EL PODER DEL BAILE Interesante propuesta en 3D que logra crear un relato homenaje a una personalidad de la danza moderna, acentuando justamente el relato en el baile y profundizando, minuto a minuto, una idea artística basada en la importancia de la coreografía y la mente detrás de cada una de las puestas escénicas. Una cinta hermosa visual y estéticamente y con una fuerza dramática muy emocionante. La película está dividida en cuatro representaciones de baile basadas en las obras creadas por Pina Bausch ("Le Sacre du printemps", "Café Müller", "Vollmond" y "Kontakthof"), adaptándolas del espacio teatral al abierto (ciudad y campos) e intercalando testimonios de sus protagonistas, quienes cuentan las experiencias con la mujer que los fueron marcando en sus años de trabajo juntos. El objetivo de la película es demostrar, además del gran talento de Pina en el baile, la manera con la que con movimientos corporales y con el uso de algunos objetos se puede llegar a expresar sentimientos y emociones únicas y muy intensas. Con solo ver la primera puesta coreográfica, esta cuestión queda clara y demostrada, pero mientras los minutos van pasando, se va intensificando la propuesta y se va inspeccionando por casi todas las emociones imaginables. Aquí, en las grandes puestas de escena y en algunas tomas cortas exteriores, quedan representados el amor, la desesperación, el odio, la soledad, la locura, la muerte, la alegría, la obsesión y muchas otras sensaciones que poco a poco van floreciendo entre los pasos de baile. La manera en la que se decidió mostrarle al espectador los diferentes episodios basados en los espectáculos de Pina, es muy original y está representada de tal manera que el mismo se sienta involucrado en el baile. La cámara juega con los diferentes encuadres y planos, cambiando de perspectiva y aportando diferentes puntos de vista sobre el mismo hecho. Por momentos el ojo del público está situado en las butacas del teatro, otras veces persigue a los bailarines y otras tantas funciona como un intérprete más del grupo. Muy original y sentida la manera en la que todo va tomando forma y unidad. El baile domina la gran mayoría de las escenas y, si bien son pocos los momentos en los que sucede, hay algunos cortes repentinos que el director realiza para introducir el testimonio de alguno de los bailarines, los cuales interrumpen la magia visual y coreográfica sin necesidad. "Pina" es una cinta bellamente filmada, con una conjugación muy interesante con respecto al sentido y a la fuerza del baile, con una gran gama de estilos musicales e interpretativos (hay expresiones clásicas, una alusión muy pequeña al tango, momentos donde se representa la comedia absurda, mucho dramatismo y una intensidad visual maravillosa y desgarradora). Una película para aquellos que disfruten de las danzas modernas y para aquellos que deseen descubrir un arte que pocas veces se puede apreciar en la pantalla grande. UNA ESCENA A DESTACAR: baldes y el comienzo.
UNA NOCHE EN EL ZOO Cuando una idea es utilizada varias veces sin importar brindarle al espectador algo distinto, novedoso o sorpresivo, esa chispa de originalidad, de entretenimiento y de ingenio desaparece inmediatamente. Esto es lo que sucede en esta película protagonizada por Kevin James, la cual toma un hecho que ya se vio repetidas veces, más precisamente en las dos películas de "Una Noche en el Museo", para regalarle al público una serie de incómodas escenas de comedia, sin lucimiento actoral y con un guión que no logra aprovechar los detalles que va creando, y se basa en el golpe sencillo, práctico y poco divertido. Griffin es un hombre que está enamorado de una mujer, pero hace cinco años ella le rechazó su pedido de matrimonio por no estar a la altura económica y laboral que ella merecía tener. Él es guardián de un Zoológico y, cuando los animales se enteran que posiblemente cambie de trabajo para tratar de reconquistar a su amor, deciden quebrar un pacto secreto y le comienzan a hablar. Con la ayuda de ellos el hombre va a tratar de volver a enamorar a Stephanie. La historia es muy similar a otras del mismo género, no aporta novedades ni situaciones que no se hayan visto con anterioridad. El hecho que por las noches los animales del zoológico se liberen, hablen e interactúen entre sí, le aporta poca originalidad y destaque a la propuesta. Pero, pese a que este es uno de los grandes problemas de la película, son otros los inconvenientes que perjudican aún más la experiencia: Por un lado, el humor es físico, poco ingenioso y algo elevado para el público infantil al que la cinta va dirigida. No hay escenas cómicas bien construidas, siempre se finaliza el acto con algún golpe o caída y no se crean diálogos que tengan un inventivo y sentido que le aporten inteligencia al relato. Son muchas las escenas incómodas que aquí se van presentando y se crea un sentimiento de "más bajo que esto no se puede caer", que increíblemente se va intensificando mientras los minutos van pasando. Hay un personaje que tiene una descripción muy mal lograda: un gorila que está solo; que es víctima de ciertos abusos por parte de otro cuidador; que no entiende a los humanos y que, sobre todas las cosas, quiere descubrir el mundo exterior, pero no la selva ni su lugar de origen, sino la ciudad y vivir la vida como los humanos (así de incoherente como suena). Hay una secuencia en la que el protagonista lo lleva a pasar "la mejor noche de su vida", van a un bar y recorren la ciudad. Una serie de escenas que dan vergüenza ajena. Por otro lado, el trabajo actoral es bastante pobre y, si bien Kevin Jones es un buen comediante que logró destacarse en otras películas, aquí, producto de un guión poco interesante, su personaje se hace tedioso, aburrido y previsible. Quienes lo acompañan tampoco logran lucirse, Rosario Dawson es quien, dentro de las pocas exigencias de su libreto, logra sacarle un poco el sentido humano de su rol; mientras que Leslie Bibb, en un papel totalmente estereotipado, sobreactúa y hace lo posible por encajar en las necesidades del guión. Otro de los problemas que aquí aparece, es la utilización de la voz en los animales. El director tarda mucho en mostrar dicha característica, no se logra entender a qué público fue destinada la propuesta, se puede apreciar un caos visual y sonoro cada vez que ellos aparecen, provocado por una dirección desordenada y poco fluida, y dichos personajes no poseen el destaque merecido, lo que ocasiona que se conviertan en roles secundarios innecesarios para contar la historia. "El guardián del Zoológico" es una película mal lograda, con actuaciones que no se lucen, un humor poco inteligente y un guión que no aporta algo nuevo ni novedoso. Una comedia fallida y poco divertida.
VIDA Son muchos los adjetivos que le calzan perfecto a esta película de Terrence Malick: ambiciosa, admirable, perfecta, profunda, única, emotiva, diferente, bella, cruda, fuerte y desconcertante, entre muchos otros. Pero hay uno que define de manera auténtica y realista a esta propuesta y que, en especial, es su gran fuerte y el sentido más rico y maravilloso de este trabajo: humana. La historia se centra en contar la vida desde el punto de vista de Jack, un hombre que se siente abatido por la muerte de su hermano y quien comienza a recordar su pasado, centrándose en sus temores, sus alegrías, disgustos, en la relación con su familia y, principalmente, en la rivalidad con su padre. La película es muy compleja y es necesario verla más de una vez para captar todos los detalles y todas las metáforas que aquí el director expone. No es una narración cronológica, aunque todo está mostrado en un orden específico para darle mayor intensidad y fuerza al relato. Aquí se pueden apreciar dos características generales que pueden separarse para un mejor análisis, pero que están llevadas adelante de tal manera que una complemente a la otra y viceversa: Por un lado, la fotografía, una manera muy particular de mostrar lo que sucede en escena, con planos hermosos, cambios de cámaras difíciles y novedosos, y una limpieza visual realmente maravillosa. Cada segundo de esta película es una muestra intensa del poder de la cámara y de la habilidad de un director por tomar de manera original y muy sentida todo lo que va sucediendo. Son muchas las secuencias en las que no hay guión hablado, por lo que la fotografía y la puesta en escena cobra un sentido mucho mayor, y el trabajo realizado para que dichos momentos puedan entenderse y puedan llegar a tocar las emociones del espectador es hermoso. Es solo cuestión de ver las escenas líricas y oníricas en las que se muestra la creación del Universo y los primeros pasos de los animales como para descubrir una manera muy particular de expresar una idea y de sentir, sin una sola palabra, con intensidad lo que sucede (excelente uso de los dinosaurios para expresar una premisa en especial y perfecto el aprovechamiento de la fotografía para llevar adelante, minutos más tarde, la creación de una vida). Se juega con las luces, con los planos, con los ángulos, con los efectos especiales, con las recreaciones, y se hacen muchos planos detalle que le aportan emoción y belleza a la cinta. Por otro lado, el guión. El argumento es complicado y muy profundo. Es muy difícil lograr que una película toque temas filosóficos y mantenga entretenido o maravillado al espectador, y aquí, gracias a la intensidad y al realismo de lo que va sucediendo, se logra plantar una semillita para que el espectador profundice o simplemente se siente curioso por ir más allá de lo que a simple vista se puede apreciar. Un trabajo minucioso, original y muy bien pensado, que toca temas existenciales y que invita a la reflexión. A su vez, la película cerca de la mitad de su duración, desarrolla en plenitud un realismo que identificará al espectador, no solo porque lo que sucede es muy creíble, sino porque hay parte de ese relato que toca la esencia de la familia y de la vida misma. Una historia apasionante de principio a fin. La radiografía de cinco personajes y sus diferentes temores, ambiciones y alegrías. La música acompaña de manera excelente lo que sucede y, al igual que la fotografía, es de suma importancia para transmitir las ideas en esos momentos silenciosos de palabras. El trabajo de Alexandre Desplat se suma a un conjunto de originalidad y sentimiento que se complementa con cada una de las partes aquí desarrolladas. Las actuaciones son precisas. Cada uno de los personajes presenta una descripción determinada y muy bien lograda, y el trabajo realizado por cada intérprete permite transmitir esas inseguridades y reflexiones que sus respectivos roles dejan entender. Brad Pitt (padre), Hunter McCracken (Jack en edad adolescente), Jessica Chastain (madre) y Sean Penn (Jack adulto) están perfectos en sus papeles (esa escena de arrepentimiento entre hermanos es soberbia). "The Tree of Life" es una experiencia surrealista sin igual, que transmite emociones y sensaciones que muy pocas veces se han visto en el cine (uno de los exponentes claros de la humanidad al mismo nivel que esta película es "2001: A Space Odyssey" de Stanley Kubrick). Con una fotografía hermosa y una historia muy ambiciosa, pero no por eso menos intensa y profunda. Una imperdible propuesta, una representación artística como muy pocas de la última década. UNA ESCENA A DESTACAR: Dejando de lado cada momento de la vida de Jack, las situaciones oníricas son admirables.
EL JUEGO DEL GATO Y EL RATON Cuesta creer que el director de "Los Dueños de la Calle" sea el mismo que llevó adelante esta nueva película, no solo por la calidad argumental, sino por la manera que se decidió llevar adelante visual y sonoramente la propuesta, desaprovechando casi todo lo que se tiene al alcance y jugando con planos que parecen haber sido sacados de alguna película de la saga de "Crepúsculo". Nathan es un adolescente que continuamente tiene un sueño que lo intriga: él ve a una mujer que está protegiendo a su hijo y que luego es asesinada. Una tarde, al estar investigando en Internet para un proyecto de la secundaria, encuentra en una página de niños desaparecidos una foto suya de cuando era chico. No duda en investigar qué es lo que está sucediendo y descubre que las dos personas con las que vivió desde pequeño no son sus verdaderos padres. Es así, como comienza una gran aventura al tratar de escapar de las manos de unos agentes de la CIA que quieren secuestrarlo. El joven tiene muchas preguntas sin resolver y no va a terminar hasta conseguir todas sus respectivas respuestas. El guión es el gran problema de esta película. La historia carece de ideas, de sentido, de algo que logre destacarla del resto y de imaginación. El relato se introduce como una cinta de conflictos secundarios, presentando al protagonista, a sus amigos y a una atractiva mujer, todo en el entorno de una gran fiesta en la casa de una compañera de curso de Nathan. Aquí no faltan las miradas entre personajes, la música bien fuerte, el alcohol y todo lo que caracteriza a este tipo de secuencias. Luego, se pasa a un drama familiar, comenzando con la rivalidad entre padre e hijo y concluyendo con el consecuente descubrimiento de un secreto bien guardado, indudablemente la única parte en la que vale la pena destacar algo (las actuaciones correctas de Maria Bello y Jason Isaacs). Por último, la propuesta finaliza con una serie de persecuciones, de escondidas y de luchas muy al estilo "Bourne". No solo no hay coherencia con cada una de estas tres partes, sino que se crea una evolución del personaje principal muy poco creíble, poco interesante y mal resuelta, ya que pasa de ser un solitario alumno a ser una persona especializada en matar y sin miedo a nada ni a nadie, características que parecen formar parte de otra película diferente a la vista en la primera media hora. Otra de las características que hacen de esta propuesta una película fallida, es la actuación de Taylor Lautner en el papel protagónico. La mejor manera de definir su interpretación es mirando el póster de la cinta (el primer plano de su rostro), ya que esa inexpresividad está presente en los momentos divertidos, en los de acción, en los románticos y en los emotivos. Igualmente, cabe destacar que, si bien la sobreacuación y la falta de credibilidad en el papel protagónico es a causa del trabajo de Lautner, la película, producto de una incorrecta dirección y de un guión que falla continuamente, no hubiese sido mejor con la participación de un actor con más experiencia en el género. Las escenas de acción está correctas, hay algo de vértigo en algunos momentos y se juega bien con la velocidad y la rápida edición, el problema cae en las justificaciones que se les da a cada uno de esos momentos, convirtiéndolos en situaciones artificiales y poco entretenidas. "Abduction" es una propuesta mal dirigida, con un abuso de los primeros planos del protagonista y de los silencios; con una historia incorrectamente escrita y con pocas ideas; con actuaciones regulares y un desorden argumental, visual y sonoro importante. Film destinado al público de "Crepúsculo" que intenta tomar su propio estilo y trasplantarlo en el genero de acción. Una película fallida. UNA ESCENA A DESTACAR: escenas con los padres.
MUJERES CELOSAS Judd Apatow, productor de esta película, es uno de los responsables que ha direccionado la comedia clásica estadounidense hacia otros rumbos. Si uno recuerda "Pineapple Express", "Super Bad", "Hermanastros", "Año Uno" y "Virgen a los 40", entre muchas otras, se podría decir que, además del nombrado productor, todas ellas comparten un mismo estilo de humor, basado en lo absurdo y en lo ridículo. Aquí, si bien el trabajo realizado en muchas escenas es realmente sorprendente e inteligente, se vuelve a repetir esa misma fórmula que por años ha marcado la identidad de dicha persona, restándole un poco de originalidad a la chispa de sus inspirados intérpretes. Annie es una mujer que mantiene una relación casual con un hombre. Un día se entera que su mejor amiga se va a casar y que será la dama de honor de la ceremonia. Es así como, además de la envidia que reprime al verla feliz, se va a encontrar con otras cuatro mujeres, también damas de honor, que le van a hacer la vida imposible. Entre ellas se encuentra Helen, una hermosa mujer que dice ser la mejor amiga de Lillian y quien va a intentar arrebatarle el puesto y ser siempre mejor que ella. La característica que aquí prevalece sobre el resto es el maravilloso trabajo realizado por las actrices con sus personajes. Kristen Wiig es una sorpresiva revelación, no solo porque afirma que tiene el talento para llevarse al hombro un papel protagónico, sino porque le aporta mucho entretenimiento y expresión a lo que aquí muestra. Su rol pasa por varios estados de ánimo y cada uno de ellos está muy bien interpretado por la actriz. Maya Rudolph también está muy bien, en especial en las escenas que comparte con Wigg y en ese preciso momento, al comienzo en una escena en el bar, cuando ambas logran llevar adelante un nivel de improvisación increíble, que le aporta mucho realismo a la relación que une a sus personajes. Quienes las acompañan, ya sean Ellie Kemper, Jessica St. Clair, Rose Byrne y Melissa McCarthy, están correctas en sus papeles secundarios. La historia junta todas las características de las películas de Apatow, es sencilla, tiene un final previsible, el humor es absurdo e innecesario por momentos (baño y los escenas con los compañeros de departamento de la protagonista) y no presenta sorpresas en lo que refiere a lo argumental. Pero, y es allí donde la cinta logra lucirse, son varios los momentos en los que el guión deja relucir algunas secuencias muy divertidas y originales, que entretienen, hacen lucir a sus intérpretes y, en especial, se alejan de sus propios estereotipos. La escena en el avión, el ya nombrado momento en el bar y algunas tomas con el policía, son algunos de los ejemplos en los que la inteligencia aparece y se luce en esta propuesta. Técnicamente esta película está muy bien fotografiada; la música acompaña correctamente el desarrollo de la historia y es de suma importancia en varias escenas; la dirección, pese a algunas elecciones del humor (hay personajes secundarios que no se lucen) es correcta, en especial en lo que respecta a la dirección de actores. "Bridesmaids" es una cinta entretenida, bien escrita, con un aprovechamiento y lucimiento impecable de sus intérpretes (Kristen Wiig está excelente), y con un humor logrado e inteligente por momentos. Una propuesta dirigida hacia el público femenino que no decepciona y divierte, algo que muchas comedias parecen haber olvidado. UNA ESCENA A DESTACAR: bar.
DURMIENDO CON EL ENEMIGO Los grandes actores y actrices en muchas oportunidades eligen interpretar personajes que se alejan totalmente del dramatismo y la seriedad que los llevó a la fama. En esta oportunidad, Hilary Swank, quien ganó dos veces el premio Oscar a la Mejor Actriz por sus papeles en "Million Dollar Baby" y "Boys Don´t Cry", interpreta un rol que está presente durante el 90% de la duración, pero que carece del desarrollo y la profundidad como para realzar su actuación y crear un relato entretenido, diferente e inteligente. Un personaje menor para una gran actriz. Juliet es una doctora que está buscando un lugar dónde vivir. Es así como encuentra un departamento muy barato, amplio y confortable. A su vez, Max, el hombre que se lo alquiló, parece estar interesado en ella, lo que le da una posibilidad para poder olvidar a su ex y comenzar una nueva vida. Inmersa en la soledad, pronto va a descubrir que la compañía de dicho hombre es algo invasiva y que por las noches se escabulle en su dormitorio para poder estar con ella. Lo que comienza como una inmediata atracción mutua, rápidamente se convierte en un peligroso juego de obsesiones. El primer tramo narrativo que la película hace está bien logrado, se crean algunas escenas de suspenso correctamente expuestas y se puede apreciar un desarrollo de las personalidades de los roles bien presentadas. Pero, inmediatamente después de algunos minutos de proyección, los problemas comienzan a aparecer, y lo que parecía estar bien encaminado comienza a entrar en terrenos ya vistos en muchas oportunidades y en caracterizaciones que no le aportan inteligencia, novedad o una simple chispa de originalidad a la historia. La participación de Christopher Lee, pese a que está muy bien, no le aporta nada a la cinta, no hay una justificación más profunda o interesante que explicar la causa superficial de las actitudes del nieto de su personaje. El guión lo presenta como una pieza importante del futuro rompecabezas, haciendo un silencio para que su áspera voz cobre intensidad y creando un maravilloso suspenso a su alrededor. Lamentablemente, luego de esa toma su rol no tiene importancia ni se lo utiliza en la creación de climas. Un gran actor, totalmente desperdiciado. Por otro lado, la historia desarrolla algunas incoherencias argumentales que juegan con el realismo de la propuesta e impiden que situaciones más lógicas digan presente. La intervención de la amiga de la protagonista; la aparición de un hombre que le instala cámaras de seguridad en la habitación de la mujer y ninguna en el lugar donde todas las noches ella escucha ruidos misteriosos; las exageradas reacciones finales de los personajes, la escena en la que se arroja por las escaleras a una persona y ese juego innecesario con el estiramiento de la supervivencia, son algunas de las cuestiones que hacen de esta película una cinta correctamente planteada, pero totalmente fácil y poco novedosa. Las actuaciones, pese a que no hay caracterizaciones que desarrollen matices muy complicados, están correctas. Hilary Swank le aporta realismo a la primera mitad del desarrollo de su personaje, al igual que Jeffrey Dean Morgan. Llegando al final ellos sufren de la extrema exageración de lo que sucede, en especial el hombre, quien eleva a un lugar ridículo las ambiciones de su papel. Correctamente fotografiada, con escenas de suspenso que le aportan un poco de tensión al relato, con actores desaprovechados y con un guión que no sorprende ni expresa con lucidez los sentimientos y emociones de los personajes, "The Resident" es una regular película, previsible e incorrectamente dirigida. UNA ESCENA A DESTACAR: primeros minutos.
LA AMISTAD EXTRATERRESTRE La carismática dupla protagonista de "Shaun of the Dead" (Nick Frost y Simon Pegg) vuelve a aparecer en esta propuesta que, si bien no es la mejor colaboración mutua de ambos actores, es una película entretenida que triunfa gracias al aprovechamiento de las personalidades de los actores antes mencionados y, principalmente, a la muy bien lograda identidad del alien que aquí se presenta. Graeme y Clive son dos mejores amigos amantes de la ciencia ficción. Ellos son ingleses, y deciden viajar a los Estados Unidos para concurrir a una famosa convención de cómics. Durante muchos años han estado expectantes por protagonizar o ser simples testigos de algún hecho relacionado con los extraterrestres, es por eso que se ponen de acuerdo para hacer un tour por los lugares más famosos donde se han avistado OVNIs. Pero en el camino conocen a un extraño individuo llamado Paul, un alien que está tratando de encontrar la manera de poder regresar a su hogar. Ellos están siendo perseguidos por los federales y van a ser participes de un acontecimiento que no podrá ser olvidado con facilidad. La cinta presenta una premisa muy bien introducida y que en cierta manera se puede asemejar a un estilo de "Road movie", ya que todo lo que aquí sucede tiene lugar en la carretera y en el viaje que los personajes van haciendo hasta llegar a destino. La temática está bien presentada y se elabora un conflicto que ya se ha visto numerosas veces en el cine, pero que mantiene una frescura y un interés muy bien logrado en el espectador. El entretenimiento siempre está presente y en ningún momento se deja de lado para contar algo demasiado serio o emocionante. A su vez, y es allí donde la misma logra destacarse del resto de propuestas similares, se desarrolla un mensaje relacionado con el valor de la amistad que está perfectamente mimetizado en la narración y que, sin duda alguna, enriquece el relato. La elección de incorporar un alien al grupo de protagonistas está muy bien resuelto, ya que, pese a que se hace una acentuación algo innecesaria del humor basado en la sexualidad, la personalidad creada en torno al extraterrestre es perfecta. La mezcla lograda entre la humanidad del personaje y la fantasía propia de sus características, es excelente, ya que se aleja de muchas de las actitudes estereotipadas de este estilo de roles y se desarrolla una diferente e inteligente manera de ver a un hecho que se ha visto innumerables veces en la historia del cine de ciencia ficción. Otra de las características que hacen de esta propuesta una entretenida película, es la calidad de las actuaciones. Nick Frost y Simon Pegg desarrollan una química maravillosa cada vez que aparecen, y son los encargados principales de profundizar el sentido aquí expuesto sobre la amistad. Cada uno respeta sus personalidades y, pese a que los personajes encarnados no difieren mucho de otros del pasado, divierten y le aportan fluidez a la historia. Quienes lo acompañan hacen también un buen trabajo: Jason Bateman, en el rol villano, está muy bien, le aporta humor y realismo a su personaje; Seth Rogen, brindándole la voz a Paul, está correcto, si bien su tono al principio no se homogeniza correctamente con la primera impresión del alien; y la segunda villana, la gran mala de la película, logra destacarse en las instancias finales (no es la intención de destruir quién es, ya que la cinta se preocupa por crear suspenso sobre su identidad hasta el momento cúlmine de la historia). Los puntos débiles de esta película se ubican en el guión. El humor por momentos toca puntos innecesarios, que, si bien son entretenidos, se alejan del ingenio y la originalidad expuesta desde el comienzo. El uso de la religión cristiana como principal eje de gracia en muchas escenas es repetitivo y está fuera de lugar. A su vez, y pese a que se destacan, son varios los momentos en los que los protagonistas son opacados por algunos personajes secundarios, alargando sin necesidad la duración de la película. "Paul" es una película entretenida, que logra destacarse gracias al aprovechamiento que se logra apreciar de sus intérpretes y a la particular identidad del extraterrestre. Una buena comedia, con muchas referencias al cine de ciencia ficción clásico, y que no decepcionará a aquellos que disfruten de la dupla protagónica en acción. UNA ESCENA A DESTACAR: final y aparición de Paul.
UN FATAL EXPERIMENTO Muy bien lograda película que se destaca, no por elevar al máximo y aprovechar el planteamiento argumental tal como se podría esperar, sino porque presenta los suficientes dotes cinematográficos como para brindarle al espectador una experiencia muy original, con momentos de suspenso muy bien logrados y una criatura protagónica intrigante e imprevisible. Una pareja está por realizar el descubrimiento del siglo. Lograron mezclar diferentes especies animales y vegetales y combinarlas con el DNA humano y formar una nueva forma de vida. El problema aparece ya que ellos lo hacen en secreto y el experimento puede llevar a la destrucción del laboratorio física y prestigiosamente. La cinta se introduce con un desarrollo muy bien logrado visual y argumentalmente, en el que se puede apreciar como la pareja protagónica decide llevar adelante el experimento sin darle mayor importancia a las autoridades del laboratorio y como la nueva especie animal comienza a evolucionar rápidamente. Esta primera media hora es perfecta, se crea un suspenso increíble en el proceso científico, se presenta una criatura muy original que va creciendo con velocidad mientras los minutos van pasando y poco a poco, se va desarrollando un cuestionamiento moral que florece en la segunda y final parte de la película. Luego de esta intrigante y atrapante introducción, la cinta tiene sus altibajos y el principal error, que concluyen con algunos momentos estirados, poco llamativos y aburridos, es la poca credibilidad de las reacciones de los personajes principales. Se pueden apreciar muchos cambios emocionales en la pareja que no se entienden: el hombre primero quiere matar a Dren (la criatura), luego se encariña y la defiende sin un cambio claro en sus pensamientos; la mujer la ama, la siente parte de su vida, la protege y, de un momento para el otro, por una reacción violenta, quiere cobrar venganza y se convierte en su principal enemiga. Estos cambios, correctos para crear una diversidad en el relato, no están bien logrados ya que se crea una falsa personalidad en los roles protagónicos. Pese a esto, la cinta desarrolla una originalidad y un deseo de ser diferente que en todo momento logra destacarse y produce muy bellas situaciones en las que se destacan la fotografía, los efectos de sonido y las actuaciones de cada uno de los intérpretes. Hay una cierta escena erótica entre Dren y un hombre, que, pese a que aporta poco al conflicto, está hermosamente mostrada, ya que se juega mucho con los movimientos imprevisibles de la criatura, con sus bellas facciones y con los cambios perfectos de planos y encuadres. A su vez, vale la pena destacar el planteamiento de los últimos 15 minutos, que desarrollan los mejores momentos de tensión de la cinta y, aunque el final es algo común y repetido en el género, son sin duda alguna, las mejores escenas de la película. Al mismo tiempo que se plantea el crecimiento de Dren, el film comienza a entrar en terrenos morales complicados y deja un mensaje final muy bien logrado e intenso. "Splice" es una película que cerca de la mitad de duración no aprovecha al máximo la premisa que toca y no le saca provecho a la figura "extraña" en escena, pero que se destaca por su originalidad; por su increíble y bellísimo uso de la cámara subjetiva al comienzo, de los primeros planos al rostro de Dren y de los convincentes efectos especiales que acompañan todo el relato. Diferente, jugada, técnicamente intensa, algo lenta, repetitiva en cierto momento y muy bien actuada (se lucen Adrien Brody, Sarah Polley y Delphine Chanéac), este film satisfacerá a quienes vayan en busca de una historia distinta y con un mensaje ético bien planteado y rematado. UNA ESCENA A DESTACAR: los últimos 15 minutos y la escena erótica con Dren (muy bien filmada)
"QUE YO CAMBIE NO ES EXTRAÑO" Nanni Moretti es uno de los directores italianos más inspirados y originales de los últimos años. Luego de la excelente "La Habitación del Hijo" y de "El Caimán", una de sus películas más políticas, regresa para estrenar una cinta que explora una realidad abrumadora, con mucho dramatismo y con un humor muy particular, inteligente y bien pensado, que le aporta entretenimiento y que conforma un sentido y una crítica entre líneas muy bien logradas. Luego de la muerte del Papa, los cardenales comienzan su lenta y ardua tarea para seleccionar al próximo representante de la Iglesia Católica. Una vez que la decisión ya había sido tomada y aceptada por el elegido, al Papa le agarra un ataque de pánico, impidiéndole poder salir a saludar a los fieles y anunciar su identidad. Es por eso, que quienes lo rodean llaman a un psicoanalista para que lo ayude a solucionar su problema y a asumir el cargo que tanto miedo e inseguridad le genera. La cinta da comienzo con el funeral de un anónimo Papa, respetando las costumbres religiosas y creando el drama que envuelve a la elección del próximo representante de la Iglesia. Aquí Moretti optó por utilizar las imágenes documentadas de la ceremonia luego del fallecimiento de Juan Pablo II, aportándole mucho realismo a la cinta. Luego, se presentan a los personajes y se introduce una secuencia de escenas que involucran a los cardenales y la respectiva reunión en la Capilla Sixtina para la votación. Sin dejar de lado nunca los pasos y el respeto ante lo que en realidad sucede allí dentro, el director se permite agregarle toques de humor al acontecimiento y, presentando una situación con reminiscencias propias del cine de Fellini (corte de luz y sus respectivas consecuencias), la cinta rápidamente va direccionada hacia el conflicto y la indicada introducción de las sensaciones y emociones que invaden el presente del Papa. A partir de este momento, la propuesta se puede dividir en dos partes bien diferenciadas, pero por supuesto, que se profundizan en conjunto. Por un lado, todo el drama que envuelve a la figura del Papa, sus escapes, sus inseguridades, sus temores, sus recuerdos y los cambios que quiere para-con su vida. Aquí se puede destacar un trabajo impresionante por parte de Michel Piccoli, quien le aporta realismo, sentimiento y fuerza a su personaje. Su mirada, sus expresiones faciales y movimientos corporales, tienen una intensión que va más allá de exponer el estado de ánimo del papel, en él se puede ver reflejada una realidad mucho más general y ambiciosa que se expresa en la última escena de la película. Una maravillosa actuación protagónica. A su vez, los diálogos y esas líneas que su personaje se dice a sí mismo son conmovedoras y están muy bien insertadas en el relato, con el objetivo de hacer pensar y reflexionar al espectador. Por otro lado, todo lo que va sucediendo dentro de la Capilla Sixtina, que envuelve a los cardenales, quienes no pueden salir del lugar, y a la aparición del psicoanalista. Estos son los momentos en los que Moretti se toma el tiempo para desarrollar un humor divertido e inteligente, siempre haciendo referencias sobre la identidad de la religión y sobre las muchas preguntas que una persona atea podría hacerse ante la obligada estadía con ellos. No hay límites a la hora de expresar los sentimientos y las ideas que el director tiene y, aunque parezca imposible dadas las circunstancias (religión vs ciencia) el respeto aquí presentado es maravilloso. Se puede destacar, además de la interpretación del mismo Nanni (psicoanalista), una particular escena en la que se puede escuchar el tema "Todo Cambia" interpretado por Mercedes Sosa, un momento que, además de ser muy rico en su estilo humorístico bizarro y ridículo, es muy emotivo. El color rojo prevalece en gran parte de la narración; las banderas del mundo se mueven con fuerza mientras esperan la salida del humo blanco y el anuncio del nuevo Papa, cuestión que parece nunca suceder; todo está acompañado por una fotografía que es muy acertada y capta lo que el espectador necesita ver para entender el mensaje del director; el guión es inteligente y está muy bien escrito; y el final, esa poderosa conclusión en la que Moretti da su último mensaje sobre la religión, con una dramática música de fondo y una majestuosa actuación en escena, un momento que hay que leer entre líneas y recordar las tomas que antes parecían pasar desapercibidas (teatro, el colectivo, el teléfono, el escuchar música en la calle y el desayuno). "Habemus Papam", una película para pensar, debatir y volver a mirar. Una inteligente propuesta de uno de los mejores directores realistas de la actualidad. Imperdible. UNA ESCENA A DESTACAR: final.
AMIGOS Y ALGO MAS Comedia que presenta una fórmula que se ha visto numerosas veces en su género y en varias oportunidades del 2011 que, pese a desarrollar un paralelismo casi idéntico con otras propuestas, logra destacarse gracias a la química de sus protagonistas, a un correcto trabajo realizado con el humor y a la humanidad con la que se decidió llevar adelante el relato en cierto momento. Jamie es una busca-talentos que acaba de separarse de su novio y que está tratando de encontrar la nueva figura para una empresa gráfica. Es así como se topa con Dylan, un estructurado hombre que decide mudarse a Nueva York para ejercer el trabajo que la muchacha le ofreció. Juntos van a comenzar una relación basada plena y puramente en la amistad, y como ninguno de los dos está buscando algo serio, se comprometen a que las relaciones sexuales que tienen continuamente no los toquen sentimentalmente. Pero dicha promesa, con rapidez, se va a ver en peligro, ya que ambos comienzan a sentir cosas que van más allá del acto físico. La premisa es repetida y muy poco original, y ese es el principal problema de la película, ya que aquí no se presenta algo que no se haya visto con anterioridad en otras producciones. Las vueltas de tuerca, las reacciones de los personajes, algunos roles secundarios y la historia en sí, están llenas de lugares comunes y actitudes estereotipadas, impidiendo que algunos momentos puedan cobrar la intensidad emocional necesaria. Pero, pese a estos problemas, esta es una película que está muy bien filmada, la fotografía, la edición y el sonido siempre están correctos y acompañan muy bien la narración; el humor presenta características que, si bien el sexo está presente, nunca pasa los límites del buen gusto o la vulgaridad, es más, hay dos escenas que están muy bien escritas y son rematadas de manera divertida e inteligente; la historia de enredos hace una pausa muy acorde cuando se introduce un personaje secundario que baja a una línea realista y emocional a los dos protagonistas, brindándole verosimilitud y un matiz diferente dentro de la importancia de la comedia; y en especial, se puede apreciar una química muy buena entre los personajes principales. El trabajo realizado por Mila Kunis y Justin Timberlake es muy bueno, principalmente porque son ellos los responsables de transmitirle al espectador las sensaciones de la cinta, que van desde el romance, la superación, la compañía y hasta la lujuria, y lo hacen muy bien. Quienes lo acompañan también están correctos, entre ellos se destacan: Patricia Clarkson, en un rol bien estereotipado (la madre de mente abierta); Richard Jenkins, el padre; Woody Harrelson, un compañero del trabajo; y Emma Stone, quien tiene un papel mínimo (aparece tan solo una vez). "Amigos con Beneficios" es una película muy poco original, con una historia repetida y que sigue las mismas fórmulas que muchas otras cintas del género, pero que se luce producto de la química lograda entre los protagonistas, la frescura que la presencia de Mila Kunis da en pantalla y ese toque humano que dice presente cerca de la mitad del relato y que enriquece el argumento. Una correcta propuesta, que divierte y no brinda más de lo que propone. UNA ESCENA A DESTACAR: playa y primer encuentro.