UN SUDOR FRIO QUE NO DA ESCALOFRIOS Película de suspenso argentina que claramente se puede y se debe mirar desde dos puntos de vista, uno plenamente visual y técnico, muy acertado por cierto, y otro actoral y argumental, muy flojo. Dos personas deciden entrar a una casa para buscar a una amiga que desapareció días atrás. Cuando entran, uno de ellos, una mujer, va a ser rápidamente secuestrada, mientras que el otro, a escondidas, comienza a ver el problema y a tratar de salvar a su novia y a su amiga. Dos ancianos obsesionados van a ir asustando y matando a cada uno que se atreva a entrar en su hogar. Es imposible negar y dejar de ver el tratamiento visual que aquí se presenta. Con un tinte y una suciedad escenográfica muy similar a la desarrollada en las dos últimas películas de "La Masacre de Texas", con colores grisáceos y gamas sepias, cada una de las escenas que forman la película presentan un montaje y un trabajo de edición muy fluido, atractivo y muy acorde al tipo de intimidad que la historia necesita. A su vez, la fotografía y la elección de planos y encuadres acompañan muy bien el relato, se acentúan diferentes objetos, expresiones y movimientos que aportan mucho al suspenso y dejan apreciar lo que el espectador necesita y quiere ver. También, los efectos visuales son muy buenos, principalmente en lo que respecta a las muertes, las reiteradas explosiones y las cámaras lentas. Visualmente "Sudor Fío" tiene lo necesario para destacarse. Ahora bien, la película desarrolla inconvenientes muy repetitivos que se sostienen en tres principales características: 1) Lo más importante y a la vez lo más flojo de la cinta: el guión. La historia tiene un planteo que ya se ha visto numerosas veces en el cine y que aquí en ningún momento se intenta revertir o modificar: diferentes personajes entran a una casa y descubren que es una trampa mortal en la que, en este caso, dos asesinos están dispuestos a matar y torturar gente. Lamentablemente el problema del libreto va más allá de toda similitud con otras cintas del género, aquí los villanos son dos ancianos, uno que casi no puede caminar y otro que está cansado de las órdenes. Ellos en ningún momento se preocupan por ocultar sus debilidades frente a las víctimas, por lo que, mientras que en otras cintas los personajes deben enfrentarse a un asesino rápido y misterioso y están todo el tiempo tratando de escapar o de encontrar la manera adecuada para matarlo, aquí los protagonistas se les quedan mirando a la cara o a las espaldas, mientras torturan gente, y no hacen absolutamente nada para tratar de asesinarlos, golpearlos o por lo menos ahuyentarlos, (hay una escena en la que el personaje de Facundo Espinosa se queda observándolo con un utensilio en las manos para derribarlo y no le hace nada; otro momento en el que una mujer camina sentada hacia atrás y la persigue el anciano con una jeringa con ácido en un andador). Una historia muy floja, que por momentos es inevitable la aparición de la risa y que por otros se torna muy previsible. 2) Otra de las características es la calidad de las actuaciones. Si el guión no es creíble, el trabajo de los actores al interpretarlo tiene que ser muy bueno como para convencer al espectador de que lo que está viendo puede llegar a pasar. Lamenablemente esto no sucede y, salvo por el labor de Facundo Espinosa, quien le pone fuerza y credibilidad a sus reacciones en ciertos momentos, todos sobreactuan y están muy desparejos. Marina Glezer y Camila Velasco, las dos mujeres secuestradas, van y vienen con sus emociones y no las expresan con fluidez, mientras que Omar Gioiosa y Omar Musa, los villanos, no dan miedo y no se preocupan por hacerlo. El trabajo correcto es el de las extras que encarnaron a las enigmáticas mujeres torturadas en el sótano (excelente maquillaje). 3) Último, pero no menos importante, la música. El uso de música metalera aquí empeora el relato y perjudica la creación de sustos, escalofríos y hasta de sentimientos para los protagonistas. Hay varios momentos impactantes que pudieron haber funcionado muy bien si no se les agregaban los tonos fuertes y repetitivos del rock pesado. Un ejemplo: mujer bajando las escaleras, llega al sótano, prende la luz de la linterna y atrás de ella se puede ver, de repente, la figura de una mujer retorciéndose; un gran momento de suspenso totalmente desperdiciado y mal logrado gracias a la música de fondo, que comienza a sonar segundos antes de lo que tendría que haber sido el choque del susto. "Sudor Frío" es una película muy bien lograda desde lo visual, pero que falla al darle mucha información al espectador en la primera parte y en desarrollar un guión muy flojo, actuaciones poco profundas y un villano sin identidad ni motivación. Una arriesgada y decepcionante propuesta. UNA ESCENA A DESTACAR: mujeres en el sótano.
UN AVISPON QUE NO PICA Si hay algo para remarcar en esta película es la fallida manera en la que se decidió llevar adelante a este personaje que marcó una época y que aquí fue destruido en tan solo casi dos horas. "The Green Hornet" no es solo una película mal actuada, sino una mala cinta que se burla del verdadero sentido de los personajes creados por George W. Trendle y Fran Striker. Aquí Britt Reid es el nuevo dueño de un prestigioso periódico que su padre se dedicó a formar y llevar adelante. Como a él no le importa el mismo y luego de conocer a un extraño personaje, llamado Kato, decide comenzar a luchar contra el mal de la ciudad bajo el nombre de "El Avispón Verde", usando a su empresa para crear en la gente un temor por el nuevo antihéroe. Esta película presenta un principal error que se introduce en el comienzo y que se va magnificando mientras los minutos van pasando: en vez de ser la parodia de los cómics que en todo momento pretende, la cinta se transforma en un chiste de sí misma mal lograda. Lo que aquí sucede es que los tonos burlones que se van presentando y las identidades fallidas de los personajes, van creando un aura de ridiculez y de poco sentido muy importante, que se burla no solo del espectador que fue en busca de un entretenimiento de calidad, sino del seguidor de la popular serie televisiva en la que Bruce Lee trabajaba. Los diálogos no están pensados, no se explica con interés y fundamentación el porqué de lo que están haciendo, se exageran hasta el cansancio las escenas de acción y se invoca a un supuesto realismo desde el principio, que se va diluyendo hasta desaparecer llegando al final. No hay manera de tomar en serio a una cinta que en si no respeta al material original y no existe peor forma que la que hizo Michel Gondry, en la dirección, de llevar adelante a esta película. El guión tiene muchos baches y momentos que no sirven ni aportan nada a la historia. Aquí se trata al relato original como a un borrador, Britt Reid es el típico hombre con plata que le importa poco la vida y el trabajo y, que para vivir la vida con más adrenalina ,decide ponerse una máscara y comenzar a combatir el crimen de la ciudad, un planteo que se ha visto mucho últimamente. Muchas situaciones quieren producir una sonrisa o una gracia en el espectador, los diálogos son sencillos y no son originales, se utilizan frases de la actualidad para crear un impacto en el público y se crean momentos totalmente innecesarios solo para mostrar alguna situación ridícula (se llama a "Crepúsculo"; hay una escena en la que los amigos se pelean y dura unos cuantos minutos, totalmente innecesaria, que termina con Kato ahogándose, el momento indicado para mostrar sentimiento entre los personajes, que es cortado inmediatamente para dar lugar a otra exagerada escena de acción, etc). El elenco poco aporta para que la película sea disfrutable. La peor elección fue la de Seth Rogen en el papel del Avispón Verde, quien no solo no le aporta gracia al rol, sino que, en cierta manera, vuelve a repetir el mismo esquema de los personajes de su carrera. Jay Chou, tampoco le aporta esa locura e histrionismo que caracteriza su papel (Kato); Cameron Diaz aporta muy poco a la película, sus escenas pudieron haber sido totalmente eliminadas y el sentido de la historia hubiese sido el mismo; y Christoph Waltz, un gran actor que aquí no se luce ni lo dejan lucirse, en un papel muy infantil y, como su personaje dice, "poco intimidante". Las escenas de acción son muchas y van exagerandose mientras los minutos van pasando, lo que al principio una simple escena de golpes abusa un poco de la credibilidad de la historia, un auto partido a la mitad andando con metralletas encima por dentro de una empresa y matando a todo villano que se aparezca cerca del final, parece sacado de una película de bajo presupuesto y carente de ideas. "The Green Hornet" es una mala adaptación y representación de lo que fue el personaje en la radio y la televisión. Una película que hará entretener a quienes no conozcan al personaje, pero que hará sufrir a aquellos que crecieron viendo la serie. Una cinta con actores desaprovechados, con un guión con muchos baches y escenas de acción largas y muy exageradas. UNA ESCENA A DESTACAR: primer ataque.
SUPERAR LAS DIFICULTADES El nuevo trabajo de Debra Granik no es solo la mejor película de su trayectoria, sino una cinta que explora con excelencia, profundidad y calidad la vida de la protagonista, presentando un ambiente, físico y moral, que atrapa desde el comienzo al espectador y no lo suelta hasta su finalización. Ree es una adolescente de 17 años que tiene que lidiar con la responsabilidad de su familia. Tiene dos hermanos pequeños, una madre enferma y un padre que escapa de la ley. Ella tiene que encontrar la manera de poder encontrarlo y convencerlo, para así no perder su casa y no quedar viviendo, junto a sus seres queridos, en la calle. Este es un relato que se introduce presentando perfectamente las identidades de los personajes, mostrando esa capacidad de resolver problemas y ese positivismo que la protagonista posee frente a la vida, centrelazándose en los primeros problemas y en la descripción de su rutina junto a sus hermanos y su madre. Una de las características que hacen de este relato mucho más fuerte y profundo es el planteo que la directora hace frente a cada una de las decisiones que se tomaron para llevar adelante la historia. Ella optó por mostrar con realismo y detalle la vida de la adolescente, y el manejo de las cámaras nunca se aleja de dicho planteo. Los movimientos son muy suaves, procurando mostrar con sencillez todo lo que involucra la escena, se utilizan muchos planos generales y planos detalles para mostrar algunos objetos o expresiones de los personajes y se aprovecha muchísimo la belleza de los paisajes y los contrastes con la pobreza del lugar. Esto hace que el espectador se involucre en la escena, que sienta las emociones de las personas y que sea testigo de la lucha de la mujer por poder vivir en paz junto a su familia. El tinte visual siempre mezcla el frío de los azules con los colores sepia de las hojas marchitas y secas de los árboles, creando un clima de abandono, soledad y pena llamativo, pero muy acorde al estilo de la película y la profundidad de la historia. Esta es una historia sobre la lucha, sobre el sufrimiento, sobre las injusticias de la vida, sobre una adolescente que quiere encontrar a su padre para dejar el pasado atrás y comenzar una nueva vida junto a su familia. El guión expresa con soltura, realismo y muy astutamente cada una de estas cuestiones, las adereza de una pena o melancolía recurrente (sin apelar a los golpes bajos) y concluye siendo una gran moraleja sobre la paciencia, la prosperidad y la sencillez, dejando abiertas algunas puertas para la libre interpretación del espectador. Las actuaciones son excelentes. El elenco realizó un trabajo muy bueno al encarnar a cada uno de los personajes, en especial al priorizar el realismo del guión y nunca desentonar con el ritmo ni con el drama que aquí se presenta. Jennifer Lawrence (Ree) desarrolla la identidad de la protagonista con delicadeza, procurando demostrar sus sentimientos más profundos y creando un personaje muy querible y con una fuerza y ganas de vivir impresionante. "Quiero vivir en paz, no me importa el pasado de mi padre", eso es lo que su actuación dice en cada segundo, (el destello de luz y esperanza de sus ojos al final es excelente). Dale Dickey (Merab), aporta talento al relato en un rol que tiene muy pocos minutos en cámara, pero que es sumamente importante, personificado con expresión y calidad por la actriz. John Hawkes (Teardrop) y Garret Dillahunt (el policía), están muy bien en sus personajes. "Winter´s bone" es una cinta que mimetiza con detallismo, sencillez y sutileza una forma de vida, con personajes muy diferentes entre sí, pero que desarrollan una homogeneidad argumental sorpresiva, muy cálida y profunda. Una película para pensar, que tiene un mensaje final maravilloso y que presenta actuaciones, principalmente por parte de Jennifer Lawrence, que son excelentes. Un relato muy realista sobre la familia, sobre la paciencia, las ganas de vivir y la pobreza, acompañado por una dirección astuta y sutil. UNA ESCENA A DESTACAR: escenas finales en la casa
¿TERROR EN TIEMPO REAL? Grabada con una cámara fotográfica, "La Casa Muda" es una correcta, aunque poco original en lo que respeta al argumento, cinta de terror que se destaca por la exactitud técnica y el muy bien logrado uso de los recursos audiovisuales. Laura y su padre deciden ir e instalarse en una casa rodeada por árboles y soledad para reformarla. Durante la primera noche, la mujer comienza a escuchar ruidos fuera del hogar, los cuales rápidamente se dirigen al primer piso. Dentro de la casa hay algo o alguien que quiere verlos muertos. El principal atractivo de la película, además de que en latinoamérica se animen a adentrarse en un género olvidado, es que la misma fue filmada con una cámara fotográfica y al mismo tiempo grabada en un solo plano secuencia. Ahora bien, hay que tener en cuenta algo, si bien las publicidades dicen que la misma no posee cortes, la formación del plano puede tenerlos, aquí es casi inevitable encontrar los momentos en los que supuestamente los hay o que por lo menos abren la puerta a la duda (pantallas negras, movimientos de la cámara rápidos, una entrada a un auto enigmática y la escena de las fotos), el secreto es el trabajo para no hacerlos visibles o reconocibles para el ojo del espectador. Si se es un poco más estricto con desmentir a la publicidad, es imposible que la cinta haya sido grabada sin cortes cuando al final se ve uno bien claro (la cinta finaliza, créditos finales, una escena más), pero aquí lo que vale es lo que la película en verdad es, y no se puede negar el fantástico trabajo del director al grabar con fluidez y mucho dinamismo la historia. Los aspectos técnicos son asombrosos. Desde la fotografía muy cuidada, que mezcla los tintes azulados propios de las lámparas que los personajes usan para alumbrar, con los rojizos de las manchas de sangre que poco a poco van apareciendo; hasta el excelente tratamiento musical que aquí se presenta, con unos tonos infantiles muy tenebrosos y una cuidada utilización y organización de los sonidos incidentales, está película le ofrece al espectador una experiencia traumatizante desde el comienzo, con un desarrollo lento, pero con los suficientes sustos y escenas de suspenso como para hacer saltar al público o hacerlo mirar para otro lado. Hay planos que son maravillosos, la utilización y el aprovechamiento de los espejos, por ejemplo. Ahora bien, como sucede en muchas películas en las que lo técnico es muy bueno, aquí el problema pasa por dos diferentes factores. Por un lado el argumento. El film engaña al espectador al decirle y mostrarle en todo momento que lo que está viendo es una historia sobre fantasmas. Las fotografías, los sonidos, las apariciones de la niña, todo da a entender que se está frente a una típica casa embrujada. El giro que se produce casi llegando al final, teniendo en cuenta esto, queda totalmente colgado y es muy difícil llegar a entenderlo con facilidad, el argumento es mucho más sencillo de lo que parece y no se explica con detallismo, soltura ni dándole las justificaciones necesarias como para que el espectador pueda comprender que fue lo que en realidad acaba de ver. A su vez, el mismo es muy poco original, ya que se lo ha visto en muchas otras cintas del género. No hay una coherencia inmediata entre lo que sucede al comienzo con lo que se plantea al final. Por otro lado, las actuaciones, principalmente el del rol protagónico, no le aportan la profundidad ni el espíritu realista que la historia demanda. Florencia Colucci está muy bien al comienzo, en especial hasta el momento en el que encuentra por primera vez a su padre, pero mientras los minutos van pasando y su personaje necesita de verosimilitud y fuerza, ella no se lo aporta, confundiendo aún más al espectador. Gustavo Alonso y Abel Tripaldi, están mejor en sus cortos papeles. "La Casa Muda" es una de esas películas muy bien hechas pero muy flojas en el argumento y las actuaciones. Una cinta que gracias a la publicidad es muy atractiva y que muestra el talento por lograr algo tan grande con tan poco. Film con sustos, con buenos acordes musicales, con atmósferas oscuras y tenebrosas, pero con una historia que no logra entenderse con facilidad y con interpretaciones que poco ayudan a que el relato se comprenda y se torne verosímil. UNA ESCENA A DESTACAR: cuarto de pinturas.
UN OSO Y UNA PELICULA PEREZOSA Basada en las míticas creaciones de Hanna Barbera, esta película tiene por momentos el aire y el espíritu de la serie animada, pero no logra cumplir con las expectativas simplemente por el básico, poco original y para nada lucido guión. El parque Jellystone, hogar del Oso Yogi, está en peligro, ya que un candidato a gobernador decidió vender el lugar a una empresa para que talen todos los árboles. El oso y su compañero Bubu van a intentar salvar su parque con la ayuda del guardabosques y una documentalista. La cinta se introduce mostrando directamente el rostro de los personajes más atractivos de la historia y una de sus aventuras al tratar de robarle la canasta de comida a los visitantes. Luego de esa correcta escena inicial, la cinta comienza a fallar por diferentes cuestiones que pusieron a prueba la creatividad de los realizadores y el esfuerzo por hacer algo respetuoso para/con la serie televisiva. Hubiese estado muy bueno ver esta misma historia llevada adelante en su totalidad en animación, ya que los efectos especiales que aquí se desarrollaron no son del todo atractivos, hay una escena de unos minutos en los que los personajes están en los rápidos rumbo a una catarata, en los que se puede ver sin dificultad el tratamiento de montaje y la falsedad de los efectos visuales en esos momentos. El trabajo realizado con Yogi y Bubu es bueno, es muy similar a lo sucedido con Scooby-Doo, pero al estar totalmente digitalizado y creado en computadora le resta mucho atractivo a su personaje y le impide presentar esos movimientos rápidos e imprevisibles que en la serie televisiva se podían observar. Otra de las contras al llevar adelante la película en live-action (animación computarizada con actuaciones reales), es que se pierde el alma de los personajes humanos. Aquí las pocas personas que actúan lo hacen mal, no le aportan delirio a la historia y no desarrollan las identidades como fueron en las creaciones de Barbera. Anna Faris, como la documentalista obsesionada con los animales; Tom Cavanagh, el guardabosques; T.J. Miller, el guardabosques tonto y Andrew Daly, el candidato a gobernador, todos están muy sobreactuados en sus roles, le aportan poca verosimilitud y le restan entretenimiento a la cinta. Ahora bien, lo que en cierta manera no tiene sentido y en la serie animada tampoco lo tenía, pero aquí era necesario dar una explicación, ya que es una película independiente de todo trabajo animado en el pasado, es el tratamiento del guión. Por un lado, hay un parque en el que viven dos osos que hablan, que caminan como personas y que visten como tales y, por ese mismo motivo, ninguno de los que van a visitar el lugar se sorprende al ver a dichas criaturas. Lo que en la animación funciona, en la vida real no es tan divertido. Por otro lado, las relaciones humanas que aquí se presentan son muy infantiles, que no está mal siendo esta una cinta destinada a los niños, pero es extremista en cada una de las situaciones que se van planteando. El guardabosques se enamora de la documentalista, cuando la ve dice cosas sin sentido y al cabo de unas pocas horas están los dos felices, abrazados, disfrutando del amor; el mismo personaje va cambiando constantemente de ideas, primero no quiere que se cierre el parque, luego hace una fiesta por el centenario del lugar, después renuncia y se lo regala al político y por último, vuelve a tratar de recuperarlo, cada una de las actitudes y la manera en la que se exageran en los rostros de los personajes son muy poco creíbles (dejemos de lado toda la cuestión política y económica que hay en el medio). Pero, y si bien esta es una cinta que tiene muchos errores y cuestionamientos que pudieron haber sido tratados con más soltura, originalidad y creatividad, tiene algunos momentos divertidos. Bubu está muy bien logrado y es el único personaje que se mantiene fiel al dibujo animado, sus momentos son muy buenos; al igual que algunas tomas a los paisajes y ciertos tonos musicales. "El Oso Yogi" es una cinta que no capta el espíritu de la serie animada, que no es creativa, que no presenta originalidad ni un aprovechamiento acorde de los personajes protagónicos y que, principalmente, deja de lado toda la gracia innata que tenía el oso originalmente. Una cinta para ver en familia, correcta si se va en busca de un entretenimiento pasajero, pero totalmente olvidable si quieren disfrutar de una película que refleje lo que los personajes de Hanna Barbera fueron en el pasado. UNA ESCENA A DESTACAR: Show en el agua.
VIAGRA PARA TODOS Esta es una de esas películas que es casi imposible tratar de definir con una palabra o con una expresión, simplemente porque tiene de todo y mezcla muchos estilos. Este es uno de los errores de la cinta, que si bien cumple su principal cometido que es el de entretener, (antes que nada la película es una comedia), se queda a mitad de camino en cada una de las expresiones reflexivas y cursis que intenta tocar. Jamie es un hombre que trabaja vendiendo drogas en los hospitales, tiene un ego muy grande y es un ganador con cada una de las mujeres que se le aparece en el camino. Un día conoce a Maggie, una muchacha que tiene un problema de salud y que está algo paranoica, ya que piensa que ningún hombre quiere formalizar con ella por su enfermedad. Ellos se enamoran y van a tener que lidiar con sus inflados egos. La cinta claramente se puede dividir en diferentes acciones o situaciones que van mezclando diferentes estilos narrativos y dramáticos. Principalmente, esta película es una comedia romántica, de desencuentros, de vueltas y de previsibles consecuencias. Por este lado, la cinta logrará satisfacer a los espectadores que vayan en busca de esto, ya que el romanticismo es el típico que se puede apreciar en cualquier cinta del género y se logra crear una correcta química entre los personajes principales. Ahora bien, pese a que la cinta no logra destacarse, pero si entretiene, por el lado de la comedia romántica, ésta entra en diferentes terrenos que comienzan a empeorar o a poner a prueba el extremista y poco profundo guión. Todos los temas que se tocan carecen de profundidad y fundamentalmente de reflexión, quedan en la historia como un elemento más para hacer humor o para agregarle una dosis un poco dramática y melosa a la historia. La enfermedad de Maggie, el Parkinson, está muy bien interpretada por Anne Hathaway, pero en ningún momento, salvo por esa charla que ella presencia en Chicago, se llama al pensamiento o la reflexión. El personaje piensa que no se puede vivir tranquilamente con ese problema y el libreto no explora ni va más allá de sus sentimientos, todo se resuelve en un acto de amor sin profundidad ni verosimilitud (el momento en el que Jamie le pregunta al esposo de una mujer con el mismo problema y él le responde de manera inesperada, solo aporta dramatismo, pero cero reflexión al relato). Por otro lado, hay un tratamiento exagerado e incorrecto sobre la medicina, sobre las maneras en las que se aceptan los diferentes medicamentos que se venden, que si bien aportan una cuota interesante de humor, carecen de sentido y de respeto, (se da a entender el viagra es lo mejor; un médico se inyecta testosterona para triunfar por las noches; un vagabundo logra salir de su estilo de vida gracias a unas pastillas que encuentra en la basura; y hay una exhaustiva intención por plantear en todo momento el comercio interno de las clínicas sin importar la salud de los pacientes). Las actuaciones son muy buenas. Anne Hathaway está muy bien en su personaje. Ella demostró que puede encarar un rol dramático y a la vez cómico con mucha soltura ("El casamiento de Rachel", "Secretos en la Montaña" y "El Diablo Viste de Prada"). Aquí le aporta mucho realismo a Maggie, principalmente en las reacciones de su enfermedad, cómo la lleva adelante y en mostrar esa paranoia que tiene con todo hombre que se le acerca y le pide algo más que una noche de lujuria. Jake Gyllenhaal también está muy bien, en especial en mostrar el espíritu ganador de su personaje y los cambios que va teniendo de identidad mientras va madurando y enamorándose. "Love and other Drugs" es una cinta que tiene una correcta historia típica de amor; con un humor entretenido por momentos e innecesarios por otros (erección en el auto, por ejemplo); que tiene personajes secundarios poco inspirados (el hermano metido, las mujeres que se entregan fácilmente); y que divierte si se va en busca de una comedia romántica sencilla y redonda. Pero que falla al plantear superficialmente y no darle importancia a la enfermedad de la protagonista y a desarrollar cuestiones morales algo ofensivas y poco profundas. Bien actuada, con una dirección y una banda sonora muy correcta, y que nunca logra pasar la barrera de seriedad que en todo momento intenta cruzar. UNA ESCENA A DESTACAR: las andanzas de Jamie.
Ser una buena madre es el trabajo más difícil del mundo, eso es lo que muchos dicen. Esta película, escrita y dirigida por Rodrigo García, es una propuesta muy interesante que muestra el trabajo, las reacciones, alegrías, enojos y decepciones de las madres con sus hijos y sus vidas. Una emocionante y profunda película que tiene como principal virtud el ser muy humana y realista.
PREVISIBLE, PERO ENTRETENIDA Da la sensación que una comedia policial con la carismática pareja formada por Angelina Jolie y Johnny Depp difícilmente pueda convertirse en una cinta totalmente olvidable. Lejos de serlo, pero a la vez muy distante de ser un buen filme, "El Turista" tiene buenos momentos de comedia, correctas escenas de humor, actuaciones bien logradas, pero un guión que no profundiza, no aporta dramatismo, ni brida interés para que el espectador siga atentamente la historia. El esposo de Elise está siendo buscado luego de haberle robado una gran cantidad de dinero a la mafia. Él le manda órdenes a su mujer para que pueda devolver el dinero sin ser descubierto, y le pide que encuentre a una persona parecida a él para que se haga pasar por un tiempo por su marido. Es así como aparece Frank, un turista que sin querer se va a ver involucrado en una seguidilla de persecusiones y va a quedar atrapado por la belleza de la bella mujer que lo usó. En esta historia aparece un error que se entiende luego de finalizada la proyección: el previsible, pero a la vez inevitable final, es el principal inconveniente de la película, pero no por ser o no inesperado, sino porque una vez que se sabe la verdad el espectador logra entender las diferentes falencias del guión. La abrupta y a la vez mal manejada conclusión, impide que en los primeros minutos se puedan explicar con profundidad e interés las diferentes decisiones de los personajes, no hay intención inicial por mostrar los sentimientos de Frank o el porqué de su elección al acompañar a la bella dama que lo seduce, son simplemente escenas bien logradas visualmente, pero que están mal escritas, ya que pareciera que los protagonistas hacen lo que hacen simplemente porque hay algo o alguien que los obliga. Son muchos los minutos que se desperdician en diálogos poco atractivos y escenas de humor algo forzadas que pudieron haber sido aprovechados para contar un poco el pasado del personaje masculino y así hacer de el final mucho más sorpresivo e inesperado. Son muchos los minutos muertos en los que nada pasa, en los que se los puede ver a ambos sentados, mirándose y contemplando sus mutuas bellezas. La cinta falla en presentar correctamente a los personajes, a crearles una identidad inicial y, principalmente, en no tratar de convencer al espectador de que lo que está viendo es creíble. Pese a este problema, a los muchos momentos en silencio en los que los minutos avanzan y la historia no va a ningún lado, esta película posee varias características que la hacen, pese a los errores, disfrutable: Las actuaciones son correctas. Angelina Jolie, en un personaje ya transitado varias veces en su carrera, está bien, su belleza aquí es el principal atractivo de su rol y por supuesto le saca provecho. Johnny Depp es quien más se destaca, hace de Frank un personaje inocente y picarón, y le aporta ese histrionismo propio del actor. Paul Bettany, en un papel sencillo, está correcto. Por otro lado, se desarrollan las suficientes escenas de humor y "acción" necesarias como para convertir a esta cinta en una entretenida propuesta familiar. El humor del personaje de Depp está siempre basado en sus expresiones, algo que el actor aprovecha, mientras que hay escenas en las que la gracia se presenta en las figuras policíacas, también bien logradas. Las pocas persecuciones están bien filmadas, esa corrida por los techos está muy buena. La fotografía cuidada y la banda de sonido que muy bien acompaña el relato, también son satisfactorias. "The Tourist" está lejos de ser el desastre que en su país de origen proclaman haber visto, pero también está distante de ser una buena y satisfactoria película, más si se tiene en cuenta el dúo protagónico y la belleza de las locaciones elegidas para filmar la historia. Una cinta que tiene todo lo justo para convertirse en una entretenida propuesta familiar, pero que falla en desarrollar con profundidad los sentimientos, reacciones y actitudes de los personajes principales. Disfrutable, pero nada más. UNA ESCENA A DESTACAR: Frank por los techos en pijamas.
¿MUSICAL? Una historia previsible, que nunca intenta llegar a mostrar su máximo exponente de creatitivad y que cae en la poca credibilidad de sus hechos, acompañada de actuaciones regulares, un dudoso guión, una dirección que no logra llevar adelante con claridad el relato y, principalmente, que nunca se acerca a ser un musical puro. Eso es "Burlesque", una cinta muy regular y desordenada. Ali renuncia a su trabajo y decide comenzar una vida nueva en Los Ángeles. Allí queda maravillada con las rutinas de baile de un bar burlesque. Ella va a hacer todo lo posible por ser parte del grupo de baile. Si hay que tener algo claro antes de ver esta película es que "Burlesque" no es un musical puro, es una comedia romántica con canciones. Las mismas en ningún momento cuentan la historia, sirven solamente como entretenimiento visual y auditivo, bien logradas, pero, salvo por dos que claramente hablan sobre los sentimientos de los personajes, no sirven como eje conductor de la historia, tal como un musical tendría que ser. Es más, si se presta un poco de atención, son muy pocas las lineas de las canciones que están subtituladas, por el simple hecho de que son poco relevantes a la historia. A su vez, y a lo que respecta a las canciones, esta es una de las pocas cintas en las que los personajes, en su show nocturno, admiten que hacen playback y dicen que tienen que coordinar los labios con el sonido de la música, y cuando supuestamente el espectáculo da un giro y las canciones comienzan a ser cantadas en vivo, da la sensación de que nada ha cambiado, ya que la mímica de las actrices es muy pobre, en especial en los altibajos de los tonos musicales y las expresiones de los rostros. Son bastantes los momentos en los que Christina Aguilera tiene que cantar a solas en el escenario y son muy pocos los que se la puede ver mimetizando correctamente las necesidades de las canciones. Este problema se repite continuamente durante todo el transcurso de la película y pone en evidencia los límites del director al tratar de llevar adelante la historia con realismo. Pero pese al inconveniente con las canciones, la cinta se da el lujo de explorar el drama y las idas y vueltas de una pareja que se enamora a primera vista. Lamentablemente, aquí también hay problemas. La previsibilidad aparece, los giros y los cambios de personalidad y actitudes de los personajes son poco coherentes, se presenta a un personaje adinerado que quiere comprar el bar, que narrativamente no va a ningún lado, que seduce a la protagonista y la deja escapar sin problemas (actitud totalmente opuesta a lo que su personaje dice en todo momento) y se invocan situaciones cortas y sin relación con el transcurso del relato que mantienen un desorden visual y narrativo llamativo (a la noche el musicalizador le dice a Tess que tiene que practicar su rutina, ella cansada le dice que si, él le pone play a la música, enciende un reflector y ella se sienta en una silla y comienza la mímica de la canción, casi sin moverse hasta el final. Una de las mejores canciones de la película, pero un momento que no tiene sentido ni coherencia). Las actuaciones son regulares. Christina Aguilera encarna a una muchacha que quiere hacer todo lo posible por entrar en el grupo de baile, bien interpretada al comienzo, pero falla cuando tiene que mostrar sus emociones y los cambios actitudinales de su rol. Cher está correcta, aunque la profundidad de sus sentimientos no se ve claramente en pantalla. Cam Gigandet, en el estereotipo del hombre perfecto, está bien, mientras que Stanley Tucci, en el mejor personaje de la película, aporta calidad y talento a su papel. Indudablemente el diseño de producción es llamativo y está muy bien implementado en escena, la música es atrapante y gira entorno a muchos géneros diferentes, el vestuario es adecuado y la iluminación es oscura y brillante. "Burlesque" es una cinta desordenada, que no presenta llamativos y espectaculares números musicales y que, lamentablemente, está muy lejos de ser un buen ejemplo dentro del género. Una comedia romántica previsible y regularmente actuada. La voz de Aguilera y Cher, el talento actoral de Tucci y un título más que llamativo, esta película pudo haberse convertido en un memorable musical, cosa que no sucedió. UNA ESCENA A DESTACAR: la alegría del final.
¡¡¡FRENEN ESE TREN!!! Aferrarse bien a la butaca, tener cerca algún tipo de tranquilizante y hacer toda la fuerza posible para poder frenar mentalmente este imparable tren. Estas son las principales sensaciones que aparecen en el film de Tony Scott, una cinta de acción que desde el comienzo desarrolla un ritmo veloz y una rápida edición, y que, pese a su simpleza, triunfa por la manera en la que fue llevada adelante. La historia es extremadamente sencilla y no va más allá del principal conflicto: un tren sin frenos ni maquinista y que va acelerando progresivamente, va justo por la misma vía en la que Will y Frank están trabajando. Ellos van a tener que salir del camino y luego tratar de frenar a esta locomotora. El desarrollo argumental es básico y no se plantea ninguna otra situación más que el principal hecho por el que la historia gira, salvo por algunas llamadas telefónicas y un bien logrado momento en el que Will cuenta la relación con su esposa. Pero, pese a esto, la cinta procura contar con lujo de detalles las aventuras de los protagonistas al tratar de salirse de la misma vía que el tren y tratar de frenarlo, y aunque cueste creerlo, no hay momento que esté de más gracias al excelente manejo de los tiempos que el director realiza y al muy buen trabajo de edición y de cambios de cámaras que adornan y hacen más atractivo y tenso el viaje. Se pueden apreciar todos los ángulos imaginables cerca de los trenes: hay cámaras fijas por debajo de los mismos, movimientos que crean un peligro visual muy bueno, muchos encuadres picados acompañados de pequeños movimientos para crear vértigo y desesperación justo cuando la máquina pasa, planos generales muy bellos en los que se pueden ver a los trenes en su totalidad, y una rapidez muy bien lograda gracias a los cortes entre escenas y a la práctica e intencionalmente veloz edición. La característica que aquí más se destaca es precisamente el conflicto de la historia, o sea, frenar el tren. Para que se cree una expectativa y a la vez una locura muy peligrosa al momento en el que los protagonistas deciden participar en el acontecimiento, se llama a un recurso que magnifica y potencia todo lo que está por suceder y que crea un realismo, aunque algo forzado por momentos, muy bien logrado: el periodismo. Al comienzo las reacciones de los medios de comunicación se presentan muy distanciadamente, procurando no entrar en detalles y dándole lugar a que el hecho se desarrolle con tranquilidad y tiempo, al mismo tiempo que se plantea todo el trasfondo político y económico por dentro de la empresa ferroviaria y se inspeccionan las posibles consecuencias de un descarrilamiento de la máquina. Pero, luego de cierto momento el espectador comienza a ver casi todo el tiempo la supuesta cámara televisiva que va documentando los hechos y puede escuchar el relato de los distintos periodistas que van comentando las decisiones de los personajes. Esta característica le aporta mucha versatilidad y una verosimilitud correcta. Las escenas de suspenso están muy bien logradas, al igual que las de acción. A partir de cierto momento, la cinta no para, no frena ni un segundo y comienza a desarrollar escenas excelentes visualmente que, acompañadas de una técnica muy bien aprovechada, son de lo mejor visto en el género del 2010. Ahora bien, hay muchas cosas que se le pueden cuestionar, principalmente a los últimos 10 minutos de duración, que no solo son muy rápidos y no se desarrollan con profundidad las reacciones posteriores al acontecimiento (tampoco era necesario), sino que se cae en la típica resolución de este tipo de películas y en todo momento se juega mucho con los límites entre la fantasía y el realismo. Con actuaciones correctas por parte de Denzel Washington, Chris Pine y Rosario Dawson (son buenas, pero no son protagonistas en la historia), con un tratamiento visual envidiable, con un dinamismo, una locura, suspenso y acción muy bien lograda, y una premisa muy simple pero no por ello menos efectiva. Entretenimiento de calidad. UNA ESCENA A DESTACAR: la curva