Dirigido por Guillermo del Toro ("El Laberinto del Fauno"/"Hellboy") sobre una idea concebida por el guionista Travis Beacham ("Furia de Titanes"), este film de ciencia ficción ambientado en un futuro no muy lejano, trata sobre la posibilidad de una invasión extraterrestre pero con la particularidad de que los invasores no provienen del espacio exterior sino que llegan a nuestro planeta por medio de un portal interdimensional que se encuentra en las profundidades del océano Pacífico. Es por allí, donde gigantescas criaturas monstruosas, más conocidas como "Kaiju", cruzan hacia nuestro mundo destruyendo todo a su paso. Para enfrentarlas, los gobiernos del mundo aúnan esfuerzos y colaboran en la creación del "Proyecto Jaeger" que consta de la construcción de enormes robots piloteados por dos personas que conectan sus mentes y sus recuerdos por medio de un "puente neural" para controlarlos. Las luchas entre colosos parecen no tener fin y año a año llevan a la humanidad más cerca de la extinción. La defensa terrestre pierde Jaegers más rápido de lo que pueden construir nuevos y los Kaiju, con cada nuevo ataque, evolucionan. El líder de la resistencia, Stacker Pentecost (Idris Elba) no tiene más remedio que recurrir a dos héroes improbables: Raleigh Becket (Charlie Hunnam), un ex piloto retirado y a Mako Mori (Rinko Kikuchi), una tímida aprendiz de piloto, quienes unirán sus mentes y sus recuerdos más dolorosos para controlar a un aparentemente obsoleto -pero legendario- Jaeger que fuera desactivado desde los primeros ensayos del proyecto. Ambos, junto a la bestia mecanizada, se convertirán en la última esperanza de la humanidad. Entre tanta pelea y destrucción, la cuota de humor en la cinta está muy bien aportada por el Dr. Newton Geizler (Charlie Day), un fanático en el estudio de los kaiju, y su colega y rival Gottlieb (Burn Gorman), un matemático frío y calculador, quienes se disputan el tener la razón durante todo el metraje, así como las apariciones de Hannibal Chau (Ron Perlman) como el comerciante de partes de kaiju en el mercado negro y su ayudante (Santiago Segura, el protagonista de las películas de "Torrente"). En lo que respecta a lo visual, la película cuenta con increíbles escenas de acción especialmente desarrolladas para el 3D que por momentos nos recuerdan a grandes clásicos del cine de monstruos como "Godzilla" pasando por "Gigantes de Acero" (Real Steel) y con una tématica muy similar a grandes series de animación japonesas como "Mazinger Z", "Neon Genesis Evangelion" o la versión americana de "Macross", "Robotech". "Titanes del Pacífico" es sin dudas una de esas películas de acción que se disfrutan de principio a fin.
En el año del 75° aniversario del personaje que dio inicio a los superhéroes en los comics, Superman, conocido también como el "Hombre de Acero", regresa a la gran pantalla y lo hace con estándares muy altos. No sólo porque están involucrados en el proyecto Christopher Nolan y David S. Goyer (dupla que que hizo de la trilogía de "Batman, El Caballero de la Noche" un éxito de taquilla a nivel mundial por su tono adulto y oscuro) sino porque además un maestro en secuencias de acción como lo es Zack Snyder ("300", "Watchmen") se pone al frente de esta superproducción que narra su origen con una visión muy personal al respecto, basándose en la mitología creada por Jerry Siegel y Joe Shuster allá por 1938 y sumando muchos elementos que se fueron desarrollando a lo largo de su rica historia. El film comienza en Krypton, un planeta lejano, moribundo y al borde de la destrucción, durante un alzamiento militar liderado por el General Zod (Michael Shannon) y en el que un científico, Jor-El (Russel Crowe) junto su esposa Lara (Ayelet Zurer), tratan de salvar a su único hijo recién nacido de una muerte segura enviándolo a la Tierra en una pequeña nave, al mismo tiempo que Zod, derrotado, es enviado a la conocidísima "Zona Fantasma" en la que pasará una eternidad en animación suspendida junto a un reducido número de sus más fieles seguidores. Años más tarde la historia continúa en nuestro planeta, con un Clark Kent (Henry Cavill) adulto, desalineado e introspectivo que pasa sus días viajando, tratando de pasar lo más desapercibido posible, oculto pero a la vista de todos con el propósito de averiguar de dónde viene y de saber cuál es su rol en este mundo. Mientras tanto vemos -a través de flashbacks- algunos pasajes de su infancia y de cómo fue criado en la granja de Jonathan (Kevin Costner) y Martha (Diane Lane), sus padres adoptivos; y además cómo fue descubriendo sus increíbles habilidades. Gracias a esa búsqueda por conocer sus orígenes es que conoce a Lois Lane (Amy Adams), una joven e intrépida reportera del Diario "El Planeta". Pero todo comienza a complicarse cuando Zod y sus guerreros logran escapar de su cautiverio y se dirigen hacia la Tierra en busca del último hijo de Krypton, amenazando a la humanidad y poniendo en peligro al mundo entero. Nacido como kryptoniano y criado como humando Kal-El/Clark Kent es obligado a presionar sus propios límites y proteger a su planeta adoptivo. Esta película, que ya tiene confirmada una secuela que será dirigida nuevamente por Snyder y escrita por Goyer (es muy posible que sirva de puente para la "Liga de la Justicia") es un muy meritorio reinicio para la franquicia de "El Hombre de Acero" tras el fallido estreno de "Superman Regresa" en 2006. Desde el punto de vista técnico, cuenta con escenas de acción muy bien logradas. La estética de Krypton y el vestuario no pasan desapercibidos. Es increible como unos pequeños cambios al reconocidídimo traje azul y rojo, lo hacen familiar pero a su vez muy diferente a versiones anteriores. Las actuaciones del elenco son impecables, sobresaliendo Michael Shannon como el villano de turno. En lo que respecta al británico Henry Cavill, probó ser la elección perfecta para intepretar a éste nuevo Superman más terranal, lleno de dudas y frustraciones. Amy Adams le dio una vuelta de tuerca a lo que signnifica ser Lois Lane dejando de lado el papel de damisela en apuros para pasar a ser un personaje con mayor determinación. Completan el reparto Antje Traue como Faora-Ul, Harry Lennix como el General Swanwick, Richard Schiff como el Dr. Hamilton, Christopher Meloni como el Coronel Hardy y Laurence Fishburne como Perry White.
Basada en la novela de Yann Martel, este film dirigido magníficamente por Ang Lee ("El Tigre y El Dragón ", "Hulk" y "Secreto en la Motaña" por nombrar alguno de sus trabajos más reconocidos) nos cuenta la increíble vida de Piscine Militor Patel, o simplemente "Pi" (interpretado por Irrfan Khan en su adultez y por Suraj Sharma en su adolescencia), un joven que, cuando se trasladaba desde la India con toda su familia, sobrevive al hundimiento de un barco carguero sin más compañía que la de un tigre de bengala llamado Richard Parker. La historia comienza en Montreal, Canadá, cuando un escritor falto de inspiración (interpretado por Rafe Spall) va a visitarlo tras ser referido por un "tío" (un amigo muy cercano de la familia) de Pi, para que éste le relate su increíble aventura. A partir de allí, le contará al escritor cómo sus padres (interpretados por Adil Hussain y Tabu) eligieron su nombre y cómo consiguió su apodo; sobre su infancia, su búsqueda constante de Dios (a través de múltiples religiones), sus años de adolescente, su primer amor y todo el tiempo que pasaba en el zoológico que poseían su padres en Pondicherry, rodeado de tigres, cebras, orangutanes, hipopótamos y otras criaturas exóticas. Pero su relato va más allá. Cuando este jovencito debe mudarse a Canadá junto a su familia y todos los animales del zoológico en búsqueda de un futuro mejor, su fe es puesta a prueba. Una noche, mientras se encuentran cruzando el océano, una fuerte tormenta hunde el barco en el que viajaban y Pi se convierte milagrosamente en el único sobreviviente humano del naufragio. A bordo de una balsa atada a un bote salvavidas, solo y asustado, debe buscar la forma de poder coexistir con el feroz animal y, sin perder la esperanza, tratar de encontrar la forma de volver a la civilización. Con muchos matices que van desde lo tímidamente risueño hasta la más dura tragedia, mostrando el lado más salvaje y feroz de la naturaleza (en una forma bastante explícita no recomendable para niños), "Una Aventura Extraordiaria" (o "La Vida de Pi" como es su traducción literal) es una conmovedora parábola que seguramente emocionará a más de un espectador. El uso del 3D es de una calidad impecable que sin dudas mejora notablemente la experiencia visual del film. El reparto se completa con una breve aparición de Gérard Depardieu, como el malhumorado y sádico cocinero de la embarcación y de Ayush Tandon como Pi durante sus primeros años de vida.
¿Te gusta "Padre de Familia"? ¿Te gusta "American Dad"? ¿Te gusta "El Show de Cleveland"?... Si respondiste que 'si' categóricamente a todas íesas preguntas, entonces "Ted"... ¡te va a encantar! De principio a fin, esta película está realizada como si fuera un capítulo de estas series anteriormente mencionadas -especialmente "Padre de Familia" (Family Guy)- pero con personajes de carne y hueso, utilizando los mismos códigos, lenguaje, música swing y hasta es protagonizada, en mayor o menor medida, por alguno de los actores que prestan sus voces a estas producciones animadas, como lo son el mismísimo Seth MacFarlane, Mila Kunis, Patrick Warburton, Patrick Stewart o Alex Borstein por nombrar a algunos. El film, escrito (junto a Alec Sulkin y Wellesley Wild) dirigido y protagonizado por MacFarlane, trata sobre John Bennett (Mark Wahlberg), un niño solitario que -allá por la Navidad de 1985- deseó que su osito Ted (MacFarlane) cobrara vida y fuese su mejor amigo para siempre. Claro que su deseo se hizo realidad. Treinta años más tarde, John es un adulto -aunque no tanto- que convive desde hace cuatro años con su novia Lori (Kunis) y su -no tan tierno- osito de peluche adicto a las drogas, al alcohol, a las fiestas y al sexo, por lo que alguna vez fue una mágica criatura adorable que hasta tuvo su propio programa infantil de televisión, ahora es una irreverente y sarcástica pesadilla. Estos dos mejores amigos no quieren madurar, cosa que exaspera cada vez más más a Lori, que además de convivir con un osito de peluche parlante y una persona completamente inmadura, tiene que soportar las insinuaciones diarias de su isnoportable jefe, interpretado por Joel McHale (de la serie "Community"). Decisiones irresponsables por parte de John pondrán en peligro la relación con su novia y éste, deberá aprender a comportarse como adulto para poder recuperarla. Hilarante y ácida, "Ted" es una de esas comedias dirigidas a un público específico que la pasará genial.
Llegó el día; la espera terminó. La saga con la que el cineasta Christopher Nolan le dio impulso a uno de los personajes más humanos, complejos, atormentados y oscuros en la historia de los comics, llega a su fin; y lo hace de una manera espectacular, pero a la vez, con un sabor agridulce para todos los que formaron parte de esta estupenda superproducción, debido a los hechos de público conocimiento ocurridos en Denver, Colorado (USA). En esta última parte de la trilogía, han pasado ocho años desde que se vio por última vez al hombre-murciélago en acción. Habiéndose hecho responsable por la muerte de Harvey "Dos Caras" Dent (interpretado por Aaron Eckhart), el fiscal de districto que puso punto final al crimen organizado en Ciudad Gótica, Batman, buscado por la justicia, desaparece para no volver. Pero el "Caballero Oscuro" no es el único que desaparece sin dejar rastro alguno. Devastado por la muerte de Rachel Dawes (interpretada por Katie Holmes en la primera entrega y por Maggie Gyllenhaal en la segunda), Bruce Wayne (Christian Bale) se ha convertido en un hermitaño, situación que genera todo tipo de absurdas historias imaginadas por la gente de la alta sociedad de la mítica ciudad. Pronto, este estado de paz y sensación de seguridad por el que está pasando Gótica está a punto de terminar abruptamente cuando comienzan a ocurrir extraños robos llevados a cabo por una hermosísima Gatúbela (Anne Hathaway) y la llegada de un mercenario psicópata y enmascarado llamado Bane (Tom Hardy) que sacarán tanto al excéntrico millonario como a su alter ego del retiro y lo sumergirán en una violenta ola de terror y una lucha sin cuartel por el control de una ciudad sitiada. Esta producción es impecable por donde se la mire. Durante las casi tres horas de duración, la película nos transporta por diferentes matices del personaje y nos muestra a un Batman como debe ser: un ser humano sin superpoderes, pero con todos los artilugios habidos y por haber. Eso, es sin duda lo que hace grande y hasta "creible" a este personaje de ficción por sobre otros super héroes nacidos en las páginas de las historietas. La historia que desarrollaron Christopher Nolan y David S. Goyer muestran a la perfección esa humanidad y le atribuyen a cada uno de los villanos que fueron apareciendo en la saga (aunque bastante retorcidos), ese mismo tratamiento. Las comparaciones con composiciones anteriores del personaje, son cosas del pasado, pero sin lugar a dudas para Batman será un antes y un después del trabajo de Nolan. El reparto se completa con Marion Cotillard como Miranda Tate, nueva CEO de Industrias Wayne, Joseph Gordon-Levitt como John Blake y retoman sus papeles Gary Oldman como el Comisionado Gordon, Morgan Freeman como Lucious Fox y Michael Caine como Alfred.
Treinta años tuvieron que pasar para que Ridley Scott ("Alien, el octavo pasajero", "Blade Runner") dirigiese nuevamente una película de ciencia ficción; y retorna al género, nada más ni nada menos que con "Prometeo", un proyecto que está inmerso dentro del mismísimo universo "Alien". El film narra la historia de una joven pareja de arquéologos -Elizabeth Shaw (Noomi Rapace) y su novio Charlie Holloway (Logan Marshall-Green)- que descubre en el año 2089, una cueva que contiene antiguos pictogramas y lo que parece ser un mapa estelar muy similar a otros pertenecientes a antiguas civilizaciones que fueron encontrados anteriormente a lo largo y ancho del planeta. Ellos creen que la humanidad fue creada por una raza avanzada de alienígenas e interpretan al mapa como una invitación para buscar y conocer a los que ellos denominan "los ingenieros". Un viejo y moribundo Peter Weyland (Guy Pearce), presidente de la Corporación Weyland, financia la creación de una nave de investigación (cuyo nombre le da título al film) en la que pasarán los próximos dos años de su vida en animación suspendida esperando llegar a destino. Durante todo ese tiempo la tripulación es continuamente cuidada y monitoreada por un androide (interpretado por Michael Fassbender). Al llegar a destino en el año 2093, la tripulación, compuesta por Meredith Vickers (Charlize Theron), el Capitán Janek (Idris Elba), Milburn (Rafe Spall) y Fifield (Sean Harris) entre otros, despierta de su larga hibernación y poco a poco se irá dando cuenta de que el lejano planeta al que fueron por respuestas que explicarían el orígen del hombre esconde aún muchos más misterios, que nada es lo que parece y que, en cambio, deberán luchar por sobrevivir a horrores inimaginables. Esta película, que cuenta con un impecable guión escrito por Jon Spaihts (The Darkest Hour) y Damon Lindelof (Lost) -y que puede verse tanto en 3D como en versión tradicional- posée una ambientación increible, tanto en lo técnico como en lo estético y está plagada de pequeños detalles que nos indican que aunque no lo veamos, el Alien está al acecho.
Robert Downey Jr. y Jude Law regresan a la gran pantalla como el astuto (aunque medio desquiciado) detective Sherlock Holmes y su fiel e inseparable ayudante el Dr. Watson para protagonizar una nueva aventura en la que intentarán poner fin a los maléficos planes del malvado e ingenioso Profesor James Moriarty (Jared Harris). Esta segunda entrega, dirigida al igual que su antecesora por Guy Ritchie, "Sherlock Holmes: Juego de Sombras" comienza con una serie de misteriosos crímenes (aparentemente sin relación entre ellos) y unos bombardeos llevados a cabo en Estrasburgo y Viena que ponen a toda Europa, y quizás al mundo entero al borde de una crisis a gran escala como nunca se había visto hasta la fecha. Nadie logra conectar los puntos como el gran Sherlock Holmes, quien está absolutamente convencido que detrás de todo este caos se encuentra la más grande mente criminal de todos los tiempos: el mismísmo Moriarty. Decidido a truncar los planes del siniestro profesor, Holmes se embarca en un agotador viaje desde Londres, pasando por Francia, Alemania y finalmente Suiza, arrastrando consigo a Watson, quien debería estar disfrutando de su luna de miel en vez de involucrarse en esta nueva misión. Impecables actuaciones de todo el elenco, excelente musicalización de Hans Zimmer, comedia y mucha acción. Todo ésto, sumado a lo que para mí es un gran efecto narrativo, como lo es el mostrarnos en cámara lenta lo que pasa por la mente del detective para luego ver lo que efectivamente va a suceder, hacen de esta secuela una gran película para disfrutarla de principio a fin. Completan el reparto la actriz sueca Noomi Rapace ("The Girl with the Dragon Tattoo") como la gitana Simza y Stephen Fry ("V for Vendetta") como el excéntrico hermano de Sherlock. De la primera entrega regresan, con unos papeles más pequeños, Rachel McAdams como Irene Adler, Kelly Reilly como la esposa de Watson, Eddie Marsan como el inspector Lestrade y Geraldine James como la atormentada ama de llaves de Holmes.
Garry Marshall, director de la exitosa "Mujer Bonita", vuelve a repetir la fórmula ya utilizada en "Día de los Enamorados" (Valentine's Day) en esta producción en la que reúne nuevamente a un super elenco compuesto de grandes figuras, quienes protagonizan esta historia en la que todo sucede en la bella ciudad de Nueva York a tan sólo 24 horas para el "Año Nuevo". Muchos de los actores que participaron en aquella película, vuelven a juntarse para este film que cuenta con algunas nuevas incoproraciones. Este elenco multiestelar está compuesto por Halle Berry, Jessica Biel, Jon Bon Jovi, a Abigail Breslin, Chris "Ludacris" Bridges, Robert De Niro, Josh Duhamel, Zac Efron, Héctor Elizondo, Katherine Heigl, Ashton Kutcher, Seth Meyers, Lea Michele, Sarah Jessica Parker, Michelle Pfeiffer, Til Schweiger, Hilary Swank, Sofía Vergara, Sarah Paulson y algunos cameos de muchos otros famosos. En este film veremos todo lo que sucede el 31 de diciembre de 2011; desde la persona encargada de planear el descenso de la esfera luminosa de Times Square, pasando por una fiesta de fin de año de una compañía disquera hasta situaciones alegres y otras no tanto dentro de un hospital de la Gran Manzana. La película es una oda al amor, la esperanza, el perdón, las segundas oportunidades y nuevos comienzos con varias historias entrelazadas, pero que están muy lejos de cumplir con su cometido. Esa fórmula que pudo funcionar en otros momentos, aquí no tanto. Tantas figuras en pantalla provocan que cada una de las historias se conviertan en situaciones muy simples y que -por momentos- se nota que están forzadas dentro del argumento. Con respecto a las actuaciones, cada uno de ellos cumple un rol más que obvio y sin sorpresas. ¿Qué otra cosa que no fuese cantar harían Bon Jovi o la estrella de "Glee" Leah Michelle?. Ver a Sofía Vergara aquí, es prácticamente ver a su increíble personaje en la comedia "Modern Family" pero con otro nombre. Zac Efron, si bien se luce bastante con su actuación, aquí no canta como en "High School Musical"... ¡pero sí baila! Desgraciadamente, actores de la talla de Robert de Niro o Halle Berry pasan completamente inadvertidos.
En un futuro no muy lejano, científicos lograron detener genéticamente el envejecimiento a la edad de 25 años, pero para evitar la superpoblación, se les otorga un año más de vida al cumplir esa edad, por lo que el tiempo ahora ha pasado a ser una especie de moneda de intercambio con la cual la gente cobra por su trabajo y paga sus impuestos, alimentos y demás necesidades o lujos. En esa realidad, los "ricos" pueden vivir para siempre, al punto tal de convertirse en -prácticamente- inmortales, mientras que los pobres y marginados de los guetos viven el día a día con sus minutos y segundos contados tratando de conseguir lo que más les hace falta: tiempo. En un lugar en el que tener muchos años encima por vivir significa ser presa de ladrones y asesinos que desean esos años para sí mismos, esta película escrita y dirigida por Andrew Niccol ("Gattaca"), narra la historia de Will Salas (Justin Timberlake), un joven idealista de los barrios bajos que busca la manera de sobrevivir y progresar, pero a veces sacrificando su propio tiempo para ayudar a personas aún más necesitadas que él. Will, un día se ve en involucrado en medio de una disputa de bar entre Henry Hamilton (Matt Bommer), un "rico" al que le quedan 116 años por delante, y unos pandilleros comandados por Fortis (Alex Pettyfer). Ambos logran escapar de una muerte segura y pasan la noche en un viejo edificio abandonado. El protagonista, al despertar, se da cuenta que en su reloj ahora tiene 116 años por vivir. Hamilton (en un acto suicida) le ha dejado su tiempo con la condición de que no lo desperdicie. En su camino hacia una mejor vida, el personaje interpretado por Timberlake conoce a todo tipo gente con mucho tiempo en su haber, pero que no disfruta de la vida por miedo a morir estúpidamente. Es en una de las zonas más ricas en la que Will conoce a Sylvia Weis (Amanda Seyfried), una joven idealista y rebelde como él. Buscado por el homicidio de Hamilton por la fuerza policial conocida como "Los Guardianes del Tiempo", Will escapa nuevamente hacia los barrios bajos teniendo como "rehén" a Sylvia, la que pronto se dará cuenta de que nunca había vivido hasta que lo conocío. Unidos por vencer al sistema, ambos inician una carrera criminal al mejor estilo "Bonnie and Clyde" pero con los principios de "Robin Hood", robando tiempo y distribuyéndolo entre los más pobres. Cillian Murphy como el guardián del tiempo Raymond Leon, Vincent Kartheiser como Philippe Weis, Olivia Wilde como la madre de Will y Johnny Galecki como su mejor amigo completan el reparto de esta excelente película de ciencia ficción que, salvando las distancias, por momentos me hace recordar a un clásico del género como "Logan's Run" (1976) y que seguramente hará pensar a los espectadores acerca del significado de la vida y nuestro tiempo en ella.
Basada en la obra de Alejandro Dumas, las aventuras de D'Artagnan (Logan Lerman), Athos (Matthew Macfadyen), Porthos (Ray Stevenson) y Aramis (Luke Evans) son llevadas nuevamente a la pantalla grande, pero esta vez de la mano de un director de super acción como lo es Paul W. S. Anderson ("Resident Evil"). La historia comienza en Venecia, con los Tres Mosqueteros y Milady de Winter (Milla Jovovich) tratando de robar los diseños de una aeronave diseñada por DaVinci, misión que concretan con éxito hasta que su bellísima y pícara cómplice los traiciona vendiéndole los planos a un mejor postor. Tres años más tarde nos encontramos con un joven y aguerrido D'Artagnan viajando hacia Paris para enlistarse en el cuerpo de Mosqueteros, pero en el camino se mete en todo tipo de problemas. Aunque los mosqueteros ya no son lo que fueron años atrás, las vueltas de la vida llevan a D'Artagnan a unirse a los tres veteranos para evitar que el malvado Cardenal Richelieu (Christopher Waltz) se apodere de Francia y la lleve directo a la guerra contra el poderoso y antipático Duque de Buckingham (Orlando Bloom). En lo que respecta al guión, no vamos a descubrir nada nuevo, la esencia se mantiene pero con muchas libertades adicionales como los "novedosos" artilugios y armamentos que guardan la estética de aquellos años pero que son muy avanzados para la época. Aunque esta versión de "Los Tres Mosqueteros" es bastante diferente a todo lo vimos en el pasado, visualmente, es como si a "Piratas del Caribe" se la mezclara con "María Antonieta-La Reina Adolescente" y se le agregaran las típicas escenas de acción de "Resident Evil" o "Kill Bill", buenas dosis de humor y además es en 3D. Esta receta hace que este filme sea sumamente entretenido de principio a fin.