Las leyendas de los ninjas nunca mueren, pero cuando supe que Dreamworks iba a sacar un film sobre un oso panda que se prepara para ser unmaestro de Kung Fu, pensé que sería un total y verdadero fiasco. Ahora ya van tres películas -y contando- y lo cierto es que la 3ra entrega supera a las otras dos, dándole mucho más sentido a la historia ancestral de Po (Jack Black). El personaje principal está más desarrollado que de costumbre, acompañado de la madurez propia de la saga. Lo mismo sucede con sus compañeros de equipo, quienes en esta ocasión tienen apariciones mucho más divertidas, en especial Mantis (Seth Rogen) yGrulla (David Cross).Cuando Kai (J.K. Simmons) está decidido a tomar elespíritu Chi de todos los líderes de las artes marciales, el pueblo entra en estado de emergencia y reina el caos con la presencia del peor de todos los villanos; un búfalo que solía ser hermano de Oogway y que se ha convertido su máximo rival. ¡Hasta el maestro Shifu está en peligro! Nadie lo tuvo en cuenta y así se escabulló entre espacios temporales, hasta llegar al día en que nuestro querido panda conoce a su manada y descubre el secreto de sus antepasados.Ahora tiene 2 padres; un ganso y un oso que se ve exactamente igual a él. Uno se encargó de criarlo, pero el otro es sangre de su sangre, por lo que Podeberá hacer malabares entre los celos de su papá emplumado y la emoción de tener al verdadero a su lado, mientras todos los puntos cardinales deChina se entregan a un salvador milenario que aún no está preparado para grandes batallas. El desenlace de toda esta lucha entre poderes del más allá, energías internas y la habilidad de derrotar a un rival con el dedo meñique, da como resultado una típica lección de vida a la que, aunque sepamos que nunca ocurre en la vida real, aceptamos con total entendimiento y disfrutamos junto a los más pequeños.Kung Fu Panda 3 es una experiencia visual mucho más placentera que las anteriores entregas, gracias a que se le ha dado mayor importancia a la cultura asiática; en esta ocasión, Dreamworks Animationprodujo junto a Oriental Dreamworks, cuya sede se encuentra en Shangai y donde se elaboró una gran parte del film. Según fuentes de información, esta saga consta de seis capítulos, por lo que tendremos pandas habilidosos para rato, considerando además que la nueva cinta incluye a cientos de personajes monocromáticos (je) como para seguir adelante con la historia de Po y su vida en familia. ¿Por qué su padre se tardó tanto en regresar? La respuesta se la piden a Bryan Cranston.
Resolver un misterio es una situación que no solamente se da en las ficciones de Sherlock Holmes y similares. La vida diaria nos plantea interrogatorios que requieren de un esfuerzo mental por encima de nuestras capacidades normales. Desde la desaparición de una media, hasta el extravío de llaves de la casa o del auto; todas esas cosas que se ausentan de nuestra vista sin previo aviso generan angustia. Lucas Abadi (Martín Slipak) es un joven abogado que trabaja en un estudio familiar junto a su hermano (Javier Drolas) y su cuñada. Su capacidad intelectual y su curiosidad hacen que no se interese demasiado por asuntos más bien banales. Mujeres, alcohol, vicios… No tienen lugar en la biblioteca del protagonista, junto a sus tan preciadas novelas policiales. Sin embargo, acepta pasar una noche con una atractiva secretaria novata que conoce en Tribunales. Al amanecer del día siguiente, Lucas se despierta un poco perdido, sensación que se extiende por el corto lapso en el que descubre que le han robado los cincuenta mil dólares que había heredado de sus padres y que iba a utilizar para comprar su nuevo departamento. Automáticamente, entramos junto al personaje en un agujero negro de incertidumbre, paranoia, sospechas, y a señalar con el dedo a todos los posibles perpetradores. Si bien el suspenso es de carácter- digamos- inocente, no podemos evitar engancharnos. Este género de películas atrae a la gran mayoría de las personas, justamente por la lógica que manejan. El nuevo film de Gabriel Lichtmann propone una historia interesante, con giros inesperados, buenas actuaciones y música a la altura. El director y guionista hace uso de muchos recursos acertados, para una historia que difícilmente aburra en sus escasos 78 minutos. “Lo que importa es la familia”, dicen por ahí. Pero si lo que está en juego es una bolsa de verdes, nadie se salvará de ser juzgado. Aunque el discípulo de Hércules Poirot que se nos presenta en el guión, tenga como candidatos principales del robo a su cita de una noche, su mejor amigo y la recepcionista de la oficina donde trabaja, su hermano mayor y opuesto de personalidad no se salvará del interrogatorio. 1400474/1400474 Qué me pasó con esta peli a diferencia de otras. Particularmente, suelo encontrar los trailers demasiado informativos. Y cuando digo demasiado, digo: ME CUENTAN TODA LA PELÍCULA. El teaser de Cómo ganar enemigos no cae en ese error (menos mal). Mis expectativas eran bajas en la previa, pero me topé con una obra que me sorprendió para bien, pese a no tratarse de una producción ambiciosa. Slipak es un actor que viene prometiendo desde finales de los años noventa, y no defrauda. Su rostro se funde perfectamente con el suspense necesario, las cuotas de un humor bastante cuidado y el drama que apenas asoma. como_ganar_enemigos_loco_x_el_cine_2 Lo que sí no tiene discusión es que la anterior película de Lichtmann, Judíos en el espacio (2005), guarda muchas similitudes con su nueva apuesta. Hay mucho director argentino talentoso allá afuera, valiéndose de lo que haya a mano para filmar y plasmar lo que sea que funcionó como fuente inspiradora para un cine ante todo inteligente. Estamos de suerte, así que… ¡Mazel Tov!
Toda gran ciudad del mundo tiene miles de propuestas para sus habitantes y/o turistas. París, Nueva York, Londres, Tokio… Y en Argentina tenemos a la querida Buenos Aires. Está buenísimo visitar lugares nuevos, conocer gente con otras costumbres, probar comidas y bebidas; en especial cuando uno está de vacaciones. Mateo (Benjamín Vicuña) y Trini (Sabrina Garciarena), arriban a un hotel porteño en pleno verano. La pareja está dispuesta a vivir una semana a puro relax, pero las cosas no irán tan bien como esperaban. Y no hablo de olvidarse la clave del candado del equipaje o de perder los anteojos de sol en un paseo. ¿Vieron que a veces uno suele utilizar la frase “por algo será…”? Bueno, lo primero (y lo mejor) que le podía pasar a Mateo fue conocer a Nacho (Germán Palacios), un policía encubierto. Digo esto porque una vez que se le hace agua la fiesta al chileno, no tendrá otra opción que acudir a los servicios de su “amigo” justiciero. Y es que en pleno boliche, la noción de tiempo y espacio se perderá cuando Trini y Mateo sean secuestrados por una banda narco. Aunque Eric Le Blanc (Carlos Belloso), jefe de esta mafia imposible de erradicar, intenta ser de lo más simpático y diplomático con los tortolitos, lo cierto es que a nadie le agradaría la idea de tener que transportar droga de una ciudad a otra como si fuera lo más normal del universo. locoxelcine_baires_palacios El plan está clarísimo, sin embargo, el protagonista tendrá los cojones de hacerles frente a estos monos narcotraficantes, desencadenando una serie de hechos que incluirán armas, piña y patada, persecuciones, rodeos y una infinidad de personajes implicados. Esta es la segunda película como director de Marcelo Páez Cubells, quien en 2012 había estrenado ‘Omisión’, y que además fue el guionista de ‘Boogie, el aceitoso’ (2009). De una producción a la otra se nota un progreso enorme, especialmente desde lo visual. Las tomas panorámicas de Capital Federal al ritmo de piezas musicales vibrantes lo trasladan a uno hacia la pantalla. Claramente la intención era que el espectador fuese un miembro más de esta recorrida por Buenos Aires. Lo mejor de todo, según mi gusto personal, es la actuación de Palacios. El actor, que quizás participa en menos proyectos que otros de la misma talla y talento, elabora a un experimentadísimo y despreocupado personaje que funciona como el soporte perfecto para el desorientado Mateo, cuyo destino está en juego. Algo así como la ley de las siete personas por las que uno necesita pasar antes de dar con aquel a quien está buscando, esta suerte de dúo improvisado de investigadores recorrerá los mil y un sitios- interrogando y golpeando gente de por medio- hasta llegar a la respuesta final. locoxelcine_baires_vicuña BAIRES presenta muchos vuelcos en la trama; giros inesperados propios de un thriller. Es bastante magnética, llena de planos cortos presentes en tomas largas de escenas sugerentes (uf!). Hay mucha escuela cinematográfica metida dentro de la peli, pero sobre todo hay una historia de trasfondo demasiado realista, lamentablemente. Todo lo atractivo que puede tener una metrópolis se funde en las fauces de la corrupción, la inseguridad y los peligros que también vienen aparejados con las aglomeraciones urbanas. Tan lindas que las vemos en pantalla gigante y resulta que tienen esa otra cara, oculta bajo las sombras. Atención porque eso no viene en el mapita de viaje. Igual, quién se va a negar a un entretenido paseíto por ciudades tan bellas, ¿no?
No quiero sonar a programa de televenta, pero… Llega la nueva película de uno de los directores más exitosos en la historia del cine. El tipo nació en 1935, y ha estado escribiendo y dirigiendo desde la década del 50. Woody Allen ha mutado bastante a través de su trayectoria como cineasta, en especial si comparamos las películas en las que él actuaba con las que ya no lo hace. Eso sí, nunca puede faltar un personaje femenino fuerte o dominante, además de actuaciones que jamás olvidaremos. Desde “Qué pasa, Tiger Lily?” (1966) hasta el film que le da título a esta reseña y dos proyectos todavía sin título, que incluyen una serie, el también clarinetista oriundo de Brooklyn ha apadrinado al cine con un estilo más que propio. Abe (Joaquin Phoenix) es el nuevo profesor de filosofía que genera demasiada expectativa con su llegada a la universidad. Por un lado cautivará a Rita, otra de las enseñantes, quien “oh, casualidad” está viviendo una crisis con su marido. Por otro lado está la alumna Jill (Emma Stone), una chica correcta, estudiosa y de buena familia, que rápidamente tendrá los locos pensamientos de cambiar a su novio de toda la vida por la novedad del vecindario. El problema es que Abe no se siente con muchas ganas de agradecerle al cielo el estar vivo a diario, y se siente como un bicho raro entre tanto acoso junto. Sin embargo, accidentalmente oirá una conversación que cambiará por completo su forma de ver las cosas; algo que le dará sentido a su actual vida. No sé si ahondar en esto o no, porque aunque quizás lo vean en el tráiler, lo que da inicio al nudo de la película es un hecho curioso y muy entretenido. hombre_irracional_loco_x_el_cine_1 Hombre irracional (Irrational Man) no es una obra de arte ni mucho menos, pero tiene cierto poder hipnótico en sus tomas sugerentes, sus personajes pintorescos y paisajes llamativos. De pronto parece no haber sido filmada en nuestra época, un recurso que Woody sabe usar muy bien, metiéndonos siempre en atmósferas muy avocadas a la trama. Por supuesto que también hay un humor intrínseco, ese que nunca falta, y que se combina a la perfección con el estado depresivo de su protagonista. Joaquin Phoenix es un actor destacadísimo, que tranquilamente puede hacer gala de papeles diversos sin pisarse con ninguno. Siempre que vemos un drama o un thriller con muertes implicadas, partimos desde la base de “quién habrá matado a tal…”; cuando damos vuelta esa premisa, la misma se apropia de quienes están expuestos en la pantalla, a la vez que los espectadores nos convertimos en testigos oculares y nos entretenemos con el mal rato que están pasando esos ilusos personajes. La historia sorprende por su realismo, llevándonos a pensar lo fácil que puede resultar a veces meterse en un lío pesado de verdad y lo difícil que es salir airoso del mismo, por más disimulado que uno se muestre. WASP_DAY_10-0299.CR2 WASP_DAY_10-0299.CR2 El guión saca mucho provecho de su perfil filosófico, justificándolo todo en el existencialismo. Kierkegaard y Heidegger son algunos de los nombres que sonarán a lo largo de la película. Tal y como dice el dicho, “Siempre habrá un roto para un descosido”. Es decir, siempre habrá alguien que gustará de las rarezas de otra persona, aunque eso parezca una misión imposible. Hombres y/o mujeres que no obedecen demasiado a la razón y actúan por mero instinto todavía los hay, por eso mi consejo es: No te dejes cautivar, son un espejismo.
Hace un año que Julián está planeando un viaje muy, muy largo. Un viaje que no tiene boleto de regreso… ¿Me explico? Lo que más le interesa en la vida es el bienestar de su mejor amigo perro, quien dio nombre a la película. Tener la hora señalada es una experiencia que prácticamente nadie quiere vivir en carne propia, pero hay veces en que los caprichos del destino hacen que uno tenga que abandonar a los seres queridos mucho antes de lo que nuestros padres lo habrían planeado al momento de crearnos. Hay que tener mucho tacto para escribir y contar un guión sobre alguien que padece una enfermedad terminal, la cual se toma de una manera muy particular, y además meter en el medio una historia de amor eterno entre un can y su dueño; algo que sensibiliza a una enorme porción de personas. El catalán Cesc Gay no enumeró prejuicios a la hora de hacerlo y se lanzó a la pileta con Truman (2015). Ricardo Darín protagoniza esta comedia dramática junto a Javier Cámara, quien interpreta a un viejo amigo llamado Tomás. La “acción” comienza en Canadá, donde él vive junto a su familia, pero enseguida viaja a Madrid por cuatro días para visitar y despedirse de Julián. Ambas personalidades no son muy compatibles que digamos, pero cuando alguien está en una situación tan compleja, no hace más que adoptar una posición de compasión. Sin embargo, no todo el mundo se siente cómodo con esa actitud. Julián es un tipo que demuestra haber disfrutado sus años de juventud, entonces, prefiere acelerar las cosas y que nadie lo tenga que ver postrado o algo así. Pese a que tiene un hijo estudiando en Holanda y una ex esposa en algún otro barrio madrileño, prefiere pasar sus días con Truman y molestar otro tanto a su prima Paula (Dolores Fonzi). truman_loco_x_el_cine_2 Todo aquel que haya atravesado por una situación emparentada con la historia de esta película, se sentirá algo tocado. Ya sea desde el humor negro, las despedidas, el malestar diario, etc. Aunque todo esté hecho con respeto, siempre habrá alguien que lo tomará como un golpe bajo. En España está teniendo un éxito sensacional, veremos qué pasa con los argentinos y resto de Latinoamérica. A menos que se trate de asesinos seriales o géneros similares, la muerte es un tema muy difícil de tocar. Pero elegir ver el film pasa por cada uno, ya están advertidos. Truman es tierna, a veces graciosa (todo por obra de Darín); y también muy “humana”. Porque más allá del tema delicado que aborda, es lo más natural del mundo tener que enfrentar algún día, de una manera u otra, el sueño eterno. En este caso, el perro funciona como herramienta o nexo para explicar ese desprendimiento que uno necesita hacer de lo terrenal. Incluso hasta te lleva a pensar en qué afortunado es aquel que cuenta con el tiempo suficiente como para decir adiós, por más feo que eso suene. truman_loco_x_el_cine_1 Las actuaciones están muy bien. De todos modos, si hubiesen sido fallidas, la peli hubiese resultado un total fiasco. El director hizo una elección correcta de casting, acompañó con una muy buena fotografía y se animó a trabajar con una mascota, algo que no es muy recomendable que digamos. Hasta las lágrimas, con nudo en la garganta o sin inmutarse… El público de “lo nuevo de Darín” será muy heterogéneo. Pero lo que sí, hay que verla en tono realista (aparentemente se basa en una experiencia real vivida por Cesc Gay), fuera de que te tomes o no con humor la vida después de la muerte.
Eso de mezclar a criaturas míticas de antaño con los tiempos que corren es una de las ideas más geniales que se han llevado a cabo en lo que a animación respecta. Drácula, Frankenstein, La Momia, El Lobo, El Hombre Invisible, Pie Grande… Y una lista interminable de monstruos copados. En la primera entrega, papá Drac lidiaba con la adolescencia de su hija Mavis, algo complicado de llevar adelante cuando no está mamá presente. Para colmo de males, la nena se enamora de un humano común y corriente llamado Jonathan, quien cae al hotel por pura casualidad, luego de perderse en su odisea mochilera. Justamente, la hostería cinco estrellas fue hecha para alojar a todos esos seres que se hicieron famosos por tantas películas que protagonizaron y que son una leyenda no apta para convivir con gente como nosotros. Pero acá los amigos son re buena onda, y a pesar de que hayan sido seres humanos retrógrados quienes asesinaron a la madre de Mavis, aceptan a Jonny como uno más de la familia. Claro, no sin antes pasar por las garras de Drácula. Finalmente, vivieron felices y comieron perdices, y ya en la segunda película se casan y tienen un pequeñín muy tierno llamado Dennis. El niño es la obsesión del abuelo vampiro, pero no específicamente por lo que implica tener un nieto, sino porque espera que pronto le salgan colmillos y se convierta en un monstruo más. De hecho, él lo llamará: Dennisovich. Dracula (Adam Sandler), Frank (Kevin James), Wayne (Steve Buscemi), Dennis (Asher Blinkoff) and Griffin the Invisible Man (David Spade) in Columbia Pictures and Sony Pictures Animation's HOTEL TRANSYLVANIA 2. Entonces, si el pequeño es “normal”, podrá vivir en California junto a la familia de Jonathan. Pero si resulta ser sobrenatural, permanecerá en el hotel. Para Drácula no hay tutía, y con la complicidad de sus legendarios amigotes, pretenderá enseñarle al pelirrojín a ser todo un héroe monstruoso. Las locuras que todos ellos harán son descollantes, mientras la pareja recién casada visita el hogar californiano de los padres de Jonny. Una mezcla de ternura, diversión, espectaculares voces-en su versión original- y un 3D bastante aceptable, para todos aquellos que opten por verla en esa dimensión. Nunca dudé del poderío creativo de Genndy Tartakovsky, gracias a que durante mi infancia me trajo “El laboratorio de Dexter”, uno de mis cartoons preferidos. El guión estuvo a cargo del propio Adam Sandler, la voz del transilvano más importante. hotel_transylvania_2_loco_x_el_cine_3 Imperdibles gags de la mano de los secuaces de Drácula, quienes esta vez demostrarán mucho más (bue, no tanto) de esos poderes que los hacen especiales. Incluso conoceremos al vampiro más vampiro de todos; padre de Drácula, bisabuelo de Dennis, quien como frutilla del postre aparecerá y hará valer sus minutos en pantalla. Por suerte no tiene demasiado para reprocharle, la peli entretiene y puede seguir tirando secuelas tranquilamente. Imagino que querrán saber si finalmente el bebé de la familia será un Dennis o un Dennisovich. Bueno, eso vendrá al cumplir sus 5 añitos de edad y… No, claro que no lo voy a decir, sería el peor spoiler de todos. hotel_transylvania_2_loco_x_el_cine_2 Supongo que cada cual elige a su personaje favorito. El mío sin duda es Wayne, el lobo (Steve Buscemi), quien debe lidiar con su loba embarazada permanentemente y con una cantidad, a la fecha, de 300 lobitos. Pulgares, garras y colmillos arriba para Hotel Transylvania 2, film que sabe combinar la tecnología que manejamos hoy en día con la antigüedad y el tradicionalismo de los ultratumberos (¿?).
¿Mad Max? ¡Mad Madec! Jean-Baptiste Léonetti es un director francés con un prontuario bastante escaso, que acaba de lanzarse al cine hollywoodense con un thriller protagonizado por Michael Douglas y Jeremy Irvine. Un adinerado empresario contrata una excursión de cacería en pleno desierto de Mojave. Su guía es el joven y tímido Ben, un chico que se conoce todos los rincones de la zona. Tan ansioso está Madec por cazar su primera presa, que accidentalmente dispara y mata a un lugareño. Ni lerdo ni perezoso, el tipo se ensaña con un plan por culpar a la única persona que fue testigo de lo ocurrido, convirtiendo el “paseo” en un total infierno (y no lo digo por el calor). Armados con una camioneta que bien podría tratarse de uno de los Transformers de Michael Bay, bajo un sol ardiente durante el día y un frío calador durante la noche, Madec y Ben comienzan un juego de gato-ratón en medio de los escasos recursos que provee el desierto. Negado rotundamente a llegar a un acuerdo con ese viejo loco, Ben intenta escaparle a la posibilidad de que lo acusen de asesino, pero su “cliente” toma el mando de las armas, la ropa, el agua y todo lo que es de extrema utilidad para sobrevivir ante un ambiente tan hostil como lo es el hogar del Coyote y el Correcaminos. duelo_al_sol_loco_x_el_cine_1 Muy poco diálogo, buenas mezclas de sonido, un villano-por momentos- oxidado y un guión que tranquilamente podría ser real. Sin embargo, lo bueno se topa con alguna que otra situación prácticamente imposible para seres humanos comunes que se enfrentan a las fauces de un sol abrasador (teléfono para el departamento de maquillaje). No hay mucho que decir de esta persecución nacida por puro capricho del destino, donde Michael Douglas se convierte en una suerte de Cruella de Vil y Jeremy Irvine en uno de sus preciados cachorros dálmata. Un hombre acostumbrado a los negocios de alto alcance económico que se aprovecha de la poca experiencia de un veinteañero que necesita dinero para salir adelante, intentando zafar de los barrotes con sus millones de dólares. Lo que no sabe es que el pibe que tiene enfrente es un humilde, pero muy inteligente servidor que no cederá porque sí a convertirse en víctima ni victimario de nadie. duelo_al_sol_loco_x_el_cine_2 El mayor problema de la película, aunque tampoco estamos hablando del éxito del año, deviene con el final; ahí se torna todo un poco raro, a comparación de lo que veníamos viendo. Es cierto que los hombres con mucho poder suelen salirse con la suya y dejar en el camino a más de uno con tal de escalar alto. A la hora de mostrar debilidades, sorprenden con las reacciones que experimentan. Reacciones que la mayoría de las veces tienen que ver con un pasado oscuro. Pero ya estaríamos utilizando palabras mayores, porque el malo del film es bastante caricaturesco y lo que menos genera es incomodidad, rechazo o miedo. Seguramente la novela de Robb White en la que se basa este guión de Stephen Susco, “Deathwatch”, tuvo muchísima más aceptación en la década del 70, cuando fue publicada. Y es que en ese entonces lo “western” estaba al día y en complicidad con el público del momento, hecho que hoy no es tan común. En conclusión, recomiendo probar con el libro y luego ver “Duelo al sol” (Beyond the Reach, 2014), en orden de tener una visión más completa de la psicología de los personajes, un detalle importante que no puede plasmarse en tan sólo 91 minutos. Michael Douglas y Glenn Close, los hermanos sean unidos (¿?).
Corre ya 1958 en Frankfurt. Hitler ha dejado una huella imborrable, pero al parecer el pueblo alemán aún no entiende el alcance que los campos de concentración tuvieron hace más de diez años atrás. Sin embargo, bastará con que uno de los sobrevivientes de aquel horror reconozca a un ex oficial de la “SS” destinado en Auschwitz, trabajando como maestro en una escuela primaria. Primero la denuncia será exclamada a vivas voces por un periodista, sin resultados positivos. A excepción de Johann Radmann (Alexander Fehling), un joven fiscal que apenas está comenzando y que se hace cargo de las multas de tránsito. El fiscal general será quien designe el caso al entusiasta novato; caso que no será para nada sencillo considerando la cantidad de hombres que acataron órdenes nazis durante el exterminio, las miles y miles de personas que fueron asesinadas, el hecho de que los crímenes de guerra hayan expirado luego de 1945 (a excepción del homicidio) y la protección que estos asesinos recibieron por parte de poderosos altos mandos luego del holocausto. laberinto_de_mentiras_loco_x_el_cine_1 Los archivos que documentaban lo sucedido existían, solo que en medio de un silencio atroz. Para juzgar a cualquier culpable, se requieren pruebas contundentes. Y eso fue lo que hizo el protagonista; recabó testimonios, reunió material fotográfico, listas de implicados… A medida que él y muchas otras personas a su alrededor iban descubriendo el horror en su máxima expresión. Es difícil y discutible creer que muchos alemanes (sobre todo los jóvenes, según el guión del film) ignoraran lo ocurrido durante la guerra. Fuera de ese detalle, el guión es sumamente atractivo. De todas maneras, lo importante de esta historia verídica es que Johann Radmann logró desenterrar todo lo sepultado bajo un laberinto de mentiras, para llevar a juicio a más de cien hombres que no mostraron arrepentimiento alguno de haber sido cómplices de uno de los hechos más aberrantes en la historia mundial. Por pedido de una víctima, el fiscal centró su investigación en el caso de Josef Mengele, mejor conocido como “El ángel de la muerte”, ese médico que tantos experimentos hizo con niños y demás criaturas inocentes, y que como recordarán de la película argentina de Lucía Puenzo, Wakolda (2013), se refugió en Argentina los últimos años de su vida. laberinto_de_mentiras_loco_x_el_cine_3 El cine alemán atraviesa un periodo de excelente crecimiento, pese a los obstáculos con que se encuentra a la hora de distribuir producciones a otros países. La película es muy buena, interesante de principio a fin, con esa estética atrapante que todo film ambientado en épocas pasadas suele tener. Aire fresco escuchar otro idioma que no sea el inglés y toparse con una calidad histórica y visual que muy poco se ve por estos días en el cine de Hollywood; amo y señor del rubro por contar con el poderío suficiente como para hacer llegar su industria al mundo entero. laberinto_de_mentiras_loco_x_el_cine_2 Ni el director ni el protagonista cuentan con amplia carrera cinematográfica, pero eso no impidió que Laberinto de mentiras (2014) se alzara con algún que otro merecido premio. Si pueden, dense una vuelta por este festival porque tiene mucho (y bueno) para ofrecer. Todavía mejor si les atrae la temática del film que acabo de reseñar, porque no se van a arrepentir de haberlo visto. Su estreno comercial tendrá lugar el jueves 17 de septiembre, así que ya saben, hay muchas oportunidades de ver y disfrutar la película.
La maternidad. Una asignatura que no se enseña en ninguna escuela o universidad. Para una mujer, convertirse en madre es el acontecimiento más importante que pueda experimentar en su vida, porque el lazo que se forma entre ese ser que crece durante nueve meses dentro del vientre, no se destruirá jamás. Tomando como punto de partida esta temática tan amplia, la directora Ana Katz construyó un relato que roza los límites de la comedia, el absurdo, el drama y hasta el suspenso. Liz (Julieta Zylberberg) es una joven que está transitando sola los primeros meses de esa aventura. Su pareja se encuentra trabajando a unos cuántos kilómetros del hogar y para ella todo es incertidumbre. No sabe muy bien qué es lo mejor para sí o para el bebé, sin embargo hace su mejor esfuerzo. Se siente algo frustrada y atormentada por el hecho de que no puede amamantar, y no quiero sonar redundante, pero esa es una cuestión que toda madre se toma muy a pecho. A diario da un paseo por el parque; un cambio de aire en todo sentido, tanto para mamá como para Nicanor. En una de esas caminatas, conoce a Rosa (la mismísima Ana Katz), con quien entablará una suerte de amistad llena de preguntas sin responder. Está bien que la normalidad no la define nadie, pero digamos que su nueva amiga no es del todo cuerda, algo que Liz descubre desde el primer momento, cuando la “obliga” a abandonar un restaurante sin pagar la cuenta del almuerzo. A partir de ahí, todo será una sutil locura. Rosa involucrará a su hermana Renata (Maricel Álvarez) – sí, las hermanas “R”- y pretenderá que una pobre, insegura y confundida Liz haga algunas cosas que no tienen demasiado sentido. Mientras tanto, la maternidad de la primeriza sigue transcurriendo; Gustavo (Daniel Hendler) está lejos, Nicanor empieza a pasar cada vez más tiempo con su niñera… Caos. Así, tan de repente y sin aviso previo. mi_amiga_del_parque_loco_x_el_cine_1 Lo bueno de la película es que el espectador se siente igual de desorientado que la protagonista. No sabemos si lo que estamos pensando va a pasar o no, no sabemos si las decisiones que toma son las correctas. Lo que seguro sabemos es que no queremos ser ella. Todo lo que se insinúa y parece tomar un rumbo gravísimo termina siendo casi un juego de niños; algo que habla de lo retorcida que puede ser la mente del ser humano. Visualmente, el film es sencillo, pero el guión está muy bien pensado y las actuaciones logran transmitir lo que Ana se propuso con cada personaje. Buen mérito para su productora, directora, guionista y actriz. La historia es tan enredada como lo pueden ser las inservibles opiniones aisladas de otras madres en el arenero de una plaza. Tan enredada como alimentar, entretener, asear y dormir a un bebé. Tan enredada como querer retomar un trabajo que abandonaste el mismo tiempo que la edad de tu hijo. Sí, es verdad, las mujeres solemos revolucionar bastante el mundo que nos rodea cuando nos sentimos abrumadas ante una situación. No es para menos. Y hasta quizás desatar el nudo del cordón sea un poco más simple de lo que aparenta. Nadie está calificado para juzgar el accionar de otro ante determinada situación, porque la historia personal de cada uno es única y tan propia como su ADN. Lo que más destaco de esta obra es que venga de una mujer, ya que puede exteriorizar con más certeza qué podría preocuparnos y qué aliviarnos. Una propuesta interesante que expone algo muy realista en medio de la cantidad de ficciones que vemos. Nada alocado, nada que saldría en un noticiero, sino algo que te coloca en la posición de “Qué haría yo en los zapatos de Liz”.
La combinación es explosiva. Dirige Jonathan Demme (“El silencio de los inocentes”,”Philadelphia”), escribe Diablo Cody (“La joven vida de Juno”) y protagoniza Meryl Streep (para qué enumerar, ¿no?). Lástima que la película apenas si funciona gracias a la multifacética actriz a quien todos amamos. Linda (Ricki, para los amigos) es la voz y guitarra de una pequeña banda californiana que noche a noche realiza simpáticas performances en un típico bar de la zona, donde los clientes de siempre van a tomar un par de cervezas, pasar un lindo rato y quizás hasta bailar un poco. Ella disfruta a pleno de esa vida rockera que lleva, en un lugar donde es prácticamente una eminencia. Pero no se olvida de todo el prontuario que la precede. Y es que Ricki atravesó hace muchos años, un divorcio que la alejó de sus tres hijos, culpa de ese sueño caprichoso de convertirse en la líder de una banda. A diferencia de otras, la oriunda de Indiana tiene la posibilidad de tomarse una revancha cuando su hija cae en una depresión debido a la infidelidad de su marido nuevecito. Por pedido de Pete, su ex (Kevin Kline), Ricki aborda el primer avión que consigue con destino a la cuidad que tantos malos recuerdos le trae. Al llegar, los encuentros serán de la incomodidad suficiente y acordes con la situación que se está viviendo. Eso de balancear una carrera artística con una madre presente no es algo que se le dé mucho, sin embargo algunas cosas salen mejor de lo esperado. Por supuesto que habrá choques y roces típicos a medida que nuestra oxidada rockera se vaya enterando de un montón de cuestiones antes pasadas por alto. Lo que es extraño del film es que en ningún momento despega. Si no fuese por lo genial que es Meryl Streep haciendo lo que sea que haga, desde cantar Lady Gaga hasta atender la caja de un supermercado para ganarse unos pesos extra, la película sería un carreteo constante. ricki_&_the_flash_loco_x_el_cine_2 Sí, tiene alguna cosita perdida para rescatar, pero no sorprende, no termina de arrancarte esa risita tímida que te estaba saliendo, no deja nada a punto de reflexión; es un “ni”. De hecho hay escenas largas sobrantes que podrían haberse ahorrado, porque no hacen a la esencia de la historia. Más drama que comedia, más musical que otra cosa, “Ricki & the Flash” puede pasarse de largo sin pena y esperar para verla en casa. Qué complicado es intentar desandar caminos cuando los años han pasado y ya ni la época te corresponde. Cuando todos rehicieron sus vidas aunque sigas estando presente en sus pensamientos diarios. Cuando todo el daño que no te percataste que habías hecho se vuelve en tu contra y está fuera de control. Bueno, Ricki eligió cantarle a todo eso, a modo de quitapenas. Difícil no juzgar las decisiones tomadas por este potente personaje femenino, pero la vida avanza y no existe freno de mano. ricki_&_the_flash_loco_x_el_cine_1 Una trama lenta, actuaciones simplemente correctas y mal aprovechadas, un guión bastante pobre y una plaga de clichés invadiendo el plató, son los ingredientes que se utilizaron para una experiencia que terminará extraviándose entre tanto estreno junto. Una pena que los únicos momentos picantes del film vayan de la mano de una pequeña banda arriba de un escenario y no de esa combinación explosiva que les mencioné al principio. Me hubiese gustado más emocionarme con la historia de una familia frustrada que entusiasmarme con las pegadizas melodías que ofrece el espectáculo. Igual te banco en todas, Miranda Priestly, no me importa que se re notara que los tatuajes cual Axl Rose eran horriblemente falsos.