La Escuela de Scorsese. Libremente adaptada de un suceso verídico que aconteció en Estados Unidos hacia 1978, el director David O. Russell (El ganador, El lado luminoso de la vida) ofrece esta historia donde un brillante estafador llamado Irving Rosenfeld debe hacer un trabajo obligado -para zafar de su delito- junto a su socia/amante por cuenta de un agente del FBI, que está bastante pasado de rosca. Urdirán pues confabularse con un presunto sheik árabe, interesado en invertir sus petrodólares en América, y así poder atrapar en caliente a unos cuantos políticos corruptos, que se sabe nunca faltan.Pero hay un trasfondo de alto poder que incluye a la mafia, lo cual irá complicando la cosa. Podría decirse que si bien la trama no es la gran vedette de esta propuesta fílmica, si en cambio lo es y a gran escala la totalidad de las interpretaciones del filme en su conjunto, es decir con actores de segunda o tercera la historietita jamás avanzaría, con semejante elencazo suma en positivo y cumple de buena manera el producto final. Christian Bale esta fenomenal en su Irving, con barriga ganada para esta película -no es trucada-, Amy Adams confirma y re confirma que es maravillosa actriz todo terreno -y luce seductora como nunca-, Jennifer Lawrence sigue dotada de su capacidad camaleónica de meterse en la piel de sus roles de una manera contundente, Bradley Cooper es el que menos brilla, asoma como solo un buen complemento, Jeremy Renner compone un político notable con toda su cáscara posible, y en breve aparición -sin tan siquiera estar acreditado en los títulos- está un Robert de Niro excepcional que inspira miedo en su capo mafia. Una banda de sonido meritoria y muy amplia que deja oir entre otros a Santana, Duke Ellington, Donna Summer, Bee Gees, Paul Mc Cartney, Tom Jones, Elton John, Electric Light Orchestra, Jeff Lynne, David Bowie y siguen los nombres...finalmente digamos que Russell apuesta fuerte a diseñar algo que en mucho se parece -aunque tampoco llega ser copia fiel digamos- al cine de Martin Scorsese, por el tratamiento coral de personajes, climas, etc. Un filme más de actores que de guión elaborado decididamente.
El Termómetro de la felicidad Daniel Burman estrena su nueva peli, ya con los tópicos y canones usuales de la industria: cosas cotidianas, toques de humor y sobre todo: un diseño de cine comercial bien argentino con actor que es eje de atracción -El público va al cine a ver "Una de Francella", como añares lo hacia con una de Sandrini o una de Palito-, pero eso no está mal, es algo normal en el cine. Cuando su socio y amigo de años, abandona el negocio, desaparece sin dejar rastros y hasta se aleja para siempre de su esposa, Santiago (Guillermo Francella) intentará conocer el porqué, en tanto su mujer cree entender al "ausente" como lo llama. En su búsqueda llegarán a un suerte de investigador retirado que solo se dedica a saborear platos típicos de la cocina armenia (Estupendo y genial Alejandro Awada)quién les plateará el tema de "Que los hace felices..??", con algunas miradas opuestas entre la mujer -también en un punto insatisfecha- y el protagonista, irán dilucidando un panorama de conformismos y a la vez replanteos. Pero el filme no va más a allá de eso, es decir no estamos ante un bodrio, pero tampoco hay aquí una historia que sorprenda mucho, el espectador sutilmente adivinará parte del entramado final. Eso si, es superable a muchísimas comedias románticas que uno ve estrenarse durante el año y de origen extranjero. El regreso a la actuación de Inés Estévez es significativo, bienvenido, es una actriz de las buenas, y juega su rol con total soltura meritoria, en cuanto a Burman-director en el pasado pudo mostrar historias más marcadas y profundas.
El Mago de las Finanzas Historia real de Jordan Belfort, genuino trepador ambicioso, que especula y es eje de su propia codicia, por otra parte un reflejo clásico de la sociedad americana, que hace a partir de su propio sueño: el éxito financiero y la fortuna desmedida. El chico en su afán atropellador se reinventa en el negocio de la bolsa, llega a su propia agencia bursátil, y en el camino sumará desquiciadas adicciones al dinero, al sexo lujurioso y las drogas. El tema es que nunca, jamás se terminara de conformar, algo similar a la frase mundana "El que más gana, más quiere poseer". Martin Scorsese hace desde su médula narrativa un verdadero show fílmico, que si bien a veces da rasgos de desbordes o de repetición- hay algo que flota de "Buenos muchachos", de "Casino", de "El color del dinero" y hasta Di Caprio que esta soberbio, mayúsculo, parece regresar a su personaje de "El Aviador"-, la calidad del filme es inobjetable. Pese a su extensa duración -y eso que le sacaron una hora en el montaje original-, el filme atrae, entretiene, y su principal figura: Leo Di Caprio está increíble. Al actor lo rodea un elenco significativo: Jonah Hill hace el imbécil amigo eficiente estupendamente, la belleza de la australiana Margot Robbie es de no creer, Matthew McConaughey aparece al inicio brevemente pero su rol es magistral, Rob Reiner como un padre ganado por sus responsabilidades esta magnífico, Jean Dujardin el astro de "El Artista" también, en síntesis que estamos ante una propuesta donde el célebre director con el guionista de la serie de TV: "Los Soprano" (Terence Winter) le pegan bien duro a la mierdosa cultura del dinero de Estados Unidos y muy ferozmente.
El Hechizo congelante de Disney Basada en el cuento clásico de Andersen: "La reina de las nieves" pero con bastante de versión libre acorde a las épocas que vivimos, este nuevo estreno de la factoría Disney ofrece aquello que siempre suele prometer, ni más ni menos. Es decir, no es novedoso que la peli tenga el éxito esperado, ni que se multipliquen las salas en los complejos con sus distintas versiones, y esto hay que resaltarlo, es quizás una de las mejores filmes que supo aprovechar la magia del 3D sin dudas. El guión tiene todo: la sempiterna lucha entre el bien y el mal, el marco decoroso de cuento clásico, los personajes secundarios que a veces cobran toda la importancia del protagonismo y que suelen ser divertidos, cómicos y tiernos, básicamente pensados en apuntar a los espectadores más pequeños como el muñeco de nieve Olaf -que todos creen al ver el afiche que se llama erroneamente "Frozen"- o los míticos "trolls". Esta aventura de las dos hermanas que necesitan ayudarse entre si son el eje de todo y el resto son la galería acompañante ya contada más arriba, y si hay alguna sorpresa...?? Si y aquí esta lo bueno, hay una vuelta de tuerca significativa, donde antes en cualquier filme disneyniano no habíamos visto, y que claro aquí no adelantaremos para no sacarle el factor sorpresa a los espectadores. Solo le juega en contra una serie de canciones y alegorías de musical-tipo Broadway que son en extremo repetitivas de otras similares en historietas de este origen animado al modo de "La sirenita" o "Mulan", pero menos efectivas. Es destacable pensar que con las altas temperaturas que estamos padeciendo por estos dias, la peli viene a ser una suerte de merecido y oasis frío para disfrutar en un sala acondicionada al caso.
El Sueño de Walter Mitty Ben Stiller se redime con su carrera, protagoniza y dirige un filme tan surrealista como atractivo, de humor inteligente absurdo como notable, y lo hace con una impresionante capacidad productiva, hay que decir que la peli trae los mejores títulos de inicio que se han visto en los últimos 10 años de cine. En 1947 hubo una primera versión con Danny Kaye de protagonista que en Argentina se llamó "Delirios de grandeza", al no haberla visto nunca no podemos decir cuanto de aquella toma, lo más seguro es muy muy poco, en esta versión Stiller juega a un personaje delirante tan lleno de sueños como de increíbles visiones fantasiosas, que lo llevan a viajar por situaciones mágicas, misteriosas, humanas a la vez, y aquí habrá cierta concomitancia con aquella historieta argentina: "Las puertitas del Sr. López", que también se llevo al cine alguna vez. Mitty puede que lleve una existencia aburrida, rutinaria como tanta otra gente, pero no ha perdido su capacidad soñadora, desea tener un romance si es factible con su bella compañera de trabajo (la estupenda Kristen Wiig) y hasta enfrentar peligros poco frecuentes, a un punto la vida misma le permitirá esa chance inusitada de poder vivirlo en sitios maravillosos poco vistos en el cine como Groenlandia e Islandia. Quizás la mejor obra de Stiller como realizador, con una significativa bocanada de originalidad y un humor pródigo -hay una parodia a "El curioso caso de Benjamín Button" imperdible realmente. No falta romanticismo, ni cierta emotividad, no es poco en un cine actual tan lleno de carencias e ideas.
Veteranos de Oficio Reunir en una misma producción a veteranos actores de larga y consagrada trayectoria siempre suele ser un desafío, aunque sabemos que termina no siendo más que un divertimento simpático, hecho a la ligera, sin demasiado vuelo argumental y que se deja ver, apenas eso. Sin desagradarnos, iremos adivinando como llegarán las situaciones típicas, rutinarias del genero comedia. Historia de un grupo de amigos desde su juventud que vuelven a reunirse en la actualidad para hacerle la despedida de soltero al más "cool" y canchero de todos (Michael Douglas), y obvio el sitio elegido será la luminosa y eterna "Las Vegas". Esta banda casi de geriátrico está conformada también por el más jovato Morgan Freeman y su personaje lleno de achaques, por un renegado y amargado Robert de Niro y el más divertido y que prácticamente se afana la peli: Kevin Kline y que en verdad es mucho más joven que el resto. Con muchos gags, y bastante humor se irá hilvanando una idea argumental nimia, intrascendente, casi invisible, y que sobre el final -algo usual en la comedia norteamericana- deriva casi todo para el lado de lo conservador y lo políticamente correcto -el ejemplo más claro es el del personaje de Kline que desea todo el tiempo tener sexo con alguna chica y que cuando está a punto de lograrlo... reflexionará si esta o no bien eso-, es decir todo está servido como para que el publico la goce y la pase bien en lo que dura la propuesta. Nada más ni nada menos...
El Mandato familiar A la hora de rotular filmes a esta la podríamos clasificar entre varios subgéneros: "splatter", gore, canibalismo, horror, etc pero si hay uno que le venga de perillas es el de "Drama humano", intensa manera de desarrollar una historia que tuvo el director Jim Mickle, alrededor de una familia cuyo pilar es un padre que ha quedado viudo, con dos hijas adolescentes y uno menor. Titulado originalmente "We Are What We Are" es una remake de un film mexicano del 2010 llamado "Somos lo que Hay", y cuenta como este pequeño clan practica tradiciones históricas referidas a macabro ritual alimenticio en lo que llaman "El día de los corderos", y con el tema "corderos" no podemos olvidar que el filme en su seriedad, en su construcción, se acerca mucho a aquél ícono: "El silencio de los Inocentes (1991, Jonathan Demme) donde Hannibal Lecter hacia su práctica comparativa. Aquí en estructura, se irá descubriendo como esas chicas enfrentan la duda de seguir o no con el mandato heredado, tanto como algunas piezas irán encajando a forma de complejo "puzzle" con la investigación de un doctor lugareño (a cargo de Michael Parks) respecto a numerosas desapariciones de chicas del lugar. Que el espectador disfrutará de varios giros sorpresivos, de un intenso clima de misterio y suspenso, se da por hecho. Los cinéfilos a su vez se hallarán con la muy curiosa vuelta a la pantalla de una casi irreconocible Kelly McGillis (la chica de Tom Cruise en "Top Gun", la cuáquera de "Testigo en peligro o la defensora de Jodie Foster en "Acusados" ), que es aquí una vecina testigo de la tragedia próxima.
Sin Respiro Densamente oscura, rebosante de tensión y cierta asfixia, con el tema lacerante de la justicia por mano propia y la muy vigente desaparición de niños, el filme del canadiense Dennis Villeneuve es un descenso a los infiernos cotidianos, de hecho hoy en Rosario la desconfianza y sed de violencia y agresión social están desgraciadamente a la orden del día. Ante la tremenda desaparición de dos niñas que salieron a jugar, sus padres enloquecidos y aterrados por lo peor salen en su búsqueda, hay también un policía encargado de la investigación y así se darán situaciones de choque psicológico, en un laberinto de personajes enigmáticos o dudosos, cuestionamientos morales, y cierta carga de religiosidad, todos elementos con los cuales el hombre se relaciona a lo largo de su vida ya sea aburrida o cargada de tensiones. Emparentada con otra dos gran películas similares: "Desapareció una noche" (Gone Baby Gone, 2007, Ben Affleck)y "Río místico" (Mistic river, 2003, Clint Eastwood), y hasta con "Zodíaco" (Idem, 2007, David Fincher), el realizador de "Incendies" hace un trabajo prolijo, de fotografía, música y puesta en pantalla, y sobre todo un mérito mayúsculo de actores de primera línea: Hugh Jackman esta notable como ese padre confundido, sacado de eje pero decidido a cualquier cosa que justifique la aparición con vida de su hijita, Jake Gyllenhall con una perfomance magistral en su policía resuelto, Paul Dano da exacta composición de ese casi "frikie" silencioso, la magnífica y re-descubierta Melissa Leo que brilla en su demoledor personaje, Terrence Howard y Viola Davis (inolvidable actriz de "Historias cruzadas") como los padres de la otra chiquita buscada nos entregan actuaciones significativas sin duda. "La sospecha", titulada así en Argentina, pero que conserva un mejor original: "Prisioneros", ya que todos aquí lo son de alguna manera y allí reside el triunfo de este filme que muy posiblemente arrase con algunos Oscars en el 2014, y está en lo mejor del año sin dudas.
Motivos para Enamorarse El género de las comedias románticas está de vuelta pero de la mejor forma y gozando de buena salud, esta peli de la realizadora Nicole Holofcener, de las más genuinas "indie" del cine actual, por suerte le escapa a lo conocido, a los ejes sensibleros o torpemente pseudo-cómicos, nada de eso....esta hecha con inteligencia, con lo justo y necesario como para no caer en lo de siempre o en la mera repetición de esquemas. Eva es divorciada, es masajista y vital oyente de las confesiones de sus clientes sobre la camilla, Albert es un tipo divertido que trabaja en una biblioteca de la TV americana, se conocen en una fiesta y florece el romance, claro que no seria cine si alguna complicación no surgiera entre ambos como para replantearse si están acertados al estar juntos. La actriz protagonista es la neoyorquina Julia Louis-Dreyfus, de la serie "Seinfeld" de TV, él es el estupendo James Gandolfini, célebre por su habituales matones de pantalla y su épico "Tony Soprano", tambien de TV, fallecido hace unos pocos meses atrás. Y si, da tristeza descubrirlo como inmejorable comediante, y saber que con este filme era en su idea el despegar su carrera como verdadero actor todo-terreno, algo que no pudo ser ya, igual ha sido una despedida maravillosa con un personaje para atesorar por los cinéfilos. Como siempre hay otras labores actorales de primera línea de Toni Collete como la amiga de Eva, y Catherine Keener como la ex de él. Al fin y seamos realistas una comedia sin chicos bellos y exitosos sino con gente común que bordea los 50 años. Por tan solo eso es merecido su disfrute.
Cuando los negros vienen marchando Lee Daniels hizo "Preciosa"(Precious, 2009) mostrando sinsabores y dramas marcados en la comunidad de color, ahora regresa dirigiendo un más ambicioso filme que parece transportarnos en el tiempo a la miniseries: "Raíces" (Roots, 1977)y "Raíces, la nueva generación"(Roots: The Next Generations, 1979) donde se narraba la muy extensa y agotadora vida de Kunta Kinte, un esclavo africano y como continuaba la saga con su descendencia, allí no faltaban, los golpes bajos como la tortura, el ultraje, el racismo, etc, items que también están en esta película que ofrece la vida de un mayordomo, y que empieza en una plantación de algodón sureña de niño y que -a través del esfuerzo propio- culmina llevando la bandeja para varios presidentes norteamericanos en la Casablanca. Si bien la historia se supone ficcional está basada en algunas vivencias de otro sirviente, el metraje de a ratos parece un capítulo de "National Geographic", desfilan: el Ku Klux Klan, Kennedy, Martin Luther King, los Panteras Negras, Vietnan, Watergate, Nixon, los Reagan, etc. sin olvidar algunos momentos familiares -la casa del mayordomo- que sugieren un capitulo de "La familia de Bill Cosby". Uma de las productoras es Oprah Winfrey, exitosa animadora televisiva americana, y actriz ocasional, se la recuerda en "El color púrpura" (1985, Steven Spielberg), ella se reservó el rol de la esposa del protagonista, así mismo en el elenco están desde Vanessa Redgrave a Lenny Kravitz, de Mariah Carey a Jane Fonda, de John Cusack a Cuba Gooding Jr., toda una constelación estelar, el protagónico de Forrest Whitaker es acertado, pero no es ningún descubrimiento su talento actoral. El olfato cinéfilo detecta muchísimas posibilidades para la futura competencia de los Oscars, sin dudas, y está hecha prediseñada para eso.En verdad no deja de ser entretenida pero llena, muy llena de golpes bajos y propaganda del gobierno actual, y que si...adivinaron aparece en persona el presi Obama.