Soy gitana Siempre que te muestran República Checa, todo es hermoso, colorido, con castillos y personas hermosas. En Zaneta, el director Petr Václav decidió mostrarnos la otra cara de esta fotografía, los paisajes son grises y nebulosos, el sol no asoma y vive escondido de los personajes. Václav también recrea una historia sin exageraciones dramáticas o momentos de tensión extrema, prefiere mostrar lo cotidiano de la vida de una pareja gitana con un hijo en un país hostil y racista con ellos. Eso sí, es otro tipo de cine al que estamos acostumbrados, algo lento y en el que tal vez por un largo rato no pase nada.
Sangre en la boca Símbolo latinoamericano por la lucha de la liberación del Canal de Panamá de las manos llenas de dinero de los yankees, historico boxeador con dos manos que destrozaron varios rostros, estamos hablando del enorme Roberto “Manos de Piedra” Duran. El fin comienza de adelante hacia atrás, mostrando cómo Duran conoce a su mítico entrenador Ray Arcel y después cómo fue la vida del boxeador en su pueblo natal El Chorillo, allá en Panamá,en momentos turbios de la historia panameña, donde Estados Unidos acciona violentamente contra una revuelta estudiantil que pedía la devolución del Canal de Panamá. Una de las cosas a destacar es la banda sonora, con el enorme Rubén Blades, otro símbolo panameño presente durante la musicalización de la película. Las actuaciones son correctas, desde Edgar Ramírez y Ana de Armas (venezolano y cubana, respectivamente) logrando un acento panameño creíble, a Robert de Niro, que poca veces se equivoca.
Fantasmas en la casa Para empezar a hablar sobre El canal del demonio (The Canal) hay que empezar porque no es más que otra típica película de terror de fantasmas en una casa, los cuales intervienen en la vida familiar de los habitantes de la misma para terminar matando a alguien. Habiendo dicho eso, Ivan Kavanagh, director del film, decide usar los elementos más comunes del terror para crear un ambiente lúgubre en alguna parte de lo que parece ser Irlanda, a pesar de que nunca se termina de saber dónde es. Hubo una sola cosa que me molestó, y no se si seré yo que soy mu quisquilloso o varios lo vayan a notar, pero quiero que alguien me explique: ¿por qué el protagonista habla con acento inglés mientras que todo el mundo a su alrededor tiene un marcado acento irlandés?
A sol y sombra A quienes nos gusta el fútbol, ante la pregunta de ¿qué es el fútbol para vos?, creo que hay una sola respuesta posible: un estilo de vida. Uno lleno de pasión, lamentos, alegrías, decepciones y terror. Todos esos sentimientos se encuentran en un evento de 90 minutos, de tan solo 5400 segundos, un evento que en la primera vez que lo ves en vivo y a todo color, lo más posible es que te cambie la vida para siempre. El hijo de Dios, la película de Mariano Fernández y Gastón Girod cuenta la historia de un pueblo en el que se ha prohibido el fútbol jugado con libertad. Quienes llegan a liberar a este lugar perdido en la provincia de Buenos Aires son unos hermanos que pasaban por ahí, pero son apresados por el “sheriff” a cargo de la corrupción en el poblado. Este le hace una propuesta: o se quedan cuatro días encerrados esperando al juez o juegan un fútbol cinco contra los policías. Si ganan se pueden ir tranquilos. El largometraje está bien hecho, la historia cierra y es una gran adaptación al género del western desde los planos y la puesta en escena, la cual es impecable. El film, además de ser muy futbolero y bíblico, muestra a los argentinos como somos en la vida: apasionados, ante todo. Girod conversó con Clarín y explicó el tema de hacer un western: “Lo de western define el código cinematográfico de la película, aunque tomamos algunos nombres de la Biblia, lo importante es lo mesiánico: es decir, en un orden establecido llega un Mesías a cambiar las cosas. Y lo futbolero es porque la historia, el western, se resuelve en un partido de fútbol” También hablaron sobre si es difícil filmar un partido de fútbol: “La verdad es que no vimos muchas películas de fútbol, las referencias visuales tenían más que ver con transmisiones reales, tal vez la única película de fútbol que referenciamos es Héroes”.
Siga el baile, siga el baile Con un esquema muy parecido al de ¿Qué pasó ayer? (The Hangover, 2009), el film de Nicolás Silbert y Leandro Mark, La última fiesta, nos traslada a un sinfín de problemas que tienen tres amigos de la infancia después de un fiestón sin control alguno. No se puede decir que la película es una maravilla porque definitivamente no lo es. Está realizada simple y llanamente para poder ir un rato al cine, sentarte en tu butaca, reírte un rato y volver a la cama a dormir. No busca complicar tu mente con retoricas o una trama filosófica, busca divertirte y lo logra, los chistes funcionan y los personajes están armados para su propósito. Uno de los directores, Nicolás Silbert, comentó de qué otros films se alimentaron y qué referencias tuvieron en cuenta a la hora de hacer el guion: “ Nos alimentamos de la comedia, básicamente. En sí no es una película sobre una fiesta, no transcurre mucho tiempo ahí. Sí tiene mucha peripecia, personajes y situaciones, entonces nos pusimos a ver comedias de acción, de aventuras, a los hermanos Coen y al mismo Fincher, porque nos gustan sus encuadres y los colores de las situaciones de sus películas. A diferencia de Hangover, en donde el exceso no te lo muestran, acá sí te mostramos lo que es un poco la fiesta. Pero la otra parte divertida es todo lo que sucede con estos tres idiotas intentando resolver el problema que también es una idiotez. Tenemos muy en claro que es una premisa bastante idiota que utilizamos como base para hacer la comedia y lucirnos con los actores. No es la historia en sí lo más importante. Nosotros teníamos como premisa hacer una comedia popular que estéticamente esté muy cuidada, visualmente con mucha calidad, que tenga fotografía, color, planos, efectos de sonido, todo un laburo creativo e ideas que uno, usualmente, no relaciona a este tipo de género. La gente invierte dinero en el ticket y hay que darle un producto a la altura de las circunstancias. Queríamos poder combinar ambas cosas, un chiste con la bola en la ingle y una fotografía con encuadres y dirección de arte, un trabajo creativo que se vea”, comentó al sitio El Lado G. También habló sobre la actualidad de la comedia argentina: “La vara está alta. Somos un país de buena comedia, no solo en el cine. La gente responde muy bien en la comedia, le gusta, ha funcionado comercialmente. Además, también tenemos todo el cordón audiovisual de la UNTREF, de la internet, Instagram y de toda la gente que está generando su propio contenido audiovisual con buenos resultados y autogestión. Hay mucho talento dando vueltas. Es un buen momento para que aparezcan películas como estas. Es un síntoma de algo que merece llegar a una pantalla grande”. ACTORES: Nicolás Vázquez: a este actor argentino no lo tenemos en muchas películas y en esta, considerando que es un papel cómico, no está mal, sostiene bien el personaje y logra ser gracioso de vez en cuando. Alan Sabbagh: a Sabbagh sí lo tenemos mucho del cine, pero en este film no tiene su mejor performance, su comicidad no es la más indicada, se queda algo corto. Benjamín Amadeo: por ser el personaje más “tonto” termina siendo el personaje más gracioso, a pesar de la exageración, te llega a sacar un par de risas.
Océano de lágrimas A pesar de sus malas criticas alrededor del mundo, La luz entre los océanos merece cierto reconocimiento por varias cosas. En primer lugar podemos poner el nivel actoral que logra con ese trío estelar de estrellas en el que participan Alicia Vikander, Michael Fassbender y Rachel Weisz. En segundo lugar podríamos poner la dulce música de Alexander Desplat, el cual nunca decepciona. Y en tercer lugar la fotografía de Adam Arkapaw, con tonos azules y colores verdes y tierras que resaltan durante todos los paisajes del film. Eso sí, no es perfecta, lo lacrimógena que resulta ser esta de más. Es una hermosa historia, pero se termina haciendo tan triste que parece exagerar. Actores y Actrices: Alicia Vikander y Michael Fassbender: solo por esta vez me pareció correcto evaluar a los protagonistas como una pareja. La verdad es que son los mejores del film, hacen acordar esas parejas que supieron formar Meryl Streep y Robert Redford en África Mía o Clint Eastwood y nuevamente Meryl Streep en Los Puentes de Madison. Se supieron complementar muy bien y lograr una gran performance por parte de ambos. Rachel Weisz: la actriz de La Momia tampoco se queda atrás, su actuación sorprende luego de algunos años sin buenos papeles y ya se posiciona como una posible nominada al Oscar.
Un juego sin reglas La película de Henry Joost y Ariel Schulman es pura adrenalina, un viaje en montaña rusa de 90 minutos. Desde los actores hasta el uso de las redes sociales imitando la pantalla de una computadora combinan en un film que te deja pegado al asiento todo el tiempo. Párrafo aparte para el director de fotografía, Michael Simmonds, que con imágenes de Nueva York y el uso de luces flúor, nos traslada a una ciudad que además de nunca dormir, es totalmente psicodélica. Actores y Actrices: Emma Roberts: a partir de Scream Queens a Roberts la vemos como una joven femme fatale. En Nerve comienza como una joven tímida e introvertida para después sacar todo su poder y lograr una performance creíble y atractiva. Dave Franco: el joven hermano de James Franco sorprende con esta papel dando una grata impresión.
Un juego de ingenio dulce Woody Allen siempre sorprende y se renueva a si mismo. Con Café Society trae nuevamente esa genialidad que tanto lo caracteriza. Personajes interesantes y buen construidos, una historia de fama y amor y la comunidad Judía presente. Un clásico de Woody. La reconstrucción de los años 30 en ese Hollywood que recién empezaba a crear el cine está gratamente reconstruido, ya sé con el vestuario o la puesta en escena. La iluminación es otra cosa a destacar, sobre todo durante las escenas oscuras. Actores y Actrices: Jesse Eisenberg: yo tengo una duda con este joven, no termino de saber si es buen actor o no, al hacer casi siempre personajes parecido (típico joven e introvertido) es difícil encontrarle una performance fuera de su zona de confort. Kristen Stewart: esta joven actriz ha mejorado muchísimo a través de los años, siendo elegida para papeles más serios, su veta actoral creció y se va para arriba. Steven Carrell: otro gran cómico/ actor dramático que viene sorprendiendo en roles más serios, a los cuales parece haberle agarrado la mano.
Los busca novias Se ve que en Hollywood hace un tiempo largo que se quedaron sin ideas y por eso deciden que hacer películas repetitivas en donde se les cambia dos o tres cosas en un argumento parece una gran idea. Esto es lo que pasó con Mike y Dave: Los busca novias, otra película más de enredos familiares y situaciones sexuales que no se pueden explicar fácilmente. Si a hay que decir algo bueno de este film es que la pareja masculina protagonista puede andar bien en una comedia más elaborada, sobre todo Zac Efreon, que viene demostrando que en la comedia se la banca como cuando canta. Actores y Actrices: Zac Effron: como dije antes, Effron puede andar bien haciendo comedia, pero tiene que empezar a buscar mejores papeles como en Buenos vecinos. Adam Devine: a este actor no lo termino de comprender, por momentos es gracioso y hay otros en que exagera de más y exaspera. Aubrey Plaza: esta hermosa actriz tiene una performance normal pero sobreactuada, su cuerpo vende, su cara vende, su comicidad no está a la altura. Anna Kendrick: otra actriz que tiene que buscar mejores papeles, es una buena actriz que ha bajado su nivel actoral.
Divinidad oriental Dentro de uno mismo convergen muchísimas emociones: desde la felicidad a la tristeza y desde la maldad hasta la bondad. Extremos opuestos conviven dentro de uno mismo. Mamoru Hosoda nos trae El niño y la bestia, una película de animación japonesa que cuenta la historia de Ren, un chico huérfano, que caminando por la calle, al atravesar un callejón ingresa a un mundo donde los animales caminan en dos patas y hablan como si fuese lo más normal del mundo. Al entrar ahí, se encuentra con Kumatetsu, un oso con habilidades guerreras extraordinarias. La película tiene de todo: la típica imaginación japonesa para la animación, el honor de los japoneses y esa sabiduría profunda que suelen tener. Es difícil encontrarle algo negativo, lo único que podría decir es que no la consideraría una película para niños, porque no creo que entenderían por completo el film, pero más allá de eso, es una producción disfruta le para los jóvenes y adultos que disfruten de este tipo de cine. ¿Será el año para el cine japonés en los Oscars? Una nominación merece mínimo.