Rocketman (2019) es una biopic basada en la vida del músico #eltonjohn (quien participa como productor del filme) perteneciente al género musical. El relato inicia con el protagonista transitando un pasillo desde una luz brillante (a la inversa de la creencia popular de que cuando uno está por morir ve un túnel hacia una luz), hacia una sala de terapia grupal a través de la cual mediante varios flashbacks irá recordando momentos claves de su vida. . Para enfatizar la idea de un autoconocimiento y la anagnorisis del protagonista, a través de las secuencias Elton John- interpretado de forma convincente tanto a nivel vocal y gestual por #taronegerton - se irá despojando de su exuberante vestuario hasta quedar desnudo literal y metafóricamente. . Rocketman hace de forma inteligente una síntesis de la infancia y adolescencia del cantante hasta su rápido ascenso y éxito. Como todo relato clásico la fama, eldinero, las drogas y toda clase de excesos lo volverán soberbio encegueciendolo hasta que vuelva tomar conciencia de sí en este relato ciclico, que evidencia que "somos quién somos gracias a nuestros padres y tenemos los problemas que tenemos por ellos". . En conclusión, Rocketman es entretenida, pero algo reiterativa lo cual le quita dinamismo. Si bien tiene momentos emotivos, carece de una conmoción general. actuaciones son correctas y sorprende gratamente la interpretación de Taron Egerton, aunque vemos convivir al actor y al personaje en algunos flashes y no constantemente (a diferencia de Rami Malek en Bohemian Rhapsody o Natalia Oreiro en Gilda, cuya convivencia del doble estatuto era asombrosamente constante). Finalmente, es un filme pasatista de la vida de un compositor que sin dudas merecía ser llevada a la pantalla grande pero que dudo se mantenga vigente como película a lo largo del tiempo. . Extra: su director #dexterfletcher trabajo como productor en #bohemianrhapsody
Aladdin, exotismo oriental Ha llegado uno de los remake de Disney del gran conjunto que se estrena este año Aladdín (2019), recientemente se ha estrenado Dumbo (2019) y en julio llegará El Rey León (The Lion King, 2019) y el año próximo Mulan. Recordemos que las nuevas versiones live action comenzaron con Alicia en el país de las maravillas (Alice in Wonderland, 2010) y siguieron con La Cenicienta (Cinderella, 2015), El libro de la selva (The Jungle Book, 2016) y La Bella y la Bestia (Beauty and the Beast, 2017). Pero si nos extendemos un poco más en el tiempo ya hubo previamente un trabajo de “acción real” en Disney con la versión del clásico animado 101 Dálmatas (101 Dalmatians,1996), más cercano a la propuesta actual y salvando las distancias Maléfica (Maleficent, 2014). Por último, es importante mencionar que en su contexto de producción la versión animada Aladdin (1992) fue exitosa, volviéndose uno de los filmes más recordados del periodo de “renacimiento” de los Walt Disney Studios. Aladdín inicia sorprendentemente con un barco pirata en donde uno de sus personajes narrará la historia como un cuento infantil, con un tono más familiar que en el original de 1992. Así se da paso a un gran paneo por la noche de Arabia que sitúa al espectador dentro de sus tres escenarios principales: el palacio en donde viven Jasmine y su padre el Sultán de Agrabah, las calles de la ciudad territorio del pobre Aladdin y la “Cueva de las Maravillas” con forma de cabeza de tigre donde se esconde la lámpara mágica que desea el villano Jafar, el asesor político del sultán. En esta adaptación dirigida por Guy Ritchie, especialista en películas de los géneros de acción y criminal, es notoria su impronta en las escenas de persecución mediante sus típicas cámaras rápidas, que remiten y recuerdan que la animación estaba basada en el cuento homónimo perteneciente a “Las mil y una noches”, y al film El ladrón de Bagdad (The Thief of Bagdad, 1924/1940). Su propuesta pese a las pocas expectativas que generaron los avances de la misma, logra ser digna y entretenida, y en ella se destacan principalmente las escenas apoteóticas musicales características de las animaciones entrañables de Disney. En dichas escenas musicales se enaltece el filme, sobre todo en las interpretadas por el actor y cantante Will Smith en el papel del Genio, que había sido vociferado originalmente por el carismático Robin Williams, presentando en consecuencia un gran desafío. Además, no es casual que el genio, que representa una forma de esclavitud, sea ahora interpretado por un actor negro. Aladdín mediante los colores estridentes y las formas del diseño de vestuario, y un resaltado feminismo en el estatuto de personaje de Jasmine, hacen notorios sus cambios con respecto a la versión previa. En esta ocasión el carácter rebelde de Jasmine en la película animada es potenciado constantemente, e incluso ella es menos cosificada a través de su vestuario, el cual exhibe menos su figura. Sin embargo, a pesar de ese empleo positivo de su vestimenta, uno quizás negativo es que su formalismo y su excesiva saturación del color remite al exotismo oriental del cine clásico para el cual todo oriente parece ser una misma cosa homóloga. Cuando es sabido que lo árabe y lo hindú no son lo mismo, aunque se diga desde la producción que esta decisión está vinculada a los orígenes de la madre de Jasmine, si bien se reconoce que el aspecto hindú ya estaba presente en la versión de 1992 desde la arquitectura. En consecuencia, lo hindú es enfatizado en esta ocasión, incluso desde algunos cuadros musicales que parecen escenas de una película de Bollywood. Finalmente, respecto a las madres y el pasado tanto de Aladdin como de Jasmine en este largometraje se hacen más presentes de diversas formas, mientras que en la versión original estaban ausentes. En consecuencia, hay un cambio respecto del lugar social que ocupa la mujer en el filme, también plasmado en el deseo de Jasmine de gobernar por sí misma. Las actuaciones de ambos jóvenes casi desconocidos –Mena Massoud y Naomi Scott- muestran su talento sobre todo a nivel vocal. Sin embargo, la interpretación del también poco famoso actor Marwan Kenzari resulta ineficiente y también su caracterización es poco convincente para un villano animado de la envergadura de Jafar. En conclusión, Aladdín resulta entretenida y correcta pero seguramente no sea una película que perdure a lo largo del tiempo. Al igual que Dumbo (2019), da una pequeña vuelta de tuerca al final con un mensaje más acorde a la corrección política actual, aun así, sigue siendo un clásico del amor interclasial característico del melodrama, modelo que siempre parece funcionar.
Juan José Campanella regresa a la pantalla grande con El Cuento De Las Comadrejas, la cual es un remake de otra película argentina, la entrañable Los muchachos de antes no usaban arsénico dirigida por José Martínez Suárez. Por Denise Pieniazek “No tengas envidia de los que hacen iniquidad porque como hierba serán pronto cortados” Salmos XXXVII 1y2. Así, con la cita anteriormente mencionada finalizaba la película Los muchachos de antes no usaban arsénico(1976) de uno de los cinéfilos más conocedores de nuestro país José Martínez Suárez. Martínez Suárez y Augusto Giustozzi habían escrito en conjunto el guión del filme en el cual predominaba el humor negro y el sarcasmo, y cuyo eje central era la rivalidad en la convivencia de tres hombres con una actriz de cine clásico en el ocaso de su carrera -al igual que Norma Desmond en Sunset Boulevard (1950)- “llamada Mara Ordaz en obvia referencia a Mecha Ortiz (…)”[i] quien la interpretaba. El propósito del juego verbal del nombre y las proyecciones de películas realizadas por la actriz al inicio de Los muchachos de antes no usaban arsénicodialogaba con los personajes previos y el estrellato real de Mecha Ortiz, generando un paralelo entre el personaje y una de las últimas películas de su carrera. En esta oportunidad más de cuarenta años después de su original Juan José Campanella -El Secreto de sus ojos, El hijo de la novia, Luna de Avellaneda, El mismo amor, la misma lluvia- aggiorna con inteligencia esta pieza tan original del cine nacional. En El Cuento De Las Comadrejas, ambientada principalmente en una gran casona lujosa y su jardín, conviven una diva olvidada del cine, su esposo un actor frustrado, y sus compañeros un director y guionista, estos dos últimos con una relación áspera con ella. Sin embargo, esta rispidez que era parte de su “normalidad” se verá interrumpida por la llegada de dos jóvenes codiciosos con un plan despiadado. El Cuento De Las Comadrejasposee varios cambios respecto al guión en el cual se inspiró, sin perder la picardía y el humor sarcástico, incluso se acentúa el tono de comedia. La astucia del director y su co-guionista Darren Kloomok, reside en entender que en los tiempos feministas que corren, la propuesta original con tres hombres que asesinaban a sus esposas (delito hoy denominado “femicidio”) ya no parece ser posible dentro de la ficción. Aquí la rivalidad ya no será entre hombres y mujeres, sino entre “viejos” y jóvenes, con todo lo que ello implica. En El Cuento De Las Comadrejas el personaje Mara Ordaz es interpretado de forma magnífica por Graciela Borges, pues quien más podría volver a interpretar a una diva, que a su vez había sido encarnada por una de las grandes divas del cine clásico argentino como Mecha Ortiz, sino otra estrella del cine nacional como “la Borges”. Se supone que se mantuvo el nombre “Mara Ordaz” porque el personaje en esta ocasión no es un homenaje a una diva puntual, sino a todas las divas del cine nacional. Aquello se evidencia a través de los distintos fragmentos de filmes que se proyectan y mediante el juego de nombres y posters que son un híbrido de varios íconos del cine clásico argentino. Mientras que en Los muchachos de antes no usaban arsénico los tres personajes masculinos pertenecían a un actor y marido de la protagonista femenina, un administrador y un doctor, en esta ocasión son todos personajes pertenecientes al ámbito artístico, es decir que se cambian éstos dos últimos por un incisivo director de cine (Oscar Martínez) y un guionista (Marcos Mundstock). En consecuencia, una vez más el relato enaltece el mundo cinematográfico mediante un constante homenaje al cine en sí mismo a través del metalenguaje. El personaje del marido de Mara –Pedro- no tiene grandes cambios en cuanto a lo profesional pero sí en cuanto a la psicología del personaje y es enternecedoramente interpretado por Luis Brandoni. En efecto, estas modificaciones y cambio del eje central, a una tensión constante entre la nostalgia por el pasado y un futuro demoledor, harán que cambien los estatutos de los cuatro personajes principales. En contraposición a la versión original, en la cual había una clara dicotomía entre víctimas y victimarios, aquí todos los personajes poseen tal ambigüedad que cada argumento –a excepción de los codiciosos jóvenes- parecerá pertinente. Incluso, el cambio conflicto es enfatizado por la adición del personaje juvenil masculino, mediante el cual se formará un paralelismo de dos parejas: la joven compuesta por Bárbara (nombre en homenaje a Bárbara Mujica quien interpretó antes le papel) y Francisco, la añeja integrada por Mara y Pedro, en cuyos ambos casos las mujeres serán las de carácter más fuerte. El Cuento De Las Comadrejas es un entretenido y gracioso tributo no sólo al cine clásico argentino, sino también hacia la amistad y al arte por sobre la vida. En dicho largometraje, la representación que se hace de la juventud es deshumanizada, codiciosa, superficial, acelerada y competitiva. Justamente ellos encarnarán metafóricamente las “comadrejas” que al igual que el universo animal se regirán por “la supervivencia del más apto” en un relato en donde la vejez es revalorada por su sabiduría y experiencia de vida, en contraposición a la original en donde casi al final uno de los personajes esbozaba “y mueren sin haber adquirido sabiduría”. En esta narración donde todos sus personajes son conscientes (a diferencia de la original que no todos lo sabían) que todo es una constante puesta en escena, donde todos engañan y han sido engañados, las actuaciones sublimes de estos cuatro maduros y talentosos interpretes (Borges, Brandoni, Martínez y Mundstock) es digna de aplausos constantes y el mejor homenaje a la historia del cine nacional. Mediante sus vueltas de tuerca esta nueva versión se profundiza abriendo más de una línea de acción puesto que tal como enuncia uno de sus personajes “Antes las cosas eran más simples, ahora todo es complejo”. A pesar de que el cine actual carece de originalidad y se recurre con abuso al remake, se considera que este en particular resulta más que pertinente y que sin dudas aporta una mirada nueva que merece ser vista y disfrutada por el público tanto juvenil como mayor, y una vez más Campanella nos demuestra su multifacético talento diversificado en el cine, el teatro y la televisión.
This is the end... Luego de una impaciente espera luego del final "abierto" en Avengers: Infinity War ha llegado su secuela Avengers: Endgame, el desenlace del conflicto universal planteado por el villano extraterrestre Thanos. Con esta película llega el final de la saga o al menos de una generación tal como se la conoce tan aclamada por sus múltiples fanáticos. Por Denise Pieniazek “Of our elaborate plans, the end Of everything that stands, the end No safety or surprise, the end I'll never look into your eyes again” The end, The Doors. La película Avengers: Endgame (2019), es la cuarta entrega de la saga, que a su vez vendría a ser la segunda parte de Avengers: Infinity War (2018). Repasemos brevemente, ésta es la película número veintidós dentro del Universo Cinematógrafico de Marvel (MCU), el cual comenzó en el 2008 con la primera entrega individual de Iron Man, uno de los personajes más queridos por el público. Desde el comienzo debemos destacar con honestidad que el MCU ha sido sumamente ingenioso por conectar tanto los filmes corales de Avengers como los de los superhéroes protagónicos (en sus películas individuales), en historias paralelas con puntos de cruce que a su vez respetan sus temporalidades. Este siempre ha sido un acierto de la saga, el de unir todo como un gran rompecabezas que ha sabido generar gran fanatismo en el público actual, sobre todo en los jóvenes, volviéndose así una industria cultural sobre sí misma. Avengers: Endgame inicia con un prólogo que muestra al personaje de Hawkeye, quien se había retirado de las batallas, justo en momento de conflicto con el que finalizaba Avengers: Infinity War. Luego veremos a los Avengers que han sobrevivido a esa batalla, con un salto temporal posterior que será el inicio de la acción propiamente dicha. El equipo conformado por Iron Man, Capitan América, Black Widow, Capitana Marvel, Hawkeye, Ant Man, Hulk, Thor, Nebula y el pequeño mapache Rocket, será el encargado de hacer avanzar la acción e idear un plan posible de revertir el daño causado por el villano Thanos en la entrega anterior, al obtener las seis gemas del infinito. Mediante el trillado recurso del viaje en el tiempo, predecible pero bien empleado en esta ocasión (incluso se mencionan y burlan a otras películas de la cultura popular que tratan dicha cuestión) este equipo de superhéroes se divide para viajar en el tiempo a varios puntos específicos que se conectan entre sí -sobre todo refiriendo a la primera entrega de la sagaThe Avengers, 2012- para proteger las piedras preciosas, que recordemos remiten a seis aspectos distintos de la existencia. En esta odisea con vaivenes temporales, algunos de los superhéroes estarán duplicados debido al paralelismo temporal, produciendo efectos de comicidad que distienden una trama, que es psicológicamente más profunda que en otras entregas. Ante la pérdida de varios seres queridos en la película anterior, ahora los superhéroes más que motivaciones heroicas o narcisistas poseen motivaciones sentimentales, de tal índole que algunos de ellos harán grandes sacrificios. A pesar de la extensa duración de tres horas que posee Avengers: Endgame, ésta resulta muy entretenida y dinámica, manteniendo intrigado al espectador sin volverse densa. Sin embargo, se considera que algunas cuestiones de su resolución y selección del tiempo presente del relato en su desenlace no terminan de encajar de forma armónica. Es decir, que quedan algunos pequeños cabos sueltos o detalles para el espectador más puntilloso, a pesar de ello el relato funciona y se sostiene dentro de su propia lógica. Mientras en entregas anteriores el esquema era reiterativo y poco original en su conflicto, aquí, aunque ese modelo general sigue presente, es utilizado de forma más audaz y es necesario debido al acierto de dividir este conflicto en dos filmes. En consecuencia, un elenco coral y su desenlace en apoteosis, si bien es exagerado y grandilocuente, tiene sentido dentro de su lógica descomunal de una guerra de las galaxias, además de otorgar a los expectantes fans lo que desean, compilando la esencia de varios años compuestos por tantos filmes. Si nos detenemos a analizar desde la simbología del color los posters de Avengers: Infinity War y su continuación Avengers: Endgame encontramos este desenlace descifrando sus tonalidades: mientras que en el primer afiche hay un predominio de la tonalidad cálida y rojiza, la cual simboliza el peligro, el estado de alerta, en el segundo predomina el azul, representando la armonía y la calma. Por lo tanto, Avengers: Endgame es la clausura de esta saga, pero no de este universo cinematográfico que seguramente encontrará la forma de seguir explotando esta industrial cultural masiva. Generalmente los comics aparecieron en periodos de guerra o crisis sociales, habría que preguntarse ¿por qué en este siglo las películas de superhéroes vuelven a tener semejante relevancia en el público? En conclusión, si bien no es una eclosión de originalidad Avengers: Endgame es entretenida y emotiva. Es el final de una generación de Avengers tal como los conocemos, y aunque no hay escenas extras como nos tiene acostumbrados el MCU, es posible el traspaso a una nueva generación de Avengers, no sólo más jóvenes, sino en donde otros aspectos de la sociedad actual se hacen latentes como las diferencias étnicas, raciales y de género.
Renacer en la eternidad Por Denise Pieniazek “… enviar al mundo un espíritu que, en cada una de las artes y en todas las profesiones, fuera universalmente capaz y por sí solo mostrase cuál es la perfección del arte del dibujo, en materia de línea, contorno, sombra y luz, y diese realce a las cosas de la pintura y con recto juicio obrase en escultura, e hiciese viviendas cómodas y seguras, sanas, alegres, proporcionadas y enriquecidas por los varios adornos de la arquitectura(…) para que fuera considerado por nosotros como un ser, más que terreno, celestial” Giorgio Vasari cine » nota Críticas | Publicado el 23 de abril de 2019 a las 00:16 hs. Renacer en la eternidad Michelangelo Infinito es un largometraje interesante para los amantes de las artes plásticas, pero a pesar de sus bellas composiciones visuales carece de emoción por momentos, sobre todo si el espectador no ha contemplado personalmente ninguna de sus obras. Por Denise Pieniazek “… enviar al mundo un espíritu que, en cada una de las artes y en todas las profesiones, fuera universalmente capaz y por sí solo mostrase cuál es la perfección del arte del dibujo, en materia de línea, contorno, sombra y luz, y diese realce a las cosas de la pintura y con recto juicio obrase en escultura, e hiciese viviendas cómodas y seguras, sanas, alegres, proporcionadas y enriquecidas por los varios adornos de la arquitectura(…) para que fuera considerado por nosotros como un ser, más que terreno, celestial” Giorgio Vasari La película Michelangelo Infinito (2018) es una biopic poco convencional sobre el artista renacentista Miguel Ángel (Michelangelo Buonarroti). El relato alterna entre la narración del personaje de Giorgio Vasari, quien como es sabido, además de artista fue uno de los primeros historiadores de arte e incluso se le atribuye el haber utilizado el término Renacimiento por primera vez para referirse al arte de su contexto.Entre sus escritos más celebres se encuentra Las vidas de los más excelentes pintores, escultores y arquitectos (Le vite de' più eccellenti pittori, scultori, e architettori italiani, da Cimabue insino a' tempi nostri) que data del 1550 con una versión ampliada en 1568. En este libro Vasari dedica gran parte a la vida y obra artística de Miguel Ángel, por dicha razón, él es seleccionado por los realizadores de la película como el gran enunciador del filme. En consecuencia, dicho aspecto se refuerza mediante la puesta en escena que remitiendo a la perspectiva central renacentista lo coloca en el centro del encuadre hablando directamente hacia la cámara en medio de un gran auditorio, carente de público físico -pues el espectador está en esta ocasión del otro lado de la pantalla y somos nosotros- pero provisto de elementos que remiten a los estudios tanto de la ciencia y el arte de aquel entonces. El segundo punto de vista del relato, estará representado por el personaje de Miguel Ángel, que se encuentra espacialmente en un lugar “atemporal” que puede pensarse que es metafóricamente la eternidad. Una especie de “cielo” debido al uso del color e iluminación de un blanco “espectral”, pero en este caso lo interesante es que proviene no sólo de la iluminación sino de los bloques de piedra que lo rodean, pues como se enuncia aquí Miguel Ángel tenía pasión por la materia. En consecuencia, la película se divide estructuralmente en tres partes: el espacio de narración de Vasari, un segundo espacio representado por el relato del propio artista en cuestión Miguel Ángel y un tercer espacio compuesto por flashbacks que relevan lo narrado en los otros dos espacios, es decir que recrean ciertos acontecimientos de la vida de Michelangelo. Este raconto sobre la vida de uno de los exponentes fundamentales del Renacimiento, se centra en aproximadamente quince de sus obras, entre ellas las esculturas de Baco, David, la Piedad, la Piedad Rondanini,el Moisés de la sepultura de Julio II en la basílica San Pietro in Vincoli, también en sus pinturas La Sagrada Familia (Tondo Doni) y por supuesto sus grandesfrescos de laBóveda de la Capilla Sixtina y el Juicio Final, además desus obras arquitectónicas como la Tumba de Lorenzo de Medici, La cúpulade San Pedro del Vaticano, y el dibujo de La batalla de Cascina (obra sobre cartón que se ha perdido). Con esta selección se quiere evidenciar el artista completo que fue Miguel Ángel, quien poseía un excelso manejo de diversas técnicas y lenguajes artísticos. Michelangelo Infinito es un largometraje interesante para los amantes de las artes plásticas, pero a pesar de sus bellas composiciones visuales carece de emoción por momentos, sobre todo si el espectador no ha contemplado personalmente ninguna de sus obras. Por suerte, quien escribe ha tenido el placer de contemplar personalmente algunas de ellas y por eso se es consciente de que su valor y emoción es intransferible al registro cinematográfico. Aunque, se reconoce que mediante el uso de la música se resaltan sensitivamente algunas secuencias como las referidas a las obras del Moisés y la Capilla Sixtina. Michelangelo Infinito es una ficción que mediante la fragmentación narrativa o los registros documentales de las obras artísticas intenta reconstruir la vida de uno de los exponentes principales del renacimiento, sin realizar ningún aporte novedoso sobre la obra del artista. Es decir, se mantiene el relato oficial y hegemónico de la historia del arte sin incluso profundizar sobre los análisis de las distintas obras, como sí lo hace por ejemplo el documental El Bosco. El jardín de los sueños(2016). En adición, se enaltece el mito del “artista-genio”, símbolo de la eternidad y de poseedor de inspiración divina o médium entre los dioses y la tierra, careciendo de una mirada interpretativa novedosa. Por supuesto, Miguel Ángel es un artista magnífico que ha logrado trascender la historia, quien por ende merece éste y toda clase de homenajes.
Este filme es ideal para los amantes del arte oriental en especial del manga y del anime y de la ciencia ficción. Alita: Battle Angel dirigida por Robert Rodriguez , quien ya tenía experiencia dirigiendo novelas gráficas como Sin City (2005/2014) es una digna y bien lograda versión norteamericana del manga llamado originalmente Gunnm (1991-1995). La propuesta creada por Yukito Kishiro tiene un antecedente animado (anime) realizado en 1993. En esta ocasión, la versión cinematográfica respeta la historia de Alita, una Cyborg adolescente que es rescatada y "revivida" por el Dr. Ido (Christoph Waltz), quien depositará en ella sentimientos paternales. El universo de ciencia ficción que habitan los personajes está ambientado en un futuro avanzado y distopico. Ese espacio está dividido en dos universos, uno terrenal habitado por humanos y cybors, y un universo superior suspendido a gran altura del que se conoce muy poco pero es visto como el paraíso al que varios quieren llegar, la única utopía posible en ese mundo de posguerra tras "la caída" ocurrida hace 300 años. La trama va dosificando de a poco y hábilmente la información y se torna atrapante cuando Alita a través de la memoria corporal comienza a reconstruir las piezas de un pasado olvidado y descubre que es fue entrenada como una guerrera letal, posiblemente ella y su tecnología sean últimas en su especie. A partir de allí la división clásica entre buenos y malos desatará luchas de poder y diversos intereses en una ciudad que se rige bajo "la supervivencia del más apto". El filme funciona más bien como una carta de presentación de dicho universo y su heroína abriendo la puerta a una posible próxima entrega, en le que este universo superior llamado Salem seguro tendrá más protagonismo. En conclusión, la película es muy entretenida, y a diferencia de varias películas de entretenimiento acutales nada predecible. Tanto desde sus efectos visuales como a nivel narrativo posee gran calidad, lo que seguramente se debe a la intervención tanto como co-guionista y productor de James Cameron (Avatar, Titanic, Terminator)
Una amistad interracial e interclasial Esta semana se estrena en Argentina la película Green Book: Una amistad sin fronteras la cual tiene enorme atención internacional puesto que posee cinco nominaciones a los premios Oscar, entre las cuales se encuentran Mejor Película, Mejor Guión Original y Mejor Actor Protagónico. Por Denise Pieniazek Green Book: Una amistad sin fronteras (Green Book, 2018) narra la historia de amistad entre el reconocido pianista y compositor Don Shirley, y su chofer y guardaespaldas Tony “Lip” Vallelonga en los años sesenta. Este relato está basado en una historia real la cual es contada en el filme por el mismísimo hijo de Tony, Nick Vallelonga quien posee años de carrera en la industria cinematográfica. Incluso Tony muchos años después ha actuado en El Padrino (The Godfather,1972), Buenos Muchachos (Goodfellas, 1990) y la serie televisiva Los Soprano (The Sopranos, 1999-2007), entre otras producciones. Debido a que curiosamente su vida real siempre estuvo ligada a la mafia italiana neoyorquina volviéndose en la ficción su texto-estrella. Esta cuestión de los origines laborales de Tony Vallelonga también son expuestos en el filme como guardián en clubes nocturnos y sitios cuyos dueños pertenecían a la mafia italiana, pero a diferencia de los protagonistas de los filmes de Scorsese, él se negaba a participar de cuestiones más comprometedoras ilegalmente. Salvando las grandes distancias al igual que los filmes más representativos de Scorsese Green Book expone las diferencias culturales, inmigratorias, raciales y religiosas de New York (y todo Estados Unidos) en aquellos años. En este contexto es cuando el niño prodigio negro devenido en un talentoso músico, capaz de experimentar con el género del jazz y la música clásica, contrata como chofer al (inicialmente racista) Tony Vallelonga. Debido a la necesidad económica de Tony este decide aceptar el trabajo como su chofer y “guardaespaldas” en sus giras musicales en varios estados del sur de Estados Unidos. Ese sur que como en otras historias cinematográficas representa el contraste social, en este caso entre blancos aristócratas y el músico negro que admiran, pero sólo arriba del escenario, puesto que debajo no hay integración alguna. De ahí deviene el título del largometraje, pues “Green Book” es la libreta donde se reglamenta qué hoteles del sur pueden hospedarse los negros. A partir de allí el filme expone, quizás demasiado literalmente y sin sutilezas, el contraste entre estos dos hombres de distinta “raza” y clase social. Lo interesante del relato es que los roles sociales de la época están invertidos, el negro es el acaudalado jefe mientras el blanco de origen italiano, es su empleado. En consecuencia, al igual que dos películas recientes como Amigos Intocables (Intouchables, 2011) y Roma (2018) –con la cual compite por el Premio de la Academia a Mejor Película-, la amistad entre dos personas de distintas culturas y clases sociales será el eje principal de la acción. La película en cuestión, va un paso más allá al mostrar al refinado y culto Don Shirley –interpretado por el versátil Mahershala Ali, quien nos muestra un personaje opuesto al encarnado en Moonlight (2016)- interactuar con el peculiar hombre con la “filosofía de las calles” Tony, pues el intercambio cultural y emocional entre ellos será más que interesante, e incluso por momentos cómico, debido a la credibilidad interpretativa de Viggo Mortensen en el papel de Vallelonga. Green Book es una película que no sólo narra la historia de una amistad de dos personajes de distinta etnia y clase social sino también una película que habla en profundidad sobre los prejuicios, las minorías sociales, y por sobre todo el sentir del personaje de Don Shirley quien se siente muy sólo a pesar de éxito debido a su falta de pertenencia, pues él no se siente integrado en ningún grupo social, para los negros es muy rico y refinado, y para los blancos acaudalados racistas, a pesar de su talento siempre será negro. E incluso este aspecto sobre el sentido de pertenencia y la angustia del personaje del pianista es acentuado por su orientación bisexual. En dicho sentido en todo momento Green Book, mostrará el poder y el alcance universal del arte musical capaz de unir estas diferencias sociales, al menos para quien estén dispuestos a hacerlo. Evidencia de ello es quizás la más emotiva escena del filme en que Don Shirley toca el piano en un bar local de negros. En conclusión, Green Book es un cálido relato, aunque se admite que carece de cierta originalidad, puesto que es muy esquemática y predecible en cuanto a las reglas del género, además de recurrir al recurso de las placas con datos al final, método innecesario que utilizan casi todas las películas basadas en acontecimientos reales del cine actual. Sin embargo, es una historia que sin dudas merecía ser contada en la pantalla grande y está muy bien lograda tanto a nivel actoral (ambos protagonistas están nominados a los Premios Oscar), técnico-formal como narrativo. Green Book una vez más nos enseña a no juzgar a un hombre por su apariencia o por como viste sino por su esencia.
La otra favorita Finalmente se ha estrenado en Argentina, La Favorita el último largometraje de uno de los directores más interesantes del cine actual, el griego Yorgos Lanthimos. La Favorita es uno de los estrenos más esperados puesto que cuenta con diez nominaciones a los Premios Óscar de la Academia, cuya entrega se llevará a cabo el próximo domingo 24 de febrero. Por Denise Pieniazek La Favorita (The Favourite, 2018), es la última película del director Yorgos Lanthimos y si bien en esta ocasión el guión no es de él, sin dudas posee su impronta. Al igual que en los extraordinarios filmes The Lobster (2015) y The Killing of a Sacred Deer (2017), La Favorita propone una vez más un universo diegético que sale de las normas canónicas sociales. La Favorita narra las preferencias sentimentales, las manipulaciones y el poder entre el trío de mujeres compuesto por Anne -la reina de Gran Bretaña- (Olivia Colman), su amiga más cercana la duquesa Sarah (Rachael Weisz) y su prima Abigail (Emma Stone). Si bien estas tres mujeres existieron realmente el relato se aleja del drama histórico para aportar una visión distinta de la historia oficial profundizando e ironizando sobre ciertas cuestiones, sobre todo las referentes a las preferencias sexuales y sentimentales de la reina. Seguramente, algunas cuestiones tienen licencias poéticas sobre lo que realmente sucedió y poco interesa al espectador qué es cierto y qué no. Lo interesante es la historia en sí misma y cómo ésta es contada. La Favorita gira entorno a la manipulación, la lucha de poderes (ya sean políticos o sentimentales) y la ambición. Este relato, estructuralmente dividido en ocho partes (titulados de forma nada clásica) y ambientado a comienzos del Siglo XVIII -en cuyo contexto histórico el reinado de Ana Estuardo se encontraba en guerra con Francia-, es muy perspicaz presentando una trama más que entretenida que aporta otra lectura de los hechos históricos, distanciándose de ellos mediante la parodia, la ironía, la exageración de lo sexual y lo grotesco (en el sentido de Mijaíl Bajtín). Quizás un antecedente cinematográfico con una visión de género sobre reinas históricas poco canónicas sea The Girl King (2015) sobre la reina Cristina de Suecia, aun así, es una poética totalmente distinta y carece del sarcasmo, irreverencia y originalidad que sólo Lanthimos puede expresar. Mientras otros filmes sobre reyes importantes de época eligen triángulos amorosos entre un hombre y dos mujeres -como por ejemplo La otra Bolena (The Other Boleyn Girl, 2008)-, aquí lo interesante en estos tiempos feministas que corren es la elección de tres protagonistas mujeres con mucha astucia y “don de mando”. La propuesta más interesante de La Favorita es el cambio de roles socialmente impuestos referentes al género, aquí estos mandatos canónicos son transgredidos e invertidos. Mientras los hombres coquetean y utilizan maquillaje y extravagantes peinados del barroco, las mujeres poseen una apariencia facial austera y son quienes toman las decisiones, son quienes realmente tienen el poder (incluso el personaje de Sarah viste constantemente pantalones, algo poco frecuente en la época). Es decir, que son estas tres peculiares y belicosas protagonistas quienes hacen avanzar la acción, en cierto sentido son tres “mujeres fatales”. Mientras que la reina Anne es representada como torpe, y carente de inteligencia, sus amigas y servidoras Sarah y Abigail son mujeres ambiciosas, audaces e inteligentes, sobre todo Abigail que es una “trepadora” dispuesta a todo con tal de volver al status social que tenía su familia antes de quedar en la pobreza. Sin embargo, una revelación del relato evidenciará que, aunque Anne es poco idónea para los asuntos de estado, sabe bien como manipular y hacer competir a sus afectos, incluso sabe pisotearlos, tal como evidenciará la metáfora con los conejos del final. En conclusión, mediante convincentes interpretaciones de sus tres protagonistas La Favorita, es otra pieza más que interesante de Yorgos Lanthimos, y nos deja a la ansiosa espera la vuelta a sus guiones co-escritos con Efthymis Filippou.
Calificación: 65% La película "Beautiful boy, siempre serás mi hijo" habla sobre las enfermedades de adicción, principalmente a la metanfetamina, una de las drogas más letales y más dañinas para el cerebro. Basado en los libros del periodista David Sheff (aquí interpretado estupendamente por Steve Carell) acerca de los avatares de su hijo con problemas de adicción, Nicholas (Timothée Chalamet), el filme ahonda en el vínculo padre- hijo y en lo terrible de esta enfermedad. El aporte de la película es exponer los dos puntos de vista: el del adicto y el del entorno familiar. No es sólo el adicto quien es afectado por la adicción incontrolable a las drogas sino también sus seres queridos que ya no saben cómo ayudarlo o cómo lidiar con el problema en cuestión. Una película muy dura en la que el joven a veces pide ayuda y en otras no desea recibirla, pues el único poder lo tiene él mismo para salir de la situacion. Un viaje de aprendizaje sobre todo para su padre en el que deberá poner límites y decirdir hasta dónde involucrarse por más dificil que esto sea. El tono pedagógico del filme está enfatizado porque este joven en particular es brillante y tiene un futuro académico prometedor, interrumpido por la droga, la cual es representada como destructora del mismo. Aunque por otro lado, esto evidencia que a cualquiera puede pasarle, por más feliz que parezca. El joven en cuestión sentia un vacío que llenar y su adicción tapó ese problema anímico. Esto se evidencia en lo formal a través de los flashbacks que muestran los recuerdos de la infancia y los momentos compartidos entre padre e hijo en donde probablemente ambos se preguntan dónde surgió ese vacío. A pesar de una música abrupta y obvia, pero con excelentes actuaciones y una intriga bien construida, la película explora un tema muy actual de forma muy emotiva para quienes puedan (y quieran) soportar el drama y la angustia.
EL VICE PRESIDENTE: MÁS ALLÁ DEL PODER Un filme pasable pero sobrevalorado, con una fuerte crítica al gobierno de George W. Bush (quien es ridicularizado constantemente en la película) y sobre todo a las políticas bélicas del protagonista de esta #biopic Dick Cheney y su ambición por el poder y cómo este llegó a ser ilimitado, tomando decisiones que afectaron a nivel mundial. Con un tono narrativo metadiscursivo, explícito y con una ironía crítica hacia el gobierno de Estados Unidos (similar a los documentales de Michael Moore) el director Adam McKay expone además varias reflexiones sobre el contexto político e histórico, en donde el rol de las mujeres en la política era tan acotado que la esposa de Cheney proyectará sus ambiciones en su marido, potenciandolo. Suelen decir (de forma patriarcal) que "detrás de todo gran hombre, hay una gran mujer", en este caso prefiero decir mejor al lado. También se deslizan otras cuestiones sociales como la homosexualidad de una de sus hijas y como esto repercute en la imagen política. Además, al mostrar la juventud de Cheney se muestra que no era para nada ni un estudiante modelo ni a nivel académico o de conducta, evidenciando que cualquiera con astucia puede llegar a la cima del poder, y asimismo el detrás de escena y la puesta en escena de la política vista como una gran farsa que se vuelve acción. Por último, en una reflexión final que interpela al espectador sobre todo al ciudadano norteamericano en la que Cheney dice "I did what you ask" al igual que al inicio de la película el narrador vuelve a cuestionar a los norteamericanos y su complicidad o mejor dicho su falta de compromiso, corriendo el foco sobre la persona de Cheney para pasarlo al espectador. En cosnecuencia, expone y deja el interrogante, explicitando una de las posibles causas la falta de compromiso de la gente con la política (y los gobernantes) es debido al desgastante mundo laboral posmoderno y al deseo de disfrute del tiempo de ocio, algo en definitiva, extensivo a todo el mundo.