Recuerdos Secretos nos presenta a un anciano, sobreviviente de un campo de concentración, un hombre con un incipiente Alzheimer que decide ir en busca de un nazi, un ex miembro de las SS que exterminó a su familia para asesinarlo. Esta gran película dramática dirigida por Atom Egoyan, recurre al género de suspenso para narrar una historia sobre la culpa, la venganza y la redención. Enorme Christopher Plummer en un papel conmovedor, como un débil e imposible vengador, su presencia en cada escena que le toca jugar es sencillamente impactante. De clima asfixiante, apelando a los silencios, el director canadiense logra una atmósfera de incomodidad que calará hondo en el espíritu de los espectadores.
Con retraso, finalmente llega a las salas del país Regreso con Gloria que presenta la historia real del guionista Dalton Trumbo y cómo su carrera casi llegó a su fin tras ser incluido en la lista negra de Hollywood acusado de comunista. Trumbo es autor de títulos emblemáticos del cine clásico como Vacaciones en Roma o Espartaco. Excelente biopic que funciona como pintura de un convulsionado y oscuro momento de la industria en la Meca del séptimo arte. Gran reconstrucción de época, apoyada en material documental que reafirma el realismo de la atrapante trama. Diálogos ágiles que en boca de un sólido elenco, funcionan tanto en niveles informativos como de entretenimiento. Helen Mirren, Diane Lane se destacan por sus composiciones pero sin dudas es Bryan Cranston el alma del filme, el actor de Breaking Bad demuestra que es un intérprete inmenso y que cualquier registro le queda bien. Apartando cierto concepto maniqueo, el filme es ideal para amantes de la historia reciente y cultores del cine de calidad.
Batman vs Superman: el origen de la justicia nos presenta al hombre de acero siendo cuestionado por sus acciones. La humanidad teme a este superhombre capaz de destruir una ciudad entera en segundos. En ese marco, Bruce Wayne, en su doble vida como Batman, ve la urgente necesidad de detener la amenaza llamada Superman. Si había alguna duda, el visionado del filme la despejará raudamente: Ben Affleck es el mejor encapotado de la época moderna. Su físico, rostro cuadrado y comportamiento psicópata, sombrío, lo convierten en un personaje de cómic viviente. El director Zack Snyder, se nutre del universo del dibujante Frank Miller para lograr una cinta oscura, violenta, entreverada, pero sin alma. Y obviamente esto no es culpa del encapotado, por lejos lo mejor del largometraje. El problema arranca con su némesis Henry Cavill en la piel del Superman menos carismático de la pantalla grande y chica. Sus parlamentos no lo ayudan, no es empático jamás y poco importa lo que ocurra con él. Se agradece la saludable inclusión de Gal Gadot como la sexy y dura Mujer Maravilla alejada de la versión catódica de los setenta pero con un aire de sofisticación acorde a los gustos de las nuevas generaciones. La cinta funciona además como una introducción a lo que será La liga de La Justicia (atentos a los guiños a otros héroes de DC). Otro de los puntos bajos es el villano, Lex Luthor, encarnado por Jesse Eisenberg quizás el actor que más desentona. Su composición demasiado histriónica, al borde del Guasón, poco tiene que ver con el registro del resto del elenco. Cada vez que aparece en escena rompe el clima. Sin el humor, la ironía y colorido de sus competidores de Marvel, esta película adulta carece de la puesta, climas y la integridad de la trilogía de Nolan. Se hace larga y abusa de los efectos digitales, rayos y centellas. Demasiado solemne y aburrida para ser una película de superhéroes. Un nuevo paso en falso de DC.
Este jueves santo también llega La resurrección de Cristo, una cinta narrada desde los ojos de un no creyente. Un centurión romano, Clavius, asignado por Poncio Pilatos para descubrir que ha ocurrido con el cuerpo de Jesús, desaparecido de su tumba tres días después de la crucifixión. Esta original puesta bíblica, fusiona lo mejor del cine épico con un argumento cercano a las historias de detectives. Joseph Fiennes como el soldado romano en busca de la verdad logra conmover. Su relación distante con los hechos milagrosos de los que es testigo le dan un marco de realidad a un filme respetuoso de la tradición cristiana que sin embargo no deja de lado nunca ni la intriga, ni la aventura ni, por supuesto, la emoción. Cliff Curtis, el actor en la piel del Mesías está alejado de las estampitas religiosas. Su Jesús es real, humano, cercano. Una gran elección del director Kevin Reynolds quien hace gala de su pericia a la hora de narrar una historia entretenida ideal para disfrutar en épocas de Pascuas.
En Me casé con un boludo, Valeria Bertuccelli es una actriz debutante que se enamora de su compañero de reparto, un actor "muy creído" encarnado por Adrián Suar. Tras un romance fugaz y una boda vertiginosa, la flamante esposa se da cuenta que se ha enamorado del personaje y no la persona, y que su concubino es un verdadero "boludo" Apelando a la comedia de fórmula, Juan Taratuto, enmarca esta historia romántica plagada de gags en el universo del cine dentro del cine, permitiendo esto un sin número de guiños, cameos y situaciones auto-paródicas. Está claro que la pareja protagonista tiene una química increíble. Sus diálogos y escenas en conjunto funcionan por más ridículas e irrisorias que parezcan. Juntos Vertuccelli y Suar son el Yin y el Yang del género vernáculo, y esto es aprovechado al máximo en una cinta 100% entretenida y popular. La historia sencilla funciona y Suar se luce como un gran comediante, un personaje que a pesar de sus mañas y egocentrismo, logra ser empático. No busquen los planos elaborados, ni los mensajes subliminales, ni la moraleja, ni la crítica social, el filme es un producto de entretenimiento que va directo al grano. Sin sutilezas pero con enorme respeto por el espectador. No es poca cosa.
También llega este jueves la tercera parte de Kung Fu Panda. En ella continuamos acompañando al simpático y algo ingenuo Po, un oso experto en artes marciales quien tras encontrarse con su verdadero padre viaja hasta un santuario secreto de Pandas en donde se convertirá en instructor e ídolo de los de su especie. Este nuevo capítulo mantiene la estética colorida y una dirección de arte prodigiosa. La historia se desenvuelve entre la comedia tradicional y los momentos de acción, bien graficados por los animadores. Pantallas divididas, buen manejo del 3D y cierta atmósfera entre onírica y psicodélica hacen de esta cinta animada un verdadero deleite para los sentidos. El expresivo Po sigue siendo el alma de la película, su carisma traspasa la pantalla y logra cautivar a grandes y chicos. En términos de guión quizás esta tercera entrega sea la menos elaborada, pero en materia de realización Kung Fu Panda 3 deja muy bien parado al género de animación moderno.
En Exorcismo un grupo de adolescentes en busca de emociones fuertes realizan una fiesta de sexo y drogas en un manicomio abandonado. Allí encuentran un viejo disco de vinilo. Al escucharlo al revés, tratando de descifrar mensajes subliminales y satánicos invocan a un antiguo demonio que comenzará a poseerlos uno por uno. Esta cinta de horror de bajo presupuesto nos llega de la mano del director alemán Marcus Nispel, quien con poco logra momentos truculentos. Homenaje al terror adolescente de los ochenta, con escenas de dudoso humor negro y personajes poco empáticos que van muriendo uno tras otro, se vale de los clichés del género para narrar una historia recurrente que no aporta nada nuevo al horror moderno.
La jugada maestra se desarrolla en plena guerra fría, cuando el ajedrecista prodigio de Estados Unidos, Bobby Fischer es utilizado para enfrentar al gran maestro de la disciplina en la Unión Soviética, Boris Spassky. Tobey Maguireretrata la genialidad y locura de un personaje único en esta cinta que cuenta con una gran reconstrucción de época y el clima épico de un match para el infarto. Cercana a la dramatización y estética de un telefilme, funciona como mirada incisiva al universo interior de Fischer. Para darle credibilidad a la puesta, el director Edward Zwick se vale de material de archivo real, que en el montaje total del metraje logra trasladarnos hasta la convulsionada época de tensiones entre Estados Unidos y los soviéticos, y logra poner al espectador frente al tablero de ajedrez para sentir a través de los ojos de Maguire la tensión y la obsesión por conseguir el movimiento perfecto. Un filme que sin ser un jaque mate, resulta efectivo.
A war - la otra guerra presenta a un comandante de un batallón danés en Afganistán que debe volver a su hogar tras ser acusado de crímenes de guerra. Junto a su familia deberá hacer frente a un juicio militar en el que la verdad y el compañerismo serán puestos a prueba. El director Tobias Lindholm es responsable de este conmovedor drama bélico, filmado con pulso realista, gracias a la utilización de una cámara en mano documental y una iluminación naturalista que agudiza la experiencia en el campo de batalla. Opresiva, con un buen manejo de la tensión y actuaciones creíbles, es esta, una de las mejores películas sobre la guerra en Oriente Medio, sin el impostado heroísmo de las producciones norteamericanas, impacta y conmueve.
Horas contadas narra cómo un buque petrolero queda a la deriva en medio de una tormenta. Tras partirse en dos, otro barco intentara rescatar a la tripulación varada en pleno ciclón. Una travesía marítima filmada con excelente pulso por el director Craig Gillespie, que maneja encuadres de pesadilla entre fuertes vientos, olas gigantes, lluvia constante y hasta nieve. Efectos especiales impactantes al servicio del relato dramático. Un montaje y una edición de sonido que aportan realismo a una trama agobiante que mantendrá al espectador al filo de la butaca. Chris Pine y Casey Affleck se destacan en un elenco que cumple con creces en este exponente que se desataca como lo mejor del cine catástrofe de los últimos tiempos.