El papá musical Retrata una época en la vida de una niña, que ama a su padre, aceptándolo como es. Un film entretenido y dulce, bastante melodramático, en el cual la directora y guionista tiene la posibilidad de contar una parte de su vida, quizás la más emotiva hasta el momento. Las buenas intenciones (2019), una comedia dramática ambientada en Argentina durante la recesión económica de la década de 1990, marca el debut cinematográfico de la directora y escritora Ana García Blaya. Es un retrato semiautobiográfico de una familia fragmentada por circunstancias difíciles y personalidades rebeldes, pero unida por un fuerte amor. El padre de características adolescentes, Gustavo (Javier Drolas), vive para tres cosas: fútbol, rock and roll y sus hijos. Luego de separarse de Cecilia (Jazmín Stuart) comparten la custodia, a pesar de la incapacidad de Gustavo de cumplir con los horarios o generar suficientes ingresos para cubrir su parte de los gastos. Gustavo es dueño de una tienda de discos junto a su amigo Néstor (Sebastian Arzeno), pero el negocio es pobre, con casetes piratas a precios de ganga que comprenden la mayor parte de sus ventas. Su eterna comodidad se altera cuando Cecilia y su pareja actual Guille (Juan Minujin), deciden comenzar una nueva vida en Paraguay, y llevar a los niños con ellos. Amanda (Amanda Minujin), la hija mayor no está de acuerdo. Ana García Blaya ejecuta una buena dirección en cuanto a captar la esencia de su padre, su entorno y el recuerdo que tiene de él y esa época feliz y agridulce; sin embargo, resulta algo tedioso y chocante el uso del recurso de la música, acompañado de videos caseros reales -a modo de documental familiar-, y, otros protagonizados por los actores del film. Estos recursos abruman y se sienten forzados en ciertos tramos con la finalidad de lograr en el espectador una emoción sublime, mayor a la que debería darse de manera natural. En cuanto al guion, se puede decir que es prolijo, de estructura dramática simple y correcta, aunque la música ayuda mucho a otorgar el ritmo necesario para lograr fluidez. Cabe destacar la excelente recreación de la época. Las interpretaciones en general son atinadas, llama la atención la escasa interacción de un actor como Juan Minujin. Resulta muy acertada la interpretación de Jazmín Stuart en el rol de la única persona mesurada en todo el relato, quien aporta sensatez, en lo que sería , sin su existencia, un caos total. Realmente muy creíble y es probable que sintamos empatía con su personaje, ya que es el más justificado. Las buenas intenciones es un film entretenido y muy tierno, se trata de la historia de la propia directora y guionista, que pone el foco en la idealización que suelen tener las hijas por su padre. Que a pesar de sus errores y falencias en su rol, lo aman tal cual es, justificándolo siempre. Es un sentimiento único e irremplazable, su primer amor, de una fuerza que traspasa el tiempo y a todos los otros amores que transitará esa niña a lo largo de su vida.
Mito judío El terror folclórico se ha puesto de moda en los últimos tiempos, es así que llega a la pantalla grande la historia de una personificación medieval de la mitología judía, un ser fabricado a partir de barro. La protagonista tendrá buenos motivos para darle vida a una bestia que tiene como misión proteger a su pueblo, sin embargo, tomará un enorme riesgo ya que darle vida a un monstruo se puede volver en su contra. Golem: La Leyenda (The Golem, 2018), es un film israelí de los directores Doron y Yoav Paz, quienes escarban en la arcilla para devolver a la vida al más terrorífico de los mitos judíos: el Golem. En pleno siglo XVII cuando Hanna (Hani Furstenberg) está transitando problemas con su marido Benjamin (Ishai Golan) después de perder hace 7 años a su hijo. Desbastada por una plaga y debido al ataque de malignos invasores, usará los poderes de la Kabbalah para gestar una criatura que defienda a su comunidad. El lazo entre Hanna y su creación será tan estrecho que ella será incapaz de ver cuán peligrosa es. Los directores crean una atmósfera adecuada y lúgubre, utilizando la iluminación, movimientos de cámara y música como herramienta necesaria para generar misterio. No obstante, la ambientación de la época no resulta creíble y el guion se siente forzado e incoherente, resultando más aterrador el supuesto enemigo, que la aterradora criatura, que toma la forma de un niño. El relato alterna varios tópicos que no se relacionan con la idea central y motivación del film. Para aquellos fanáticos del género de terror, se encontrarán con un cine gore, que se centra en lo visceral y la violencia gráfica extrema y exagerada, mutilación y demás efectos especiales aquí muy forzados. El real Golem aparece cuando comienza el film, con lo cual, la figura del niño desconcierta bastante, pero luego se comprende por el sustrato dramático relacionado al protagonista. Golem: La Leyenda esconde un mensaje no esperado y se trata del papel que juega la mujer en la religión y en la sociedad. Cuál es su deber, qué debe hacer y qué no, una reflexión con respecto a la maternidad. La identificación y el amor materno que se despierta en ella y una manera muy siniestra de dejar atrás el pasado con la esperanza de rehacer su vida. Temas que pensamos quedaron en esa época de caballos y carretas, sin embargo, siguen vigentes en una sociedad en donde aún el patriarcado cobra un lugar muy importante.
Eres asombroso Un film conmovedor e informativo acerca de la adopción que nos invita a reflexionar en profundidad sobre la vida, de una manera diferente y realista. Pasando por cada momento del proceso de adopción, la película nos hace comprender las dificultades de adoptar a una criatura y en este caso, la necesaria e inevitable "burocracia". En buenas manos (Pupille, 2018) cuenta la historia de una mujer que decide entregar a su bebé recién nacido en adopción. La directora y guionista francesa Jeanne Herry plantea el tema desde un lugar diferente y nuevo, siguiendo de cerca lo que sucede con Theo, el bebé protagonista, a Jean (Gilles Lellouche), que trabaja cuidando transitoriamente a los niños, a Karine (Sandrine Kiberlain), una asistente Social y a Alice (Elodie Bouchez), que adopta a Theo. Detrás del papeleo que no vemos, existen muchos profesionales, cuyas vidas dependen de sus decisiones. Es notable la fluidez y naturalidad con la que transcurre el relato, pues resulta difícil imaginar que hay una cámara y una directora siguiendo cada detalle, tratándose de un tema tan delicado. La ternura y belleza de los planos detalle de las pequeñas partes del cuerpito del bebé recién nacido, sus ojitos, sus manos y sus ruidos tan particulares, transmiten fragilidad, como así también, su dependencia del mudo adulto, con los planos generales de los mayores que toman decisiones sobre su vida. Del trabajo de Jeanne Herry se destaca un inteligente y sensible guion que se encarga de contar una historia pocas veces relatada y a la vez informar sobre el tema, tocando la realidad de cada personaje con sumo respeto y con fuentes fidedignas. Las actuaciones son inmejorables y la construcción de los personajes también; cada suceso ocurrido, funciona como nexo para construir una sólida historia que otorga sentido y credibilidad al espectador, atrapándolo, emocionándolo y también consiguiendo su empatía con todos los personajes. Este film relata el comienzo de una vida muy endeble. ¿Cuál será su destino? Nadie sabe. Aquí sólo se muestra un comienzo, uno muy particular, puesto que depende de seres que se prepararon para ayudarlo desde sus primeros días. Transitamos diferentes emociones: impotencia, incomprensión, amor, ternura, miedo, debilidad, frustración, enojo, calidez, etc., sentimientos y sensaciones que nos acompañarán durante el film.
El Irlandés "Pequeña Italia" Durante los últimos 50 años, el cineasta ganador del Premio de la Academia Martin Scorsese ha creado películas icónicas como Taxi Driver (1976), Goodfellas (1990). Aquí nos sumergimos en las marcas registradas de Martin Scorsese, que regresa con The irishman (2019), una saga del crimen organizado en la América de la posguerra que se cuenta desde el punto de vista de Frank Sheeran (Robert De Niro), un ex soldado de la Segunda Guerra Mundial que se convirtió en estafador y asesino a sueldo, trabajó junto a algunas de las más importantes y poderosas figuras del siglo XX, abarcando varias décadas. La película cuenta uno de los misterios insondables en la historia de los Estados Unidos: la desaparición del legendario líder sindical Jimmy Hoffa (Al Pacino). También ofrece una inmersión monumental en los misterios de la mafia al revelar su funcionamiento interno, sus luchas internas y sus vínculos con el mundo político. Cuando una película comienza con un plano secuencia que es una lección cinematográfica, sumamente cuidado y al estilo de Scorsese, ya sentimos que disfrutaremos de una gran película. Es, sin lugar a dudas, uno de los mejores cineastas y ésta una candidata a recibir todos los premios y la considero, una de las mejores películas del año. Es un film muy Scorsese, sus paneos, su completo manejo de la cámara, las escenas de violencia como un torbellino tan realista, consiguen que vivamos el relato junto a esos actores. No sólo incluye al espectador, sino que nos mantiene en todo momento interesados y curiosos en un film de larga duración. Para algunos pueden considerarla, demasiado extensa para verla en cine y para otros se les pasará volando, por lo tanto, la duración, queda a criterio de cada uno. Otro gran logro del film, es la caracterización de los actores, muy bien lograda. Por otra parte, las interpretaciones de los tres, realmente, superan lo que esperaba. Es un verdadero disfrute y lección de actuación y, además se vislumbra la admiración y respeto que tienen por el Director y entre ellos. -la humildad de los grandes talentos-. Si hay un detalle para nombrar sería el color de ojos azules de De Niro, lo que resulta algo chocante al principio, hasta que nos acostumbramos. Empatizamos con cada personaje y recorremos la cocina de la mafia italiana de los Estados Unidos, sin embargo, sentimos ese sabor agridulce del costo muy elevado -implícito en el film- que deben pagar los mafiosos, en especial, el protagonista. De quien conocemos más, su faceta humana. Calificación: 9/10 Título original: The Irishman Año: 2019 Duración: 209 min. País: Estados Unidos Dirección: Martin Scorsese Guion: Steven Zaillian (Libro: Charles Brandt) Música: Robbie Robertson Fotografía: Rodrigo Prieto Productora: Netflix / Sikelia Productions / Tribeca Productions. Distribuida por Netflix. Productor: Martin Scorsese Género: Thriller. Drama | Biográfico. Crimen. Mafia. Vejez. Amistad. Años 70. Años 60
Juego de espejos Cuenta la leyenda que los espejos reflejan todo de un ser humano, no sólo lo que vemos a simple vista, sino también nuestras debilidades y secretos. Este es el caso de un espejo siniestro que también oculta un secreto. Povocarlo por diversión, puede ser demasiado peligroso e irreversible. Reflejos siniestros (Queen of Spades: The Looking Glass, 2019) es una película de terror sobrenatural del director ruso Aleksandr Domogarov que nos presenta a un siniestro fantasma, "la reina de picas" alojada en un internado, un tétrico edificio histórico. Olya (Angelina Strechina) y su hermano Artyom (Daniil Izotov) acaban de perder a su madre en un trágico accidente y son llevados allí. Olya se une a un grupo de adolescentes que resultarán ser víctimas de la Reina de Picas. Ellos descubren un cristal con una serie de misteriosas pinturas. Al invocarla, se les concede aquello que han deseado... pero a costa de sus almas. Aleksandr Domogarov nos entrega un film débil en dirección y un guión desequilibrado, con problemas notables y cierta manipulación para que las piezas encajen. Se destaca la fotografía, lo visual está bien resuelto, la iluminación y los efectos visuales, acordes al género y la música aporta una cuota de suspenso. Considero que lo mejor logrado, es la elección de la locación, si bien es predecible para el desarrollo de estos relatos, este edificio antiguo es de una belleza muy particular y tal vez, lo más representativo de la antigua Rusia. El film cumple con todos los elementos para que funcione, una locación temerosa e interesante, alejada de la civilización, el típico grupo de adolescentes con diferentes personalidades, en el que cada uno deberá cumplir su función y una tragedia como detonante. Sin embargo, aquí no fluyen de manera armoniosa, sin aportar novedades y no consigue asustar como esperamos. Las interpretaciones son correctas. Es una película que se deja ver, cuenta con buenos momentos que asustan. Es de los casos en los que la película te atrae por el trailer, predecible, aunque no tanto en su resolución. El juego de los reflejos, no solo en espejos, sino en el agua, en ventanas, en plásticos transparentes y en uno en particular que esconde un ser de otra época, resultaba interesante, aunque no se explotó ni se utilizó el recurso lo suficiente como para profundizar sobre algún tema y permitirnos reflexionar al respecto.
Silencio y cicatrices El talentoso director y guionista belga Guillaume Senez hizo su debut cinematográfico en 2015 con 9 meses (Keeper), que se estrenó en el Festival Internacional de Cine de Toronto, en donde dejó claro su estilo y brillante elección en el tipo de cine que quiere realizar. Gratamente regresa con Dónde está ella? (Nos batailles, 2018), un film que nos recuerda el poder del verdadero lenguaje cinematográfico, bello y digno de ver en estos tiempos de aburrida y taquillera cartelera. Olivier (Romain Duris) trabaja en una fábrica y lucha por los derechos de sus compañeros. Pero de manera repentina, su esposa Laura (Lucie Debay) se va de casa sin explicación alguna, por lo que deberá conciliar la educación de los niños, la vida familiar y la actividad profesional, mientras recibe una reveladora visita de su hermana Betty (Laetitia Dosch). Frente a sus nuevas responsabilidades, lucha por encontrar un nuevo equilibrio, porque Laura no regresa. Cuando se habla de cine en su forma más natural, este film es un ejemplo. Modestia, talento, comprensión del lenguaje cinematográfico y considerar a esta labor como a un trabajo tomado con seriedad, que no se permite subestimar al espectador, considerándolo un actor más en la historia, ya que sin su participación activa, la película no funcionaría. Si a esto se le suma un talento como Guillaume Senez nos encontramos con una bella sorpresa, una gran y simple película. Al estilo de los hermanos Dardenne, Dónde está ella? nos relata con los elementos justos un profundo drama. Estamos ante un guionista que maneja con gran fluidez y espontaneidad el ritmo de la trama, brinda la información necesaria sin ser evidente jamás y tiene muy claro lo que quiere contar y la manera de hacerlo. Lo que llamamos "la voz del autor" que está muy presente de manera sutil. La gran interpretación de Romain Duris conmueve junto con la del resto del elenco, que supieron conectarse con el alma de su personaje para así lograr esta brillante comunión entre la historia y su rol en ella. Utiliza la música en un momento crucial de la película, al igual que los diálogos y los silencios. Un cine con personalidad, que no brinda respuestas fáciles, que nos expone ante la película, que nos increpa. El silencio, la no respuesta y una cicatriz, a veces, se convierten en la única herramienta de comunicación.
Tu amor por siempre La fascinación de estar enamorado y el miedo a descuidar a tu pareja es la idea a transmitir por Sebastián Mega Díaz, director y co-guionista, en Amor de película (2019). Comedia romántica protgonizada por Vera (Natalie Pérez) y Martin (Nicolás Furtado), quienes se conocieron hace 7 años filmando un cortometraje, se enamoraron y desde ese día estan juntos. Ahora Vera es una actriz famosa y Martin un director que no consiguió triunfar. Pero llega para él una gran oportunidad profesional que lo lleva a ausentarse de Argentina, coincidiendo con el tan esperado estreno de la última obra de Vera. La relación que venía medio estancada sufre una crisis existencial y ahora Martin deberá hacer todo para recuperar al amor de su vida, aunque estén en diferentes sintonías. Sebastián Mega Díaz relata esta historia desde su punto de vista, se involucra en la película con una voz en off y postula la trama como previsible, al igual que todas las comedias románticas. Interrumpiendo, quizás, vivir nuestra propia experiencia, lo cual considero un desacierto ya que esta herramienta predispone al espectador, su estilo puede ser de carácter algo pretencioso y aburrido. Sin embargo, la simpatía de los protagonistas y la buena contrucción de ambos personajes consiguen "endulzarnos" y lograr nuestra empatía y atención. La dirección acompaña al dinamismo y humor de las escenas, mientras que la música, es atinada para generar una atmósfera romántica. La química entre los actores es muy buena, contribuyendo a la conexión entre el espectador y la magia de los enamorados. Cabe destacar que el film está dirigido a cierto público adolescente, generando credibilidad a pesar de las incoherencias y otorgándo más fuerza a lo predecible, sin relatar algo novedoso ni profundo.
¿Te atreves a regresar? En este nuevo capítulo de The shining de Stanley Kubrick, Mike Flanagan intenta fusionar ambos mundos, honrar la historia y los personajes creados tan maravillosamente, con el lenguaje cinematográfico que se volvió icónico. Ahora Danny ha crecido y responderá a esa pregunta que alguna vez nos hicimos todos: ¿qué pasará con ese niño cuando se convierta en adulto? Doctor Sueño (2019), basada en el libro homónimo publicado por Stephen King en 2013, funciona como continuación del film de culto El resplandor (1980) dirigido por Stanley Kubrick. Ahora esta secuela, dirigida y adaptada para la pantalla grande por Mike Flanagan, sigue a Danny Torrance (Ewan McGregor), quien se encuentra afectado por el trauma que experimentó cuando era niño en el Hotel Overlook, Dan tuvo que luchar para encontrar un poco de serenidad. Pero cuando conoce a Abra (Kyliegh Curran), una valiente niña con poderes extrasensoriales, sus viejos demonios resurgen. Porque ella es consciente de que Dan tiene los mismos poderes y necesita su ayuda: busca confrontar a Rose (Rebecca Ferguson) y su tribu, que se alimentan de los dones de inocentes como ella para conquistar el mundo y ser inmortales. Formando una alianza inesperada, Dan y Abra participan en una lucha despiadada contra Rose. Dan no tiene más remedio que utilizar sus propios poderes. Mike Flanagan, reconocido cineasta del género de terror y por su serie de horror sobrenatural de Netflix: La Maldición de Hill House (2018), logra con Doctor Sueño una obra de universo individual, en la que plasma su impronta. Es un experto en fotografía a la hora de la puesta en escena, utiliza unos planos únicos para representar con su estilo misterioso, lo que observa en locaciones en apariencia normales o en donde nada ocurre. Generando de esta manera una atmósfera ilusoria y oscura, adecuada para sentir y vivir el suspenso. El guion es prolijo, la presentación de los personajes es correcta, aunque quizás algo prolongada, hasta que la verdadera acción de terror comienza. Con lo que puede parecer de ritmo lento, no obstante, esto depende del gusto del espectador. Hay recreaciones del film de Kubrick, escenas que quizás resulten innecesarias a la hora de seguir la idea de Doctor Sueño y separarse de El resplandor. Algo que también, puede o no ser del gusto del espectador. Se destaca la interpretación de Ewan McGregor que nos tiene acostumbrados a comprender la psicología y el alma del personaje, y en general las actuaciones de todo el elenco. El permanente latido de corazón y la música, acompañan el suspenso de la trama, junto a los movimientos de cámara que sugestionan. Los diálogos son muy inteligentes y no necesitan ser explícitos para transmitirle al espectador el desarrollo de la trama y el porqué de ciertas situaciones. Más allá de las expectativas del espectador, con respecto a la comparación con la de Kubrick, este relato trae consigo sus propias emociones, siendo tal vez, más revelador del padecer del autor y su fragilidad, de la novela “El resplandor”, constituyéndose en independiente y tomando al pequeño Danny, sólo como un adulto traumatizado. Es una historia de recuperación, de adicción, apoyo, sobriedad y responsabilidad. El mensaje profundo e imperante que transmite, a mi parecer, es que un adicto vive en una cierta oscuridad y soledad, alejado de lo que supuestamente brilla. Sin embargo, no se trata de bandos contrarios. Tanto la luz, como la oscuridad, forman parte de todos nosotros.
Sanación espiritual En estos tiempos convulsionados, resulta interesante la nueva propuesta de Daiana Rosenfeld (Sanadora, 2017), en su nuevo film Mujer Medicina (2019), sobre los procesos de sanación de Fedra Abrahan, a través de la medicina tradicional amazónica y serrana del Perú. Dirigido en especial a quienes se encuentren en una búsqueda diferente de sanación y de paz interior. Fedra es celíaca, da testimonio de cómo se sanó con plantas medicinales en un viaje y conociéndo la emoción que tuvo que curar de raíz. Esa emoción es la intolerancia, primero hacia sí misma y luego hacia los demás. Pero este viaje será diferente, ya que acaba de fallecer su padre y decide atravesar el duelo en la selva amazónica y en la montaña peruana, realizando diversos rituales de sanación, limpieza y purificación con ceremonias de plantas maestras, ayunos y búsqueda de visión. Un proceso duro y personal, nos indica que existe una planta para cada persona. Los elementos utilizados por la directora, son los indicados para introducir al espectador en la selva y experimentar con medicinas ancentrales. En este caso acompañamos a la protagonista en el proceso de su preparación para la ceremonia de ayahuasca. El relato es en primera persona, ya que se trata del paso a paso de su experiencia, única e íntima. La neblina, la luna, la tierra, el agua, los árboles, el fuego, en especial el humo y la magestuosidad de los paisajes. Además la formación natural de mandalas, cánticos, mantras y planos subjetivos de la distorsión o visión extra-sensorial del campo visual, como efecto del trance; planos detalle de la potente paleta de colores existentes en pequeños animales, plantas, flores, a los que no prestamos suficiente atención, no le damos el valor adecuado ni agradecemos la belleza que le otorgan a la vida. El ayuno consta de 4 días, con el propósito de honrar a los 4 elementos de la naturaleza y a la relación de su significado con nuestra esencia. Considerándo a la enfermedad, como un desequilibrio emocional y en un momento en el cual, la medicina alopática es cuestinada por los de "occidente", por enfermarnos más que curarnos, confluye en una acercamiento a las opciones que brinda la medicina natural. Nos encontramos en un proceso de transición, de apertura de nuestra mente y corazón, de escuchar y quizás contemplar nuevas maneras de sanar. El documental se presenta como una alternativa para que reflexionemos y repensemos porqué nos enfermamos y cómo elegimos sanarnos.
Voluntades anestesiadas. Un asombroso y lúgubre filme que relata, de una manera muy original, el camino inverso al comienzo del amor de pareja. Algo que suele suceder, sin embargo, sólo un cineasta tan controversial como Ari Aster, comprende y consigue narrar fiel a su estilo, transitando varios tópicos con la profundidad exacta y consiguiendo, en algún momento, confundirnos aunque sin subestimarnos. Una película para disfrutar en pantalla grande y reflexionar con respecto a los meta-mensajes que dan forma a esta película. En Midsommar (2019) el director y guionista Ari Aster (Hereditary, 2018) nos relata la historia de Dani (Florence Pugh) y Christian (Jack Reynor), una pareja que se encuentra en un punto de inflexión cuando la familia de Dani se ve afectada por una tragedia. Triste por el duelo de la joven, Christian no puede dejarla sola y la lleva a un festival de verano, junto a su grupo de amigos invitados por Pelle (Vilhelm Blomgren), que se celebra una vez cada 90 años en un pueblo sueco aislado. Pero lo que comienza como unas vacaciones despreocupadas en un país nórdico que festeja el verano, tomará un giro siniestro e inquietante. Ari Aster nos sorprendió con el horror en Hereditary el pasado año y nos impactó con su corto The Strange Thing About The Johnsons (2011). Esta vez nos asombra con Midsommar, su último trabajo, que profundiza de manera muy original con respecto a la ruptura de una pareja, incluyendo los efectos que supo lograr antes en el espectador y sumando una trama dramática que comunica a varios niveles. El “tercero en discordia”: Pelle representa en realidad a todo factor externo que detecta un momento de flaqueza atravesado por una pareja o un individuo, para así introducirse en la psiquis de la persona: en este caso eligió a una secta, lo que considero un enorme acierto. Un hecho cotidiano en apariencia, sin embargo, nadie advierte sobre cada detalle y momento que afecta a los protagonistas de una separación. Por ese motivo y muchos más, Aster se constituye en un potente observador de la vida, un guionista que conoce a sus personajes íntegramente, la construcción de los mismos, es perfecta. Por otro lado, un director que sabe de lo que está hablando y los mensajes que quiere transmitir, por eso, el sustento dramático y tratándose de una historia de amor, es prodigioso. La estética que lo caracteriza, es admirable, de un realismo sobrenatural y con metamensajes en cada plano. Mandalas naturales y realizados hipnotizantes. Nada librado al azar, todo tiene una razón de ser en esta maravillosa película, y es aprovechado hasta de manera obsesiva; destaco la teatralidad, la música y los metalenguajes de sus bellísimos planos generales, que bien podrían ser cuadros para deleitar y analizar. Los contrastes naturales en general, en especial los colores de las flores, aportan frescura a la atmósfera de horror y la vestimenta es simple, no obstante, importante para la trama. Cada movimiento, cada sonido, cada mirada sugieren, hablan y reemplazan diálogos de manera inteligente, así como los efectos especiales muy bien logrados, lo que conduce a que cada palabra tenga sustento, y en donde el silencio se convierte en un preponderante transmisor. Desde ya, las interpretaciones de cada personaje son muy buenas y los contrastes en su totalidad, son admirables. Los cánticos son alienantes, recurso muy bien utilizado por el realizador en sus otros trabajos, los cuales aquí cobran un protagonismo muy particular. Es un film que estimula todos nuestros sentidos de manera sutil, plasmándose en nuestro inconsciente. Se recomienda ver más de una vez. Nada es casual, cada elemento elegido por Ari Aster, funciona como conductor que el individuo ha elegido de manera intuitiva, hacia dónde desea ir y es atraído por ciertas personas, lugares y situaciones. En este excelente filme, esto es llevado a un extremo tal que el ser es manipulado hasta perder su propia esencia, transitamos juntos el paso a paso y es por eso que conocemos el funcionamiento de estos grupos y comprendemos los motivos que afectan a ciertas personas a mantenerse aferradas. Haciendo un paralelismo con lo cotidiano, existen sectas a nuestro alrededor, no necesariamente recluídas en bosques, sino entre nosotros y en cada pensamiento que no es generado por nosotros mismos, lo cual nos obliga a prestar especial atención para elegir una vida real y no una mentira, en la que nos dicen lo que necesitamos escuchar, nos contienen y nos hacen sentir en familia.