Maya, latina, más de 45, bien plantada, ha luchado toda su vida para conseguir y mantener un buen trabajo. Esta tienda de multiproductos parece ser la indicada, luego de 15 años de dedicación. Sin embargo ahora que hay una posibilidad de ascenso, la falta de formación universitaria de esta "chica" criada en Queens se va por las ramas. Ni su novio de toda la vida la puede consolar y entonces Maya se juega el todo por el todo y gracias a la intervención de su mejor amiga y especialmente de su hijo, en base a una serie de mentiras se empoderada con un curriculum brillante, antecedentes en redes sociales y todo lo que necesita para ser la consultora de una empresa relacionada con el mundo de la cosmética. Las mentiras la llevan a cambios de lugar, de personalidad, acordes a la mujer capaz de dominar un universo diferente. Tal el planteamiento de esta comedia liviana ligada al lugar de la mujer en el siglo XXI que toma la figura de la popular Jennifer López para apuntalar un producto que a pesar de cierta simpatía y atracción no puede superar la flojedad de su guion. Así la inicial simpatía por el personaje y las amigas se va perdiendo ante alguien que se transforma en base a trucos y mentiras ingenuas, un poco difíciles de creer. Atrae sin embargo como ciertas series televisivas glamorosas y un humor ochentoso en la línea de clásicos como "Secretaria Ejecutiva" y "Mujer Bonita" que llevaron a la fama a Melanie Griffith y Julia Roberts. El filme se mantiene especialmente por el carisma de la protagonista y su química con Vanesa Hudgens.
Una nueva película del perseguido director iraní Jafar Panahi, que luego de sufrir varias encarcelaciones, desde hace ocho años tiene la prohibición de filmar y salir del país. Quien nos sorprendió con "El círculo", formidable alegato a favor de la libertad de las mujeres en el cerrado ámbito iraní, nuevamente retoma el tema femenino en este filme de premiado guion en el Festival de Cannes. Tres son las mujeres que circulan por la película de Panahi. Dos actrices y una aspirante a actriz. Una de la que se habla al final y a la que no se ve, otra que conduce la historia y la motivadora de la intriga, una adolescente. La primera de las mujeres es una niña de dieciséis años que en la primera secuencia se queja porque sus padres no le permiten ser actriz y ella acaba de ganar el ingreso a la Escuela de Actuación de Teherán. En su desesperación se filma con un celular y llama a la actriz de moda por sus series de tevé para que convenza a sus padres de que den el permiso para seguir la carrera de actriz. Pero en una caverna lejana y acompañada de una soga, peligrosa compañera, cae victima de la desesperación. La segunda secuencia muestra a la actriz que fue llamada por la niña, que con remordimientos al no haberle respondido inmediatamente, recurre al director Jafar Panahi para que observe la realidad o falsedad del video que recibió. Lo que sigue será un viaje por regiones fronterizas a Irán en que el director acompaña a la actriz que intenta comprobar la realidad o ficción de la existencia de la jovencita del video. SOCIEDAD DE DESNIVELES "3 rostros" es una clásica road movie por zonas fronterizas y rurales de Irán, con recorridos a su interior poblado de gente simple y cultura detenida en el tiempo, pero que puede mantener el sentido común y la más ortodoxa prohibición a la libertad femenina. Espacios perdidos en la montaña, labriegos con un pie en la prehistoria, alabanzas a la hospitalidad son lugares y caracteres que desfilan en este viaje iniciático. Contrastan campesinos deslumbrados por la popularidad de la actriz televisiva y a la vez portadores de un pensamiento que confunde gente del espectáculo con políticos en el poder (culpan al director y la actriz por el mal funcionamiento de los servicios). Un poder que llega a zonas aisladas, de precarios recursos y que parece convertirse para ellos en el arma capaz de transformar su miseria y aliviar sus necesidades. Este original testimonio muestra el contraste entre la popularidad de la televisión y la censura al mundo del arte y el espectáculo como representantes de un oficio sin utilidad y sentido. El concepto parece extenderse a la noción de educación (el hermano de la niña que quiere ser actriz grita: "Ahora son los estudios los que pide, ¿después qué?"). Ambigüedades de una sociedad de profundos desniveles acentuados por lejanías geográficas, pluralidades lingüísticas y esquemas ideológicos discutibles. Muy bien la actriz Behnaz Jafari, la joven Marziyeh Reza y la presencia del mismo director Panahi como actor encarnándose a sí mismo.
Nuevamente aparecen en la pantalla cinematográfica los robots Transformers, esos en los que el Mal y el Bien estaban representados por los Autobots (los Buenos) y los Decepticons (los Malos, muy malos). Nacidos hace más de doce años, estos extraterrestres tienen un poder extraordinario, cambian de forma convirtiéndose en máquinas de transporte comunes: autos, camiones y aviones. En esta historia ambientada en 1987, el líder Autobot, llamado Optimus Prime (del planeta Cybertron), envía un Súper Soldado B 127 a nuestro planeta para preparar el terreno terráqueo (valga la redundancia) y preparar el campo a los Autobots que deberán defender la Tierra de los Decepticons. El problema es que cae en un campo Sector 7 de una agencia secreta del gobierno, que investiga actividad extraterrestre. Como lo creen enemigo, Jack Burns (John Cena), un capo de la zona, lo daña, pero el Soldado se transforma en un Volkswagen Beetle sesentista. Así lo encuentra en un depósito chatarrero la nueva heroína de la historia, de nombre Charlie, una linda adolescente que vuelca su amor en Bumblebee, el Volsks Beetle que se transforma una y otra vez, formándose así una suerte de unión ET-Elliot de la época de Steven Spielberg (productor ejecutivo de esta película). EFECTOS ESPECIALES Entre enfrentamientos de Decepticons, que finalmente llegan, y Autobots representados por Bumblebee, que tiene como aliada a la efervescente adolescente Charlie, la película une efectos especiales de primera línea, bromas ingenuas o alguna humorada levemente sofisticada, rompiendo la seriedad de ciertas actitudes que caracterizaban las anteriores "Transformers". Y es precisamente en ese punto en que "Bumblebee" tiene sus mayores logros, en no tomarse demasiado en serio, en burlarse de ella misma, gozar de la iconografía de los "80 y sus temas musicales. No olvidemos que Bumblebee habla por sus inserts musicales, todos de la época. Una nueva "Transformer" con bocanadas frescas, con amistades que unen especies diferentes para trabajar y ayudarse mutuamente (Charlie y Bumblebee), con reconciliaciones familiares (Charlie y su madre, a la que no perdonaba su nueva unión amorosa) y con mucha comprensión más allá de lo humano. Por supuesto que hay mucha acción, luchas interestelares en tierra, abundante juego pirotécnico, pero lo humano sobresale en todo el filme y da solidez y ternura a la película. Un hallazgo Hailee Steinfeld, la Mattie Ross de "Temple de acero", que contrataba a Jeff Bridges para vengar a su padre. En esta, el recuerdo paterno y su ausencia física la precipitan al cariño de Bumblebee y en su condición de partenaire en la fiera lucha contra los Decepticons.
Laos está en Indochina, en el Sudeste Asiático. Luego de su independencia sufrió una guerra civil finalizada en 1976 y la posterior presencia comunista a través del movimiento político conocido como Pathet Lao. La guerra civil hizo huir a muchos de sus ciudadanos, entre ellos un chico de 16 años, Vanit Ritchanaporn, que con su primo, hace más de 35 años cruzó el río Mekong para luego formar parte de los cientos de refugiados en campos de trabajo de Tailandia. Una familia en ese campo le habló de la Argentina y con ellos llegó en 1979, ayudado por Naciones Unidas. Laura Ortego, fotógrafa, y Leonel D"Agostino, guionista ("El rascacielo latino"), recogen su testimonio en este documental. Ritchanaporn, hoy asentado con su familia en Chascomús, preside la comunidad laosiana más grande de la provincia de Buenos Aires. Testimonios del inmigrante laosiano, que pasó en distintos momentos de su vida por La Pampa, Misiones, Río Negro, Pergamino, hasta llegar a Chascomús, siempre arrastrado por la búsqueda de trabajo, conviven con fragmentos de documentales de la guerra en Laos y diarios que hablan de los grupos de laosianos, vietnamitas y camboyanos que recibió nuestro país. En un presente centrado en la Fiesta del Inmigrante, donde distintas colectividades testimonian su cultura en la feria del lugar, diversas comunidades conviven y recuerdan sus raíces, pero ya con mucho de nuestra cultura. Dejan atrás años difíciles, problemas de adaptación, quejas que se recuerdan ante ciertos compromisos no cumplidos por el país que obligaron a protestas, pero siempre en un clima de convivencia en el que Vanit formó su familia. Ritchanaporn y sus "paisanos" ahora tienen su templo y un monumento en desarrollo de Buda que promete ser el más importante de América latina.
El Gran Chaco es una región geográfica del Norte Argentino, Bolivia, centro sur de Brasil y el Altiplano andino. Precisamente sobre esa región, hombres por la libertad intentan con sus precarios recursos visibilizar la situación indígena en nuestro país. La película habla de historiadores como el qom Juan Chico y Laureano Segovia, wichi, dedicados a esta parte de la historia nacional, del maestro y principal de ocho comunidades Valentín Suárez, que recorre polvorientos territorios concientizando hermanos o el mayor referente en la defensa de los derechos civiles indígenas, Félix Díaz, consejero qom de la comunidad aborigen La Primavera, que luego de la represión de 2010, lideró un acampe y huelga de hambre en la capital argentina. EL JUICIO El filme no solamente informa sobre las masacres contra indígenas, de las que nada sabemos, a través de vigorosas animaciones de Adrián Noé y Dante Ginevra, sino entrega la presencia y la palabra de sobrevivientes. Como Pedro Balquinta, hombre toba de 105 años que en condiciones de pobreza, confinado en su silla de ruedas, con pasmosa lucidez habla de la matanza indígena luego de una huelga en 1924, de la que escapó con catorce años. Como Melitón Domínguez, sobreviviente pilagá de la masacre de Rincón Bomba, Las Lomitas, Formosa, que escapó de la matanza en 1947 y fue posteriormente esclavizado en reducciones. En Rincón Bomba, 700 indígenas fueron asesinados en tierra y desde el aire, ayudados por un avión dotado de ametralladoras y también, posteriormente hubo violaciones. Sí, Balquinta y Domínguez (también denunciante en "Octubre Pilagá" de Valeria Mapelman), cuentan su verdad, esperando justicia, porque hasta hay un juicio desde en Formosa, por la masacre de Rincón Bomba que "duerme el sueño de los justos". Una película de visión obligatoria, donde Félix Díaz, referente de los Derechos Humanos, postula la necesidad de formar un Consejo de antropólogos que certifiquen genocidios indígenas desde 1860 y que sean considerados como crímenes de lesa humanidad. "Chaco", valioso filme, dedicado a Pedro Balquinta y Melitón Dominguez, sobrevivientes de masacres indígenas, ya fallecidos poco antes de finalizar la película es un valioso y ágil documental de docentes y alumnos. Ulises de la Orden ("Río Arriba", "Tierra Adentro") es docente del Enerc y filmó con sus alumnos Ignacio Ragone y Juan Fernández Gebauer ("Hijos nuestros" con Nicolás Suárez). Lo hicieron en qom, wichi, pilagá y castellano, uniéndose a la producción Untref y la Universidad Nacional del Noroeste de la Provincia de Buenos Aires.
John Callahan era un chico de Oregón que quedó discapacitado en un accidente, poco después de cumplir los 21, cuando después de una tarde de tragos volvía por la ruta en un auto que conducía su amigo. El descubrimiento de sus condiciones para el dibujo y la caricatura cambiaron su vida y la de los que lo rodeaban. Sencillo en el trazo, amargo y hasta cruel en los contenidos, su polémica obra fue censurada aunque la divulgación en periódicos lo hizo popular.La enfermedad, la muerte volcadas sin piedad podían llegar a molestar a los que lo leían. Esta película podría encuadrarse dentro de los convencionales relatos de autoconocimiento y mejora terapéutica, pero lo dirige una vanguardia hecha persona como Gus Van Sant y un notable outsider como es Joaquin Phoenix. El resultado es emocionante, la locura se apodera de un entorno tradicional que rodea a un cuadripléjico que desmonta la vida de los demás con la elaboración de sus dibujos pasionales, negros, los que representan su propia realidad. Nada es tradicional con John, ni su amiga y hada protectora (Rooney Mara, la chica de "Carol") ni su mentor en las adicciones (Jonah Hill, "El lobo de Wall Street"). Todo lo que sabemos sobre relatos de autoayuda se transforma en el "sesgo Van Sant" y su mirada irónica, extraña, con un increíble Joaquin Phoenix, la locura dirigida en silla de ruedas de este curioso representante de los que recurrieron al arte para salvarse. Relato fresco, contado nerviosamente con una óptica impensable en otro director porque para el director de "Elefante" cualquier tema puede tratarse de una manera anticonvencional, efervescente y polémica.
Algún estudioso o descreído puede lanzarse a preguntar si existió una poesía de los "90, así como alguien en algún momento agrupó a un tipo de escritores en lo que se llamó el Grupo Florida y otro, el Grupo Boedo. Es que el espíritu de una época siempre tiene sus representantes y no siempre es fácil encontrarlos, como a éstos que presenta la película, con publicaciones propias, mínimos circuitos en los que circularon y bien concretos, y materiales en la mirada del mundo. El caso es que el director busca qué pasó con ellos (y con él mismo, que integró el grupo) y recuerda también cómo se unieron, cómo se separaron o cómo fue la fundación de la revista de nombre 18 Whiskys (que duró dos números) e incluyó un raid de nueve bares, nueve vueltas de todo tipo de bebidas y la posibilidad de ganar con el más aguantador, el que no vomitaba en el intento. Con espíritu abierto y divertido, libertad en las búsqueda de los personajes y películas caseras, incluso una del director, que se llamaba "París. Dakar", elaborada cuando era estudiante en la Escuela de Cine de Avellaneda, Mario Varela inicia un viaje hacia aquellos que formaron parte de esa bohemia de Buenos Aires, que sobrevivió a pesar de todo mientras las concentraciones populares y la furia de las cacerolas interrumpían el orden público. CAMINOS DIFERENTES Un reencuentro de personajes que vivieron su juego en los "90, como todos a los veinte, y ahora -a los más de cuarenta- pueden tener emprendimientos en la Patagonia, trabajar de traductores, atender una biblioteca: esa es la gran apuesta de Varela. En el filme se puede disfrutar de la humorada fácil de chicos que gozaban la no responsabilidad mientras apostaban a escribir lo que veían criticando a viejos poetas o utilizando con su propia creatividad el contenido de sus vivencias. El gran aporte de esta producción es rescatar la solidez de sueños que empezaron en los "90, que mantuvieron de alguna manera toda la vida, y se plasmaron en páginas que aún hoy viven en antologías más o menos compradas por aficionados ("La tendencia materialista", aparecida hace no tanto tiempo). Viaje que une a viejos conocidos, ahora separados, con hijos unos, con muchos amigos otros, bohemios en Oriente otros, pero todos de alguna manera inmortales por vivir en una película que habla de un sueño de poesía solidificado en papeles que una y otra vez reaparecen de alguna plataforma que permite recordarlos.
A partir de un maldición que se prolongará en el tiempo, luego de un asesinato, comienza la historia del Silbón, una leyenda popular que involucra la figura de un ser mítico que deambula por los pueblos con una misión justiciera, precedido por un silbido de determinadas características que preanuncia la muerte. La acción del filme se ubica en la zona rural de un pueblo latinoamericano, a fines del siglo pasado, y sigue con la cámara una continuidad de crímenes que se suceden en un pueblo, en el centro de una comunidad casi medieval, donde el sometimiento ancestral de los servidores hacia los propietarios de la tierra, con su ristra de abusos, son moneda corriente. "El Silbón", reciente ganador del premio al Mejor filme iberoamericano en el Festival Buenos Aires Rojo Sangre (BARS), atrae por su cuidada transcripción de un ambiente primitivo de supersticiones, paternalismos y atropellos, y la atmósfera que se crea con un buen aprovechamiento de la naturaleza como marco de esa suerte de duende deforme, que maldito desde el nacimiento, mata sin piedad a culpables de iniquidades. Con ciertas equivalencias respecto de un mito nuestro que se extiende a Brasil y Paraguay, el Silbón recuerda la figura del Yasy-Yateré, enano silbador, ladrón de niños y jovencitas, diferente respecto de éste que nos viene de Venezuela. En contraste con la fealdad del Silbón, la presencia del Yasy-Yateré seduce pero mantiene, como el Silbón, sus acciones cuestionables. Filme naturalista con personajes planos, "El Silbón", con buen ritmo, abunda en sangre y ritmo ágil, tiene un buen manejo del sonido, atractiva fotografía y una bella canción final, sumado a un correcto grupo de actores en el que se destaca Vladimir García como personaje protagónico.
Luego de largos años, Aquaman cuenta su historia. Pariente de personajes como Superman, Batman o Mujer Maravilla, Aquaman, uno de los héroes de la Liga de la Justicia, se presenta en toda su potencia. Creado por Mort Weisingery Paul Norris en 1947, cobra una vida especial en esta película fantástica que James Wan, el popular director de "El Conjuro" maneja con creatividad entre la Tierra y el Mar. Así se vive la historia de esa mezcla de atlante y humano, hijo de una reina de Atlantis (Nicole Kidman) y su enamorado, que como buen superhéroe es reconocido con el nombre de Arthur Curry en la Tierra y Aquaman en el reino submarino. En algún momento, fiel a la doble identidad de icónicos personajes del reino de Marvel, toma conciencia de ser heredero de un reino submarino y de integrar la cualidad terrena y la marina. Mágicamente, virtudes como nadar más rápido que el sonido, respirar bajo el agua y tener un lenguaje con los seres acuáticos le serán comunes, como tener relaciones con la guerrera hija del rey Nereo, que está llamada a convertirse en la reina Mera y como él, dotada del poder de comunicación con los seres marinos. LEGION DE ENEMIGOS La historia se desarrolla en la Tierra y en el Mar, pero es en el agua donde el filme alcanza su estética verdadera y en la que el famoso y emblemático Tridente de Poseidón logra su verdadera fuerza. Entre los que amenazan con la polución de los océanos desde la tierra y los que se enfrentan contra la tierra desde el mar, se mueve el superhéroe que tendrá enemigos como su medio hermano atlante, Orm Marius (Patrick Wilson), que postula la guerra submarina contra la superficie y trata de unir los reinos submarinos para luchar contra la Tierra. El y Black Manta, cazador de tesoros marinos, experto en experimentos tecnológicos peligrosos se enfrentarán con Aquaman, hábilmente secundados por sus atlantes y la bella Mera, siguiendo al consejero del reino, Vulko (Willem Dafoe), HUMOR Y ROMANCE Desbordante en creatividad visual, en efectos especiales realmente sorprendentes, "Aquaman" supera en potencia de acción y aventuras a las sagas tradicionales de superhéroes. Incorpora abundante humor y romance con la pelirroja Mera, protagonizada por Amber Heard (la ex de Jhonny Depp) y por sobre todas las cosas, logra con el carismático Jason Momoa el ideal Aquaman. Llamativamente en la vida real, Momoa es un curioso híbrido, no de atlante y terráqueo, pero sí de padre hawaiano y madre alemana-irlandesa. Y para consolidar los parecidos, Momoa se crió entre surfistas, uno de los cuales, su tío, es el famoso acróbata acuático, Brian Keaulana. Modelo y actor, Momoa destaca por su intensidad y lo imponente de su estatura gigantesca, que contrasta con la sensibilidad emocional en la construcción del personaje, demostrativo especialmente en las escenas románticas con su compañera Mera. Una brillante aventura, entretenida y desbordante en su humor que se erige como una de las mejores historias con el sello Marvel y que fue rodada en Australia, Terranova, Sicilia y Túnez con un presupuesto de 160 millones de dólares.
"Hay que acostumbrarse al matrimonio", dirá alguna vez Colette y alguien le contesta: "Es mejor que el matrimonio se acostumbre a ti". Ella no pensaba lo mismo cuando tenía diecisiete y, criada en la campiña francesa y educada por una madre liberal, moría de amor por Henry Gauthier VIllars, habitante del centro de París, catorce años mayor y bastante atractivo. El le haría conocer las bellezas y no tanto de una ciudad cosmopolita donde él mismo reinaba con sus más de 35 "negros" y numerosas amantes. Es que Colette se había casado con alguien que vivía del oficio de escribir, pero a través de los llamados "negros", jóvenes aspirantes a escritores o medianos novelistas de pocos francos la carilla. Gauthier Villars, conocido por Willy, era un astuto mercader de palabras, que a falta de extenso vocabulario sabía muy bien qué quería leer la gente y cómo diagramar bocetos a los que incorporaba escritores desconocidos o aspirantes aventajados que escribían bajo sus lineamientos por una paga y sin firma. Vividor atractivo, dueño de olfato comercial, detectó el talento literario de su joven esposa y la alentó a escribir. Así surgió la inicial "Claudina en la escuela" y la serie de novelas que le siguieron con el éxito popular de esa protagonista joven (Claudina) con la que se identificaron jóvenes y no tan jóvenes, y durante décadas no sólo compraron sus libros sino las cremas Claudina, los jabones del mismo nombre, o lucieron la moda que de ella surgía. Los éxitos literarios eran firmados por Willy y fomentaron la destrucción de un matrimonio que ya se bifurcaba en relaciones, como las de los políticos, multilaterales. Es que Colette disfrutaba de las experiencias sexuales sin distinción de género o moralidad. Sus parejas serían desde descendientes femeninas del zar Nicolás I (Missy) hasta editores de diarios famosos, pasando por algún hijastro adolescente cuando ella bordeaba los cuarenta o aristócratas casadas que también Willy festejaba. BOHEMIA PARISIEN Wash Westmoreland, un personaje de la bohemia inglesa, director con Richard Glatzer -su pareja- de la recordada "Siempre Alice" (Joanne Moore) elige una dupla como protagonista y pinta un fresco de la "Gozosa París" de 1912 a 1920, momentos en que el teatro se atrevía a todo, en que Helena Rubinstein comenzaba a transformar a las mujeres con sus cremas y Les Ballets Russes asombraban a la ciudad con su exotismo y audacia encarnada en un tal Nijinsky, que revolucionaría la danza. Entre ellos, la guerra que estallaba y la prepotencia de una mujer que se aventuraba a demandar su derecho a firmar sus obras literarias y vivir la vida que sentía. Filme sobre la libertad, más allá de cualquier paternalismo disfrazado de protección, con elegante reconstrucción de época, donde brillan la moda y París con su bohemia intelectual. Poder disfrutar de una época en la intimidad de sus fiestas de literatura y escándalo, o de esas extrañas representaciones teatrales donde los recientes descubrimientos de la tumba de Tutankamon (1922) las poblaban de momias y sarcófagos, es una curiosidad y un placer. EL ESTALLIDO El espectador disfruta de conocer una Francia distinta, donde la Torre Eiffel era joven y el Arco de Triunfo no era vandalizado, aunque ya se percibía que las relaciones podían tener estallidos y que aquello de "París era una fiesta" podía entrar en crisis. Nunca tan bien elegida Keira Knightly con el encanto, la picardía y la reserva de esa dama atípica que fue la autora de las Claudinas y "Gigi", la primera mujer en entrar a la Academia Goncourt y que quizás por haberse confundido de época no pudo incorporar a sus tres matrimonios, un cuarto igualitario con la escultora Missy, de quien se decía era la hija ilegítima del zar Nicolas I.