Hollywood by Cronenberg "Maps to the stars" es el nuevo trabajo del director canadiense David Cronenberg, famoso por películas como "La Mosca", "Scanners" y "Promesas del este". Los que están familiarizados con sus trabajos, sabrán que Cronenberg es del tipo de artista que hace films con sello propio, de autor, por fuera de los cánones habituales del cine mainstream, por lo cual no siempre es del agrado de todo tipo de público. Personalmente encuentro algunos de sus trabajos realmente perturbadores e interesantes, pero en otros creo que el ego y el personaje que ha creado de sí mismo se lo come y entrega producciones sólo como para armar revuelo sin tanta sustancia puesta en la trama. En "Maps to the stars" creo que hay un poco de ambas cuestiones. Por un lado tenemos un mundo hipnótico, el Hollywood en su intimidad desconocida por casi todos los mortales salvo por los que forman parte de ella, a través del cual nos muestran que no todo lo que brilla es oro y que ese tipo de vida acarrea algunas tentaciones difíciles de sortear y algunas prácticas dignas de ser analizadas por el mismísimo Freud. Por otro lado el director le imprime algunos caprichos propios varios como por ejemplo su forma de ver el sexo, la ambición, las relaciones familiares y los desequilibrios psicológicos. En "Maps to the stars" hay incesto, hay una mirada exagerada de la industria fílmica y el ego de las estrellas de Hollywood. Todos sabemos que a ese nivel hay mucha excentricidad, pero en este trabajo de Cronenberg todo está llevado al absurdo, extremando la superficialidad de los protagonistas y mirando todo con mucho cinismo. Algunos dicen que esto es comedia, humor negro desde el enfoque del artista, pero no estoy tan seguro de que haya querido ser muy gracioso que digamos. Si nos centramos en la crudeza de su mirada, el film es efectivo porque expone las miserias de esas personas que desde afuera parecen tenerlo todo, la soledad que muchas veces trae el éxito y el dinero sin límites y las consecuencias que suelen traer la falta de amor y la carencia de austeridad en la vida diaria. Nos hipnotiza usando como gancho la vida secreta de las estrellas del entretenimiento y a la vez nos introduce en temáticas con las que nos podemos sentir identificados como la complejidad en las relaciones laborales y familiares. Estas cuestiones hacen que el film sea bueno, significativo y nos ofrezca entretenimiento, pero como escribí anteriormente, también aparecen algunos factores que a mi entender le bajan la calidad. El elemento incesto por ejemplo, está al vicio. No aporta más que bizarrez y de última una mirada crítica al mismo, lo cual tampoco tiene mucho sentido. La escena escatológica protagonizada por Julianne Moore tampoco aporta nada, sólo acrecentar el repudio al personaje, algo que ya se logra con otros recursos. Y así se pueden encontrar algunos otros caprichos del director. En general, diría que es una buena película, que explora un mundillo poco expuesto y adictivo aunque por momentos se vuelve demasiado exagerado en su mirada crítica. Las interpretaciones son muy buenas, sobre todo de Julianne Moore y Mia Wasikowska. No es una película para cualquier tipo de espectador, pero aún así creo que va a entretener a un público que va más allá de los seguidores incondicionales de Cronenberg y el cine "arte".
La muñeca que defraudó... "Annabelle" es el esperado spin off de la exitosa película de James Wan, "El Conjuro". La muñeca que tuvo sus 15 minutos de fama durante el metraje del film de Wan, consiguió el suficiente interés para ser producida y dirigida individualmente. Los resultados de calidad, lamentablemente no fueron los mismos. La dirección de "Annabelle" recayó sobre John R. Leonetti, director de fotografía habitual de las pelis de Wan con el que hizo algunos buenos laburos. Como director de largometrajes no tiene la misma chapa que como cinematógrafo. Algunos de sus trabajos anteriores son las fallidas "El Efecto Mariposa 2" y "Mortal Kombat: Annihilation", dos productos realmente para el olvido. Con esta nueva película no hace tanta agua como con aquellas, pero tampoco logra sacar adelante un promesa que se perfilaba como uno de los blockbusters del verano. Para empezar, la muñeca tiene un protagonismo débil, trucho. En toda la promoción se la mostró como eje central de la trama y la verdad es que eso cambia cuando uno ve el film completo. Entiendo que la muñeca de por sí sola no es la villana, sino que tiene un espíritu maligno que la posee, pero acá directamente la relegaron a un pedazo de madera con vestido que aparece cuando el demonio hace de las suyas... La que llamaba la atención en "El Conjuro" era la muñeca, no el demonio que la poseía. Así mismo, el demonio que cobra protagonismo por encima de Annabelle, tampoco es lo suficientemente interesante como para hipnotizar al espectador. En el metraje no se explica casi nada sobre su origen y personalidad, simplemente se limitan a mostrarlo como una entidad del mal, de las cuales hemos visto hasta el hartazgo en la gran pantalla. Mucho mejor hubiera sido profundizar sobre quien era el espíritu maligno y crear una conexión más fuerte entre el personaje y el público. Por último, los recursos para asustar utilizados por Leonetti no son de lo más creativos. Ruidos intensos que aparecen de la nada, voces en off susurrando, mobiliario que se abre y cierra solo... eso ya se ha visto. Los únicos momentos para resaltar son dos a mi criterio. Una es la secuencia en la que la protagonista intenta bajar en el ascensor reiteradas veces y no lo consigue, lo que realmente me generó una sensación de desesperación e impotencia; y la otra es cuando el matrimonio es ataco en su casa al principio del film. En general, no es un buen producto. No es un desastre como otros exponentes del género como "Actividad Paranormal" o "El último exorcismo 2", pero claramente no logra transmitir ni el miedo ni la conexión que sí se logró con "El Conjuro".
Denzel a pleno "El justiciero" vuelve a juntar al que ya podemos decir es una leyenda del cine, Denzel Washington ("Hombre en llamas", "Día de entrenamiento") con el director de acción pensilvano Antoine Fuqua ("Día de entrenamiento", "El Tirador") para deleitarnos con 132 minutos de una historia de muchas peleas a puño limpio y armas varias. La película es la adaptación al cine de una serie de televisión de los 80s que duró unas 4 temporadas. La misma trataba sobre un ex agente de inteligencia que se dedicaba a ayudar a gente de clase trabajadora que era damnificada por actos de corrupción. En este nuevo film de Fuqua, Denzel es ese justiciero. Particularmente recomiendo a los que no vieron la serie, no verla antes del film, ya que de esa manera la trama les resultará un poco más misteriosa y sorpresiva. Los que ya conocían la serie, no se van a sorprender más allá de la nueva carga de violencia que tiene la peli y el carisma que destila Denzel en pantalla. "The Equalizer" es todo Denzel, él es el protagonista absoluto y la verdad es que la sabe llevar como un duque. Historias sobre justicieros hemos visto muchas veces en cine, por lo cual la trama no nos ofrece algo totalmente original, pero la forma en que está producida y el picante que le mete el protagonista la convierte en un producto de entretenimiento espectacular. Todo va in crescendo, presentándonos al principio al justiciero como una persona retirada, buscando vivir en paz y que los demás puedan hacerlo también. En un bar al que va todas las noches a leer y tomarse un te que él mismo lleva, conoce a adolescente prostituta rusa (Cloë Moretz) que está en problemas. Al principio su ayuda se limita a darle consejos de vida, para que deje atrás la prostitución y siga su sueño de convertirse en cantante, pero cuando se entera de que la piba recibe una golpiza tremenda que la deja internada en el hospital, su ayuda va más allá y aparece el justiciero frío y despiadado que todos estamos esperando. ¿Quién no fantaseó con ser un paladín de la justicia áspero con habilidades de combate extraordinarias? Bueno, McCall, el personaje de Denzel, es esa fantasía que alguna vez hemos tenido. Se enfrenta a los corruptos y los pone en su lugar, primero dándole la oportunidad de tomar la decisión correcta y si no escarmientan, los limpia de la faz del planeta a puño limpio o usando armas caseras a lo MacGiver. La trama no es fabulosa, debo admitirlo, ya que si bien mantiene aspectos de la personalidad de nuestro protagonista de manera misteriosa, la resolución del conflicto narrativo es previsible y casi no presenta vueltas de tuerca. Es lo que se ve desde el principio y nos damos bastante cuenta de cómo terminará todo. En cuanto a aspectos técnicos, Fuqua hace un despliegue fabuloso de peleas, muy bien coreografiadas y tratadas con una elegancia que la pone por encima de otros exponentes del género. Un verdadero blockbuster para disfrutar sin muchos prejuicios, dejándose llevar al mundo Denzel y delirar con peleas muy imaginativas.
Gran historia se convierte en basura "The Giver" o "El dador de recuerdos" es una película basada en la famosa novela de la escritora Lois Lowry, una historia para lectores juveniles que se publicó bastante antes de "Los juegos del hambre", "Divergente" o "The Maze Runner". No he leído la novela confieso, pero por comentarios que me han llegado y otros que he leído en la web, es un muy buen libro que aborda de manera valiente temas sociales, políticos y tabúes. Para el año en que fue publicada, 1993, los temas polémicos como la eutanasia, no eran muy tratados en novelas para jóvenes lectores. Todo esto podría haber representado una ventaja total para la concepción del film y podría haberse producido de una manera que llegara para patear el tablero de las sagas juveniles en el cine, pero en lugar de esto se dejaron manipular por los cánones de lo que supuestamente debe mostrar una obra de este tipo en pantalla y nos ofrecieron una adaptación tonta y aburrida, donde las temáticas interesantes quedan totalmente desabridas y dan rienda suelta a la cursilería al mejor estilo "Crepúsculo". Es increíble como la mentalidad comercial errónea de algunas personas en la cúspide de grandes estudios cinematográficos puede llevar una buena historia al fracaso absoluto. Se pretendía que fuera la nueva Juegos del Hambre, pero en cambio han conseguido que peligre al continuidad de la saga. El presupuesto que destinaron a la producción fue de unos 25 millones de dólares, muy poco si se tiene en cuenta que su reparto incluye nombres como Jeff Bridges y Meryl Streep. Así y todo, no supieron aprovechar la oportunidad y ambos actores cumplen con sus roles pero quedan deslucidos ante un guión básico que se concentra más en las sensaciones del personaje protagonista que en la trascendencia de la crítica social que hace el relato. Poca acción, poco suspenso, poca aventura, mucho momento meloso, sobre todo entre la pareja protagonista compuesta por Brenton Thwaites ("Oculus") y Odeya Rush ("We are what we are"), cuyo carisma fue muy débil. Una película chata, con pocas pretensiones que deja la sensación de haber perdido dinero en la entrada al cine. No la recomiendo.
Melodrama judicial "El Juez" es un melodrama familiar, sí, es eso. No es un thriller, no es un drama judicial, es la historia de un padre y un hijo que se llevan pésimo pero se quieren. Dejo esto en claro porque muchas personas me comentaron que se sorprendieron, algunos para mal, con el tipo de género que presenta la peli. En cuanto a la trama, el film trata sobre Hank Palmer (Robert Downey Jr.), un abogado exitoso pero sin escrúpulos que se ve forzado a volver a su pueblo natal por la muerte de su madre. Allí se encuentra con sus familia, con la cual tiene un pésima relación por heridas del pasado que no fueron superadas. Acá comienza una historia al mejor estilo novela de Pol-Ka, en la que nos exponen a un juego de humor y drama para desbaratar la compostura y terminar llorando y riendo al mismo tiempo. Sí, tiene algunos golpes bien bajos y hay secuencias que se notan están creadas 100% para emocionar al espectador. Por este tipo de recursos utilizados, le bajo puntos a la propuesta. En el cine se debe ser muy cuidadoso de exhibir algo que emocione al espectador, ya que esto tendría que mostrarse de una forma bien natural y no forzada, donde se note justamente lo contrario de algo artificial pensado con el único fin de desarmarlo. Sino pongamos niños con enfermedades terminales y riendo en el hospital mientras se van muriendo de a uno y listo. La interacción de Downey Jr. y Duvall (el padre en la ficción) es magnífica y deberían haberse centrado en esto, no en ponerlo al último en el rol de viejito debilitado mostrando las miserias de la vejez para despertar la catarata de lágrimas. Si se fijan bien, el film es todo ellos dos, los protagonistas máximos de esta historia cuya carisma rebalsa los límites de lo habitual. Downey Jr. está fabuloso en un rol que le sienta como anillo al dedo, el tipo engreído y ácido pero de buen corazón en el fondo. Duvall hace gala de su carácter de tipo fuerte y nos muestra a la vez una faceta más frágil de su personalidad desplegando toda su experiencia. El reparto compuesto por Vera Farmiga, Billy Bob Thornton, Vincent D'Onofrio, Dax Shepard y Jeremy Strong acompaña bien al dúo dinámico. El punto más fuerte de esta propuesta está acá, en los intérpretes y sus laburos. Otra cuestión que por momentos se vuelve interesante es el juego judicial, involucrando al espectador en los procesos y dándole lugar a que se anticipe a adivinar qué rumbo va tomando la historia. En general se puede decir que "El Juez" es un buen entretenimiento, con puntos muy fuertes en lo que a interpretaciones se refiere y un tratamiento divertido de la escena judicial norteamericana. Lo que la tira abajo es el melodrama excesivo exhibido por momentos, lo que la da un aura de film televisivo de los que presenta Virginia Lago en canal 12 por la siesta. Más allá de esto último, se puede disfrutar bastante.
El anti héroe de Transylvania "Dracula Untold" fue una grata sorpresa, ya que como la mayoría de los espectadores tenía cero expectativas con respecto a otra película sobre el icónico personaje. La mayoría de los últimos trabajos que se llevaron a la gran pantalla sobre Dracula y los vampiros eran realmente deprimentes como "Dracula 3D", "Van Helsing", "La reina de los condenados" y ni hablar de la saga "Crepúsculo", por lo que estaba bastante descreído sobre otra adaptación del vampiro más famoso del mundo. ¡Ojo!, tampoco es una joya del cine, pero es muy entretenida y está bien realizada. Para empezar es atractiva la vuelta de tuerca que decidieron darle al personaje hacia monstruo/héroe, es decir, un tipo que se convirtió al lado oscuro pero por una buena razón como proteger a su familia y pueblo de una masacre segura en manos de los turcos. Para esto se va en busca del demonio que vive en la montaña y le vende su alma. Es un concepto nuevo, que no habíamos visto en la gran pantalla y está bien desarrollado. Los actores cumplen bien sus roles, Luke Evans como Dracula, Sarah Gadon como Mirena, Dominic Cooper como el villano Mehmed y Charles Dance como el vampiro supremo, pero no maravillan. Está bien, los productores no estaban pensando mandarse la nueva Bram Stoker's Dracula, pero creo que podrían haberse jugado con alguna cara más estelar, sobretodo con una historia sólida entre manos. En al apartado de los aspectos técnicos creo que en general se hizo también un muy buen trabajo aunque por momentos de abusó un poco del uso de CGI. Hay muy buenas secuencias de acción en las que su uso era necesario, pero por momentos de utiliza en otras en las que se podría haber resuelto de otra manera. El cierre de la historia es bueno y conecta con la implacable búsqueda de su amor a través del tiempo, algo que se explotó también en el film de Francis Ford Coppola, pero a la vez, ya sobre el último, da la sensación de un cierre con ganas de secuela sacada de manual, lo que siempre resulta un tanto molesto. Un entretenimiento que nos muestra un historia distinta de un personaje mítico del cine, con un buena construcción de la trama, secuencias de acción de calidad y una producción que si bien tuvo un presupuesto medio (u$s70.000.000) se las arregló para parecer mucho más cara. Recomendable para divertirse un rato con cine de acción.
Fanático religioso llega al cine Hace mucho que no veía una película tan brutamente mala como "El remanente". Realmente un insulto al cine, al género de terror y a la misma religión cristiana. No se si todos mis lectores lo saben, pero soy cristiano católico y estoy orgulloso de serlo, por lo cual me voy a permitir hacer como introducción un pequeño análisis de la propuesta cinematográfica en este sentido. Es increíble que grupos fundamentalistas cristianos (sí, lamentablemente lo son) intenten bajar línea de sus creencias a través de algo tan masivo como el cine y usando recursos tan poco inteligentes y pedagógicos. Aún así esto no es lo peor, sino que lo más negativo de todo esto es que por el contrario de lograr acercar personas al cristianismo, las alejan aún más metiéndoles ideas de un Dios opresivo y castigador, visión superada hace décadas. Transmitir un mensaje de la religión cristiana como una forma de vida opresiva, regida bajo reglas de comportamiento tomadas literalmente de libros como el antiguo testamento y que en vez de esparcir el amor esparcen el miedo, son simplemente burradas de personas que no conocen a fondo el mensaje del cristianismo o bien lo han leído de pasada en Internet y se les ocurrió hacer un film de terror con eso. Si lo que pretendían era interesar a alguien en el cristianismo, le pifiaron a lo grande. Jesús es amor, no miedo. Más allá de la visión religiosa nefasta de los responsables de esta película, como producto cinematográfico también es pobre y superficial. En primer lugar hablemos de la técnica de filmación elegida... El found footage o cámara en mano ya pasó muchachos. Nos saturaron durante unos 7 años con esta técnica y el espectador ya está podrido. Dejó de ser novedad hace por lo menos 2 años. En segundo lugar, entiendo lo del presupuesto bajo, pero podrían haber hecho un casting mejor o haber dirigido con más detalle a los intérpretes. Ninguno convence en su rol y todo es muy superficial. Lo de Alexa Vega y Bryan Dechart da vergüenza ajena directamente. En tercer lugar el guión es malo y con una bajada de línea grotesca que no deja casi nada a la interpretación del espectador. Líneas como "No entiendo porque me pasa esto a mí... yo siempre fui a misa y he sido buena persona..." les puede dar una idea con lo que se van a encontrar. Diálogos estúpidos y situaciones sin sentido como confesiones de amor en medio del Apocalipsis, dan la sensación de que los productores y escritores no supieron como rellenar los espacios en los que no estaban destruyendo la imagen del cristianismo. Lo único safable es la factura técnica, que para ser un proyecto de bajo presupuesto, logra algunas secuencias que parecen más caras de lo que realmente fueron. Una verdadera vergüenza para el cine y la religión. No recomendable.
Vaivenes de la música y la vida "Begin Again" o el nombre ridículamente cursi que le pusieron acá, "¿Puede una canción de amor salvar tu vida?", es una comedia romántica, con algunos toques de drama, que con bastante frescura nos muestra la historia de Dan (Mark Ruffalo), un productor musical que está en la lona y Gretta (Keira Knightley), una joven cantante incipiente cuya carrera ha sido eclipsada por la de su novio cuya popularidad se encuentra en franco ascenso. La trama gira en torno a las vidas de estos dos protagonistas y sus relaciones interpersonales; de Dan con su familia (está separado y tiene una hija) y con su jefe/socio con quien mantiene diferencias, y por otro lado de Gretta con su ex novio Dave (Adam Levine) y su estancada carrera como artista. La casualidad o providencia consigue que ambos se conozcan en uno de los peores días de sus vidas, ella recién despechada y él recién despedido de su trabajo. Dan se encuentra con Gretta cantando en un bar y automáticamente capta el potencial que tiene como artista. A partir de esto, juntos tratarán de salir a flote y mejorar sus vidas haciendo una suerte de música callejera. El film tiene un buen ritmo y presenta también buena química entre Ruffalo y Knightley. Hay algunas escenas interesantes y bien concebidas, aunque no llega a ser un producto memorable a mi entender. Es una comedia/drama de manual con algunos toques y vueltas de tuerca que la convierten en un entretenimiento por encima del promedio. Por ejemplo la secuencia en que él va descubriendo el potencial de Gretta mientras interpreta un canción en el bar, es una de las mejores. Una de sus canciones, "Lost Stars", está nominada al Oscar 2015 y demuestra un buen laburo sobre el elemento musical que expone, que en definitiva es el core central sobre el cual gira la historia. Tiene toques dramáticos, varios, algunos de humor y otros de romance, aunque no tiene un desenlace clásico como en la mayoría de estos films. En "Begin Again" todo está mostrado con mayor naturalidad que en otros exponentes del género, permitiendo esto que el espectador se involucre más con los personajes y lo que les sucede en pantalla. Una buena película para disfrutar sobre las amarguras y alegrías que tiene el mundo de la música y la vida misma.
Adaptar con clase una novela “Gone Girl" es el nuevo gran trabajo del talentoso director David Fincher ("Pecados Capitales", "El Club de la Pelea") que está basado en la novela del mismo nombre escrita por Gillian Flynn. El libro tiene la distinción de haber sido el que destronó del puesto número 1 en ventas a "50 sombras de Grey", lo que demostró su potencial comercial y tentó a 20th Century Fox que compró sus derechos para llevarla a pantalla. Dar vida cinematográfica a una novela famosa no es tarea fácil, de hecho hay muchos intentos que fueron nefastos, pero el maestro Fincher junto con la mismísima Flynn dieron en la tecla y crearon un film que se convertirá en un clásico sin dudas. Para los que no conocen nada de la historia, les cuento que se trata de la desaparición de su hogar de una escritora llamada Amy (Rosamund Pike), que está casada con el escritor Nick (Ben Affleck) y cuya evanescencia es muy misteriosa. Cuando el marido hace la denuncia, los policías comienzan a advertir que su conducta es muy extraña y relajada para lo acontecido, lo que los lleva a profundizar su investigación y comenzar a sospechar de él. Por supuesto hay varias vueltas de tuerca que sobre las cuales no diré nada para no spoilear. El concepto de la historia es de por sí muy interesante e intrigante, por lo cual ya la película se gana algunos puntos, pero como expliqué anteriormente, lo que funciona muy bien en la lectura no siempre lo hace en la pantalla. En este caso Fincher dirige maravillosamente las interpretaciones de una Rosamund Pike ("Orgullo y Prejuicio", "Otro día para morir") que está espléndida y un Ben Affleck ("Argo", "Good Will Hunting") que cumple una vez más con las expectativas. Lo de Pike fue tan bueno que la ternaron para el Oscar como Mejor Actriz, la única nominación conseguida por la película, algo que personalmente me parece un tanto injusto. El aura sombrío y frío que se imprime al film es todo mérito del director, que logra transmitir esa relación amor-odio de los personajes con respecto a los lectores. Un rato queremos a uno y odiamos al otro y luego los sentimientos se invierten. Esto está muy bien logrado, al igual que la constante tensión y el suspenso. El metraje se extiende por 2 horas y media y por lo bien que está manejada la trama casi no se notan. Quizás se le podrían haber recortado unos 15 minutos, no más. Una película de suspenso de las buenas, que atrapa, incluye y transmite con mucha pericia la concepción original de la novela. Muy recomendable.
Con la cara lavada "Comando especial 2" llega recargado y con varias mejoras sobre la primera entrega aunque no logra posicionarse como una gran película de comedia. En primer lugar se puede resaltar la mayor producción, con secuencias de acción más trabajadas, mejores locaciones y un trabajo de edición más canchero. Ya en la primera escena en la que tratan de arrestar a unos traficantes se nota un despliegue muy bueno a nivel visual y presentan el primer gag fuerte del metraje que incluye un forcejeo con un animal salvaje (muy divertido). La química entre Channing Tatum ("Magic Mike") y Jonah Hill ("The wolf of Wall Street") sigue siendo muy buena, demostrando que ambos tienen madera de comediantes profesionales y que pueden llevar adelante un film ellos solos. En comparación con la primera entrega, es notable la mejoría de Tatum, que toma más protagonismo sobre los gags y se pone a la par de Hill. A nivel general, el humor es bueno pero por momentos se va un poco de mambo y exhibe algunos chistes del tipo "nueva comedia americana" que no suman y la hacen más inmadura, como por ejemplo disparar al aire agarrándose las bolas o el jueguito de bromance entre los dos protagonistas que torna un tanto pesado. Lo mejor es, lejos, el humor físico. En el plano cinematográfico, el ritmo es bien dinámico y los aspectos técnicos exhiben calidad, incluidos algunos juegos de edición distintos que sirven para llamar la atención del espectador. El mayor problema llega de la mano del guión, que es prácticamente lo mismo que en la primera entrega, solo que se pulieron algunas cuestiones superficiales. Leí en otra reseña que el hecho de que en un diálogo de la película se exponga de manera explícita, en forma de guiño, el hecho de que estamos por ver "más de lo mismo, como les gusta a todos" es una genialidad por su ironía, es decir, porque nos está avisando que estamos por ver el mismo combo acción/comedia que ya vimos en 2012 y por eso la vamos a pasar muy bien... No se ustedes, pero a mi me gusta ver que las franquicias evolucionen, crezcan, sean más originales y me muestren algo mejor que lo ya visto. Presentar lo mismo puede haber sido efectivo en esta secuela, pero dudo que en una tercera parte (que ya ha sido confirmada) funcione nuevamente. En conclusión, una divertida comedia de acción que sin ser original y espectacular, logra entretener habiendo mejorado algunos aspectos de la primera entrega.