Con sello francés. El nombre de Luc Besson (‘El perfecto asesino’, 1994- ‘El quinto elemento’, 1997) es garantía de calidad narrativa. El director y guionista tiene un estilo que rara vez se encuentra en los films calificados bajo el género de acción. Además, suele incluir personajes y elementos que buscan el cariño del espectador. Hoy se estrena 3 Días para matar (3 Days to Kill, 2014), protagonizada por Kevin Costner, Hailee Steinfeld y Amber Heard, y escrita por Besson. Tal y como ocurrió con el Léon de Jean Reno, Costner es un ya veterano asesino a sueldo que en este caso no lidiará con una pequeña huérfana, sino con su propia hija adolescente. Desde que le diagnostican una enfermedad aparentemente irreversible, el protagonista se apresura a resolver varios asuntos pendientes; y uno de ellos es, justamente, reestablecer el contacto con su hija Zooey (Hailee Steinfeld), a quien al igual que a su esposa y madre de la primogénita, abandonó durante años, con tal de serle fiel a su labor para la CIA. En el mientras tanto, aceptará también un último trabajo, encomendado por una misteriosa y sensual agente llamada Vivi (Amber Heard). Este cóctel de actividades, tiene dosis de drama, humor, acción y suspenso, que a veces se parecen DEMASIADO a otras películas provenientes del mismo autor. Quizás sean guiños, pero la reciente saga de ‘Búsqueda Implacable’ (2008 y 2012) lo vuelve mucho menos probable. 1 Desde mi punto de vista, encontré algunas discontinuidades en el orden de la trama; ciertos saltos sorpresivos. El desempeño actoral está correcto, aunque no me termina de convencer la figura de Amber en este tipo de film. Sin embargo, donde tiene que haber acción, hay acción, sin lugar a dudas, y donde el agente Ethan Renner pone el ojo, pone la bala. ¡Pero también hay escenas dulces! Ya que el protagonista quiere aprovechar el mayor tiempo posible para devolverle a Zooey el tiempo perdido; desde salir a tomar un chocolate caliente, hasta dar un paseo en las hamacas voladoras o aprender a andar en bicicleta. Por supuesto que la niña no se la dejará fácil. Está en plena etapa de rebeldía, con nuevo novio y en la movida nocturna parisina, lo cual inflará más los dramas de vida o muerte que su papá deberá enfrentar. 2 No me parece una película novedosa, mucho menos para los que vienen siguiendo al francés desde hace tiempo… Digo esto porque la historia le pertenece, pero es una pena que la dirección haya recaído en el norteamericano Joseph McGinty Nichol, quien tiene menos ‘pasta’ para los films de acción; o al menos, es un tipo mucho menos rudo y que fantasea bastante a la hora de contar una historia. Acá la cuestión es que Kevin Costner se amigó con su familia, se cargó su enfermedad al hombro y liquidó a una docena de tipos. Ahora pensá vos, qué sos capaz de hacer en tan sólo tres días.
Las ocho patas de la justicia. Ya lo cantaba Frank Sinatra: “Spiderman, Spiderman, does whatever a spider can” y no nos queda duda de que el álter ego desinhibido de Peter Parker, es el héroe favorito de la ciudad de Nueva York. Contando la trilogía de Sam Raimi, ya van cinco películas del superhéroe azul y rojo creado por el gran Stan Lee. Sin embargo, lo nuevo del Hombre Araña no hace más que alejarse del estilo que Tobey Maguire le había impuesto a este personaje. Son días importantísimos tanto para Peter Parker (Andrew Garfield) como para Gwen Stacy (Emma Stone). Ha llegado el momento de la graduación, lo cual implica adoptar nuevos rumbos. Si no contamos su complicada relación con el arácnido, para Gwen resulta bastante fácil, ya que es un cerebrito sin fondo que rápidamente conseguirá una beca universitaria para asistir a una de las mejores instituciones. Pero en cuanto a Peter… El joven apenas logró aceptar el asesinato de su tío Ben, como para ya tener que hacer malabares entre su identidad secreta y su tía May, quien está teniendo bastantes complicaciones para controlar la vida de su sobrino. Mientras tanto, el único heredero de los Parker sigue molesto con sus padres, que lo abandonaron cuando pequeño, y sin explicación aparente. Pero desde que nuevos y poderosos villanos azotan su ciudad natal, Peter no hará otra cosa que guardarse sus problemas mundanos en el traje de Spider-Man para salir a enfrentar a esos peligrosos enemigos y devolverle a los neoyorquinos la tranquilidad que hace rato venían reclamando. 2 Es ese uno de los mejores rasgos de esta nueva película de la Marvel; el superhéroe se olvida de sus rollos cotidianos una vez que entra en el ajustado traje de lycra y deslumbra a todos con su ágil capacidad para resolver los problemas de vida o muerte que le competen no sólo a él sino también a una ciudad entera. Hay que reconocer que este nuevo Peter Parker es mucho más fachero y seguro de sí mismo que el anterior, lo cual le da un encanto tan particular que no nos importa el desborde de efectos especiales que hacen ver a la película como un cómic dibujado (literalmente). Las dos némesis de esta entrega se componen de Electro (Jamie Foxx), un empleado de la Oscorp cuyo único deseo en la vida era dejar de ser ignorado por todo el mundo, y tras sufrir un accidente de laboratorio en el día de su cumpleaños, convertirá su fanatismo por ‘Spidey’ en una herramienta de odio. Y del famosísimo Duende Verde; así es, Harry Osborn –heredero millonario de Industrias Oscorp- is back! Lejos de parecerse al personaje que supo interpretar James Franco, Dane DeHaan nos presenta un villano con una personalidad muy marcada, y que será la clave en el desenlace de la película. 3 El Sorprendente Hombre Araña 2: La Amenaza de Electro (The Amazing Spider-Man 2, 2014), no es ninguna novedad; es decir, hay conflictos en las calles de la ciudad y el afamado héroe deberá salir a resolverlos. El film entretiene durante sus 142 minutos ‘en el aire’, y Marc Webb -su director-maneja el drama, el humor y la acción sin límites, con una muñeca sorprendente (¡Ja!). Yo le digo SI a este nuevo y osado Hombre Araña… ¿Ustedes?
A quien le gusten las comparaciones... Siento profundamente que me suceda esto con un film argentino, pero lamentablemente, esta película de Hernán Guerschuny me pareció lo más ‘soso’ que vi en mucho tiempo. Qué irónico; tener que hablar en tono de crítica acerca de un producto que justamente es un retrato de la decadencia en la que ese rubro periodístico ha ingresado. En realidad es un nicho que hoy en día perdió mucha credibilidad, a fuerza de medios alternativos que le dan a cualquier persona (calificada o no) la capacidad de elaborar una opinión acerca de algo. Pero, ingresemos en el terreno de la película propiamente dicha. Es muy evidente la forma en que algunos actores fuerzan las pausas de un guión con interminables diálogos carentes de profundidad. No es culpa del casting, sin embargo, sino del responsable de darle credibilidad a los diálogos. Si algo debo reconocer, es que el personaje interpretado por Rafael Spregelburd (El crítico, justamente) es una postal de lo que uno puede imaginar en torno a esa figura. Pero en el caso de por ejemplo, Dolores Fonzi, ‘la enamorada’ en cuestión, no pude más que encontrar un vacío total de desempeño actoral. 1 La historia no me resultó para nada interesante, de hecho me aburrió la mayoría del tiempo. Todo es gris en la vida de un tipo que pertenece a la redacción de un diario-sección espectáculos- y que sufre de problemas económicos, una personalidad regida por el análisis del todo y más, dificultades para socializar y un escaso sentido del sentimentalismo, el amor y la amistad. Víctor Tellez, el protagonista, padece de un inconsciente que razona en idioma francés, por el sólo hecho de que lo hace sentir más seguro. Pero ni siquiera sacaron partido de ese detalle… Cómo describir un guión tan cotidiano, con algún que otro elemento del terreno de la ficción que no llegó a ser bien explotado por el equipo de producción. Por ejemplo, las referencias a películas destacadas del cine clásico. En mi opinión, podría haber resultado interesante aprovechar esas imágenes para beneficio de la trama, porque aparentemente la historia acarrea humor… Un humor que jamás llegué a captar. En torno a algunos comentarios que leí sobre su paso por festivales, encontré algo de exageración en el tratamiento de las comparaciones. Cosas como, ‘para los amantes de Cuando Harry encontró a Sally’. Quizás mi conclusión ya la habrán deducido; te pintan al Crítico como la peor profesión del mundo mundial, dato del que nadie debería estar orgulloso. Pienso que el grupo reducido de cineastas fracasados (¡así los llaman en la película eh!) tendrá una visión más certera de hacia dónde apuntaba este relato pero, en lo que respecta a mí, no encontré más que un producto soporífero y tosco en cada uno de los sentidos de la palabra. Habrá quienes se interesen en mi visión, y habrá quienes me manden a la lona; porque al fin y al cabo… ¡Quién soy yo para criticar!
Ya sé que estoy piantao. El cine argentino tiene aún varios desafíos que enfrentar en lo que respecta a largometrajes. Sin embargo, de a poquito va decantando muchos productos que colman las expectativas tanto de realizadores y productores, como de espectadores. En esa línea se encuentra Gato Negro, un film dirigido por Gastón Gallo y protagonizado por un ENORME Luciano Cáceres. En primer lugar sorprende gracias a que abarca unos 40 años de tiempo a lo largo de toda la trama. Eso implica cambios drásticos en el vestuario, la fotografía, el diseño de producción, y lo más complicado de todo, la realidad político-social argentina durante cada una de esas épocas. La película comienza cuando Tito (Cáceres) es apenas un niño tucumano rebelde, cuyo único sueño es dejar atrás su ciudad natal y trasladarse a Buenos Aires, donde todo lo que él desea podrá volverse realidad. Pero, pese a su valentía y decisión, necesitará tiempo y trabajo hasta que la suerte se ponga de su lado y a su depresiva madre se le presente una oportunidad laboral en tierras porteñas. La llegada a la capital no es para nada lo que Tito anhelaba, ya que es metido en un colegio pupilo, donde su rabia por un padre ausente apenas cesará una vez que decida escapar de ese lugar, intentando dejar rezagado un pasado pueblerino que nunca termina de convencerle. A partir del momento en que el joven decide comenzar a correr un camino que parece no tener rumbo, todo en su vida serán oportunidades que sabrá aprovechar como buen campesino interino, humilde y perseverante. Así es; Tito jugará en las grandes ligas, consiguiéndolo todo a fuerza de trabajo duro y algún que otro ‘tejemaneje’. Casa, auto, esposa, hijo, empresa… Más de lo que el pibe se animaba a aspirar. Pero no todo lo que brilla es oro en la vida de cualquiera de nosotros, y es por eso que más de un gato negro se le cruzará por delante al protagonista, poniéndole varios obstáculos familiares, sociales y laborales. Texto Se trata de una metáfora de la vida misma y de un retrato social que se enfoca sobre todo entre los años 60 y 80, en nuestra golpeada Argentina. Personalmente la recomiendo fervientemente; se trata de un producto osado, que asume riesgos, muy bien actuado y con un trabajo de producción verdaderamente notable. Luciano estrena un acento tucumano excelente, lentes de contacto oscuros y una energía impresionante a la hora de plasmar su personaje; sin duda, es el alma de la película. Denle la oportunidad a Gato Negro porque es otra de las apuestas locales que sorprende. Tiene drama, tiene acción, tiene humor, tiene historia y hasta tiene ‘poesía’. Completan cartel: Lito Cruz, Luis Luque, Leticia Brédice y Favio Posca, entre otros. Y no puedo no mencionar el elaborado trabajo con los niños, una regla difícil de romper a la hora de hacer cine. Mismo pensamiento para con la banda sonora, la cual muchos directores obvian cometiendo el grave error de dejar a un lado la música, uno de los condimentos más importantes a la hora de mover emociones en el espectador. Y ya sé que suena feo, pero lo voy a decir igual; ¡Suerte Gato!
Encuentro cultural. Francia, Inglaterra, Estados Unidos, China, España. Esos cinco países pueden tener mucho en común si los miramos con amor. Xavier es un nativo francés que se casa con una inglesa, tienen dos hijos y a los 10 años de matrimonio se separan. Ella se va a vivir a Estados Unidos (Nueva York) porque allí conoció a un nuevo amor y, por común acuerdo, lleva con ella a los niños. Al poco tiempo, él se da cuenta de que no puede vivir lejos de su familia, y toma la compleja decisión de mudar su vida a la Gran Manzana. Allí se encuentra una de sus mejores amigas europeas, a quien tiempo atrás Xavier donó esperma para darle la posibilidad de criar un hijo con su novia lesbiana. Por ende se reencontrará con Isabelle y su prominente embarazo. Vivirá un tiempo con la pareja femenina, hasta que consigue un pequeño apartamento en el Barrio Chino, cortesía de Ju, la otra madre del bebé en camino. En medio de todos esos malabares, nuestro amigo francés tratará de conseguir un trabajo que lo sustente, pero para eso necesitará tener la ciudadanía. Con ayuda de su abogado, arma un falso casamiento con una norteamericana de raíces chinas, mientras lidia con el divorcio y con la llama que continúa encendida en torno a otra de sus mejores amigas, también antigua pareja con quien convivió en Barcelona (y con dos hijos), que ha venido desde Francia a Nueva York para cerrar un negocio. 1 Esta enredada historia, es un poco lo que sucede con los hijos cuando quedan pendiendo en medio de una separación. El film está abordado con humor y con extremo optimismo, pero dudo que en la vida real se pueda soportar semejante cruce de culturas sin que nadie salga perjudicado. Sin embargo, los cuatro personajes principales resultan ser encantadores, pese a la cantidad de líos en que se meten cada uno de ellos. 2 A todo esto, Xavier es un exitoso escritor en su ciudad natal, y desde la distancia tratará de lanzar un nuevo libro, basado en sus propias experiencias con el amor, la amistad y la familia. Toda una novela su vida, lo cual el editor agradecerá plenamente. En general, Lo mejor de nuestras vidas (Casse-tête chinois, 2013), se inclina hacia la comedia, planteando un complicadísimo rompecabezas desarmado que a simple vista parece imposible de ensamblar, pero que la noble personalidad del protagonista sabrá cómo ordenar, ¡y sin perder la paciencia! Como espectador vas a desesperar rápidamente, porque la trama va y viene tanto, que hasta aparecen algunos antiguos y célebres pensadores que han influenciado el modo de ver la realidad de Xavier. ¿¡Cómo!? Sí, lo dejo a tu criterio. Y recomiendo la obra de Cédric Klapisch para pasar un lindo rato entre amigos y reflexionar acerca de lo poco complicada que va a parecer tu vida en comparación con esta película. Como dirían en París: Crème de la crème!
Las vueltas de la vida. Luego de recorrer variados festivales, llegó a la Argentina esta especie de thriller ‘bonachón’ que gira y gira en torno a una madre separada y su hijo, viviendo una vida sencilla, casi rozando la depresión, hasta que un desconocido los aborda en un supermercado y prácticamente sin explicación termina siendo parte de la familia. Mientras Adele (Kate Winslet) y Henry transitan la única salida semanal en el gran mercado del pueblo, un fulano de nombre Frank (Josh Brolin) se les presenta herido y pidiendo ayuda. No lo pide muy amablemente, pero tampoco es que los amenaza, y así sin darnos cuenta, el trío se sube al auto y regresa a casa como si nada pasara… Frank es un fugitivo de la justicia, intentando escaparle no sólo a los policías sino también a un triste pasado que nos irá siendo presentado con cuentagotas. 2 Me cuesta imaginar que un tipo cualquiera se aparezca de la nada en la vida de alguien, con un aspecto considerablemente peligroso y rápidamente tenga acceso a las comodidades de un hogar decente sin que nadie lo denuncie. Mientras tanto, el pueblo alerta sobre su presencia entre los transeúntes y los oficiales del sheriff pegan carteles de ‘Se Busca’ en cada árbol erigido en sus tierras. Pero ante la imagen desesperada de una madre necesitada de amor y contención, y de un niño sin una verdadera figura paterna presente, me parece más o menos creíble que un fortachón tan manos a la obra, con un costado bastante sensible enseguida logre controlar la situación. Frank es el padre que Henry necesitaba; le enseña a jugar béisbol y a cambiar la rueda del auto, arregla la casa, sabe cocinar, ayuda en las tareas de limpieza y complace a su madre. Y como menos pregunta Dios y perdona, las razones por las cuales el nuevo integrante es presa de los cazadores, pasan a un segundo plano. Entre los tres formarán un grupo feliz y armonioso, pese a esconderse hasta del sol. 3 Me costó bastante encontrar respuestas a algunas cuestiones, pero en general el film es correcto y atrapa; sobre todo porque a cada segundo que pasa, da la sensación de que a alguien le va a saltar la chaveta y la trama se va a ir a la lona. Con un poco de imaginación, podemos sentirnos parte y compenetrarnos en esa historia, cuya presentación recién llegará al final. Hay que leer entre líneas para anticipar las escenas, y si bien ninguno de los actores derrocha actuación, la novela es emotiva, en especial los 30 minutos finales. Aires de esperanza (Labor Day, 2013) es un drama construido un poco a regañadientes, pero con un backup demasiado ambicioso y un mensaje absolutamente reflexivo. En conjunto, podrá resultar algo lento pero valdrá la pena. De hecho, las conclusiones a las que el joven llega, fruto de su floreciente adolescencia, resultan ser muy perspicaces para una película que vagamente pretendía pertenecerle al pequeño Henry.
Tan Biónica. Es difícil ver un film de éstas características, sin sentirse uno influenciado por el bombardeo de opiniones en torno a la misma. Me refiero a que la película, fue una de las grandes competidoras durante la temporada de premios, y hasta alcanzó la terna de ‘Mejor Película’ en el Oscar, donde sólo se llevó el galardón al Mejor Guión Original. Pero con mucha razón… En un futuro más o menos utópico y cercano a nosotros, en una California dominada por la cultura asiática, la tecnología y el aspecto ‘vintage’, donde sólo se consumen alimentos orgánicos, vive Theodore (Joaquin Phoenix). Un tipo bastante sensible, que acaba de romper su relación matrimonial y está tramitando el divorcio. La soledad lo conduce por ese camino en el que todos los seres que te rodean, desean que rehagas tu vida, consiguiéndote citas y demás situaciones incómodas. En ese contexto llega a su vida, Samantha. ¿Su hija? ¿Una nueva pareja? NO. Samantha es un Sistema Operativo Inteligente. Bajo la voz de Scarlett Johanson, ese ‘IOS’ se convertirá en el mejor amigo, la mejor compañía, la consejera, y hasta la amante del protagonista. Y con esa simple premisa, se plantea un dilema que a los ‘pro tecnología’ no va a simpatizarles demasiado. 3 Es el guión más inteligente, valga la redundancia, y creativo que vi (y que oí) en este tiempo. Los diálogos que Spike Jonze ideó entre esa máquina y ese ser humano, son una delicadeza. Por lo menos a mí, me hizo reflexionar mucho, aunque no emocionar, porque creo que pese a todo, la frialdad de esa relación es imposible de esquivar. Sin embargo, no estamos muy alejados de una realidad en la que los dispositivos electrónicos rigen nuestra vida… Ah no, esperen; ¡Eso ya está pasando! El director y guionista, plasma esa idea en base a piezas musicales impecables y melancólicas (los sonidos en general, son una de las claves del relato), superávit de primeros planos, una ambientación espectacularmente pulcra, y bellísimas tomas panorámicas. 4 Debo reconocer que Scarlett Johanson ha logrado muchísimo con su voz; queda todo más que claro cada vez que Samantha está en ‘Modo On’ y su infinita inteligencia se proyecta más allá del cálculo de sus programadores. ¿Puede esa cosa tener sentimientos? Claro que no. Pero si te compenetrás mucho con la historia, caés en la trampa, para luego destildar esa loca idea de tu cabeza y volver a pensar: “Es sólo un dispositivo, es imposible encariñarse así”. Ella (Her, 2013) es respaldada además por Rooney Mara, Amy Adamas, Olivia Wilde y Chris Pratt, en el reparto. ¡Que vivan las relaciones de carne y hueso! Okay Google Now, guarda y cierra este documento…
Perro adopta niño. ¡Y NO es al revés! Este jueves 20 de febrero llegan de viaje el Sr. Peabody y su hijo adoptivo, Sherman. Esa pequeña historia que formaba parte del famoso show de Rocky y Bullwinkle allá por 1960 y monedas, se pasó a formato película, con muchos más pixeles y en 3D. Se trata de un perro con un coeficiente intelectual superior al de cualquier ser humano, a quien la ley otorga el derecho a adoptar un niño. Y es que este perrito blanco y anteojudo, adornado con un moño rojo en el pecho, pasó toda su vida de cachorro y madurez sin ser adoptado por una verdadera familia. Todos los peques que iban a verlo al hogar de canes, no se sentían para nada atraídos por su infinita inteligencia; ellos querían el típico ‘guau-guau con movimiento de rabo’, ‘trae la bola muchacho’ y ‘dame la mano amigo’. Peabody se rehusó a comportarse como un perro corriente, por lo que dedicó sus días al enriquecimiento mental. Finalmente, el techo que el perrito nunca tuvo, fue el obsequio que él quiso hacerle a su hijo Sherman. Cuerpo Mr. Peabody no sólo le enseñó al niño un montón de datos históricos importantísimos, sino que lo llevó personalmente a verlos, mediante la construcción de una eficiente máquina del tiempo. Con este panorama, no podemos esperar otra cosa que una bomba explosiva de aventuras sin igual. De la Revolución Francesa a La Era de Hielo. Del Renacimiento con Da Vinci, al Egipto de Tutankamón. De Shakespeare, al primer presidente de los Estados Unidos… En este educativo film animado conoceremos a cuantos personajes históricos y emblemáticos quepan en 92 minutos de cinta. Así que papis, vayan preparados; lean las enciclopedias de historia mundial si no quieren quedar en ridículo cuando sus hijos les pregunten de qué está hablando el Sr. Peabody. Cuerpo1 En un mundo fantástico donde nadie se pregunta cómo es que un perro habla, cocina, lee, sabe de cuanta materia se le pregunte, maneja una moto ¡y hasta cuida a una personita de 6 años!, cualquier cosa puede suceder. Un calculador terrier al mejor estilo Sherlock Holmes, te relatará en primera persona, cómo se van desarrollando los hechos en su casa de Nueva York, a partir del día en que Sherman comienza la escuela. El conflicto comenzará cuando el establecimiento educativo descubra que el niño ya sabe demasiado para su corta edad, y una típica pelea de recreo ponga en peligro el ‘contrato’ legal que asegura su adopción. Cuerpo2 Me parece que esta nueva película es más interesante para esos jovencitos curiosos que se interesan por la historia, cosa que es bastante difícil que pase en los tiempos que corren. Y también para los adultos que ya conocemos los hechos, ya que la clave del humor está ahí; un montón de datos importantes que ocurrieron hace muchísimos años fueron truncados, planteando la influencia que la modernidad podría haber tenido sobre ellos. El resultado en el que aterricé, llevó a elaborarme la siguiente pregunta: ¿Hubiese sido Einstein capaz de armar el cubo Rubik?
Toy Story para armar. Si faltaba un ladrillo por colocar en los pilares de la animación, ese era un Lego. Finalmente, el sueño de muchos (supongo) se cumplió y los cuadraditos y rectangulitos con los que jugaban en la infancia- o quizás no tanto- se volvieron realidad. Así es; entre los ejecutivos de la Fox y los mismísimos responsables del juguete, armaron una comedia basada en ese lunático pasatiempo que es colocar piezas como en un rompecabezas, pero en tercera dimensión. Mi primera aclaración con respecto a esta película, es que la vi en español neutro. Por lo tanto, estimo que perdió bastante calidad ‘desde el vamos’. Pese a ese detalle, el humor del film no me atrapó tanto como en otros casos pero, una vez más, le echo el 70% de la culpa al español. Al parecer, si miramos con una lupa, el mundo de los Lego… ¡Está vivo! Y todas esas aventuras que podemos imaginar mientras armamos esas estructuras plásticas, tienen un corazón latiente. O bueno, más o menos. Cuerpo1 Resulta que el pequeño Emmet, es un ciudadano más que común entre miles de legolianos (¿?), que lee las instrucciones al pie de la letra cada maldito día y no tiene nada que lo haga realmente especial. Un buen día, es confundido con el gran Maestro Constructor y deberá dejar de cantar esas insoportables canciones ciudadanas que nadie ensaya pero que todos saben, y entregarse a salvar al universo, debido a la única y accidental razón de haber encontrado una pieza con pegamento que responde a una poderosa profecía. Ese universo que Emmet deberá cargar a su cuadrilátera espalda, está compuesto por los buenos, los villanos, los comunes, los especiales y… Gandalf, Batman, C-3PO, Han Solo, Abraham Lincoln, Linterna Verde, Superman, Shaquille O’Neal, La Mujer Maravilla, y hasta Shakespeare. Cuerpo2 Bueno, la trama no es nada que no hayamos visto antes, porque la gracia está en los dobles sentidos y la lisergia que le aportan los personajes ‘famosos’ del film. Es por eso que recomiendo PLENAMENTE verla en idioma original. Y es que, La gran aventura Lego (The Lego Movie, 2014) es una bola como la que persigue a Indiana Jones, llena de burlas a otras grandes películas y personajes del imaginario público- y cinéfilo-, a la cual aportan sus voces personalidades como Morgan Freeman, Liam Neeson, Will Ferrell, Jonah Hill, Channing Tatum, Charlie Day y Chris Pratt, entre otros. Movimientos robóticos de ‘ladrillito’, expresiones faciales repetidas, cabellos sin vida, manos de tenaza inmóvil, torsos intercambiables, infinidad de accesorios por doquier, repentinos ‘transformers’, vehículos espectaculares y estructuras imposibles que rascan los techos, constituirán para muchos un sueño hecho realidad viendo cómo cobran vida esos parientes de los Playmobil. Igual no te ilusiones, porque es imposible construir algo así. Perdón, se supone que debería dejarles una linda moraleja, pero la realidad es que hasta la enseñanza de la película es una buena tomada de pelo.
La historia se escribe sola Año 1938, Alemania. Claramente ese dato te tiene que insinuar algo… Sí; ya casi se desataba la drástica II Guerra Mundial. Una vez más, aunque hayan pasado casi 75 años, nos sorprende lo duro que fue todo. Y una de las cosas más tristes, son los niños. Porque ellos son inocentes, sin importar ‘el bando’. Los niños judíos sufrieron la desgracia de ser capturados y asesinados. Los niños alemanes, simpatizaban errónea e inocentemente con el régimen nazi, ya que eso les era impuesto por los adultos. En ese penoso contexto, es imposible no entristecer hasta la médula, y allí es donde se desarrolla Ladrona de libros (The Book Thief, 2013). Con una nominación al Oscar a la mejor composición musical, elaborada por el legendario Mr. John Williams (otro detalle para no retener las lágrimas), esta tierna película protagonizada por Sophie Nélisse, Geoffrey Rush y Emily Watson, relata la infancia de Liesel, una niña a quien su madre ha dejado a merced de una nueva familia, luego de que el frío y la hambruna acabara con la vida de su otro pequeño hijo. Así es como, en plena Alemania nazi, la jovencita sobrevive a todas sus tragedias, refugiándose en algunos recuerdos, en el cariño de sus nuevos ‘parientes’ y, más que nada, en la lectura. book_thief_xlrg La etapa de adaptación de Liesel es, por supuesto, muy triste. Pero enseguida encuentra dónde y cómo verle el lado positivo a todo. Una nena que irradia fortaleza, y que es dueña de un gran corazón, cuyas raíces pertenecen al comunismo. Es por eso que, cuando su familia adoptiva decide albergar y esconder a un judío fugitivo, ella no siente otra cosa que un inacabable cariño hacia ese tal Max. El film cuenta con destacadas actuaciones, en especial las ‘infantiles’; los niños siempre sorprenden con su talento. No es necesario que aclare, el trabajo musical hermoso que se ha hecho para acompañar una historia tan cruda. Una vez más, nos sumergimos en una historia marcada por la guerra, como ya lo hemos hecho miles y miles de veces. Sin embargo, hay algo curioso en el punto de vista desde el que se aborda la trama, de principio a fin. Pero ese es un dato que no revelaré. Después de todo, decirle ‘ladrona de libros’ resulta un tanto chocante, ya que la jovencita es presa de un destino irreparable, en donde los relatos escritos son los únicos elementos que sobreviven al tiempo. Aunque bastante triste, disfruté mucho de la película. Por momentos recuerda a Hugo de Martin Scorsese y, mal que les pese, hay una regla entre los cineastas la cual dice que hay que evitar trabajar con animales y con niños. Bueno, la verdad es que lo segundo no me parece, ya que hay muchos peques que desbordan talento y que encaminan sus carreras gracias al trabajo en cámara. El cine ya lo ha demostrado; ¡qué me voy a poner yo a explicarles! WEK_TheBookThief_1108 No te vas a perder uno de los éxitos del año si no la ves, pero vale la pena repasar un poco de historia mundial europea durante 131 minutos, al ritmo de una bella enseñanza de amor y supervivencia. .