Luis Cardei fue un cantor de tangos que la yugó de abajo hasta hacerse un lugar en el mundo del tango. Canturreaba en cantinas y bares de mala muerte hasta que de tanto insistir llegó a ser la gran figura del Club del Vino. Su vida no fue fácil. De chico estuvo postrado hasta que consiguió salir de a poco, fue hemofílico y sufrió. Sufrió cuando dejó a su mujer y se fue detrás de María. Fue volvió y nos dejó. “El torcán” muestra los avatares por los que pasó Luis Cardei hasta llegar a ser un cantor conocido. Quizás la figura de Cardei no fue muy popular para los que no están dentro del tango. Por eso esta realización sirve para mostrar que Cardei fue un cantor que supo brillar a pesar de no haber estado en televisión. “Pino” Solanas en su película “La nube” lo tuvo como actor y cantor. Esa fue la única participación de Luisito. Aquí, en esta peli de Arregui además de Osqui Guzmán (estupendo encarnando a Cardei), aparece Rodrigo de la Serna, y Alfredo Cardei el hijo del tanguero evocado . Recomendable para los amantes del tango, y para quienes quieran conocer una historia de un torcán nacional.
Para empezar a hablar de esta cuarta película de Inés de Oliveira Cézar podríamos evocarla con aquella frase tanguera que dice: “Pretenciosa y engrupida”. Sin lugar a dudas, “El recuento de los daños” tiene todos los aditamentos necesarios para confundir al espectador y desconcertarlo. Una mujer que acaba de enviudar cuando era joven estaba militando en política, sobrevive a la dictadura en cuyo cautiverio parió un hijo del cual separaron violentamente. La vida sigue su curso y en la actualidad enfrente crisis familiares, mientras esta al frente de un taller metalúrgico donde también hay problemas económicos. Tal es el conflicto que sirve para conformar el nudo de esta historia que por querer abarcar tanto termina aburriendo y confundiendo aún más. Es una lástima que la realizadora haya encarado un proyecto interesante estructurada sobre una historia endeble, con muchas lagunas narrativas que hacen tan difícil de seguir en su relato y comprender en su contenido. Su ópera prima “Cómo pasan las horas” (2004) hace casi una década prometía, ni que hablar de “Extranjera” (2007) estrenado el año pasado, su trabajo más interesante hasta ahora. Sus protagonistas Eva Bianco y Santiago Gobernori se esfuerzan para hacer creíble una historia fallida como tal y como realización que deja como saldo aquel tanguero “pretenciosa y engrupida” hasta lo abúlico.
Héctor Olivera en el año del Bicentenario decidió contar la historia del muralista Siqueiros. En los años treinta llega a Buenos Aires el ya por entonces prestigioso muralista mexicano David Alfaro Siqueiros. Aquí toma contacto con las más importantes figuras de la cultura y de la sociedad de la época, entre ellas Pablo Neruda, que se hallaba en el país, y conoce a Natalio Botana, fundador, propietario y director del diario “Crítica”. El muralista subyugado por el micromundo artístico y por las más hermosas mujeres que lo rodean acepta un gran desafío: hacer en la quinta Los Granados, de Botana, un gran mural que abarcaría todo el sótano de la finca. Con la colaboración de los pintores argentinos Lino Enea Spilimbergo, Antonio Berni y Juan Carlos Castagnino y el escenógrafo uruguayo Enrique Lázaro, el mural va tomando cuerpo mientras se tejen varios conflictos íntimos que, en torno de Siqueiros, conforman la contradictoria esposa de Botana, la poetisa Blanca Luz Brun y el propio Neruda, a los que se suman figuras tan importantes de esos años como la escritora Victoria Ocampo y el presidente Agustín P. Justo. Hasta aquí una breve sinopsis de la historia. Si analizamos “El mural” se podrá apreciar que a Olivera no se le escapó ningún detalle de la época. Impecable la reconstrucción de los ambientes y los trajes y vestidos. La fotografía también se destaca, no en vano Félix Monti es el responsable. Quizás la parte más floja esté en el libro en donde la realización por momentos se centra demasiado en los conflictos de alcoba y en las relaciones sexuales. A muchos nos ha quedado las ganas de ver un filme que rescate otras situaciones y problemáticas históricas. Esto es lo que hace que “El mural” sea una buena producción. Con respecto a los actores sobresalen Luis Machín y Carla Peterson, otros personajes si no fuera porque los nombran nadie se da cuenta que son ellos. Para los que quieran saber un poco más de Siqueiros hay un documental excelente de Lorena Muñoz que se estrenó hace unos años y se llama “Los próximos pasados” (2006). Ver ambos filmes puede resultar un lindo ejercicio para creer o no.
A veces pienso que este tipo de producciones la tendríamos que ignorar, y me siento culpable de difundir que se ha estrenado una nueva película (perdón) bodrio en donde el amor, el desamor y el thriller conviven en esta aburrida, por no decir pelotuda pelicula, procedente del país de Obama. La trama es simple, y uno se la imagina desde que comienza hasta el final que se da a los 110 minutos, una barbaridad para no contar nada y repetir hasta el hartazgo chistes que no harían reír ni a los Hermanos Marx. Milo (Gerard Buttler) es un ex-policía que ha sido echado de la fuerza por inútil, y ahora sobrevive dedicado a atrapar prófugos de la justicia, en realidad a fugados con deuda pendiente respecto con quien depositó la fianza para que gozar de libertad mientras se sustancia el juicio, tarea por la cual cobra la pertinente recompensa Nicole (Jennifer Aniston), su ex-mujer, es una periodista de investigación, comete una infracción de tránsito y no se presenta ante el juez, por lo que es declarada prófuga y dispuesta su detención..A Milo se le presenta una excelente oportunidad para vengarse por la separación deteniéndola, llevándola a la justicia, y así cobrar la correspondiente recompensa . Con estos ingredientes tan trillados, con chistes que no parecen serlo, y con carilindos y carilindas se desarrolla esta historia que pierde el rumbo y termina aburriendo. Pensar que nos quejábamos de nuestras comedias de los ‘70 y ’80. Para los Estados Unidos el cine romántico y las comedias, con relatos y realizaciones como esta que me ocupa, están en total decadencia, para ello basta repasar las criticas de semanas anteriores respecto a títulos como “Amante accidental”, “Y... dónde están los Morgan”, para darse cuenta que lo que abunda son las estupideces. Lo único que le faltó a este film son las flatulencias. Sin trascendencia, aburrida y le falta una vez más el respeto a lo que nosotros conocemos por cine..
Boy Olmi, actor y productor de larga trayectoria en el medio artístico, debuta con esta ópera prima en el rol de director. Difícil de definirla en algún género. “Sangre del Pacífico” por momentos parece un filme épico, en otros una película de aventuras para niños. Pero no es ni una cosa ni la otra. Ambientada la acción frente al mar y con una destacada participación de China Zorrilla, cuenta con muy buena la fotografía y algunos atendibles efectos especiales. El resto navega en una dirección incierta de la cual no hay una salida coherente. La gran falla de la peli de Olmi es que el guión pierde la dirección y eso hace que “Sangre del Pacífico” haga agua por todo el océano. Lástima, la intención es muy buena, pero no basta con las buenas intenciones.
Logrado reflejo, Duro y cruel, de la sociedad moderna En “Preciosa” se plantean todos los problemas que a pesar de los años siguen vigentes. Una chica de 16 años es obesa, negra y, además, ha sido violada por su padre, de cuya relación nació una criatura discapacitada, cuando ella tenía 12 años. Su vida cotidiana es una historia de horror: está embarazada y en espera del segundo hijo de su padre, mientras es una esclava, física y psicológicamente, de su abusiva madre. En la escuela es el blanco de todas las bromas por su sobrepeso y carga con un secreto que la llena de vergüenza: no sabe leer ni escribir. El tema del SIDA también está planteado en este filme que compite en varios rubros por los premios Oscar. Aunque muchos lo quieran negar “Preciosa” es la vida misma. Aquí se vuelve a plantear el tema de la discriminación, de los abusos sexuales y la humillación, entre otros problemas, de la sociedad contemporánea que afloran en la narración. Es una historia que nos inquietante y conmovedora desde que comienzan a proyectarse los primeros fotogramas hasta que nos retiremos del cine. Imágenes muy crudas y duras nos harán reflexionar. ¡Ojalá! que a muchos les sirva de lección. “Preciosa” compite por el Oscar con, entre otras, “Avatar” y “Vivir al limite”, producciones muy distintas entre sí. Habrá que esperar el dictamen de los miembros de la Academia de Hollywood, pero más allá del resultado, plantea una historia y cuanta con una realización que nos tocará en el corazón, por lo menos a los sensibles.
“Pecados de mi padre” contiene dos narrativas. Por un lado, cuenta la historia de Pablo Escobar Gaviria (poderoso narcotraficante colombiano muerto en un enfrentamiento con la policía en 1993) desde el punto de vista de su único hijo varón, Sebastián Marroquín. Por el otro, los intentos de Sebastián por contactar a los hijos de las más prominentes víctimas de su padre. El resultado termina por enseñarnos que entre sus hijos no hay un gran rencor. Sebastián Marroquín, hijo directo de Pablo Escobar cuenta de qué manera ha vivido en Buenos Aires, narra que por haber sido hijo de Pablo Escobar estuvo 45 días preso, y su madre, por haber sido la mujer estuvo más de 18 meses en prisión. En el filme también están los testimonios de Rodrigo Lara, Juan Manuel Galán, Carlos Galán, Claudio Galán y Maria Isabel Santos. Ellos en definitiva son víctimas de una u otra manera de Pablo Escobar. Uno de los momentos más emotivos es cuando Sebastián Marroquí se entrevista con los hijos de Galán, muertos por su padre. Lo interesante es la manera adulta que tienen de encarar la charla. La dirección de Nicolás Entel se realza con los primeros planos y la narración que acompaña las imágenes. Quizás la voz en off le resta emotividad a un filme que vale la pena ver para entender un poco más la vida de este narcotraficante.
Inquietante mirada a un mundo en destrucción Cuando en el año 1977 se estrenó “La guerra de las galaxias”, pocos creyeron que este tipo de cine con los años se iba a convertir en material de culto, los críticos de entonces no soñaban con que este cine tendría el esplendor que ha adquirido en las últimas décadas. En los 80 con la llegada de ET ocurrió otro tanto. Hoy ambas producciones son materias de estudio y de revisiones. Con “Número 9” ocurrirá lo mismo. Esta realización que ha llegado a las carteleras porteñas nos habla de un mundo post-apocalíptico, en donde casi no existen los seres humanos y los que gobiernan son seres de trapo. “Número 9” no es una película para chicos, aunque seguramente se van a sentir cautivados por las animaciones y los seres no tan humanos que por momentos semejan ser muñecos de trapo. La visión de un mundo en destrucción, la fotografía y la trama inquietante nos acercan a un futuro muy cercano. A pesar de ser cine, “Número 9” es una obra que va a pasar a la historia por seguir sosteniendo que el cine, además de contar muy bien una historia, como en este caso, es un entretenimiento puro. Un detalle, los muñequitos se dejan querer. ¿Será el futuro o recuerdos solamente de un futuro no tan lejano?
Fresco disparate bizarro con rockeros autóctonos, platos voladores y otras yerbas Néstor Montalbano ha encontrado la senda de los platos voladores y la comedia disparatada sin ninguna duda volviendo de la mano de Diego Capusotto y Luis Luque al cine. El realizador que comenzó su carrera cinematográfica dirigiendo “Cómplices” (1998) y luego con “Soy tu aventura” (2003), venerada comedia bizarra con Luis Aguilé, regresó con todo. En primer lugar supo elegir elenco. A los mencionados Capusotto y Luque se suman: rockeros veteranos como Willy Quiroga, Ciro Fogliata, consagrados actores del under como Verónica Llinás, Alejandra Flechner y grandes figuras de la televisión y la radio como Víctor Hugo Morales y Juan Carlos Mesa, quien debuta en cine a sus 80 años personificando a un gaucho de antología. Si bien las estrellas de la peli son los platos voladores (se filmó en el Uritorco), también aparece por ahí el político octogenario, actualmente senador nacional, Antonio Cafiero en un paso de comedia de antología. Contar este delirio en donde también puede verse a Miguel Cantilo, Claudia Puyó, Miguel Zavaleta entre otros rockeros argentos es imposible. Montalbano consigue hacernos reír durante gran parte de la proyección con ese humor absurdo, disparatado, ácido y delirante que hace mucho no se veía en el cine argentino. “Pájaros volando” ya se inscribe dentro del cine bizarro, autóctono y peronista que supo tener chapa gracias a Capusotto y sus secuaces. “Pájaros volando” es un aire fresco dentro de nuestra pantalla vernácula que aporta inteligencia y entretenimiento, algo que hemos perdido en el cine nacional. Celebremos este delirio místico que habla de platos voladores y rock and roll con humor. Advertencia para su director: Aquí está el camino y aquí están los protagonistas que pueden llegar a ser uno de los dúos más cómicos de este milenio.
Por fin el cine argentino aborda un relato chiquito, adulto y valiente “Por Tu Culpa” narra un drama intimista que transcurre en una sola noche haciendo foco en una madre en plena crisis de divorcio. Por un simple accidente doméstico de uno de los hijos del matrimonio termina siendo acusada de maltrato familiar. Domingo a la noche, Julieta está en casa con sus hijos, Valentín (8 años) y Teo (2 años). Los chicos se divierten jugando a la lucha libre en la cama matrimonial, mientras su madre intenta terminar una entrega laboral. Esa noche su padre no cumplió con el trato de encargarse de ellos, pero Julieta sí debe cumplir con su trabajo. Los límites parecen no existir para los chicos, pero tampoco para los adultos que intentan separarse. La hora del “buenas noches” se dilata y las contiendas en la cama se vuelven peligrosas. Ella no puede, ni sabe contenerlos y lo inevitable ocurre. Teo se ha lastimado. ¿Por una caída? ¿Por un golpe de su madre? Julieta busca asistencia para su hijo en una clínica privada. Pero la noche se transforma en pesadilla en donde todos la señalan culpable. Por fin el cine argentino nos aborda un relato chiquito, adulto y valiente. “Por tu culpa” es la historia de una familia que está en plena crisis de divorcio. El padre, la madre y sus hijitos son seres desprotegidos y muy frágiles que en cualquier momento pueden lastimarse. No en vano en muchos aspectos y en muchos pasajes del filme la chiquita da lecciones a sus padres de cómo comportarse. Un padre y una madre en crisis tienen muchas salidas, muchas veces dependen de un terapeuta o un psicólogo, en esta narración nada es lo que parece. Muy buenas actuaciones, destacándose Erica Rivas por sobre los restantes intérpretes. Es ella la encargada de cargar con la mochila de las culpas como personaje y de la máxima responsabilidad actoral en su mejor trabajo cinematográfico La realizadora Anahí Berneri demuestra una vez más su oficio. La historia de “Por tu culpa” es ficción, pero refleja una realidad que cada vez se proyecta con mayor fuerza y amplitud la vida familiar contemporánea, que a medida que pasa el tiempo más se va distanciando de en las familias de no hace tanto tiempo atrás.