desarrolla de buena forma y el documental se torna más y más interesante conforme pasan los minutos. Sin buscar juzgar, el film retrata el porqué de las tradiciones gitanas y la importancia que conllevan para ellos. Música flamenco, narrador gitano y una familia de lo más interesante forman un coctel que merece ser visionado. Recomendado, con especial ahínco para aquellos que solamente asocian a los gitanos con las carpas, las polleras largas y las trenzas.
Un grupo de adolescentes comunes se junta a chatear vía Skype una noche como cualquier otra. Todo se torna raro cuando a la videoconferencia se una Laura Barns, una compañera de ellos quien se suicidó hace un año atrás. Lo que en un principio parecía una broma de mal gusto termina convirtiéndose en una pesadilla real. Te vi estas ahí, al otro lado de mi monitor Eliminar Amigo es otra de las cintas de terror que nos llegan tarde por nuestros pagos. Y aunque recalcar esto en cada review de las distintas películas de terror pueda parecer redundante, es necesario debido a la tozudez de las distribuidoras de esperar meses, e inclusive años para hacer aterrizar un film de terror en los cines de Argentina. Detrás de esta producción de terror se encuentra Jason Blum, con su productora Blumhouse Productions, casa que supo involucrarse en cintas como La Noche del Demonio, Sinister o Whiplash: Música y Obsesión. Nuevamente Blum vuelve a dar en el clavo al brindar un soplo de aire fresco en medio de tanto ambiente viciado de posesiones y demonios. Y es que Eliminar Amigo se siente diferente porque toda la cinta se desarrolla desde la perspectiva de la protagonista y a través de su monitor, en ningún momento veremos a los actores de otra forma que no sea por la pantalla de la notebook de la protagonista, y a esto se le suma el hecho de que los 83 minutos que dura la cinta transcurren en tiempo real. Para destacar también es el hecho de que la cinta usa el terror psicológico –excepto en pequeñas partes–, por lo que no veremos demasiadas escenas violentas, sino que el miedo y el suspenso se infundirán a través de la sugestividad, como supo hacerlo aquella promesa de Hollywood, un director hindú conocido como M. Night Shyamalan. Toda la acción se desarrolla por Skype, Facebook y iMessage, por lo que no veremos a los actores haciendo otra cosa que no sea hablarles a la computadora, y aunque el reparto no logra lucirse, ya que el guion no se lo permite, los actores logran cumplir una tarea lo suficientemente decente como para creerles lo que estamos viendo, y no llegar a sentirse sobreactuada. Lamentablemente a pesar de toda la originalidad con la que se impregna la propuesta, y lo bien que está realizada, tiene varios defectos y la historia propuesta no basta para hacernos sentir realmente miedo, por lo que el clima no pasara de momentos de tensión. Quizás esto se deba un poco a que la propuesta no cuenta con música que induzca al miedo, y la banda sonora se limita a los distintos temas que suenan por momentos desde la computadora de la protagonista. Conclusión Eliminar Amigo es otra buena propuesta de terror a cargo de Blumhouse Productions, cargada de originalidad y tensión, la cinta logra ponernos en la piel de la protagonista para vivir a través de su monitor los espantosos hechos que acaecerán. Quizás se la juzgue duro por el hecho de que no llega a asustar, y aquellos que busquen verdadero terror no lo encontrarán, sino que se hallaran más bien en el campo del suspenso. Dentro de tanta basura de terror que nos llega, la propuesta es recomendable para pasar un buen rato, y a pesar de sus múltiples falencias es totalmente entretenida.
Ozzy es un pequeño mono volador quien junto a su padre Goliath, y a sus otros compañeros monos, están al servicio de la malvada bruja del Oeste, Eveline. Existen alrededor de Ozzy dos problemas: el principal de ellos es que tiene las alas muy chicas y no puede volar, y el segundo es que está en desacuerdo con Eveline y sus decisiones para gobernar Oz, por lo que decide revelarse, buscar a los Guardianes de Oz y así poder detener a la malvada bruja del Oeste. Llegando los monos Guardianes de Oz es una cinta de corte infantil que se inspira libremente en los personajes del mundo del Maravilloso Mago de Oz, para traernos esta historia que apunta a los más chicos. El principal problema con esta propuesta es su floja trama, los guionistas tomaron los personajes de Oz, ya que los mismos son de derecho público e idearon esta historia totalmente predecible, llena de clichés y sus típicos mensajes inspiradores. La cinta está a cargo del no muy bien ponderado Ánima Estudios, la productora encargada de traernos nefastos proyectos como El Chavo Animado, la serie animada de El Chapulín Colorado, la película de Gaturro, entre otras producciones que no valen la pena nombrar. Uno de las cuestiones a tener en cuenta con Guardianes de Oz es la buena música con la que cuenta, la cual logra crear los ambientes necesarios en los momentos, quizás sin la misma, la cinta no hubiera podido ser tan llevadera. En cuestión de animación, no se puede pedir demasiado a un estudio latinoamericano, ya que comparar el presupuesto de un estudio de América Latina, con el caché que cuentan productoras como Pixar, Dreamworks o Disney Estudios sería algo estúpido y sin sentido. Pero a su favor juegan el hecho de que al menos el diseño de los monos voladores está bien hecho, los primates alados son bastante simpáticos, y la animación es bastante fluida. Otro cantar es hablar sobre el resto de los personajes que cuentan con un acabado menos pulido, sobre todo el de los guardianes o de la misma compañera de aventuras del protagonista, la pequeña bruja Gabby. Eso sin contar que los escenarios son bastante austeros, la animación y detalle de los mismos es nulo, pero volvemos otra vez a ahondar sobre la cuestión del presupuesto, y lo dejamos pasar por alto. Lo que no se puede ignorar para nada es la flojísima historia que idearon los guionistas. Lo cual sorprende bastante, ya que el guion está firmado por dos muchachos que trabajaron en una de las mejores cintas animadas de la temporada pasada: El Libro de la Vida. Al parecer, Jorge Gutiérrez y Douglas Langdale no pusieron demasiado empeño a la hora de escribir la historia de Ozzy, y esto se siente a las leguas. Una trama completamente predecible, con mensajes moralistas y que buscan dejar una enseñanza metidas con calzador. Conclusión Guardianes de Oz es una cinta infantil con una buena música e interpretaciones de los actores de voz, una regular animación, pero una historia bastante floja, lo cual echa por la borda lo construido por los otros pilares de la producción. La cinta peca al seguir la tendencia de pensar que el hecho de que sea una película para niños se puede contar cualquier historia, subestimando a los más chicos, total a ellos no les importa la trama sino los dibujitos. ¿Hasta cuándo con lo mismo? Recomendable solamente si se tienen muchas ganas de ir al cine con los chicos.
Todo transcurre con normalidad en la vida de Shaun y su rebaño, aunque esa normalidad trae consigo una aburrida rutina que llevó al hastío a todas las ovejas de la granja Mossy Bottom. Hasta que un día, Shaun y su rebaño planean tomarse una jornada libre, lamentablemente para las ovejas nada saldrá como lo esperaban, y lo que en un principio iba a ser un día de descanso, termina convirtiéndose en una aventura en la gran ciudad, tratando de recuperar a su dueño, bastante lejos de casa. Va el pastor con su rebaño De los creadores de Pollitos en Fuga, y Wallace & Gromit nos llega la primera película basada en los cortos para la television de Shaun The Sheep, aquella oveja que nació en 1995 y fue introducida en un capítulo de Wallace & Gromit, luego fue llevada de vuelta a la serie en 2002, y finalmente en el año 2007 tuvo su propia serie de cortometrajes. Para los que nunca vieron los cortos, la película no les resultará para nada extraña ya que los personajes involucrados son pocos y sus roles en la cinta están bien identificados ya que en la genial introducción se nos presentan los que serán los protagonistas de esta historia: Shaun y su rebaño, Bitzer y El Granjero. shaunLa Gran Aventura Lego nos brindó una de las mejores películas de animación de los últimos años, y aunque parecía que fue hecha con la técnica stop-motion, toda la cinta fue animada por computadora emulando las cintas al estilo brickfilm (animación con legos). A diferencia de La Gran Aventura Lego, Shaun el Cordero: La Película, utiliza el clay-motion real (técnica igual al stop-motion en la que se trabaja con plastilina), trabajo que les tomo a los encargados de animar los personajes casi seis años, por lo que la cinta está impregnada de ese encanto que ni todo el CGI del mundo puede alcanzar y solo la animación cuadro por cuadro tiene. Cada detalle de los personajes, los escenarios, la animación, absolutamente todo está bien cuidado y nada se deja librado al azar, inclusive hay guiños a series y películas de la actualidad, la fotografía es hermosa y junto a la animación, destilan esa nostalgia para los que crecimos viendo a Wallace & Gromit en Caloi En Su Tinta. El guion tampoco se queda atrás, y gracias a un libreto que sabe llevar al espectador a donde quiere, la historia brinda momentos irreverentes, emotivos y hasta alguna que otra escena de suspenso. La magia de todo yace en su animación, la música que encaja en cada cuadro de manera perfecta y en los nulos diálogos de la película, absolutamente todas las “líneas” de la cinta son ruidos provenientes de los humanos y los animales. Conclusión Shaun el Cordero: La Película hace su aparición en la gran pantalla de una forma esplendida, dotada de una bella y puntillosa animación, una música y una historia que está a la altura de la propuesta donde todo se amalgama de forma perfecta. Shaun, su rebaño, Bitzer y El Granjero nos muestran que una cinta de animación con las técnicas clásicas nunca pasan de moda, tanto es así que ya se está barajando una posible secuela. Aardman –estudio a cargo de la cinta– nos brinda otra joya para recordar. Absolutamente recomendada.
Caroline y Charlotte son dos hermanas alemanas del siglo XVIII muy unidas, a tal punto que hicieron un pacto para compartirlo absolutamente todo antes que Caroline se case para salvar económicamente a su familia. Por esas cosas de la vida, el destino pondrá a prueba ese pacto entre ellas cuando un joven poeta llamado Friedrich Schiller entre en la vida de las hermanas, para así desencadenar un triángulo amoroso. ¿Podrán compartir el amor entre ellas? Hermanas en lo bueno y en lo malo Amadas Hermanas nos presenta una historia basada en un fuerte mito que existió en su momento, sobre la relación de uno de los dramaturgos más importantes de la historia de Alemania: Friedrich Schiller, con Caroline von Wolzogen, hermana de su esposa Charlotte. Según el rumor, las hermanas von Lengefeld se enamoraron de Friedrich, quien a su vez se enamoró de Caroline, aunque ella ya estaba casada por interés económico, pero Charlotte aceptó casarse con el poeta así Caroline y Schiller podían verse en secreto. Todo esto no es más que una leyenda basada en una carta que se encontró, pero no existe ninguna prueba que fundamente dicha historia. Lo que sí existe es esta adaptación de la leyenda, que a pesar de contar con una recreación fantástica de la Alemania de fines del siglo XVIII, no ofrece demasiado en otros aspectos audiovisuales. Dotada de una narración caótica y hasta confusa, los eventos suceden demasiado rápido, y no da tiempo al espectador de poder relacionarse en demasía con la historia y así poder sentir empatía con los personajes. La vertiginosidad que decidió impregnar al relato el director Dominik Graf no hace más que confundir al espectador con tantos nombres y sucesos que transcurren con demasiada velocidad. Por momentos se siente como si estuviéramos al frente del televisor viendo una de las novelas de la siesta. Sorprende que Amadas Hermanas haya sido seleccionada para representar a Alemania en los Oscar como Mejor Película de Habla no Inglesa. No quedan dudas que en el país teutón existen mejores propuestas que esta engorrosa adaptación símil telenovela, pero quizás los personajes históricos con los que trata la historia convencieron de que poner en carrera a esta cinta era una buena idea. Como si todo esto no fuera suficiente, la cinta no nos brinda actuaciones demasiado creíbles, y ningún actor logra destacarse con una buena labor, a pesar de contar con escenas dramáticas. A la postre comete el error de durar dos horas y dieciocho minutos, los cuales se hacen bastante largos, no porque la cinta sea aburrida, sino porque no logra generar demasiado interés por el devenir de los personas y su trágica historia. Conclusión Amadas Hermanas es una película regular, que cumple con lo justo para lograr que no nos durmamos durante las casi dos horas y veinte que dura la propuesta. Con actuaciones poco logradas, una dirección confusa y caótica, y un guión que no supo hacer hincapié en demasiados momentos, la historia del triángulo amoroso de Schiller y las hermanas von Lengefeld pasa con más pena que gloria por los cines. Recomendada para ver en casa nada más.
Es el año 2000 y Nicolás es un joven perteneciente a una familia de una arraigada tradición judía. Cuando su primo recibe una beca para estudiar en Tel Aviv, Nicolás decide visitarlo de sorpresa. Al llegar al Estado de Israel se encuentra con que su primo se fue del país, por lo que el joven decide empezar a recorrer el territorio y grabar con su cámara lo que en un principio son unas vacaciones tranquilas, que luego terminan convirtiéndose en un viaje donde pone en riesgo su vida y en un documental de gran valor histórico. Un misil en mi placard A primera vista, NEY, Nosotros, Ellos y Yo, parece un documental más al estilo road movie: un joven común que decide hacer un viaje para visitar a un primo en Israel mientras graba con su cámara sus propias vivencias. Pero lo que hace diferente a este documental es el hecho de que el propio Nicolás se encuentra al borde de cuestionar las creencias tan bien guardadas de su familia cuando empieza a conocer más sobre el conflicto entre Palestina e Israel. La genial edición de Andrea Kleinman transforma una grabación totalmente casera en un producto bien llevado, que sabe lo que quiere contar a través de los testimonios. La narración, a cargo del propio Nicolás Avruj, quien fue el protagonista de este viaje nos contextualiza los orígenes de su familia y su fuerte tradición judía. Todo este marco que se nos presenta nos sirve para entender lo fuerte que es todo lo que llega a vivir Nicolás y como el hecho de ser testigo en carne propia todo lo que ocurre en Palestina y en la Franja de Gaza lo lleva a movilizarse por dentro y preguntarse si en realidad todo lo que le enseñaron sus creencias desde pequeño sobre los palestinos es lo correcto. Sin proponérselo, Nicolás y su cámara son testigos de algunos eventos históricos, como el comienzo de la segunda intifada. Los testimonios obtenidos también son de gran valor, y sorprende la ingenuidad del protagonista al ingresar por su propia cuenta a la Franja de Gaza –con todos los riesgos para un judío que ello supone– y directamente preguntarle a los entrevistados gazatíes su opinión sobre el bloqueo israelí, los judíos, y el conflicto. La inocencia por el peligro que podría suponer el formular esas preguntas en terreno tan escabroso para un judío convierte en material de peculiar interés las grabaciones obtenidas. Al ser filmaciones caseras con una sola cámara, las imágenes no tienen la mejor calidad, pero cumplen su objetivo, y ese toque casero le otorga cierta magia al documental. El 9 de septiembre de 2001 se produjo el atentado que cambió al mundo, tanto por la violencia como por la desconfianza reinante, por lo que uno se pregunta si hoy en día, un muchacho como Nicolás podría llegar a realizar la misma travesía y vivir para relatarlo. Conclusión NEY, Nosotros, Ellos y Yo es un documental interesante al retratar un momento histórico determinado. Es la curiosidad de un muchacho que lo lleva a descubrir con sus propios ojos que no todo es lo que parece, y que cuestionarse a sí mismo y lo que le fue infundado desde pequeño no está mal: los hechos hablan por sí solos, ni pro-palestino, ni pro-israelí. Una gran edición, buen material grabado, la crudeza de lo que presenciamos -bombardeo incluido-, una música que acompaña, y el propio protagonista narrando el documental hacen de esta propuesta una alternativa ampliamente recomendable.